Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi y a Kamishiro Tsutomu♥.

Les sacará el grito fangirl Counterpart este capítulo ♥.♥

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"Sanar es una cuestión de tiempo, pero a veces también es cuestión de oportunidad".

POV de Jonouchi

La mitad de los chicos se fueron con el hermano de Yuto y la mitad nos fuimos con Reiji, en cuanto abordamos no se hizo la espera para que mi neko y el oji-púrpura se presentaran como era normal entre empresarios reconocidos.

—Entonces eres el gran Seto Kaiba, el empresario número uno de todo Japón -Mencionó Reiji sonriendo levemente.

—Quién diría que en este viaje conocería al segundo mejor empresario de Japón -Mencionó mi neko cruzado de brazos sin inmutarse de nada, supongo que para mí neko, Reiji solo era un empresario más -Eh escuchado mucho sobre tu trabajo en Leo Corporation.

—Y para mí sería imposible no conocer sobre tus trabajos en Kaiba Corp -Mencionó el peli-gris con su vista fija en la avenida -Realmente sería un gran honor plantearte alguno de mis proyectos, desde hace tiempo tenía la intención de Viajar a Domino para presentarme, pero esto resulto mejor.

—Claro, pero hablaremos de trabajo después -Respondió mi neko en cuanto vio que hice un puchero de desaprobación al ver que se estaba enfrascando en su trabajo cuando también se supone que trataríamos de disfrutar estos días fuera de Domino.

—Mi hermano es un genio en el ámbito tecnológico -Mencionó mi pequeño Moki hablando amenamente con su nuevo amiguito.

—Mi hermano también lo es -Respondio el pequeño Reira sonriéndole, al parecer ambos pequeños se sentían orgullosos al poder presumir a sus hermanos, yo solo miré la escena con una sonrisita.

—Espero que la madre de Yuya esté bien -Mencioné pesadamente sin olvidar el motivo de estar en Ciudad Maiami.

—Esperemos que esté bien -Mencionó el albino cabizbajo.

—Lo estará, solo necesita descansar un poco, la madre de Yuya siempre ha sido una persona muy activa y es totalmente admirable, entre ella y su hermano Shuzo-san manejan una escuela y por ende tiene muchas obligaciones -Menciionó el oji-púrpura mirándonos por el retrovisor.

—Eso no debe ser nada fácil solo para dos personas -Menciionó Marik impresionado.

—No lo es, por eso el colapso -Mencionó el oji-purpúra sin más.

—Mokuba me gustaría que fueras a jugar a mi casa, ¿te gustaría? -Preguntó Reira feliz a mi chibi.

—No sé Reira, debo preguntarle primero a Jono -Respondió este sonriéndole.

—Hjmm... -Mencionó mi neko haciendo un ruidito que me hizo reír ya que el chibi dijo que necesitaba mi autorización y no la de él -Parece que olvidas quien es tu hermano mayor, eh Mokuba -Dijo con sus ojos cerrados fingiendo molestia.

—Esto me suena familiar -Mencionó Reiji sonriendo -Cierto pequeño también hace lo mismo conmigo cuando Shun está cerca -Mencionó mirando por el retrovisor a Reira quien solo se sonrojo al momento por las palabras de su hermano.

—Al parecer nuestras parejas ya nos llevan un paso adelante -Mencionó mi neko sonriendo levemente.

—Así parece ser -Respondió Reiji sonriendo.

—Entonces Jono, ¿si puedo ir? -Me preguntó Moki mirándome con una mirada tan linda que era imposible decirle que no.

—No lo sé chibi, Seto es quien debe decir -Respondí volteando a ver a Seto.

—Si no hay inconvenientes para Reiji, puedes ir Mokuba -Respondió este sin más.

—Por mí no hay problema, además me da gusto que Reira invite a alguien a la casa, no es usual que lo haga -Menciionó el oji-púrpura sonriendo.

—Ya escuchaste Chibi, entonces solo cuídate mucho y no dejes tu celular donde sea que te estaré marcando para ver cómo estás -Mencioné sonriéndole.

—¡Lo haré! -Exclamó feliz -Gracias hermano, gracias Jono -Dijo sonriéndome enormemente -Entonces si podré ir Reira.

—Me alegra -Mencionó el pequeño tomando las manos de mi chibi sonriéndole cálidamente, al parecer habían creado cierto vínculo entre ellos y eso me agradaba.

Así seguimos con una amena conversación entre el par de importantes empresarios sobre sus hermanitos, y Shun y yo como tema principal, los chibis hablando de las mil cosas que harían en casa de los Akaba, y por último mis amigos y yo hablando de lo que íbamos viendo de camino al hospital.

Fin del POV de Jonouchi.

El camino al hospital se nos hizo demasiado corto mientras íbamos hablando con Shun sobre alguna que otra patoaventura de Yugo, Yuya y Yuto, mi Yami, Yuri y yo solo íbamos riéndonos de las cosas que nos contaban, inclusive salió a relucir un festival en el que habían obligado a Yuto a vestirse de una botarga de oso panda.

—Hubiera amado tomarte una foto ese día -Mencionó el oji-carmesí cabizbajo encogiéndose de hombros.

—Doy gracias que nadie tomo ninguna, fue vergonzoso -Menciionó el oji-gris cruzándose de brazos frunciendo el ceño.

—¿Estás seguro de eso? -Cuestionó Shun con una sonrisa maliciosa y un extraño brillo en sus ojos color limón.

—¡Shun! No me digas que tú... -Comenzó a decir Yuya impresionado.

—Así es... Yo tengo unas fotos de Yuto bajo mi poder -Respondió el mencionado sonriéndole mientras le guiñaba.

—Por favooooor debes pasarme alguna -Pidió Yuya haciendo ojitos de enamorado.

—Oh no, Shun, no -Mencionó Yuto apenado y frustrado a la vez, era divertido verlos.

Cuando divisamos el hospital todas las sonrisas se esfumaron al saber que veríamos como estaba Yoko-san, solo esperábamos con todo nuestro corazón que la mamá de Yuya estuviera bien.

—De acuerdo hemos llegado -Mencionó sonriéndole levemente a Yuya -Yoko-san está en el tercer piso en la habitación 125.

—Gracias por traernos Shun -Mencionó el oji-carmesí sonriéndole levemente.

—Vamos Yuya, Yoko-san estará mejor, además adentro del hospital habrá personas que se sentirán felices de verte -Mencionó el oji-limón feliz.

—Los chicos... -Mencionó el oji-carmesí sonriendo, supuse que extrañaba mucho a sus amigos de esta ciudad.

Nos reunimos con los chicos rápidamente y entramos al hospital hasta llegar a la sala de espera, en ese momento varios chicos se aproximaron a Yuya para saludarlo alegremente.

POV de Yuya

Al entrar al hospital caminé junto a mis amigos hasta llegar a la sala de espera, al momento de poner un pie ahí fue recibido efusivamente por mis amigos y por un emocionado peli-azul que se me lanzó al cuello en un gran abrazo dando una vuelta con él en cuanto me vio, gritando mi nombre.

—Sora, yo también te extrañé -Mencioné correspondiendo el abrazo de mi pequeño amigo que de pequeño solo tenía la altura ya que tenemos la misma edad, él era mi única salida cuando Yuto y Yugo se ponían a pelear sobre mí.

—Ya te quería ver -Mencionó encantado.

—Y yo a ti -Dije mirándolo con una gran sonrisa, una de las cosas que caracterizaba a mi amigo era su forma de ser tan encantadora y a la vez orgullosa que hacía que todos los que lo conocieran lo adoraran en un instante.

—Sora, suelta a Yuya, lo sofocas -Mencionó mi amigo Sawatari restándole importancia al asunto como era siempre -Hola Yuya qué de tiempo -Sonrió al verme.

—Yo nunca sofocaría a Yuya -Mencionó Sora haciendo un puchero muy tierno ante mis ojos -¿Verdad Yuya? -Me Preguntó mirándome como si escudriñara mi corazón en mi mirada para evitar que le mintiera.

—Hola Sawatari -Mencioné feliz -Y no Sora, jamás me sofocarías -Le respondíi sonriendole, él sonrió asintiendo felizmente.

—¡Yuya! -Escuché el grito de emoción de mi prima Yuzu llegando a mi lado -Que alegría volver a verte -Mencionó feliz.

—Lo mismo digo Yuzu -Mencioné acercándome a ella para saludarla con un beso.

—Hola Yuya -Mencionó llegado Serena, la hermana de Sora junto a Yuzu sonriéndome mientras la abrazaba por la cintura.

—Hola Serena -Mencioné feliz, por lo que podía ver la cercanía de ellas era más allá de una simple amistad -Serena... -Susurré muy bajito al acercarme a saludarla.

—¿Qué pasó? -Me cuestionó de la misma manera.

—¿Qué tal van las cosas con Yuzu? -Pregunté feliz.

—Ya es mi novia -Respondió orgullosa, me alegré de escucharla, desde hace tiempo ella había querido decirle a mi prima que estaba enamorada de ella, pero tenía miedo de perder su amistad.

—Me alegro -Dije sonriéndole enormemente.

—¡Yuya! -Exclamaron los dos hermanos de Yugo a coro saludándome felizmente.

—Hola Michio, Rin -Dije sonriéndoles.

—¡Yuya! -Exclamó mi cuñada viniendo a mí para abrazarme, me apené un poco al momento ya que recordé que ella siempre estuvo diciéndome que eligiera a su hermano, seguramente amaría cuando Yuto y yo le dijéramos que ya éramos novios.

—Al parecer todos, incluidos mis hermanos se olvidan de Yuto y de mi cuando esta Yuya cerca, como siempre -Mencionó el oji-azul fingiendo melancolía, mi novio solo asintió a sus palabras.

—Eso no es verdad hermanito -Dijo la peli-verde llegando a su lado para abrazarlo.

—Hola chicos -Dijeron todos a coro saludando a mi novio, a Yugo y de paso a mis amigos.

—Chicos, es hora de las presentaciones -Dije feliz -Ellos son mis amigos de Domino, él es Yugi Mutou, su novio Yami Atemu y el primo de Yu, Marik Mutou, los primos de Yami, Seto y Mokuba Kaiba, junto a ellos está el novio de Kaiba, Jonouchi Katsuya, él es Ryo Crawford y él es Yuri Hochun -Dije feliz -Chicos ello son mis amigos de aquí, Sora y Serena Shiun'in, Shingo Sawatari, mi prima Yuzu Hiragi, ese es el apellido de soltera de mamá -Dije sonriendo -Ruri Kurosaki, la hermana de Yuto y Shun, y los hermanos de Yugo, Michio y Rin Mokota -Dije feliz.

—Es un gusto conocerlos -Dijeron mis amigos y mi prima.

—El gusto es nuestro -Dijeron Yu y los demás chicos sonriéndoles.

Me gustaba ver que a mi alrededor tenía a muchas personas que me querían y con las que siempre iba a poder contar, mientras pensaba en eso Yu y los chicos estaban amistándose con Sora y los demás, Ruri le reclamaba a mi novio su desinterés en ellos, y por otro lado Rin y Michio reprendían a Yugo por no llamar, y bueno, era obvio si el par de tontos se fueron tras de mí a Domino y no habían hecho por contactar a sus familiares, yo solo sonreí levemente.

—Yuya, ya puedes pasar a ver a tu madre -Dijo el oji-limón llegando a mi lado, yo asentí y les avisé a los chicos que pasaría a ver a mi mamá.

—Ve sin cuidado Yuya, nosotros te esperaremos aquí -Me dijo Yu sonriéndome, yo asentí y me dirigí hasta la habitación de mi madre.

Caminé por el pasillo hasta llegar al ascensor para subir al siguiente piso, al llegar a la habitación de mi madre me sentí mal, tal vez si me hubiera quedado en Maiami ella no hubiera colapsado ya que hubiera tenido mi ayuda.

—Tranquilo Yuya, Yoko-san está mejor, Shun y yo ya la vimos -Mencionó Reiji sonriéndome poniéndose a lado de mi cuñado ya que también nos acompañaba durante el trayecto.

—Esta bien -Dije pesadamente y abrí la puerta -Mamá -Pronuncié asomando mi cabeza para divisar a mi madre.

—¡Yuya! -Exclamó emocionada al verme -Mi pequeño hijo, ¿cómo estuviste todo este tiempo sin tu bellísima madre? -Preguntó animada, realmente Reiji tenía razón, mi madre se veía mucho mejor, pero aun así estaba conectada por vía intravenosa a una bolsa con suero.

—Mamá -Mencioné entrando rápidamente dejando a Shun y Reiji afuera, cuando llegué junto a su lado la abracé fuertemente mientras unas pequeñas lagrimas salían de mis ojos -Perdóname por no estar aquí cuando más me necesitas -Mencioné afligido.

—Yuya... Entiendo eso mi amor, además cuando te cases no vivirás conmigo así que no te preocupes tanto -Mencionó separándome un poco de ella para mirarme a los ojos fijamente mientras pasaba su mano por debajo de mis ojos para limpiar las lágrimas.

—Lo sé, pero mientras no me case estaré al pendiente de ti -Mencioné sintiéndome mal.

—Tu deber no es cuidar de mí, tu deber es ir a la escuela y ser un gran profesionista y hacer que me sienta orgullosa -Mencionó feliz -Además tu padre volverá de su viaje el domingo, él es quien debe cuidarme en todo caso y no dejar tan a la deriva a su muy hermosa esposa -Dijo cruzándose de brazos haciendo un puchero que hizo que sonriera.

En esos momentos entró el doctor que la estaba atendiendo para darnos noticias.

—Buenas tardes Yoko-san, oh él debe ser su hijo, ¿verdad? -Cuestionó mirándome.

—Doctor Morita -Dijo mi madre sonriéndole -Así es doctor, le presento a mi muy amado hijo, Yuya -Yo me apené un poco al escuchar a mi madre.

—Es un gusto jovencito -Dijo sonriéndome.

—El gusto es mío, muchas gracias por cuidar de la salud de mi madre -Mencioné haciendo una inclinación.

—No es nada -Me respondió feliz -Por cierto, traigo buenas noticas -Mencionó animado.

—¿En serio doctor?, ¿qué noticias son? -Preguntó mi madre feliz.

—Bueno, al ver que ha mejorado considerablemente durante la tarde y noche de ayer hemos decido darla de alta y darle algunas especificaciones para evitar que tenga una nueva recaída -Mencionó el doctor mirando unos papeles en sus manos.

—¡Eso es genial! -Exclamé emocionado -Podrás ir a casa hoy mismo mamá.

—Eso es lo mejor, ya necesito comer algo más que no sean solo verduras o pollo hervido -Mencionó haciendo una leve mueca.

—Con lo fastidiosa que eres para la comida y lo acostumbrada que estás a la comida de Michio no se me hace raro que lo digas -Mencioné sonriendo, mi madre era así, era un fan de la comida del hermano de Yugo, este era muy famoso por la cocina, inclusive tenía su propio programa de televisión y esas cosas, y como todos mis amigos adoran a mi madre, Michio siempre le cumple sus antojos de cualquier comida.

—Es verdad, extraño su comida -Mencionó afligida, yo solo sonreí.

—Bueno entonces prepararé todo para darla de alta, con su permiso -Dijo saliendo de la habitación.

—Me alegra que ya estés bien ma -Mencioné feliz.

—Tienes una madre muy fuerte -Sonrió orgullosa -Un simple colapso no es nada para mí -Mencionó guiñándome, yo asentí a sus palabras.

—Avisaré a Reiji y a Shun para que también estemos listos para ir a la casa y por cierto madre, hay ocho personas a las que quiero presentarte -Mencioné feliz.

—¿Ocho? -Preguntó impresionada.

—Si, mis amigos de Domino, en cuanto les dije que estabas mal no escatimaron en nada para poder venir a ver cómo te encontrabas -Mencioné sonriéndole.

—¿Eh?, ¿en serio? -Preguntó sorprendida -Que buenos chicos deben ser para preocuparse por mí, aunque aún no me conocen -Mencionó encantada.

—Lo sé, tengo buenos amigos -Mencioné feliz -Pero bueno a ellos los conocerás en un rato -Dije sonriéndole y mi madre asintió a mis palabras -Saldré para hablar con los chicos, ahora regreso.

—Ve Yuya -Mencionó feliz.

Al salir les dije a Reiji y a Shun lo que el doctor Morita había dicho y fueron rápidamente a organizar todo para llevar a mi madre a nuestra casa.

Cuando todo estuvo listo y el doctor ya nos había dado el rigurosa proceder para evitar la recaída mi madre se fue con los chicos y Sora, mientras Yu, Yami, Marik y demás nos fuimos hasta mi casa de la misma forma en la que habíamos llegado al hospital, así que tendría que esperar hasta mi casa para presentarle a mi madre a mis nuevos amigos.

El camino no fue muy largo, en diez minutos ya nos encontrábamos en mi casa sentados en la sala y ahora si era el momento de volver a presentar a mis amigos.

—Ma, te presentaré a mis amigos de Domino -Mencioné feliz -Ellos son Yugi y Marik Mutuo son primos, Yami Atemu y sus primos, Seto y Mokuba Kaiba, Jonouchi Katsuya, Ryo Crawford y Yuri Hochun, chicos ella es mi adorada madre Yoko Sakaki -Dije sonriéndoles.

—Es un gusto conocerla Yoko-san -Dijeron sonriéndole.

—Pero que lindos son todos -Mencionó encantada al verlos -Todos son tan guapos.

—Gracias por el comentario Yoko-san -Mencionó Yu apenado.
—Nada de gracias, solo es la verdad, todos son una lindura, me encanta que mi Yuya tenga amigos tan lindos y por cierto muchas gracias por preocuparse por mí y por venir hasta acá para ver cómo me encontraba.

—No es nada Yoko-san, Yuya es un amigo muy importante para nosotros y no podíamos dejarlo solo en una situación así -Dijo el albino sonriéndole cálidamente.

—Eso es verdad, los amigos están para apoyarse en cualquier situación y es muy lindo conocer a su hermosa madre -Mencionó Marik feliz, mi madre quedó encantada con el oji-lavanda y con el albino al momento, lo noté en su mirada.

—Que alegría poder conocerlos -Mencionó ella feliz -¿Pero quieren algo de tomar o de comer?, ¿quieren conocer la ciudad? -Preguntó entusiasmada.

—Yoko-san, no creo que esté en condiciones de salir a pasear si acaba de salir del hospital -Dijo mi novio un tanto preocupado.

—Lo sé, pero sería lindo darles un recorrido por Ciudad Maiami -Mencionó esta afligida.

—Hoy puede descansar y si quiere mañana nos podrá dar ese recorrido que nos dice -Mencionó Yu sonriéndole.

—¡Me parece muy bien! -Mi madre tenía tanta energía que ni parecía haber salido del hospital, pero era mejor hacer que descansara.

—Yuto, ¿me ayudas a llevar a mi mamá a su recamara para que descanse? -Cuestioné a mii novio sonriéndole.

—Por supuesto -Respondió él sonriéndome dulcemente.

Quería estar con mi madre un momento a solas, bueno junto a mi Yuto para decirle que éramos novios y esas cosas.

—Se quedan en su casa chicos -Mencionó despidiéndose de todos.

—Gracias y hasta luego Yoko-san -Todos lo dijeron a coro hasta parecía que hubieran ensayado esa línea, eso me hizo esbozar una sonrisa.

Al subir para llevar a mi madre a su habitación Yuto y yo nos quedamos un momento preparando todo para ella mientras mi madre conversaba amenamente con él.

—Me alegra verte después de tanto hijo -Mencionó sonriéndole, mi madre tenía eso de llamar hijo a Yuto y eso antes me apenaba, pero ahora me parece lindo, además era raro porque a Yugo nunca le decía así.

—Igual a mí, me da gusto poder ver que sigue tan fuerte y bella como siempre -Mencionó mi novio sonriéndole cálidamente.

—Siempre eres tan lindo -Mencionó mi madre feliz -Por cierto, ¿ya tienes pareja?, eres muy lindo como para seguir soltero -Miré fijamente a mi madre, ella había dado en el punto que estaba planteándome en la cabeza.

—Si, ya tengo a alguien -Respondió apenado bajando su mirada un poco sonrojado.

—¿De verdad? -Preguntó sorprendida -Es una pena -Mencionó encogiéndose de hombros.

—¿Por qué le dices eso, ma? -Pregunté algo impresionado por su comentario.

—Siempre pensé que ustedes terminarían juntos -Mencionó señalándonos afligida, cuando dijo eso sentí como mi corazón se aceleró de sobremanera -Solo espero que sea un chico o una chica muy linda como para que le haya quitado la posibilidad a mi lindo Yuya -Mencionó cerrando sus ojos pesadamente.

—¿De verdad usted quería que Yuya y yo estuviéramos juntos? -Preguntó sorprendido, yo me quedé en blanco esperando la respuesta de mi madre.

—Claro, siempre me has parecido un chico muy apuesto y puedo ver cómo siempre te preocupas por Yuya, así que creí que él te gustaba -Nunca le había contado a mi madre lo que pasaba con Yuto y con Yugo, pero aun así ella solo tenía sus leves sospechas para con Yuto que me decía cuando tenía la oportunidad, pero yo siempre le rehuía al tema, sin embargo, ahora era más sencillo hablarle de nuestra relación.

—Ma -Mencioné para llamar su atención acercándome a mi novio tomándolo de la mano mientras sonreía -Yo soy el novio de Yuto -Mencioné feliz, en ese momento mi madre abrió sus ojos sorpresivamente y una gran sonrisa apareció en su rostro.

—¡Sabía que los dioses no me fallarían! -Exclamó emocionada acercándose rápidamente a nosotros para abrazarnos fuertemente -Me da mucho gusto que tú, Yuto, seas mi yerno, sabía que no ibas a poder resistirte a los encantos de mi más grande tesoro -Mencionó orgullosa.

—Nunca hubiera podida hacerlo, cómo nunca pude desde el día que lo conocí -Mencionó Yuto sonriéndole a mi madre.

—Es tan lindo tener la razón -Mencionó ella con pose ganadora -Sabía fervientemente que sentías algo por él, siempre se lo decía, pero Yuya me tomaba a loca.

—Eres muy intuitiva ma -Mencioné feliz.

—Otro de mis grades talentos es darme cuenta de las cosas antes que todo el mundo -Mencionó soltándonos para sentarnos junto a ella en la cama -Me alegro por ustedes, de ahora en adelante tengo un hijo más -Dijo simulando secarse una lagrima de su ojo que nunca bajó.

—Con más razón le dirás hijo -Mencioné sonriendo.

—Así es -Mencionó sonriéndo -Desde siempre pensé que lo sería y por eso lo llamaba así.

—Gracias por aceptarme como novio de Yuya -Mencionó mi lindo novio apenado, pero con una gran sonrisa en su rostro.

—No agradezcas, a ti te acepté desde hace mucho tiempo al ver el gran chico que eres, no hay nadie mejor que tú para mi Yuya -Respondío mi madre sonriéndole.

Me sentía feliz, estuvimos un rato hablando con mi madre hasta que pasó como una media hora, después la dejamos descansar y bajé junto con mi novio para ver a nuestros amigos, ambos nos sentíamos felices por la emoción de mi madre al decirle que éramos novios, yo más que nada me sentía feliz, ¿qué más podía pedirle a la vida?, con amigos maravillosos, una familia hermosa y un novio guapísimo y admirable lo tenía todo.

Fin del POV de Yuya.

----Continuará----

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Sé que todas quieren pedirle a mi Shun♥ la copia de las fotos de Yuto vestido de panda x'D Y... ¿Acaso Yoko-san no es un amooooor? *-* ya pues, nos leemos en el próximo capítulo, cya :3