Luego de exactamente 12 horas de viaje, siendo las 7 de la tarde, Taehyung llegó por fin al aeropuerto internacional de México.

Estaba tan cansado, el viaje había sido muy duro, ya que no hicieron ninguna escala y todo fue directo.

De todas formas no podía quejarse tanto, pues lo trataron como todo a un príncipe, y claro que su Hyung era el causante de aquello.

Con él, iban 4 azafatas que lo cuidaron durante todo el viaje, le ofrecían comida, bebida, dulces, lo animaban a dormir un rato, todo estaba perfecto.

Pero Taehyung creyó que su Hyung se excedió demasiado cuando también en el avión se presentaron, un doctor para él por si el viaje le causaba problemas o ante cualquier situación, y un veterinario para Yeontan por lo mismo, de verdad que fue excesivo.

Pero al final, su Hyung hacía las cosas por algo.

Su pequeño bebé se había puesto mal durante el viaje, y el veterinario fue de gran ayuda, lo atendió como todo el profesional que era y le explicó el por qué estaba mal su Tannie, más él no prestó tanta atención pues solo estaba pendiente de su cachorrito.

A pesar de ello, y después de que todo se calmara, sonrió con amor. Su Jungkook siempre pensaba en todo, y se prometió así mismo, que jamás volvería a cuestionar las cosas que hiciera su novio, pues al fin y al cabo, de una u otra forma, todo tenía una función necesaria.

Su Hyung no le había dicho quien era el chico con el que se estaría quedando, pues dijo que dejaba todo en manos del misterioso chico para que así aquél tuviera la libertad de demostrar como era su persona, pero por eso se encontraba nervioso entre tanta gente.

Él se consideraba lindo, pues su novio, sus padres y sus amigos más cercanos se lo recordaban todo el tiempo, y el recuerdo de sus padres fallecidos diciéndole lo hermoso que era, jamás se podría borrar de su mente.

Pero el recibir tantas miradas por su apariencia lo ponían muy tímido, haciéndolo encogerse en su lugar mientras avanzaba, incluso vio a unas chicas tomándole fotos de manera "disimulada" y lo único que entendió de sus cuchicheos fue la palabra "Idol" por lo tanto después de pensarlo detalladamente llego a la conclusión de que aquellas chicas decían que parecía un Idol, lo cual lo avergonzó aún más.

Suspirando temblorosamente, se animó a subir la mirada, buscando con su mirada a quien podría ser su cuidador, y cuando sus ojos se toparon con un chico alto y delgado, de tez blanca, supo que era él. El chico tenía unas gafas de sol negras y una gran sonrisa se encontraba en su cara, en sus manos, había un cartel que decía Kim Taehyung de Jeon, lo cual lo hizo sonrojar furiosamente ante aquello, pero una sonrisita empezaba a formarse en sus labios ante la sensación que le causó el ver el apellido de su Hyung junto al suyo.

Abrazando a Yeontan contra su pecho, caminó tímidamente al chico que lo esperaba sonriente.

—Kim Taehyung, por fin tengo el placer de conocerte en persona—Había dicho apenas y había llegado a su lado, con su mano extendida en su dirección esperando que la estrechara.

Tomando a Yeontan con un solo brazo, correspondió al saludo.

—Uh, un gusto...—Taehyung calló al ultimo momento al no saber el nombre de la persona frente a él, quien pareció notarlo pues se apresuró a presentarse.

—Es cierto, le pedí a JK que me dejara presentarme ante ti personalmente, soy Kim Samuel, Taehyung—Le informó mientras se retiraba sus gafas.

Taehyung imaginó que era Coreano al hablar el idioma a la perfección, pero también se imaginó que tal vez era un Mexicano con una buena pronunciación, después de todo estaban en su país y creyó que se quedaría con uno.

Pero por su mente no pasó verdaderamente quedarse con alguien de su nacionalidad, con un chico lindo y de mirada cariñosa para agregar.

—Y por si te lo estás preguntando, pues tu carita llena de confusión me lo confirman, sí, soy Coreano pero también Mexicano, aunque nací en Estados Unidos—dijo con una risita ante eso, sacando sus dudas sin siquiera haberlo preguntado, lo cual lo hizo ponerse tímido al ser descubierto y el no haber disimulado ni un poco.

—Aunque eso podemos hablarlo en mi casa ¿Hmm? Por tus cosas no te preocupes, ya había mandado a traerlas desde que vi el avión llegar, te lo dijeron ¿cierto?—Preguntó, a lo que él simplemente asintió, le era difícil hablar con extraños, pero por su propio bien, se obligó a relajarse, pues no sabía cuanto tiempo pasaría al lado del joven a su lado, por lo cual era mejor el empezar a llevarse bien y  tenerse confianza.

—¿Y quien es este chiquito de aquí?—Preguntó hasta ahora recordando al animalito que Taehyung traía consigo desde el primer momento.

—Oh, es n-nuestro bebé, Yeontan—Aclaró Taehyung, tomando entre sus dedos la patita de Taehyung para simular un saludo

Samuel rio enternecido, pero el "nuestro" lo dejó desconcertado, y no se quedaría con aquella duda.

—Un gusto Yeontan— le dijo con una sonrisa mientras agitaba la mano hacia el cachorrito- pero ¿A qué te refieres con "Nuestro" eh, Taehyung?—preguntó, el nombrado se sonrojó al notar ese pequeño detalle que se pudo fácilmente haber malinterpretado.

—U-uh sí, me refería a nuestro bebé, con Jungkook—aclaró mientras bajaba su mirada avergonzado, acariciando las orejitas de Yeontan para distraerse.

Samuel sonrió asintiendo suavemente, agradeciendo el que Taehyung no lo estuviera viendo directamente y así no notar la sonrisa un tanto triste que se había formado en su rostro.

Pero recuperándose al instante, Samuel volvió a sonreír como si aquellas palabras no hubiesen causado nada a su terco corazón.

—E-eso es genial—comenzó a decir, aunque aclarando su garganta ante el error de haber tartamudeado—Para que Jeon te haya dejado tener una mascota con ustedes, y nombrarlo su bebé es porque debe amarte mucho ¿Cierto?—Preguntó con un deje de dolor, que por nada del mundo dejó notar.

Taehyung al hablar de su pareja, no pudo evitar asentir efusivamente, sonriendo en grande y con sus mejillas rojitas de la vergüenza por lo que diría, respondió a la pregunta.

—Sip, es cierto, Jungkookie y yo nos amamos mucho, mucho—Sus ojitos brillantes no notaron como los oscuros del chico a su lado se apagaban un poco ante su respuesta, pero era mejor así, se decía Samuel, aquello ya era totalmente el pasado.

Él ya lo había superado totalmente.

—Eso es muy bueno, Taehyung, el haber conquistado a Jeon Jungkook es digno de admirarse, él pareciera que no tiene corazón—Dijo con sinceridad, con una sonrisa decaída ante sus propias palabras.

Él no lo había logrado.

—Nuestro amor es una prueba de que Jeon Jungkook tiene un corazón—Atacó Taehyung sin dudarlo, con su voz un poco cargada de enojo ante aquellas palabras.

Sin saber que esas mismas inofensivas palabras habían dañado tan solo un poco más el corazón del otro Kim a su lado.

Quien a pesar de todo, también tenia muy bien sabido que Jeon Jungkook tiene un corazón, y uno muy grande, aunque éste solo perteneciera al chico a su lado, a Kim Taehyung.

a que nunca se imaginaron a Kim Samuel enamorado de JeiKei kajskajskaj