C A P I T U L O. 1
Una semana había pasado desde que se había anunciado el proyecto y desde entonces se habían expandido un sin fin de rumores sobre lo que pasaría con los estudiantes que se negaban a ser parte y entre ellos estaba que ninguna universidad les daría equivalencia de sus años de estudios obligándolos así a comenzar de cero sus carreras, y obviamente nadie quería arriesgarse a que todos los años de estudio fuesen tirados a la basura.
Sus clases del día viernes habían dado por finalizado antes del mediodía, permitiéndoles comenzar su fin de semana antes que la mayoría de los demás estudiantes, y aunque debía estar contento no lo estaba, pues antes de siquiera poder abandonar el salón de clases la noticia que esa misma tarde se llevaría a cabo el proceso de selección para darle inicio al proyecto. Ante la noticia hubo varios quejas en formas de murmullos y muecas de disgustos por parte de varios estudiantes, entre ellos estaba Jeon JungKook quien solo se limitó a formar una mueca y maldecir internamente al alfa, beta u omega que tuvo la grandiosa idea de joderles la vida con ese estúpido proyecto.
Y es que si JungKook pertenecía a ese cierto porcentaje de la población estudiantil que no estaba de acuerdo que el ser parte de esa tontería, pero no podían poner en riesgo sus años de estudio. Bufando con molestia, termino de fumar su cigarrillo y termino de apagar la colilla en el pequeño cenicero que tenía en la esquina del balcón.
—Mierda.—murmuro cuando su móvil comenzó a vibrar en el bolsillo de su pantalón deportivo.
Sabía a ciencia cierta que se trataba de TaeHyung, pues esta le dijo que le avisaría una vez supiera quién sería su pareja. El Omega presentaba una actitud muy contraria a la de su mejor amigo, pues Kim se encontraba completamente emocionado por el proyecto, que incluso se había imaginado un sin fin de escenario con el cachorro mecánico. Sacando su celular miro la pantalla y efectivamente era su amigo, así que sin más contesto.
—¡Hey!—Fue lo único capaz de decir al contestar debido a la interrupción por los estruendosos gritos del omega.
JungKook alejo levemente el dispositivo de su oreja y con una mueca divertida se adentró nuevamente al departamento, pues ya había acabado de fumar su cigarrillo y no le apetecía seguir soportando el rocío de la noche.
—Tae, no me grites que te escucho con claridad, ¿vale?—profirió tranco de clamar a su mejor amigo.—Además que con tu griterío no he entendido nada de lo que has dicho.
—Está bien, lo siento, me he emocionado demasiado con todo esto.—dijo el Omega al otro lado de la línea.—en fin te decía que Jung Hoseok tu primo es el padre de mi cachorro mecánico y, por lo tanto, ahora no solo seremos mejores amigos, sino también cuñados, ¿Puedes creerlo?..., —TaeHyung comenzó a divagar con respecto al asunto.
A Jeon le importaba muy poco que la pareja de su mejor amigo fuera su insoportable primo con el que apenas se dirigía miradas, y es ambos se había dejado de llevarse yacía varios años y todo gracias a que ambos eran alfas competitivos que no aceptan el ser derrotados. La discordia entre ellos se dio una noche en el que ambos decidieron que era buena idea hacer una carrera automovilística mientras regresaban de una reunión familiar; lastimosamente la carrera terminó en tragedia dejándolos a ambos hospitalizados. Sin embargo, el herido de gravedad resultó se Hoseok quien tuvo que perder casi dos años de estudio para llevar a cabo su recuperación.
Aunque JungKook intentó disculparse con su primo no logró hacerlo debido a que al estar en el área de cuidados intensivos no se le permitía pasar y cuando Hoseok fue dado de alta se marchó a Japón donde llevó a cabo su recuperación; soltando un profundo suspiro observó el techo del departamento como si fuese la cosa más importante del mundo con la esperanza de que TaeHyung terminara de divagar
Pasaron unos cuantos minutos más en los que el Omega siguió con sus divagaciones sin sentido alguno hasta que se dio cuenta de que su amigo no le estaba prestando atención en lo absoluto.
—Ya, pero a todo esto, ¿quién es tu pareja?—preguntó TaeHyung con curiosidad.
—No lo sé, no he entrado a ver.—respondió sin interés alguno.—Tal vez lo vea hasta mañana.—agregó.
Escuchó el sonido de desaprobación que TaeHyung emitió al otro lado de la línea ante su respuesta. Rodando sus ojos se preparó para los reclamos por parte del omega, quien le exigió que abriese al maldito sistema y revisara quién sería su compañero en el proyecto.
Él tenía la opción de negarse y colgar la llamada, pero como buen conocedor de lo que su amigo era capaz de hacer, se levantó de su lugar y fue hasta su habitación donde encendió su ordenador portátil; tras ingresar su número de carnet y contraseña se dio paso a su perfil académico virtual.
—Espero que de compañero de proyecto te toque un Omega que cambie ese jodido humor que siempre te cargas.—escucho a TaeHyung decir al otro lado de la línea mientras él hacía todo el proceso requerido para el proceso de selección y asignación de pareja.— Si antes era un dolor de cabeza, después de lo del innombrable te volviste un dolor de culo y un buen omega te hará cambiar.
JungKook rodó sus ojos con fastidio, pues ese pensar de su mejor amigo muchas veces llegaba a joderle las pelotas. Él no necesita un omega que a la presencia de otro alfa con más posibilidades lo dejara.
—Tal vez a ti, mi primo te cambie lo parlanchín e imprudente que puedes llegar a ser.—dijo con molestia mientras observaba cómo la barra de carga del sistema le anunciaba que estaba a nada saber quién sería su pareja.
Observando la barra de carga estancarse a casi nada de completarse, logró que su paciencia comenzara a agotarse con cada segundo que transcurría; cuando la barra por fin se completó luego de casi diez minutos, los cuales tocó soportar los comentarios absurdos de su amigo.
El perfil del omega que sería su pareja se hizo presente a sus ojos y al contrario de lo que creyó que encontraría, se topó con un perfil bastante básico que mostraba una foto de este, su nombre, edad, la carrera que cursaba y por último un número telefónico de contacto.
—¿Ya sabes quién será tu compañero?—preguntó TaeHyung.
—Sí, un tal Park Jimin.—respondió mientras agendaba el número en su celular.—Estudia Arte contemporáneo, en el área de actuación y baile...
TaeHyung al escuchar quién sería la pareja de su mejor amigo quedó completamente anonadado, ya que dicho omega era el más cotizado de la facultad de artes y con justa razón, pues no era hermoso físicamente, sino también interesante y ni hablar de lo talentoso que era. Sin duda alguna ese omega lograría al menos un pequeño cambio positivo en JungKook.
Un fuerte grito se escuchó en la planta alta de la casa de la familia Park, ocasionó que los que se encontraba presentas en este dieran un sobresalto ante tal grito. La señora Park, al reconocer que ese grito pertenecía a su hijo menor, se asomó a las escaleras con preocupación.
—¿Minnie, está todo en orden, Bebé?—preguntó está con voz alta desde el pie de las escaleras.
Al no recibir respuesta alguna se encontraba dispuesta a subir y ver que ocurría, pero el sonido de la puerta principal abriese, la detuvo. Girándose hacia dicha dirección encontró a su esposo, quien se encontraba cerrando la puerta mientras se deshacía de su refinada corbata.
—¡Cariño, has llegado!—exclamó la omega con una sonrisa genuina en el rostro.—¿Cómo estuvo tu día?—inquirió mientras caminaba hacia él con la intención de recibirlo con un beso.
—Cansado, pero a pesar de ello gane el caso Lee y eso me llena de satisfacción.—murmuro.
Todas las preocupaciones y cansancio que el alfa podía haber acumulado ese día se desvanecieron cuando los labios de su omega se posaron sobre los suyos con ternura. No cabía duda alguna que a pesar de los años ellos seguían manteniendo ese amor puro y fuerte como cuando eran jóvenes. Y el fruto de todo ese amor habían sido sus cinco hijos, de los cuales había resultando dos alfa, una hermosa beta y dos lindos omegas, de los cuales Jimin era el último.
—¿Los chicos han llegado?—preguntó el Señor Park.
—ChanYeol tiene turno en el hospital hoy, JinYoung ha llamado diciendo que Yugyeom ha entrado en celo así que no lo veremos en unos días, ChaeYoung saldrá tarde de su práctica, JiHoon y Jimin se encuentran en su habitación.—dijo la omega con una sonrisa.—Así que esta noche cenaremos con nuestros dos pequeños.
Antes de que alguno de los dos pudieran agregar algo más escucharon cómo bajaban las escaleras con rapidez. Cuando el dueño de aquellas pisadas se hizo presente en la planta baja, el señor Park abrió los brazos hacia su pequeño cachorro de cabellos púrpuras. Jimin al ver a su padre no tarde en correr hacía para que este lo estrechara entre sus brazos. Sin duda alguna los Park eran una familia muy unida y amorosa.
—Mi pequeño y lindo bebé cabeza de mora.—susurro el alfa una vez abrazo a su hijo.
—¡Papá!—exclamó el menor mientras se separaba levemente.—Deja de llamarme así, ¿quieres?
Los dos mayores se rieron mientras negaban levemente; aunque Jimin siempre le pidiera a su padre que parara con ese tipo de apodos, muy internamente los amaba. Entre conversaciones triviales, el pequeño omega recordó la razón por la cual había bajado en primer lugar.
—Mamá, papá, tengo una noticia muy importante que darles.—anuncio mientras entraba a la cocina tras los mayores.
—¿Serás el protagonista principal del lago de los cisnes este año nuevamente?—preguntó su madre y Jimin negó levemente.—¿Entonces?
Jimin ensanchó una hermosa sonrisa en su rostro.
—¡Estoy embarazado!—exclamó eufórico mientras llevaba sus pequeñas manos a su plano vientre.
La noticia tomó por sorpresa a los Park, pero sobre todo al alfa quien escupió el jugo de naranja que estaba tomando para luego comenzar a toser. Los señores Park, por su parte, se aferró a la barra de desayuno para evitar caerse. Ninguno se los esperaba que su pequeño bebé les diera esa noticia, ellos no se encontraban preparándoselos para ello y dudaban estarlo en un futuro.
—¿Qué?—preguntó el alfa con incredulidad, deseando que todo fuera una broma por parte de su hijo.
—Que estoy embarazado y el padre de mi cachorro es un alfa muy apuesto y se llama Jeon JungKook.—agregó
—¡Luna! No sé quién sea ese delincuente, pero cuando lo vea lo mato.—profirió el alfa.
Si bien luego de eso Jimin tuvo que explicar la situación a sus padres y de que iba todo eso del embarazo, el señor Park seguí exclamó que si llegaba ver al delincuente de ese tal JungKook iba a matarlo. Y fue ahí donde Jimin se arrepintió de hacerle esa broma a sus padres.
nta: solo espero que nuevamente esta historia tenga el mismo apoyo que antes:(
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