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Everything Would Be Better

capitulo dedicado a: junkookytaeforever espero que te guste <3

Taehyung comía su desayuno en silencio, sintiéndose un poco triste ante la situación, sabia que Jungkook estaba haciéndose cargo de lo ocurrido, pero por mas malo que haya sido lo que le hicieron, por mas incorrecto que fue, él tan solo quería que Jungkook no se metiera en problemas por ello, que no se arriesgara a él y a los demás por lo que paso, él tan solo quería que su Hyung fuera a él y lo abrazara, que lo acompañara en esos momentos y curara sus heridas con pequeños y cálidos besos, esos que tanto ama.

Tal parece que su tristeza se desprendía por sus poros, pues ante su notable desanimo, su noona, quien era la que lo estaba cuidando en esos momentos, se acerco a él con una pequeña sonrisa comprensiva y amigable.

—¿Que pasa, Taehyungie?— Le pregunto tranquilamente, su voz suave y su presencia lograron que Taehyung se sintiera mejor en tan solo unos segundos.

—Jungkookie aun no viene—respondió con un pequeño puchero apenas notable, sacandole una gran sonrisa a su mayor, quien no se pudo resistir a aplastar sus mejillas cariñosamente, soltando chillidos raros según Taehyung, soltando frases como "eres tan lindo" mientras alargaba la ultima vocal, u otras como "¿como tú, mi niño bonito, puede estar con la bestia de Jungkook?" eso haciéndole fruncir el ceño en señal de disgusto, queriendo lucir enojado ante su noona, pero ella solo seguía sonriendo y aplastando sus mejillas como loca diciendo que esas muecas solo lo hacían ver mas tierno.

—Noona mis mejillas duelen—le recordó en un tono lastimero, los golpes en su rostro aun recientes hacían que cualquier toque o movimiento le causara un dolor indescriptible, y al parecer su querida y dulce noona lo recordó, pues lo soltó al instante, preguntando repetidas veces si se encontraba bien o lo había lastimado aun mas, se limito a responder que esta bien, regalandole una sonrisa a su mayor ante su rostro aun preocupado.

Y cuando apenas olvidaba su tristeza al no tener a su Hyung con el, la puerta fue tocada un par de veces, haciendo que ambos dirigieran su mirada a ella, su mayor siendo obviamente la que fue a abrir.

Apenas y la puerta fue abierta, Jungkook entro por ella, cerrándola en el proceso, quedando cara a cara con su amada primita.

—Jeon—dijeron ambos al unisono, como si se hubieran puesto de acuerdo para decir aquello.

Ambos se dirigían miradas matadoras, ante la vista de Taehyung parecía que se lanzaban dagas con los ojos, la rivalidad de los primos Jeon siempre fue divertida para él.

Habían ocasiones donde le causaba ternura como su Jungkook se molestaba con Somi cada que esta le decía que se casaría con él, Jungkook se ponía celoso a morir, aunque no lo demostraba, Taehyung y Somi lo sabían, por eso ella siempre se encargaba de alagar y darle cariños a Taehyung, amando como su primo parecía sacar fuego ante eso, tan divertido.

Ante los recuerdos y la actitud de sus mayores, no pudo evitar soltar una risita, poniéndose un poco tímido cuando se gano la mirada atenta de los Jeon, ellos siempre se encargaban de decirle que su risa era tan carismática y contagiosa, que la amaban, eso solo hacia que sus mejillas se tornaran rojas y se pusiera tímido, como ahora.

Jungkook lo miraba atento, tratando de ocultar la pequeña sonrisa que comenzaba a formarse por sus labios, de nuevo dirigiendo su mirada a Somi, pidiendo con una fuerte mirada que se fuera y lo dejara a solas con su novio, ella captando la indirecta, rodó los ojos en disgusto, pero sabia que eso era lo que ambos necesitaban, así que fue por su bolso aun cuando no quería irse, pero tenia qué, pero antes de hacerlo, se acercó a Taehyung, colocando suavemente su perfecta y bonita mano en la mejilla de Taehyung, dejando un corto besito en su frente, sonrió al ver como Taehyung cerraba sus ojos ante el dulce cariño y como su primo los rodaba mientras se cruzaba de brazos, esperando que se fuera de una buena vez.

Satisfecha, estaba por irse cuando Jungkook la detuvo.

—Somi... gracias— le dijo en un apenas y audible susurro, decir esas palabras para Jungkook era tan difícil que aún no lograba comprender porqué, pero a pesar de eso, que Jungkook lo dijera, logro sacarle una sonrisa, pues eso demostraba que de verdad amaba a Taehyung, hasta el punto de dar las gracias, demostraba que estaba preocupado por él y que agradecía el que ella haya estado ahí, cuidando de su pequeño ante su ausencia.

Suspirando se dio la vuelta regresando hasta llegar y quedar al frente de Jungkook, su rostro frío y serio no cambiaba por nada, pareciera que se llevaban mal, pero en el fondo se querían, ambos eran la ultima familia que les quedaba, por eso ante cualquier cosa, estaban pendientes el uno del otro, aun cuando fuera en silencio o de lejos, ellos se apoyaban.

—No tienes que agradecer, JK— le dijo divertida, dejando de lado sus peleas infantiles—Quiero mucho a Taehyung, él es tan importante para mi ahora, así como tú lo eres, venir a cuidarlo mientras tu llegabas no fue un problema- siguió diciendo, dirigiéndole una sonrisita a Taehyung, quien estaba atento ante todo—y sabes que si quieres ayuda, puedo hacer lo que me pidas—dijo lo ultimo en un susurro, solo ante eso, Jungkook soltó una pequeña risa altanera.

Su prima podía parecer un pan de Dios, pero en realidad era tan mala como el, después de todo los Jeon estaban forjados con el mismo metal, ser lo que son ya era de familia.

—Esta bien, acepto tus palabras— le dijo aun en pequeños susurros, no queriendo que Taehyung escuche todo- pero no voy a permitir que te involucres en esto, puedo arreglarlo por mi mismo—soltó tan orgulloso como siempre, ante eso, Somi rodó los ojos, diciéndose que Jungkook jamas aceptaría trabajar juntos, aunque en realidad eso no siendo un problema para ella, estaban bien así.

—Ok, Ok, JK—Dijo resignada— Me voy ahora— y para hacer enojar a Jungkook, con su mano tomo su mandíbula y dejo un ruidoso beso en su mejilla, corriendo a la puerta cuando Jungkook amago con pegarle.

Mientras salía gritó un "Los amo" y se fue de ahí.

Taehyung que aun se encontraba en silencio, soltó risas divertidas en el momento en el que Jungkook se volteo nuevamente a verlo, pues en su blanquecina piel quedaron pintados los labios de Somi en un rojo intenso gracias a su labial.

Jungkook se acerco a él, alzando una de sus ceja sin entender el motivo de sus risas, Taehyung con su dedo toco su mejilla, indicándole a Jungkook que tenia algo ahí, rápidamente el mayor paso sus dedos por su mejilla, fingiendo una mueca de asco cando vio el labial impregnarse en sus dedos.

Se dirigió al lavabo para lavarse la cara, luego de unos minutos regreso con una toallita húmeda en sus manos, sentándose en la orilla de la cama al lado de su novio, quien no lo había dejado de ver en ningún momento.

—¿Tú de que te ríes? pequeño bribón— le dijo Jungkook a Taehyung, sonriendo libremente al estar solos, y divertido al saber que ese apodo molestaba a Taehyung— tu frente tiene una gran mancha roja como la mía— y entonces Taehyung recordó el beso que Somi le había dado primero, a punto de pasar su mano por ella para comprobar, Jungkook la tomo delicadamente, agitando suavemente la toallita en su mano, entiendo hasta ahora el porque la había tomado.

Con toda la calma del mundo, Jungkook comenzó a limpiar el labial en su frente, ante las caricias, Taehyung no pudo evitar el cerrar sus ojos gustoso, Jungkook lo agradeció, pues así Taehyung no pudo apreciar el momento en el que la sonrisa de Jungkook se borro en un instante, ni la mirada dolorosa que le dirigió al ver su rostro golpeado y maltratado, al  igual que sus brazos y lo demás que no podía ver por la bata de hospital.

Todo era su culpa.

Cuando terminó con su pequeño trabajo, tomó con dos de sus dedos el pequeño y fino mentón de Taehyung, atrayendolo suavemente a su propio rostro para comenzar un beso, lento y apasionado.

Apenas y sus labios se juntaron, soltó un pequeño gemido gustoso, lo había extrañado tanto, tanto, y la preocupación lo carcomía por dentro, él tan solo quería abandonar todo y correr para cuidar de su Tae, pero no podía permitirse eso, esas personas tenían que pagar con sangre, y él se encargaría de ello.

Cuando el beso se terminó, Jungkook mordió suavemente el labio inferior de Taehyung, sacandole un pequeñito jadeo.

Sin separar sus rostros, a tan solo centímetros de distancia, los ojos de Jungkook comenzaron a viajar por toda la bonita cara de su novio, aunque ahora se encontraba maltratada, eso haciéndolo enojar, como osaban esas personas a cometer tal estupidez.

Aún con sus labios húmedos, Jungkook comenzó a besar los moretones en el rostro de su Ángel, tratando de ser lo mas cuidadoso posible, cuando terminó, ambos estaban viéndose a los ojos.

—¿Porqué tardaste tanto en venir, Jungkookie?—Taehyung ya sabía la respuesta, pero el silencio en el que se encontraban lo ponía nervioso, por eso trató de iniciar una conversación, aunque ésta no era la más indicada.

—Estuve haciéndome cargo de esto, Tae, sé que lo sabes—Jungkook trataba de sonar tranquilo, pero en su interior su sangre hervía por la furia al recordar todo.

Taehyung se abstuvo de decir que no era necesario nada de eso, pero lo más probable es que su novio se enojara por decir aquello, y nadie hacía cambiar de opinión a Jungkook cuando existían estos casos, ni siquiera él.

Por eso se limitó a tomar las manos de su Hyung, comenzando suaves caricias en ellas, tratando de calmar la tormenta que amenazaba con empezar en el interior de su novio, Taehyung sabía que su Hyung se estaba culpando de ello, pero claro que no lo era.

—¿Qué es lo que te preocupa, Jungkook Hyung?—Le preguntó tratando de que su voz no sonara temblorosa al ver los ojos atormentados de su mayor— Sabes que puedes decirme todo— y aún cuando trató de evitarlo, las lagrimas salieron de sus bonitos ojos miel sin que el lo quisiera, no le gustaba ver el dolor en los ojos oscuros de Jungkook.

—No estás seguro aquí, Taehyung—Jungkook decidió no darle tantas vueltas al asunto, yendo directo al punto que debía de tocar con su pequeño Tae—No estás seguro conmigo ahora.

Para estas alturas Taehyung ya se encontraba llorando, su mandíbula temblaba dolorosamente, y su pechito dolía, no quería hacerse ideas equivocadas antes las palabras de su novio.

—¿Que tratas de decir, Jungkook?—Ambos ignoraron el como Taehyung preguntó aquello, sin respeto o sin cariño, tan solo atento ante las acciones del contrario.

—Quiero que te vayas mientras hago esto—Soltó Jungkook, sintiendo su corazón doler ante el sollozo lastimero que soltó Tae, pero no era tan malo como parecía, solamente que Taehyung aún no comprendía sus palabras.

—¡¿Irme a donde Jungkook!?—Le preguntó alterado el menor, las lagrimas bañando su rostro adolorido—Yo quiero estar contigo...— y sin más, se rompió en llanto.

Con sus largas y bonitas pero temblorosas manos, tapó sus ojos, en su cabeza rondando la idea de que Jungkook ya no quería que siguieran siendo pareja, eso haciéndolo llorar aún más.

Jungkook no pudiendo resistir, tomó con cuidado el menudito y tembloroso cuerpo de su menor, agradeciendo el que Taehyung no haya querido separarse de él, en cambio, se aferró a su cuerpo como si no quisiera soltarlo nunca.

—Tienes que entenderlo, TaeTae—Empezó en un tono calmado, acariciando con sus dedos entre las hebras rubias de Taehyung, acomodando y desarreglando sus bonitos cabellos—No estás a salvo conmigo, y menos ahora, por eso tienes que irte, pero cuando todo acabe, yo mismo iré por ti—Decía, besando su cabellera rubia.

—No...¿No me vas a terminar por esto?— Preguntó Taehyung, su voz escuchándose deforme al estar su rostro enterrado en el pecho de Jungkook y por el llanto.

Jungkook casi se ríe, casi.

—¿De que hablas amor?— Le preguntó en un tono tirando a lo divertido, aunque no lo era, sus manos separando suavemente a Taehyung de él para poder verlo a la cara— Claro que jamás haría eso, tú eres mío y nunca voy a permitir que te aparten de mi— Taehyung sonrío un poco mas aliviado ante eso, ignorando la falsa posesividad de su novio, Jungkook no era así, sin embargo, sus palabras tenían partes con razón, él jamás lo dejaría, y si lo hacía, solo sería si Taehyung lo quisiera.

—Pero... quieres apartarme de tu lado— susurró sin entender muy bien.

Jungkook quitó con sus largos dedos las lagrimitas que aún corrían por su rostro, besando suavemente su naricita roja ante el llanto al terminar de secarlas.

—No quiero que estés aquí porque es peligroso para ti, bebé— comenzó a explicar ahora con el ambiente menos tenso— Serán como unas mini vacaciones, mientras yo me encargo de todo, tú te tomas un pequeño descanso de todo esto ¿Ah?— Jungkook esperaba que Taehyung aceptara eso.

Aun con dudas existentes en su cabecita, Taehyung se recostó sobre el cuerpo de su novio, abrazándolo y sonriendo al ser abrazado también, aunque un pequeño puchero quería  adueñarse de sus labios, pues aun no entendía bien del todo.

—¿Y a donde se supone que voy a ir?—Le preguntó, esperando que Jungkook no haya sido tan extremista como sabía que era cuando se trataba de su persona, al no escuchar respuesta alguna, se separó del cuerpo fornido del mayor, viendo la sonrisita nerviosa en su rostro, lo cual le daba mala espina—Jungkookie...—le decía mientras entrecerraba los ojos.

—Mi opción solo era mandarte a Japón, Tae, pero apuesto a que estas personas conocen a todos mis contactos ahí, así que lo descarté, Seúl nunca fue una opción, darían contigo muy pronto, ellos saben que eres mi punto débil—lo ultimo lo susurró, pero es que era cierto, y para colmo, sus opciones estaban limitadas— Estados Unidos jamás, odio a esos Americanos—La manera despreciable en la que se dirigía Jungkook a los Estadounidenses logró sacarle una pequeña risa a Taehyung.

Pero es que simplemente los odiaba, siempre creyéndose la mejor cosa del mundo y despreciando a todos, sin decir que tenía bastantes enemigos ahí, después, en otros lugares no tenía conocidos, solamente le quedaba una persona a la cual recurrir en la cual confiaba, aunque dudaba de que a Taehyung le gustara la idea.

—Y por eso, pensé en mandarte a...—Jungkook no podía decirlo, sabía que Taehyung se alteraría ante eso, era un país desconocido, con un idioma que para nada conocía.

Pero es que era su opción más buena, pues nadie sabía del chico del que una vez fue algo así como su "pupilo" en este mundo de la mafia, además de que confiaba plenamente en él.

—¿A donde quieres que me vaya, Jeon Jungkook?—Preguntó Taehyung, cada vez más alterado ante las vueltas que comenzó a dar Jungkook en el asunto.

—Quiero que te vayas a México— Respondió de manera rápida.

(N/A ¿porqué me reí al escribir esto? Lol, sigamos xde)

Taehyung abrió los ojos de sobremanera, sin poder creer lo que su mayor había dicho

—¿¡México!?—El grito que soltó, logró sobresaltar a Jungkook, pero es que Taehyung no lo podía creer— ¿Cómo quieres que me vaya al otro lado del mundo a un País que para nada se me pasó por la mente?—Para estas alturas Taehyung ya había dejado el respeto de lado, hablándole de manera informal y demandante a su Hyung.

—Tengo a alguien de confianza ahí, Tae, además de que nadie lo conoce aquí, es mi opción más buena—trató de explicar— Y dicen que México tiene buena comida—trató de alivianar el ambiente con eso, pero el enojo de Taehyung no parecía querer irse pronto.

—Vamos amor, no es tan malo como parece, conocerás un continente nuevo, un país nuevo, cosas nuevas, también es bueno para ti— dijo Jungkook al ver que Taehyung no decía a pesar de que ya habían pasado unos minutos luego de decirle su gran propuesta— Y te prometo, Tae, te prometo a que apenas y termine con esto, yo mismo iré por ti.

Ante aquello, y luego de pensarlo mucho, Taehyung suspiro resignado, tal vez en realidad no era tan malo.

—¿Prometes que terminará pronto?— Cuestionó Taehyung, resignado.

—Haré que todo acabe cuanto antes, amor—respondió Jungkook de forma aliviada, agradeciendo el que Tae aceptara—Ni bien termine, iré a buscarte y ya nada más nos podrá separar—Prometió.

Taehyung volvió a buscar el calor que desprendía el cuerpo de su novio, abrazándolo fuerte y sin querer soltarlo.

Si Jungkook decía que era mejor así, era por algo, entonces si con eso ambos estarían bien después, él podía aceptarlo, además no es como que México fuera horrible ¿No?

Tratando de olvidar lo que vendría después, ambos se limitaron a abrazarse lo suficiente, a besarse hasta el cansancio, y decirse entre susurros que todo estaría bien.

Porque después de eso, todo sería mejor.

Jaja me mame con lo de México 😎🇲🇽 pero entramos al mes patrio y pos eso AKJSKSK

Mil años después, I know.

Bueno, aquí está la nueva portada, fue la más votada uwu

Bueno, espero que el capitulo les haya gustado, perdón por los errores ortográficos y pues nada, adiós, los amo!¡♡

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