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Los que habían presenciado el fuerte golpe que recibió la hibrída estaban expectantes de saber el estado de ella.
Cuando el humo que había levantado aquel ser grotesco al atinarle un golpe a Leah para alejarla del peliazul, pudieron volver a respiras lo espectadores. Detrás del humo se podía ver a la chica con sus antrebrazos formando una "X" enfrente de su cuerpo, aquello había reducido demasiado el impacto.
—"¡No puede ser!"— pensaba incredúlo Aizawa al ver como la mano de aquel ser estaba totalmente desfigurada, esto se debe a que la chica había podido protegerse con sus antebrazos antes de que el puño de la criatura pudiera tocarla.
—Debo de pedirle a De Nile-san que me explique su traje— comentaba entre murmuros un shockeado Izuku al ver el estado intacto de su compañera.
Ante el acto de ataque directo que recibió la oji ambar, el enojo estaba creciendo en ella.
—Sabes no quería hacerte tanto daño porque parecez un niño berrinchudo que le quitarón su juguete favorito— ante las palabras de Leah, Shigaraki no evito rascarse —Pero cómo tú diste el primer golpe "mortal"— los alumnos escondidos en el arbusto sintieron escalofríos al ver la sonrisa que le dirijía su compañera al peliazul —Ya no me sentiré tan mal de ser un completo monstruo—
Shigaraki no comprendía totalmente a qué se refería la chica, pero al sentir un gran ardor en su rostro lo comprendió.
—¡IDIOTA!— gritaba de profundo dolor, Leah había dado un zarpazo con su lanza directamente al rostro— ¡NOMU MÁTALA!—
Y tan pronto como dio la orden, el gran ser se avalanzo hacia la chica.
Pero este no podía avanzar libremente debido a que unas cintas los estaban deteniendo —¡DE NILE VETE DE AQUÍ!— gritaba con dificultades Aizawa, ya que el Nomu tenía más fuerza que él y lo estaba jalando, también que sentía un fuerte dolor en su codo.
El peliazul al ver como el héroe estaba atrasando sus planes dio la orden —Nomu antes de matarla, desasté de él— Shota no pudo reaccionar antes de que su rostro fuera estampado fuertemente contra el suelo.
Izuku, Tsuyu y Mineta veían con terror puro como el Nomu le estaba rompiendo los brazos a su profesor y cómo estampaba cada vez más profundo su rostro en el piso, a tal grado que causo grietas en este.
En eso vieron como el hombre niebla del comienzo llega a lado del peliazul, informándole que uno de los estudiantes había escapado, logrando que el primero sufra un ataque de ansiedad y este se rascará su cuello dañandosé más la piel y abrirse más la hérida causada por la chica.
Después que el hombre niebla calmara un poco al chico, este decidio actuar.
—Vámonos a casa— daba la orden Shigaraki —Pero no sin antes herir el orgullo de los héroes— dijo para después lanzarse dispuesto hacerle daño a Tsuyu.
"A ella no la tocas"
Pero ante de tan siquiera poderle tocar un cabello, un gran golpe impacto en el brazo del villano —¡AHHHHHH!— gritaba por segunda vez de dolor.
La causante de esto era Leah, ella había llegado a tiempo para salvar a su amiga —Eso fue por el codo— informaba el porqué de la ruptura del brazo de Shigaraki.
Cuando sus compañeros la vieron quedaron impactados, su compañera en vez de piernas ahora tenía la mitad de su cuerpo como serpiente —Y esto es por mi golpe— y tan pronto como dijo eso, Shigaraki salió volando debido a que Leah le había dado un colazo.
El chico había impactado en una pared, logrando que esta se quebrará, junto a varias costillas de él—N-Nomu— el peliazul escupía sangre —Asesinala—
Leah en ese momento se desplazó rápidamente por el suelo, evitando de nueva cuenta otro golpe por parte del Nomu y antes de que este pudiera reaccionar lo petrificó. Fue cuando se acerco preocupada a su profesor.
—Ya estará a salvo— trataba de calmar un poco el sufrimiento del pelinegro —Ustedes— los tres estudiantes se sobresaltarón al sentir la fuerte mirada —Llevenló enfrente, la petrificación no va a parar a esa criatura— y tal como Leah les ordeno, los tres cargarón a su profesor.
Leah volteo rápidamente cuando escucho como la petrificación ya se estaba rompiendo y sin pensarlo dos veces se lanzó a atacar al Nomu con su lanza.
Silencio, es lo que reinaba el lugar y solo el sonido de la sangre golpeando el suelo era lo que se escuchaba. La ojiambar había encajado su lanza en el estómago de la criatura y con facilidad había partido a la mitad al ser.
—Si quieren que sea un monstruo, lo seré— le decía directamente hacia el peliazul y el hombre niebla —Porque ustedes me dieron el ejemplo—
Shigaraki comenzo a reír como desquiciado, Leah no entendía el porqué de ello, pero cuando esucho algo raro detrás de ella se percato —"Esto no es humano"— pensaba la chica al ver como el Nomu se volvía a juntar perfectamente.
—¡Debemos ayudar a Leah-san!— demandaba Kirishima viendo como su amiga luchaba sola contra el Nomu.
—Ella es la única de nosotros capaz de hacerle frente— comentaba serio Shoto, pero dentro de él le preocupaba del estado de la chica, en todo momento ella había estado haciendole frente a aquel ser, pero también había recibido fuertes golpes —Nosotros no pudimos hacer nada— recordaba como habían tratado de tener al gran ser pero fallarón en el proceso.
Shigaraki viendo como su criatura tenía más de perder empezo a impacientarse, pero antes de tener otro ataque se dio cuenta de algo.
—Ji ji ji te tengo— murmuraba con burla al ver el plan de la chica —Nomu— el ser se paro de golpe —Atácalos a ellos— apuntaba al cuarteto de chicos que se encontraba alejados de Leah.
La oji ambar había estado alejando al Nomu con sus ataques, para que este no estuviera cerca de sus compañeros y poderles hacer algún daño.
—¡KACCHAN!— grito con todo su ser Izuku al ver como la gran criatura lo estampaba a la pared — ¿Kacchan?— decía confundido al ver al rubio a lado de él.
Este aún parecía muy desconcetrado —¿Cómo pudiste evitarlo?— Katsuki miro con molestia al peliverde
—¡Yo no hice nada Deku!— fue cuando todos vieron hacía la dirección del golpe, ahí se podía ver como la cola de Leah había detenido el golpe del Nomu.
La chica retaba con la mirada al gran ser —Sabes ya me estás hartando— informaba para después petrificarlo —En estos momentos agradezco haber prácticado deportes con la tía Toralei— aquel comentario no lo entendieron las personas que lo escucharon.
Pero sus dudas fueron resueltas cuando de un colazo Leah había mandado a volar por los aires al Nomu.
En eso se escucha un chiflido —Fue un buen lanzamiento cachorra— la chica volteo shockeada al origen de la voz.
—¡TÍO CLAWD!—
—Ya llegarón los refuerzos fidí— salía detrás del moreno
—¡PAPÁ!—
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