Cap 15

5 años después...

Mi hija ya es totalmente una mujer, iniciando por su apariencia. Es bellísima, una combinación entre su padre y yo, creando a la criatura más hermosa que se halla visto.

T/n: Hija, cuando quieres visitar la playa? Estas muy pálida.

Mi: Cuando quieras mamá.

T/n: Entonces vístete, iremos esta tarde.

Emocionada me dio un beso, corrió y se introdujo en su habitación. Yo mientras tanto, preparé bocadillos para el viaje, los guardé en una canasta y organicé mis ropas en una maleta color azul.

Justo a las 5pm ella sale de su habitación ya vestida y lista para el viaje.

T/n: Echaste tu traje de baño?

Mi: Obvio Mami, sin él no soy nada.

Subimos a mi auto y conduje.

Mi: Mamá, quiero mostrarte algo.

T/n: Estoy conduciendo, ahora se me dificulta un poco cariño.

Mi: Es algo rápido.

Suavemente colocó su mano en mi mejilla e hizo algo que no encuentro a explicación como para que el pueda hacerlo.

Me mostró de una forma sobrenatural a su padre. En mi visión logró que se reprodujera lo que Tae veía desde su punto de vista, y allí estaba yo, su vista apuntando hacia mí.

Cuando mi hija retira su mano...

Mi: He practicado durante un tiempo.

Yo sólo estaba aturdida y las lágrimas venían a mis ojos nublando mi vista. No le presté atención al camino por el que iba, y ese fue el error que cometí.

Un auto venía haciendo zigzag por la carretera, había de ser alguien ebrio o algo parecido, pero con todo lo que me estaba sucediendo no me dio tiempo a reaccionar.

Sólo di vuelta al volante, provocando que mi auto saliera de la carretera para prevenir que impactara contra el otro, pero el mío comenzó a dar vueltas y los cristales se rompieron, cayeron encima de mi cuerpo y el de mi hija, cortando alrededor.

Me importaba solamente el bienestar de mi hija, el único recuerdo vivo de mi esposo, así que creé una barrera mágica, pero era algo tarde.

El auto, virado al revés, con las ruedas hacia arriba, se encontraba con los cuerpos mío y de mi pequeña dentro.

Pero se escuchó mi voz que clamaba.

T/n: Tae, ven aquí, salva a nuestra hija.-entre lágrimas, sin poder moverme, pidiendo por la vida de mi hija.-TaeHyung, por favor, sálvala. Tae, amor mío, no nos dejes solas.-dije mis últimas palabras casi inconsciente.

POR TAEHYUNG...

Mis ojos se abrieron, salí de un cofre enterrado en el suelo, a 5 metros bajo tierra, y la única razón fue...

Que escuché como alguien me estaba llamando.