Aquella mañana del martes todo pintaba para ser un día bastante normal y con nada fuera de lo común, pero vamos, la vida es una hija de perra.

Seonghwa y Jisung estaban en la cafetería tomando café, Han acababa de salir de una importante reunión y como siempre Minho le había dado diez minutos para poder descansar, ambos hombres conversaban cuando un beta y una omega entraron a la sala, el beta era el secretario de Minho, Han lo conocía, su nombres es Choi Junho y jamás llego a caerle bien al omega, menos ahora, que contaba su "aventura" bastante alto

— Te lo digo en serio, Hwasoo. Minho en la cama es todo un semental, aunque le gusta el sexo bastante suave, yo he querido intentar lo de esposas y eso, pero a él parece gustarle más lo romántico, ¿o será que le gusto? — Presumió, batiendo sus pestañas varias veces.

Jisung rodo disimuladamente los ojos, ¿Minho sexo suave? Ja.

— Aún no puedo creer que te acuestas con el vicepresidente de nuestra compañía. Yo escuche el chisme de que está casado y tiene dos hijos. — Susurro la pequeña omega.

— Que va, ¿esposo?, ¿hijos?, ¿tan siquiera le ves anillos? — Negó. — Lo de él es más de sexo sin compromiso, aunque creo que lo nuestro pronto será algo más que relaciones casuales.

[Solo ha tenido un novio en toda su vida y soy yo, perra] Gruño celosamente el lobo del omega.

— Oye, Jun, me llego el rumor de que nuestro gran jefe Lee tiene tatuada una mariposa en el abdomen, ¿es verdad? — Sin resistirse Han se metió a la conversación.

— Es verdad, es un tatuaje bellísimo, se tatuó en Grecia, aunque aún no me ha dicho que significa.

Con aires de superioridad Junho salió de la cocineta siendo seguido por una muy asombrada Hwasoo.

— ¿En serio tiene una mariposa tatuada en el abdomen? — Cuestiono divertido el alfa.

— Que va, lo único que tiene en el abdomen es una cicatriz por una cirugía, aunque si esta tatuado, tiene en el hombro derecho las fechas de nacimientos de Riki y Heeseung. — Comento furioso apretando su taza.

— Wow, entonces ese beta miente.

— Y descaradamente.

Jisung llego a la oficina de su esposo, entro con pasos bastante escandalosos, Minho estaba frente a su escritorio, medio sentado en este, se encontraba al teléfono, sus lentes caían por el puente de su nariz. Al ver los lindos iris de su esposo irradiar furia, prefirió cortar la llamada.

— ¿Qué ha ocurrido?

— Nada, ¿debe ocurrir algo?

Lee elevo las manos en señal de paz y se acomodó los lentes.

— Dime, ¿alguna vez has hablado con Choi Junho fuera del trabajo?

— No, ¿por qué? — Preguntó quitándose los lentes.

— El beta idiota está fingiendo ser tu amante, hasta dice que pronto te le propondrás. — Espeto, acercándose a donde estaba Minho.

— ¿Y eso qué? Sabemos que no es cierto.

— Despídelo. — Suplico Han acercándose aún más, tal solo había unos treinta centímetros de separación entre ellos, sin poder evitarlo Lee poso sus manos en las caderas de Jisung jalándolo aún más cerca.

— Puedo hacerlo. — Susurro cerca de los labios de su esposo. Minho giró, haciendo que ahora Han quedara sobre el escritorio. El alfa se acercó al cuello del contrario y paso su nariz por este, gruño bajito porque el collar le estorbaba, juguetón desabrocho los primeros tres botones de la camisa del omega, bajándola de un lado para repartir besos en el hombro de su pareja. — Pero debe haber un buen motivo.

— A mí no me gusta. — Puchereo.

— Tus deseos son órdenes, mi amor. — Dijo, desabrochando hábilmente los pantalones del omega.

— Min, alguien puede entrar.

— Eso lo hace más divertido. — Sonrió ladino, terminado de bajar los pantalones.

Minho pudo deleitarse a tal vista, ya que esta vez Han estaba usando unas bonitas pantis de encaje color negras, la lechosa piel de Jisung se veía inclusive más apetecible de lo que Lee recordaba, lamentándose quito la hermosa tela y agachándose a su paso.

— Honnie, ¿Qué vas a... Ah — Un gemido travieso se escapó de la boca del menor al sentir como los tibios labios de Minho empezaban a darle pequeños besos a todo el glande.

El alfa sintió como rápidamente el pene de Jisung paso de semiduro a estar completamente erecto. Lee pasó de pequeños besos a lamer todo la base del miembro. Dejando de jugar se introdujo lo más que podía del miembro de su esposo chupando ágilmente como si de una paleta se tratase, miro para arriba observando a Han. Estaba con la boca abierta y sus ojos cerrados, las manos de Jisung se trasladaron a la cabeza del contrario, para llevar su propio ritmo provocando que el ceo se atragantase un poco.

Se sacó el falo de la boca. Volteo nuevamente a Jisung, esta vez obteniendo una perfecta vista del gran trasero del omega, por este ya comenzaba a escurrir lubricante natural, provocando que la dura erección de alfa comenzara a doler.

Enterró su experta lengua por el orificio de Han, sacándole un sonoro gemido por el beso negro. El menor no dejaba de mover sus inquitas manos, cosa que comenzaba a cansar al alfa, con una mano desato su corbata y ato las manos de Han.

— Mira, cariño, intente portarme bien, pero tú no cooperas, así que de rodillas ahora. — Exigió.

El omega hizo caso y se arrodillo, Lee mismo desabotono sus pantalones para sacar su problema, la erección del alfa salió disparada golpeando una de las mejillas del menor. Jisung estaba dispuesto a llevar la polla de su esposo a la boca, cuando este lo detuvo.

— Solo mastúrbame, quiero ver que tan impresionante eres con las manos. — La verdad era que Minho ya se sentía cerca y con la boca de su esposo no aguantaría como él quisiera.

Sonrió travieso y como puso llevo sus manos hasta su trasero, se metió uno de los dedos y se masturbo a sí mismo un poco, el alfa solo veía todo expectante, tras unos segundos Minho pudo sentir cómo Han se sacaba los dedos, dejando caer aquel lubricante natural a lo largo de toda la parte de enfrente de su pene muy lenta y delicadamente. Con las manos Han tomo aquel falo caliente y comenzó un lento vaivén siendo casi tortuoso para el alfa. La boca de Jisung salivo y sin resistirse más llevo aquel caliente falo a sus belfos.

— Hanji, no, no creo poder aguantar. — Un gemido casi grotesco salió de su boca.

— Siéntate en tu silla. Ahora. — Demando y en completa sumisión Minho acato la orden.

Jisung lo siguio en seguida, pero antes de poder hacer algo, observo a Lee abrir un cajón en su escritorio donde tenia una cantidad desmesurada de condones.

— ¿Desde cuando tienes tantos condones? — Pregunto asombrado.

— ¿Qué día empezaste a trabajar? — Dijo poniéndose de manera rápida el preservativo.

— El doce de agosto.

— Pues los compre ese día. — Pauso. Minho estaba en su silla y Jisung dándole la espalda así que el alfa tan solo dijo. — Siéntate.

Han iba a protestar, pero sintió como de una sola estocada era penetrado. Gimió sonoro y muy alto, sintiendo sus piernas fallar debido a la oleada de placer que inundo su cuerpo, ambos ya estaban al borde. Sabían que solo bastarían unas cuantas penetraciones para que ambos llegasen.

Minho sintió sus encías picar, anunciando que en cualquier momento saldrían sus colmillos, su lobo de emociono más que nunca y de hábil manera quito aquel estorboso collar.

Un silencio sepulcral se instaló en el lugar. Han se reincorporo sintiendo la vergüenza hasta por los poros, Minho estaba simplemente mudo, sintiéndose la peor pareja del mundo.

¿Por qué era tan idiota? Era obvio que había dejado de sentir a Jisung hace tiempo, ¿Por qué no le dio la importancia suficiente?

— Minho, yo...

— ¿Cómo te sientes? — Lloriqueo atrayendo a Jisung a su cuerpo para abrazarlo.

— Son simples mareos y dolores de cabeza.

— Dicen que es demasiado doloroso. Hanji, lo lamento he sido un idiota todo este tiempo. ¿Quieres que lo haga?

— ¿Hacer qué?

— ¿Quieres que te marque otra vez?, ¿me aceptarías nuevamente como tú alfa?

Para ese momento a ambos ya se les había pasado la calentura, Jisung asintió tendiéndole su cuello al alfa. Minho entre palabras bonitas enterró sus colmillos en aquel lindo cuello, provocando que sus lobos brincaran de la emoción al volver a sentirse.

Minho lamio la mordida y repartió varios besos alrededor del cuello de su pareja intentando hacer todo lo menos doloroso posible.

Ambos sonrieron, estaban felices de poder volver a estar juntos.

Pésimo smut, lo sé ):

En esta semana se acaba la historia. Solo me faltan tres capítulos y el epílogo. Kemoción.

Los especiales se subirán poco a poco :3