Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes mepertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi y aKamishiro Tsutomu♥, las canciones utilizadas tampoco me pertenece, estas pertenecen a sus respectivos autores♥.   

Aasedfgh este capítulo tiene de todo un poco *-* espero que les guste, ah si, también tiene lemon Puppy jaja /u\ 

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"Hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer algo juntos".

Por fin era viernes, lo que significaba solo una cosa, nos iríamos a acampar el fin de semana junto a los chicos, estaba feliz, a la salida de clases ya todos llevaban sus mochilas listas con ropa, alimentos enlatados, agua embotellada, cuerdas y cosas para armar las casas de acampar, bolsas de dormir, entre muchas cosas que utilizaríamos, mi primo y yo éramos los más emocionados de ir ya que teníamos muchos años sin visitar nuestro lugar especial para acampar.

Yami y Kaiba-kun dijeron que llevarían sus autos para que fuera más fácil ir hasta el lugar, Yo guiaría a Yami y mi primo a Kaiba-kun.

Nos dividimos en dos grupos para ir en cada auto, yo obviamente iría con mi Yami junto con Yuto, Yuya y Ry-chan, con Kaiba-kun irían mi primo, Jonouchi-kun y Mokuba-kun el hermano menor de Kaiba-kun por el que teníamos que pasar a la primaria aún.

Después de pasar por Mokuba-kun salimos en dirección a nuestro destino, el pequeño bosque a las afueras de Domino.

En el trayecto Ry-chan iba cantando las canciones que Yami iba poniendo, nosotros solo sonreíamos ante eso, Ryo tenía una voz hermosa, también íbamos jugando a "Yo veo" mencionando cosas al azar en el camino, después de una hora y media ya habíamos llegado a la entrada del bosque.

—Es por ahí –Mencioné mencionándole una entrada alterna a Yami.

—Muy bien amor –Dijo sonriéndome dulcemente dando vuelta hacía la dirección -¿Es aquí? –Cuestionó volteando a verme, yo estaba perdido contemplando el lugar, no había cambiado en nada desde que habíamos estado ahí la última vez, mis ojos estaban brillando de la emoción.

—Supongo que con esa mirada no necesitas una respuesta Yami –Mencionó el oji-carmesí sonriendo.

—Si, es aquí –Mencioné volteando a verlo con una gran sonrisa, sabía que mi primo se pondría igual que yo al ver el lugar –¡Bajemos de una vez! –Exclamé emocionado en cuanto Yami se estacionó.

—De acuerdo, vamos chicos –Mencionó volteando a ver a todos con una sonrisa, yo abrí rápidamente la puerta del auto y salí cerrando la puerta tras de mí, fui directo hasta un prado rodeado de árboles con una salida que daba a un arroyo.

—Justo cómo lo recordaba –Mencioné cerrando los ojos y dando una vuelta sobre mi propio eje con una sonrisa respirando el suave aroma natural que nos rodeaba.

—¡Ani-chan! –Exclamó mi primo feliz llegando a mi lado –Todo sigue igual –Mencionó feliz tomando mis manos dando una vuelta conmigo.

—Lo sé, eso es genial, ¿quieres ir al arroyo? –Pregunté sonriéndole cálidamente.

—¡Obviamente! –Exclamó asintiendo con entusiasmo.

—¡Vamos! –Exclamé tomando su mano corriendo hasta la orilla del arroyo –Que lindo, también sigue igual –Mencioné feliz admirando el agua cristalina y las flores cosmos que adornaban la orilla.

—¡Este lugar es hermoso! –Exclamó mi guapo novio mirando todo a su alrededor.

—Tienes toda la razón, estuvo muy bien que aceptáramos venir, ¿verdad Yuto? –Cuestionó el oji-carmesí mirando con una gran sonrisa al oji-gris.

—Si así es –Respondió él sonriéndole dulcemente.

—Que tranquilidad y pureza se siente aquí –Mencionó el albino poniéndose a mi lado cerrando los ojos respirando la frisa fresca.

—Yo quiero entrar a nadar un poco –Mencionó el pequeño hermano de Kaiba-kun emocionado.

—Por supuesto que lo haremos –Mencioné sonriéndole –Pero primero hay que arreglar las cosas –Mencioné feliz.

—Es verdad, debemos comenzar a levantar las casas de campaña –Mencionó mi Yami sonriéndome.

—También tenemos que conseguir madera para hacer una fogata –Mencionó mi primo sonriendo.

—Es verdad... Yuya, Yuto, ¿podrían buscar un poco de madera a los alrededores? –Cuestioné sonriéndoles cálidamente, en ese momento empezaba mi plan para juntarlos.

—Claro –Mencionó el oji-gris comenzando a caminar hacía los arboles –Andando Yuya.

—Si, ya voy –Mencionó el mencionado sonriendo llegando a un lado de él.

—Lo hiciste a propósito, ¿verdad cielo? –Cuestionó Yami llegando a mi lado hablándome en voz baja.

—Por supuesto –Revelé guiñándole con una sonrisita, viendo que estaba a centímetros de mí aproveché para robarle un rápido beso en los labios.

—Oye, eso debería hacerlo yo –Mencionó impresionado cuando me separé de él.

—Si, tal vez –Mencioné robándole un beso más haciendo que se sonrojara un poco, se veía tan lindo así.

—¡Ey! Par de tortolitos dejen el arrumaco y pónganse a ayudar –Dijo el albino riendo.

—Ya vamos –Mencionó mi novio sin mirarlo –Esto no se quedará así –Mencionó mirándome a los ojos de manera retadora.

—Si, por eso, ya vamos a ayudar –Mencioné volviendo a robarle un beso alejándome rápidamente de él corriendo tras el albino –¿Ry-chan en que te ayudo?

—Eso no se vale... ¡Amor! –Gritó haciendo un lindo puchero, yo solo volteé a verlo y le saqué la lengua riéndome de él, me gustaba jugar de vez en cuando con él de esa manera.

POV de Yuto

Ya que el novio de Yami me había dado la oportunidad de estar un momento a solas con Yuya lo iba a aprovechar para poder hablar un poco con él para ver que sentía y ese tipo de cosas, este fin de semana tenía que intentar conquistarlo, aunque fuera lo último que hiciera, aunque me preocupaba un poco que sintiera algo por Yugo, lo bueno es que él no estaría aquí para poder interrumpir nada.

—¿Crees que esto nos sirva? –Cuestionó mi dulce Yuya llegando a mi lado con unas cuantas ramas entre sus manos.

—Yo creo que si –Respondí sonriéndole –Buscaré también por este lado –Mencioné yendo hacía el otro extremo empezando a buscar ramas entre los arbustos.

—¡Yuto! –Gritó de repente.

—¿Qué pasó? –Pregunté extrañado llegando tras él.

—Dime que eso no es una araña –Mencionó apuntando a una pequeña araña café de las que tanto hay en los bosques, en ese momento recordé su fobia a las arañas.

—Amm... no te vayas a espantar Yuya... pero... si, es una –Mencioné poniendo mis brazos a centímetros de su cadera para poder sostenerlo en caso de que se hiciera para atrás cayéndose o algo así.

—¡¿Qué?! –Gritó haciéndose para atrás, casi cayéndose, pero lo detuve con mis brazos, había sido una buena idea mi acción –¡Mátala por favoooor! –Exclamó dándose la vuelta abrazándose a mí con mucha fuerza.

—Yu-ya –Mencioné impresionado, pasando mis brazos tras su cadera, nunca me había abrazado a mí de esa manera ya que Yugo era el que siempre iba en su ayuda cuando alguna situación así pasaba –No la mataré –Dije pensando en el pobre arácnido –Solo haré que se vaya lejos –Mencioné mirando a la arañita.

—Haz lo que tengas que hacer, pero por favor haz que se vaya –Mencionó aferrándose más a mí, yo no sabía si sentirme mal por verlo así o sentirme bien por tenerlo entre mis brazos.

—Lo haré –Mencioné sonriendo cálidamente –Pero debes soltarme un momento –Mencioné algo apenado sin querer que él se separara de mí.

—Es verdad... lo siento –Mencionó separándose de mí algo apenado con su rostro agachado, al momento fui y tomé a la araña con una pequeña rama y la llevé un poco lejos en donde Yuya ya no pudiera verla.

—Ya está –Mencioné volviendo a su lado sonriéndole.

—Muchas gracias –Mencionó levantando su rostro para regalarme una ligera sonrisa, yo solo asentí sonriendo.

—Sigamos buscando el encargo de Yugi –Mencioné acercándome más para tomar su mano suavemente –No te separes de mí –Mencioné sonriéndole –Si aparece otra araña yo la enfrentaré por ti –Le dije sintiéndome un caballero medieval con el deber de proteger a mi princesa, él solo asintió moviendo suavemente su cabeza sonriendo un poco apenado.

—Creo que eso puede servir –Mencionó después de caminar unos minutos soltando mi mano acercándose a un arbusto.

—Si, eso servirá –Mencioné inclinándome en el arbusto viendo un pequeño tronco seco, Yuya se hizo hacia atrás poniéndose bajo un árbol -Oh no... -Pensé al darme la vuelta para mirar a Yuya y ver que arriba de él había otra araña colgando de una de las ramas de un árbol que daba justamente sobre de su cabeza –Yuya... Será mejor que des unos pasos al frente –Mencioné lo más calmado posible, pero sin poder quitar mi cara de impresión.

—No es lo que estoy pensando... ¿verdad? –Cuestionó poniendo un semblante asustado.

—Por favor ven hacia mí –Mencioné extendiéndole mi mano.

—¡Yuto aléjala de mí! –Gritó corriendo hacia mí, en el transcurso se tropezó con una pequeña raíz del arbusto cayendo encima mí haciendo que ambos cayéramos al suelo tras el arbusto –Yo... lo siento –Mencionó apenado al momento de estar en el pasto.

—Duele... -Mencioné un poco adolorido por la caída.

—De verdad lo siento –Mencionó levantando su rostro estando a centímetros del mío –Noté como un ligero tono carmesí como el color de sus bellos ojos invadió sus blancas mejillas, yo pude sentir como me pasó lo mismo, estábamos a centímetros uno del otro, él no dijo nada más y yo no podía pronunciar nada, estaba paralizado, nos estábamos mirando fijamente a los ojos, yo sentía un gran impulso de besarlo, pero no lo iba a hacer si no era lo que él quería, en momentos desviaba mi mirada de sus ojos y la posaba sobre sus labios, tragué un poco de saliva, estaba nervioso.

—¡Yuyaaaa! ¡Yutoooo! ¿Están por aquí? –El tricolor menor había ido a buscarnos debido a que ya habíamos tardado algo.

—¡Si aquí estamos! –Gritó Yuya quitándose de arriba mío levantándose y extendiéndome su mano algo apenado para ayudarme a levantar.

—Gracias –Mencioné algo apenado, estábamos tan cerca, suspiré profundamente algo desanimado, había dejado pasar la oportunidad más grande de mi vida.

—¡Aquí estamos Yugi! –Gritó levantando su mano para que el tricolor nos viera.

—¿Qué les paso chicos? –Preguntó extrañado al mirar lo desaliñados que estábamos con algunas cuantas pequeñas ramas y hojas en nuestros cabellos.

—Sin querer nos caímos –Mencioné sobando mi espalda baja saliendo de detrás del arbusto con Yuya tras de mí.

—Lo siento –Mencionó Yuya mirándome apenado viendo que estaba sobando mi espalda –Todo fue mi culpa, por mi tonto miedo a las arañas –Mencionó agachando su cabeza haciendo una pequeña reverencia.

—No te preocupes por eso –Mencioné sonriéndole –No pasó nada, llevemos la leña que encontramos –Yuya volteo a verme y me sonrió ligeramente asintiendo.

—Vamos, les ayudaré –Mencionó el oji-amatista sonriéndonos.

—Por cierto, ¿no estabas con Yami? –Pregunto Yuya curioso.

—Él está ayudándole a Kaiba-kun a armar las tiendas de campaña –Mencionó sonriéndole.

—Ah... Ahora bien –Mencionó mi oji-carmesí mientras caminabas rumbo a donde estaban los demás.

Tal vez había perdido esta oportunidad, pero intentaría no perder ninguna más.

Fin del POV de Yuto.

Después de que todo estuviera listo colocamos la fogata en medio del prado un poco alejada de las casas de campaña y pusimos algunos troncos alrededor para sentarnos, al ver todo listo ya podíamos ir a jugar un rato al arroyo.

—Ahora que está todo listo, ¿aún quieres ir a nadar al arroyo Moki? –Cuestionó el rubio sonriéndole al pequeño Mokuba-kun.

—¡Claro que si Jono! –Exclamó este emocionado.

—¿Qué dicen chicos? –Cuestionó Jonouchi-kun mirándonos con una gran sonrisa.

—¡Vamos! –Exclamamos al unísono el albino, mi primo, el oji-carmesí y yo, los demás solo asintieron y Kaiba-kun no hizo expresión alguna.

Después de cambiarnos con ropa adecuada para entrar al agua fuimos y tendimos algunas toallas para los que aún no queríamos entrar al agua y estaríamos en la orilla descansando.

Jonouchi-kun, Mokuba-kun, Ry-chan, mi primo y Yuya fueron los que entraron a jugar al arroyo, los demás estábamos en la orilla.

—Yugi, ¿no entrarás? –Me preguntó el oji-carmesí extrañado mirándome acostado en una de las toallas junto a Yami.

—Si, en un rato entraré –Mencioné sonriéndole.

—Ve con ellos amor –Me dijo acercándose a mí sonriéndome dulcemente

—Voy, pero si tú vienes conmigo –Mencioné poniendo cara de "Por favor".

—No puedo decir que no si pones esa carita –Mencionó resignado levantándose extendiéndome su mano, yo solo sonreí y la tomé –Ahora vendrás conmigo –Mencionó jalándome hacia él para tomarme entre sus brazos dándome una vuelta en el aire acercándose a la orilla.

—Esto no me gusta –Mencioné un poco asustado.

—Tranquilo cielo, nunca te lastimaría –Mencionó dándome un suave beso en la mejilla, yo me sentí más tranquilo y asentí sonriéndole -¿Estás listo? –Cuestionó anunciando que saltaría conmigo en brazos.

—Ya vengan –Mencionó el albino apurándonos arrojándonos un poco de agua.

—Yuto ayúdales –Mencionó Yuya sonriéndole al oji-gris.

—Con gusto –Mencionó llegando a un lado de nosotros y empujando a Yami, di gracias a Ra de que el arroyo estaba más o menos profundo si no hubiéramos podido pegarnos con el fondo.

—¡Yuto! ¡Me las pagarás! –Le gritó saliendo del agua corriendo tras él para aventarlo al agua.

—¡Yugi! ¡Dile que se calme! –Me gritó el oji-gris para que detuviera a Yami.

—No, lo tienes merecido por tirarnos –Dije haciendo un puchero.

—¡Qué te cuesta entrar por tu propia cuenta! –Gritó el oji-carmesí burlándose del oji-gris.

—No quería mojarme... –Mencionó parándose suspirando, en su descuido Yami llego tras él y lo jaló hasta tirarlo al agua –¡AHHHH! –Gritó mientras caía dentro del arroyo.

—Tú te lo buscaste –Mencionó el oji-carmesí llegando a su lado tomando un poco de agua entre sus manos para arrojársela a la cara.

—¿Pero de quien fue la culpa? –Cuestionó acercándose a él, abrazándolo por la cintura para hundirlo junto a él.

—Buen trabajo cielo –Mencioné feliz cuando mi novio se acercó a mí.

—¿Qué?, ¿todo lo habías planeado amor? –Me preguntó impresionado.

—No, había pensado en algo así, pero eso fue mucho mejor, míralos –Mencioné haciendo una pequeña seña para que volteara a ver a Yuya y Yuto.

—Pequeño travieso –Mencionó tomándome por la cintura comenzando a jugar conmigo.

—Hay que jugar luchitas –Mencionó mi primo de repente.

—¡Siiii! –Gritó el albino emocionado –Yu-chan con Yami, Jonouchi-kun con Mokuba, Yuya con Yuto y Marik-chan conmigo –Mencionó sonriendo.

—De acuerdo ya que insistes –Mencionó mi novio agachándose para que me subiera a sus hombros –Me temo decirles que mi novio y yo les ganaremos –Mencionó orgulloso.

—Ja, yo soy un haz en el agua –Mencionó mi primo con orgullo y tenía razón en natación era excelente y toda actividad en agua se le daba bien.

—¡Bien! Qué están esperando, comencemos de una vez, Moki y yo les demostraremos que es jugar, ¿verdad Moki? –Cuestionó sonriéndole.

—¡Claro Jono! –Mencionó feliz.

—Yuto y yo tampoco somos tan malos en esto –Mencionó Yuya sonriendo.

—Es verdad, tendrán una dura competencia –Mencionó el oji-gris secundando al oji-carmesí.

—¡Comencemos! –Dijimos todos al unísono.

En ese momento comenzamos a jugar, era todos contra todos, los que estábamos arriba eramos Ry-chan, Mokuba-kun, Yuya y yo, primero fui contra Yuya, Yuto había tenido razón no eran fáciles de vencer, pero finalmente Yuto se resbaló haciendo que ambos se cayeran, Mientras Ryo-chan estaba compitiendo contra Mokuba-kun nos acercamos para retar al albino, tal vez mi primo era el que era un haz en el agua, pero Ryo-chan era otra historia, comencé a luchar contra él hasta que en un descuido lo pude empujar para que se fuera de espaldas, ahora solo faltaba Mokuba-kun, cuando nos acercamos a ellos el peliazabache me miro sonriendo maliciosamente, había soportado ser derribado por los demás, sin embargo no se veía un duro contrincante, cuando comenzamos a luchar para tirarnos, Mokuba-kun pensó en una solución más rápida y me tomó del pie y me empujó hacia atrás haciendo que me cayera al agua siendo detenido un poco por mi novio, al final ellos habían ganado, yo solo sonreí ladeando la cabeza.

—¡Eso es Moki! ¡Les ganamos! –Gritó el rubio feliz festejando con el pequeño Mokuba-kun aún sobre sus hombros.

—¡Siiii! –Exclamó feliz, Kaiba-kun solo miraba la escena desde la orilla con una sonrisa.

Después de jugar por muchas horas más diferentes cosas como atrapados, un poco de voleibol, pescar algo para la cena y cosas así nos percatamos que ya era algo tarde, los colores del cielo tintaban un color rojizo acompañado de violeta y naranja.

—Es hora de salir para encender la fogata –Mencioné mirando a todos sonriéndoles, estos asistieron devolviéndome la sonrisa.

Salimos y Yami y Yuto fueron los que la encendieron en lo que los demás íbamos a cambiarnos las ropas mojadas.

Cuando salimos ya había una cálida fogata adornando el centro, esto realmente me recordaba a todas esas veces que venía aquí de niño.

—Esta listo, ahora nos cambiaremos nosotros –Mencionó acercándose a mí sonriéndome.

—Si amor –Mencioné sonriéndole, él se acercó a mí y me dio un suave beso en la frente y fue con Yuto a cambiarse.

—Tengo hambre –Mencionó el albino tocando su estómago.

—Debe de ser, tanta actividad física suele abrir el apetito –Mencionó mi primo sonriéndole.

—Deberíamos cocinar algo –Mencioné mirando a mi primo, tal vez no éramos unos chefs en la cocina, pero sabíamos hacer algunas cosas.

—¡Sí! ¡Hagamos algo! –Me respondió este feliz.

—Yo también quiero ayudar –Mencionó el oji-carmesí poniéndose a lado de mi primo –No soy un gran cocinero, pero no estoy tan perdido y puedo ayudar –Mencionó sonriéndonos, eso significaba que era como mi primo y yo, sonreí al ver su entusiasmo.

—Claro, ayúdanos –Mencioné sonriéndole.

—Yo también ayudaré –Mencionó el albino orgulloso, si Ry-chan sabía hacer algo en este mundo era cocinar y cocinaba realmente rico, ya había tenido la oportunidad de probar algo hecho por él los primeros días de conocerlo.

—Tú nos serás de mucha ayuda Ry-chan –Mencioné sonriéndole.

—Lo sé –Dijo orgulloso, los demás solo nos reímos por lo bajo.

—Yo mejor no meto las manos en lo que ustedes harán –Mencionó con una gotita bajándole en la sien –Soy malísimo en la cocina –Reveló algo apenado.

—No te preocupes Jonouchi-kun, con nosotros es suficiente –Mencionó mi primo sonriéndole –Deberías ir a hacerle compañía a Mokuba-kun y a Kaiba-kun –Mencionó de momento.

—Amm... -Mencionó apenado juntando sus dedos índices a la altura de su pecho –Está bien –Mencionó encaminándose hacía los primos de Yami y se sentó a un lado de Mokuba-kun.

Yami y Yuto terminaron de cambiarse y fueron a ver que estábamos haciendo, nosotros estábamos haciendo varías cosas, Ry-chan estaba descamando el pescado que habíamos pescado en la tarde, Yuya y mi primo estaban preparando una olla encima de la fogata y yo estaba cortando unos vegetales que había encontrado cerca en una pequeña parte en la que mis padres y mis tíos habían sembrado unas cosas para cuando viniéramos de nuevo.

—¿Podemos ayudar en algo? –Preguntó mi novio viendo que podía hacer.

—No te preocupes mi vida, ya casi acabamos, ve a hacerle compañía a tu primo –Mencioné señalándole al castaño que estaba serio a un lado de Mokuba-kun mientras este jugaba con Jonouchi-kun, él solo asintió sonriéndome dulcemente –Yuto, tú también ve a sentarte ya Yuya nos ayudó en esto –Dije sonriéndole, este solo asintió y fue a sentarse.

Después de un rato la comida estaba lista, todos comenzamos a comer alrededor de la fogata, me impresioné de lo bien que nos había salido todo, era una especie de caldo de pescado, a pesar de no tener condimentos u otras cosas tenía un sabor muy bueno.

—Les quedó muy rica la cena chicos –Mencionó Yami sonriéndonos.

—Es verdad, esto está delicioso –Mencionó el oji-gris terminando de probar una cucharadita de su comida.

—¡Chicos los amo! –Mencionó el rubio con estrellitas en sus ojos mientras comía –Esto es delicioso, ¿dónde consigo a uno como ustedes? –Preguntó bromeando, nosotros solo ahogamos unas risitas.

Al terminar la cena, Ry-chan sacó tres bolsas de bombones que había llevado.

—Pensé que no podía haber una ida a acampar sin esto –Mencionó enseñándonos los bombones.

—¡Pensaste bien Ry-chan! –Exclamó mi primo levantándose para abrazarlo, si algo amaba mi primo era asar bombones.

Nos repartió una buena cantidad de bombones a cada uno y nosotros comenzamos a asarlos en la fogata, después de un rato comenzó a hacerse más tarde, Mokuba-kun se estaba comenzando a quedar dormido así que Kaiba-kun lo llevó a acostar a una tienda de campaña, mi primo y Ry-chan también se sentían cansados así que también fueron a acostarse a otra que estaba a un lado, Jonouchi-kun también cayó rendido después de un rato, pero él había decidido dormir a un lado de la tienda de Ryo-chan y mi primo en una bolsa de dormir, Yuya y Yuto tampoco tardaron tanto en comenzar a tener sueño así que fueron a dormir a otra tienda que estaba al lado de la que usaríamos Yami y yo.

Solo nos habíamos quedado mi dulce Yami y yo frente a la fogata, yo estaba recostado sobre su pecho mientas él estaba abrazándome, era un lindo momento podía quedarme toda la vida así, a su lado, me sentía privilegiado de tenerlo como novio.

—Cielo, ¿me esperas aquí un momento? –Cuestionó de un momento a otro.

—Si amor –Mencioné volteando a verlo sonriéndole.

Se levantó y se dirigió a su auto, de la cajuela sacó un estuche negro, parecía ser de una guitarra, yo no sabía que Yami tocara la guitarra o bueno es algo que nunca le había preguntado.

—Listo –Mencionó sentándose a mi lado comenzando a abrir el estuche para sacar una bonita guitarra acústica.

—Oh es preciosa –Mencioné impresionado.

—Así es –Mencionó sonriéndome –Es el último regalo que me dio mi madre –Dijo mirando el cielo, yo solo lo miré con ternura, pensando en que me hubiera gustado poder conocer a su madre –Bueno ahora lo que quiero es hacer eso –Dijo acomodando la guitarra en su regazo tocando la primer nota "Do".

—¿Tocarás una canción? –Cuestioné mirándolo con una sonrisa.

—Te voy a dedicar una canción –Mencionó mirándome regresándome la sonrisa, yo sentí que me apené un poco, nunca nadie me había dedicado una canción y menos habían tocado para mí –Muy bien, presta atención a la letra –Dijo acercándose para darme un suave beso en los labios sonriéndome.

I wanna dance like no one's watching me

(Quiero bailar cómo si nadie me viera)

I wanna love like it's the only thing I know

(Quiero amar cómo si fuese lo único que sé)

I wanna laugh from the bottom of my heart

(Quiero sonreír desde el fondo de mi corazón)

I wanna sing like every single note and word it's all for you, is this enough?

(Quiero cantar cómo si cada palabra y nota fueran todo para ti ¿Sería suficiente?)

I wanna tell you and this is the only way I know

(Quiero decirte algo y es la única forma en la que sé decirlo)

And hope one day you'll learn the words and say

(Y espero que algún día comprendas las palabras y digas)

That you finally see, what I see

(Que finalmente viste lo que yo veo)

Another song for you about your love

(Otra canción para ti sobre de tu amor)

'cause you love the me that's full of faults

(Porque tú me amas aunque esté lleno de fallas)

I wish you could see it from this view

(Desearía que pudieras verlo desde mi punto de vista)

'cause everything around you is a little bit brighter from your love

(Porque todo lo que te rodea brilla más desde que encontré tu amor)

I wanna dance the night away with you

(Quiero bailar toda la noche contigo)

I wanna love because you taught me to

(Quiero amar porque es lo que me enseñaste)

I wanna laugh all your tears away

(Quiero reír y que todas las lágrimas se vayan)

I wanna sing 'cause every single note and word it's just for you

Hope it's enough

(Quiero cantar para que cada nota y palabra sean solo para ti, espero que sea suficiente)

I wanna tell you and this is the only way I know

(Quiero decirte algo y es la única forma en la que sé decirlo)

And hope one day you'll learn the words and say

(Y espero que algún día comprendas las palabras y digas)

That you finally see, how I feel

(Que finalmente viste lo que yo veo)

Another song for you about your love

(Otra canción para ti sobre tu amor)

'cause you love the me that's full of faults

(Porque tú me amas aunque esté lleno de fallas)

I wish you could see it from this view

(Desearía que pudieras verlo desde mi punto de vista)

'cause everything around you is a little bit brighter from your love

(Porque todo lo que te rodea brilla más desde que encontré tu amor)

Not a day goes by that I don't think

(No hay día que pase en el que no piense)

about you and the love you've given me

(Solamente en ti y en el amor que has dado)

I wish you could see it from this view

(Desearía que pudieras verlo desde mi punto de vista)

'cause everything around you is a little bit brighter from your love

(Porque todo lo que te rodea brilla más desde que encontré tu amor)

Life is just so much better from your love

(La vida es mucho mejor desde que llegó tu amor)

—¡Eso fue hermoso cielo! –Exclamé abrazándolo en cuanto terminó de tocar –Te quiero tanto –Mencioné tomando su rostro entre mis manos dándole un dulce y largo beso.

—Que bueno que te gusto mi amor –Mencionó feliz cuándo dejé por un momento sus labios para tomar un poco de aire.

—Mucho más que eso, la amé –Mencioné sonriéndole -¿Tú la escribiste? –Cuestioné feliz.

—Si, espero que no haya sido tan mala, es la primera que escribo –Mencionó algo apenado.

—¿Bromeas? ¡Es perfecta! –Exclamé sonriéndole –Yo... también escribí una canción para ti –Revelé algo apenado.

—¿En serio amor? –Me preguntó impresionado.

—Si –Dije apenado bajando mi rostro –Solo que no sabía si cantártela o no, es que es muy sencilla –Mencioné sin mirarlo mientras miraba el suelo.

—Por favor cántala –Mencionó tomando mi mano dulcemente, yo volteé a verlo y sonreí.

—Esta bien –Mencioné finalmente -¿Me la prestas? –Cuestioné señalando su guitarra.

—Claro –Mencionó sonriéndome -¿También tocas guitarra amor? –Cuestionó impresionado.

—La verdad es que no, solo soy bueno tocando el piano y el violín, solo he practicado una que otra vez en guitarra y eso porque la canción que escribí para ti sentí que sonaba mejor de esa manera –Mencioné empezando a pasar mis dedos por las cuerdas de la guitarra.

—Te tomaste muchas molestias –Mencionó abrazándose a mi cintura, depositado un beso en mi cabello -Eres el mejor novio que alguien puede tener –Mencionó sonriéndome, yo solo sonreí orgulloso.

—Tú también pon atención a la letra –Mencioné Sonriéndole, Yami asintió sonriéndome separándose de mí para que pudiera tocar bien –Bueno... aquí voy...

Tú, de mañana, tu ventana, solo tú

Tú y no existe el mundo entero, solo tú

Tú, mi encierro en libertad del que no quiero escapar

Me abrazas y te vas, y me cambia todo

Si tú estás no hay razón para llorar, nada malo que pensar

Las mañanas duran más que las noches cuando te vas

Me levantas y me das esperanza que jamás

La tristeza pasará por mi ventana una vez más

Tú me liberas mis batallas solo tú

Tú no me faltas, nunca fallas solo tú

Y no me quiero imaginar que algún día faltarás

Razones hay demás para amarte

Si tú estás no hay razón para llorar

Nada malo que pensar

Las mañanas duran más que las noches cuando te vas

Me levantas y me das esperanza que jamás

La tristeza pasará por mi ventana una vez más

Si tú estás no hay razón para llorar nada malo que pensar

Las mañanas duran más que las noches cuando te vas

Me levantas y me das esperanza que jamás

La tristeza pasará por mi ventana una vez más

Tú de mañana, tu ventana.

—¡Mi amor! –Gritó encantado –Eso fue perfecto, fue una canción tan perfecta como tú –Mencionó feliz –Yugi te amo –Mencionó tomando la guitarra para dejarla a un lado y abrazarme fuertemente, sus palabras me habían dejado sin habla, nunca me había dicho te amo antes y eso me hizo sentir una inmensa emoción.

—Yo... también te amo –Mencioné sonriendo, él me hacía creer fervientemente en esas palabras, realmente lo amaba.

—Me haces feliz –Mencionó asegurándome más a su cuerpo, yo sentí que me estaba perdiendo en la calidez de su cuerpo, de su suave aroma que amaba y en un sueño profundo -Cielo, ¿ya tienes sueño? –Cuestionó cuándo se dio cuenta que mis ojos se estaban entrecerrando, yo solo asentí tallando uno de mis ojos, a mí también me habían agotado los juegos de la tarde –Vamos a dormir –Mencionó guardando la guitarra para ponerla sobre su hombro tomándome entre sus brazos, yo asentí con una suave sonrisa pasando mis brazos tras su cuello, era una verdad que odiaba que me cargaran, pero si lo hacía Yami era diferente, era algo que amaba completamente.

Me llevó hasta nuestra tienda y me bajó en la entrada, fui y me acomodé boca abajo, Yami acomodó el estuche de la guitarra a un lado y se acostó a mi lado al sentirlo cerca me acerqué a él y me acomodé sobre su pecho, él paso su mano tras mi espalda suavemente y así disfrutando de nuestra cercanía nos quedamos profundamente dormidos.

POV de Seto

Mokuba tenía bastante rato que se había quedado dormido, yo no podía dormir, me sentía irritado, estaba cerca de mi cachorro y aún no había podido hablar con él, había presenciado la escenita romántica entre mi primo y su novio, me parecían cursis, pero eso era normal entre personas enamoradas, además yo no podía hablar porque no sabía cómo reaccionaría al estar con mi cachorro, no podía quedarme quieto dentro de la tienda de campaña así que salí un momento para aclarar mis ideas, además estaba tan acostumbrado a dormir tarde que no tenía ni un poco de sueño, al salir volteé a ver las demás tiendas de campaña todas estaban cerradas, seguramente ya todos estaban dormidos puesto que no se escuchaba ningún ruido, entre la tienda de Mokuba y yo, y la del primo de Yugi y su amigo albino vi la bolsa de dormir de mi cachorro vacía, ese tonto cachorro salió a pasear sin su correa pensé por un momento, pensé un poco lo que haría, pero de igual manera fui a ver si lo veía por algún lado.

Caminé hasta el arroyo y vi a mi cachorro sentado en la orilla con sus piernas cruzadas mirando su reflejo o lo poco que podía ver gracias a la luz de la luna, se veía un poco afligido, me acerqué un poco a él y toqué su hombro.

—¿Huh? Ka-Kaiba –Pronunció sorprendido al girarse un poco y mirarme.

—¿Qué haces aquí tan sólo? –Cuestioné sin mirarlo centrando mi mirada en el arroyo.

—Solo pensaba –Mencionó bajando la mirada volviendo a girarse para volver a mirar el arroyo.

—¿Tiene algo que ver conmigo? –Pregunté restándole interés.

—¡Claro que no! ¡No seas tan egocéntrico! –Gritó girándose cerrando los puños con fuerza poniéndose de rodillas.

—¿Entonces por qué te pones así? –Cuestioné señalando el sonrojo que había aparecido en sus mejillas.

—Por nada importante –Dijo haciendo un puchero dándome la espalda.

—Bien, quería hablar contigo sobre el beso de la otra vez –Mencioné dándole la vuelta poniéndome de cuclillas frente a él tomándolo del mentón dejando su rostro a centímetros del mío.

—¡Deja de joder conmigo Kaiba! –Exclamó golpeando mi mano para quitarla de su mentón levantándose del pasto.

—No estoy jodiendo contigo –Mencioné levantándome mirándolo fijamente.

—¿Ha sí?, ¿por qué no me dices de una vez que te diste cuenta de mis sentimientos y que te divierte jugar conmigo? –Cuestionó molesto, su rostro comenzaba a ponerse más rojo aún.

—¡Ya te dije que no estoy jugando Katsuya! –Exclamé un poco molesto de que no me creyera.

—Cómo digas –Mencionó dándome la vuelta encaminándose hacia donde estaban los demás.

—¡No me dejes hablando solo Katsuya! –Grité yendo tras él tomándolo del brazo para jalarlo y acorralándolo en un árbol –¡Ya te dije que no estoy jodiendo contigo! –Exclamé mirándolo fijamente poniendo mis brazos a sus costados para que no pudiera escapar.

—¿Entonces qué es lo que quieres de mí? –Cuestionó ocultando sus bellos ojos miel en su radiante flequillo rubio.

—Te quiero a ti –Mencioné con voz calmada levantando su mentón con mi mano juntando sus labios con los míos en un apasionado beso.

—Kaiba yo... -Mencionó tratando de recuperar un poco de aire.

—No debes decir nada, solo debes creerme –Mencioné volviendo a aprisionar sus labios en un cálido beso, me fascinaba degustar sus labios, mi cachorro era mi obsesión, bajé de sus labios hasta su cuello él hizo su cabeza a una lado dejando toda su nivea piel a mi merced, eso fue para mí una invitación a seguir, mi cachorro pasó sus brazos tras mi espalda y empezó a recorrerla de arriba abajo mientras yo seguía con lo mío en su cuello, puse mi pierna derecha entre sus piernas para no dejarlo escapar más, mi cachorro me quitó mi gabardina rápidamente, era seguro que no escaparía más, levanté su playera quitándosela de una vez, su cuerpo era perfecto, era delgado pero también estaba marcado, por lo visto mi cachorro hacía ejercicio, me puse de cuclillas para bajar hasta su abdomen para besarlo poco a poco dejando rastros de saliva a mi pasó, él se dejó caer frente a mí de rodillas para tomar mi rostro entre sus manos dándome un demandante beso, su lengua estaba abriéndose paso entre mis labios, mi lengua fue gustosa a darle la bienvenida, ambas comenzaron a luchar para encontrar a la dominante pero ninguna cedía mientras él estaba entretenido con mis labios yo bajé mis manos para desabrochar su cinturón y el botón de su pantalón.

—Ka-Kaiba –Mencionó separándose un poco de mis labios –Yo... nunca he hecho esto –Reveló un poco apenado.

—No te preocupes seré gentil –Mencioné volviendo a aprisionar sus labios mientras mis manos bajaban la bragueta de su pantalón, me sentía muy excitado y sabía que mi cachorro estaba igual, pero tenía que tener cuidado no quería lastimarlo de ningún modo, bajé un poco su pantalón y su bóxer dejando a mi merced su despierto miembro –Estás igual de excitado que yo -Mencioné dejando sus labios yendo a su oído para susurrarle sensualmente mientras pasaba mi lengua por el pabellón de su oreja.

—Kaiba... ahhhg –Mencionaba entre pequeños gemidos mientras yo mantenía su miembro entre mis manos dándole toda mi atención –Esto es... vergon-zoso... ahhhg... -Mencionaba intentando articular palabras mientras su cuerpo luchaba por no temblar.

—No me llames Kaiba, me gusta más cuando pronuncias mi nombre –Mencioné bajando a su cuello para morderlo un poco sin llegar a hacerle daño.

—Se-to ahhhg –Gimió mi nombre al sentir mi suave mordida.

—Eso es, eres un buen cachorro –Mencioné sonriendo con orgullo aumentando más la velocidad de mis manos en las caricias que le estaba dando, mi cachorro solo pegó su rostro a mi pecho respirando entrecortadamente.

—Ahhhg... -Gemía quedamente, era obvio que no podía hacer más, no queríamos despertar a los demás y que nos vieran en tal escena –Ahhg Seto –Gimió levantando mi playera comenzando a besar mis pectorales, al verse limitado por la tela me trato de quitar la playera, pero mis manos seguían estimulando su miembro así que no lo podía dejar así cómo así, continúe en lo mío mientras el daba pequeños besos y mordidas en mi cuello y pecho –Seto yo... estoy a punto de... Ahhhg –No pudo terminar de decirlo cuando llegó por fin al orgasmo haciendo que su esencia cayera sobre mis manos, subí una de ellas hasta mi boca y lamí los restos.

—Eres delicioso cachorro –Mencioné poniendo mi mano cerca de su boca para que el también probara de su esencia, él lamió sensualmente mis dedos quitando los restos y en ese momento aprovecho para quitarme la playera.

—Ahora es tu turno –Mencionó sonriéndome bajando sus manos hasta el botón de mi pantalón para desabrocharlo y bajar la bragueta, lo miré algo impresionado, ¿realmente lo haría?

—Eres un cachorro travieso –Mencioné mirándolo fijamente, él solo me sonrió levemente, al bajar mi pantalón junto a mi bóxer pasó sus dedos por todo mi miembro que ya estaba demasiado despierto en ese momento, lo recorrió todo con sus manos y después se agacho a la altura de mi miembro, ¿en serio lo haría?

—Tú también tienes derecho de disfrutar neko engreído –Mencionó sonriéndome, yo estuve a punto de decir algo, pero no pude decir nada al sentir sus suaves labios en la punta de mi miembro.

—Ahhg... cachorro –Mencioné disfrutando de la calidez de sus labios, el comenzó a pasar su lengua por todo el contorno hasta llegar a la base, su boca se sentía tan bien –Ahhhgg... -Me era imposible no gemir, esto era algo que nunca hubiera imaginado.

—¿Te gusta eso? –Cuestionó separándose un poco de mi miembro para poner su mirada en la mía con una sonrisa ladina, no me dejó responderle y volvió a posar sus labios en mi miembro dando una pequeña mordida que no me hizo daño en el glande, me sentía tan excitado, quería poseerlo en ese mismo momento, pero debía esperar.

—Jonou-chi... -Pronunciaba con mi voz entre cortada con uno de mis ojos cerrados y con el otro mirando la sensualidad de mi cachorro con la que lamía mi miembro, después de un rato metió todo lo que pudo de mi miembro en su boca –Ahhg cacho-rro –Gemí como loco por lo bajo, lo tomé de su cabello de un momento a otro para marcarle el ritmo, ¡Ra! Se sentía tan bien, era como ser llevado al cielo por sus labios –Ya no... puedo... más... Ahhg –Mencioné llenando de mi esencia la boca de mi cachorro, él se tragó todo lo que pudo, esto me puso mucho más –Quiero poseerte ya cachorro –Mencioné pasando mi lengua por la comisura de sus labios para limpiar los rastros que habían quedado de mi esencia.

—Pero... yo ya te dije... –Mencionó un poco apenado.

—Confía en mí –Dije sonriéndole dulcemente, él solo asintió un poco sonrojado, lo acosté en el pasto y levanté un poco su cadera para comenzar a prepararlo, llevé dos de mis dedos a su boca para que este los lamiera –No tienes nada que temer –Mencioné llevando mis dedos hasta su entrada comenzando a dilatarla poco a poco –Tal vez sientas incomodidad al principio, pero te irás acostumbrando –Dije abalanzándome sobre él para depositar un tierno beso en sus labios.

—¡Ahhg neko! –Exclamó llevando una de sus manos a su boca para morderla irguiendo su espalda al sentir dentro de su entrada mi primer dedo, comencé a moverlo poco a poco después de esperar unos minutos, después de sentirlo un poco más dilatado comencé a meter el segundo –Ahhg... ¡Seto! –Gritó con sus bellos ojos un poco dilatados.

—Tranquilo, no pasa nada –Mencioné sonriéndole, comencé a mover suavemente mis dedos simulando pequeñas embestidas, tenía que prepararlo bien para no lastimarlo, después de unos minutos sentí que ya estaba listo pero lo quise comprobar con él -¿Estás listo cachorro? –Pregunté quitando por completo su ropa mirando su semblante rojizo y un pequeño rastro de saliva saliendo se su boca.

—S-Si... Hazlo –Mencionó cerrando fuertemente sus ojos desviando la mirada, en ese momento me puse entre sus piernas, bajé por completo mis pantalones y coloqué mi otra vez erecto miembro en su entrada, comencé a meterlo poco a poco –¡Ahhhhhgg! –Gritó ahogando su gemido mordiendo su mano, de sus bellos ojos salieron unas pequeñas lágrimas –Esper-ra un poco... neko.

—Ahhhg –Gemí al sentir que todo mi miembro estaba dentro de él, se sentía tan bien, tan estrecho –Cachorro te sientes delicioso –Mencioné esperando que él dijera que ya podía moverme libremente.

—Ya... puedes mo-verte –Cuando dijo eso empecé a moverme despacio para que se fuera acostumbrando mientras tomaba una vez más su miembro entre mis manos para masturbarlo, a los segundos empecé a penetrarlo más fuerte –Ahhhg Seto... –Sus gemidos eran música para mis oídos.

—Jonou-chi –Gemí sintiendo la calidez de sus adentros sin dejar de atender su miembro, tantas veces había soñado este momento y ahora era una realidad –Te... quiero –Mencioné acercándome a sus labios para depositar un ardiente beso mientras seguía penetrándolo.

—Yo también te qui-ero neko –Mencionó sonriendo cuando dejé sus labios por un momento, me sentía tan bien, mi corazón estaba descolocado por sus palabras y por sentir la calidez de su cuerpo fundiéndose con el mío –Ahhhgg... hazlo más... rápido –Pidió apenado

Seto: ¡Ra! Me vuelves loco –Dije acelerando mis embestidas y la velocidad de mis manos, lo estaba adorando tanto, solo podía pensar en que ya no iba querer a alguien más que a él en toda mi vida –Ahhh –Mi voz se escuchaba más enronquecida de lo normal, todo mi cuerpo se sentía tan cálido, ambos estábamos bañados en un pequeño sudor apenas perceptible, la luz de la luna apenas si podía bañar la suave piel de mi cachorro, me sentía feliz.

—Ahhhg... ya no pue-do ne-ko –Mencionó volviendo a llegar al orgasmo.

—Yo tam-poco –Mencioné sonriendo –Hagámoslo jun-tos –Dije sonriéndole cálidamente, él solo asintió, ambos llegamos al orgasmo al mismo tiempo derramando nuestra esencia, yo en sus adentros y él entre nuestros vientres –Te adoro cachorro –Mencioné recuperando un poco al aire –En verdad debes creerme, te quiero –Mencioné mirándolo fijamente a los ojos para que viera en ellos que todo lo que decía era verdad.

—Te creo –Mencionó atrayéndome a él para darme un pequeño y tierno beso en los labios, cuando nos separamos salí de él poco a poco, me sentía cansado, me acosté a su lado y lo jalé hacía mí para dejarlo reposar en mi pecho, podía sentir como su respiración estaba empezando a regularse poco a poco al igual que la mía.

—¿Esto significa que ya somos novios? –Cuestioné sonriendo cuando ya sentía mi aliento más recuperado.

—Oye... Deberías al menos preguntar de la forma correcta neko tonto –Mencionó haciendo un bello puchero de molestia.

—Esta bien... Mi adorado cachorro, ¿quisieras ser mi novio y el amor de mi vida? –Cuestioné sonriéndole sintiéndome un tonto cursi, pero que podía hacer, eso me hacía decir mi cachorro, por eso no había juzgado a mi primo, porque sabía que al tener a mi cachorro me iba volver como él e inclusive peor.

—¡Claro que si neko! –Exclamó felizmente acomodándose mejor sobre mí para darme un largo beso en los labios –Siempre quise ser tu novio –Mencionó sonriéndome cálidamente recostándose sobre mi pecho abrazándome suavemente, yo pasé mis brazos tras su cadera y así sentía como el sueño nos invadía.

—Cachorro debemos cambiarnos e ir a dormir –Mencioné mirándolo más dormido que despierto con una sonrisa –No querrás quedarte aquí y que mañana todos nos vean en esta escena, ¿verdad? –Cuestioné riendo por lo bajo, en ese momento mi cachorro reaccionó.

—¡Claro que no! –Mencionó levantándose rápidamente –Auch –Dijo de repente.

—Cuidado cachorro, ahora debes reposar, fue la primera vez y no fue en un lugar muy cómodo –Mencioné algo apenado levantándome rápidamente deteniéndolo ayudándolo a buscar su ropa y también la mía.

—No importa el lugar si es contigo Seto -Mencionó sonriéndome –No quiero dormir lejos de ti –Mencionó cuando ya estábamos cambiados acercándose a mí para abrazarme.

—Ni yo cachorro, pero no creo que quieras dormir conmigo y Moki –Mencionó sonriéndole.

—No, no quiero traumar al chibi –Respondió apenado –Entonces hasta mañana mi neko –Dijo dándome un dulce beso.

—Hasta mañana cachorro –Mencioné abrazándolo con fuerza, después lo solté para dejar que se fuera primero a acostar, él solo comenzó a caminar lo mejor que podía, esperaba que estuviera mejor en la mañana para que no se viera tan extraño y no le preguntaran nada raro.

Me sentía tan feliz, era increíble que ahora ya fuera novio de mi cachorro, me quedé un momento mirando el cielo, era una bella noche, nunca me había detenido a mirar el cielo antes, tal vez solo quería dar gracias a toda partícula que me contenía por la felicidad que me rodeaba, ahora solo faltaba contarle a Moki que "Jono" ya era su cuñado para hacerlo más feliz de lo que ya era.

Fin del POV de Seto.

Al día siguiente todos despertamos un poco tarde, especialmente Jonouchi-kun ya que eran las doce del medio día y él aún no se había despertado así que Mokuba-kun había ido a molestarlo para despertarlo, mientras el hacía eso los demás preparábamos algo para comer ya que era tarde para desayunar.

—¡Jono! ¡Despierta! –Mencionó amolando la mejilla de Jonouchi-kun con su dedo índice.

—No, cinco minutos más –Mencionó dándose la vuelta, esto hizo reír al pelinegro y a nosotros que estábamos viendo la escena.

—¡JONO! –Gritó haciendo que el oji-miel despertara asustado.

—¿Qué pasó? –Cuestionó algo exaltado.

—Ya son las doce y no despertabas –Dijo mirándolo divertido.

—¿Qué las doce? –Cuestionó sorprendido.

—Si Jonouchi-kun, ya levántate o te vas a quedar sin comer –Mencioné sonriéndole.

—Si ya voy –Dijo levantándose, por lo que pude ver con un poco de incomodidad.

—¿Te pasa algo? –Cuestioné algo preocupado.

—No, no me pasa nada –Dijo negando con sus manos.

—Tal vez te lastimaste ayer mientras jugábamos –Mencioné pensando en las actividades del día pasado –Ten cuidado –Mencioné sonriéndole.

—Si, lo haré Yug –Me respondió sonriéndome yendo a sentarse a uno de los trocos.

Después de un rato la comida estaba lista comimos un poco y después pensamos en que podíamos hacer, con Jonouchi-kun así no podíamos ir de excursión al bosque.

—¿Ahora que hacemos ani-chan? –Cuestionó mi primo sonriéndome.

—No lo sé, pensaba en ir de excursión, pero con Jonouchi-kun un poco lastimado no podremos ir –Mencioné pensando.

—Vayan, no se preocupen por mí –Mencionó sonriéndonos cálidamente.

—¿Estás seguro Jonouchi-kun? –Cuestionó el albino inseguro.

—Vayan, yo me quedaré a cuidarlo –Mencionó el peliazabache sonriéndonos.

—Yo también me quedaré aquí para vigilar a Mokuba –Mencionó Kaiba-kun cruzado de brazos restándole importancia al asunto, lo pensé por un momento, tal vez era buen momento para que Jonouchi-kun hablara con él y arreglaran sus diferencias.

—Entonces iremos –Mencioné feliz.

—¡Sí! –Gritaron al unísono mi primo, el albino y el oji-carmesí.

Después de preparar todo salimos para empezar con nuestra pequeña excursión, no iríamos tan lejos ya que podíamos perdernos en el bosque o algo así.

Comenzamos a caminar a través de la orilla del rio para que nos fuera más sencillo regresar, Yami y yo íbamos a la cabeza del grupo, Mi primo y el albino iban atrás y Yuya y Yuto iban al final.

—Ani-chan aquí hay unas bayas moradas –Mencionó mi primo corriendo a un lado de un arbusto al ver que había algunos frutos.

—¡Que bien, yo quiero probar! –Exclamó el albino feliz llegando a su lado.

—Yo también –Mencionó el oji-carmesí llegando a un lado de Ry-chan.

Mientras ellos cortaban bayas y las comían nosotros nos sentamos cerca para descansar un poco, ya habíamos caminado por una hora, una vez que terminaron recolectaron unas para llevarle al pequeño Mokuba-kun y a Jonouchi-kun.

Seguimos caminando por mucho rato más, hasta que nos dimos cuenta que ya estábamos más lejos de lo pensado.

—Yo creo que debemos regresar antes de que se haga tarde chicos –Mencionó el oji-carmesí algo preocupado.

—Yo opino lo mismo, no queremos que la noche nos tome por sorpresa –Mencionó el oji-gris secundando al oji-carmesí.

—Es vedad, regresemos de una vez –Mencionó mi Yami sonriéndoles –¿Vamos amor? –Me cuestionó mirándome con una sonrisa.

—Si amor –Respondí dándole un pequeño beso en los labios sonriéndole, Yami tomó mi mano correspondiendo mi sonrisa y comenzamos a caminar de regreso con los demás.

Justamente llegamos antes del ocaso, nosotros fuimos a buscar a Jonouchi-kun y Mokuba-kun para darles las bayas, Yuya y Yuto se quedaron cerca del arroyo a descansar un rato, además era un buen momento que Yuto podría aprovechar para acercarse más a Yuya.

—Muchas gracias por las bayas chicos, están realmente deliciosa –Mencionó el rubio probando una de las bayas.

—Si, están muy ricas –Mencionó el albino sacando más bayas de su bolsa, nosotros solo nos reímos, habíamos pensado que las únicas bayas que llevarían serían las del Jonouchi-kun y Mokuba-kun.

POV de Yuya

Me iba a quedar un rato cerca del arroyo para admirar los colores de la tarde y para descansar, me sentía algo cansado de tanto caminar, di gracias al cielo que no habíamos encontrado ninguna araña en el camino si no tal vez hubiera salido corriendo despavorido, Yuto se quedó conmigo para hacerme compañía, yo me sentía un poco nervioso al estar cerca de él, sentía que mi corazón se estaba comenzando a acelerar, supuse que eso era por lo que había pasado ayer en la tarde, mi corazón seguía confundido, por una parte me sentía muy bien al estar con Yuto porque él siempre me trataba bien, pero por otro lado sentía que al sentirme así traicionaba la amistad de Yugo, eso era algo deprimente, tal vez si quería a Yuto y la razón de no corresponderle era por no querer dañar a Yugo, me senté con las piernas cruzadas cerca del río, Yuto estaba a mi lado sin decir palabra alguna acostado con los ojos cerrados y sus brazos tras su cabeza mientras sonreía.

—Es una linda tarde, ¿verdad? –Pregunté tratando de hacerle plática para no sentirme tan nervioso.

—Lo es –Respondió sin abrir los ojos mientras seguía sonriendo –Me gusta este lugar, la brisa es cálida y el ambiente es pacífico –Mencionó sonriendo.

—Lo sé –Mencioné sonriendo mientras lo miraba –Que bueno que los acompañamos o nos hubiéramos perdido de esto –Mencioné algo apenado refiriéndome a ese momento justamente.

—Si, es verdad –Mencionó abriendo sus ojos para mirarme y sonreírme, al parecer no había entendido mi concepto, suspiré aliviado, él se acomodó sentándose a lado mío –De todos los millares de personas en el mundo, doy gracias al cielo compartir este momento contigo –Mencionó sonriéndome cálidamente, si, así era Yuto conmigo, siempre era un amor y por eso yo... lo quería, yo sentí que me apené un poco y solo asentí nerviosamente.

—Creo que tienes razón –Mencioné apenado bajando mi rostro.

—Yuya... -Mencionó de un momento a otro yo volteé a verlo sonriendo, en ese momento él me miró por un instante acercándose a mí y me dio un suave beso en los labios, yo abrí los ojos de la impresión, ¿esto era real? ¡Yuto estaba besándome! Después desvió su mirada apenado, yo no podía salir de mi asombro, sentí como mis mejillas adquirieron un tonó rojizo profundo, solo lo miraba impresionado, pero después volteé mi rostro a otro lado sonriendo nerviosamente para que él no viera la tonalidad de mis rostro, era vergonzoso, él volteó a verme de nuevo, yo no lo miré, sentía que mi corazón estaba a punto de dejar de latir de la impresión, al momento Yuto tomó mi rostro entre sus manos haciéndome que volteara a verlo y me dio otro beso, pero este beso era diferente, sus labios se sentían tan cálidos, tan bien, mis ojos seguían abiertos de la impresión, poco a poco comencé a cerrarlos dejándome llevar y comencé a corresponder su beso, así eran las cosas, mi corazón quería a Yuto sí no, lo hubiera golpeado la primera vez que me besó, así como había hecho con Yugo tantas veces atrás al menor intento de besarme, pero estaba vez no fue así, era claro, mi corazón tenía dueño y no era de nadie más que de Yuto.

Al separarnos nuestros labios nuestras frentes se juntaron y nos miramos directamente a los ojos.

—Yu-to –Pronuncié apenas recuperando un poco de aire.

—Yuya, te quiero –Mencionó mirándome directamente a los ojos.

—Yuto yo... –Comencé a decir cerrando mis ojos sintiendo un gran peso en mi corazón.

—No digas nada, no quiero forzarte a nada, solo te pido que me dejes intentar conquistarte –Mencionó mirándome sin ningún tipo de ironía o titubeo.

—Esta bien –Mencioné abriendo mis ojos para verlo, nuestras frentes aún estaban juntas, Yuto sonrió y volvió a acercar sus labios a los míos para darme otro cálido beso, qué podía hacer yo, no podía detenerlo, era feliz, después de separarnos nos sonreímos mutuamente y nos recostamos en la hierba para mirar como el sol se ponía tras los árboles. Cuando empezó a oscurecer apareció el primer lucero de la noche, recordé que decían que si pedías un deseo al primer lucero de la noche este se concedía –Mira Yuto, pidamos un deseo –Mencioné mirándolo con una gran sonrisa.

—No lo necesito, todo lo que deseo está aquí, a mi lado –Mencionó sonriéndome, yo sentí que me apenaba mucho más y sentí latir alegremente a mi corazón, me gustaba que fuera así conmigo, nadie me hacía sentir como él –Pero tú puedes pedir un deseo si quieres –Mencionó mirándome tiernamente, yo solo asentí sonriendo.

—Por favor primer lucero del anochecer, ayúdanos a Yuto y a mí para poder ser felices, que Yugo entienda que yo no hice esta elección, el que lo eligió fue mi corazón, que cuando llegue el momento Yugo lo entienda y que él también pueda encontrar a alguien que lo quiera -Pensé mientras miraba el lucero, al terminar mi deseo otras estrellas comenzaron a aparecer en el firmamento.

—Es hora de regresar con los demás –Mencionó Yuto levantándose tomando mi mano para levantarme con él.

—Si –Mencioné sonriéndole, después nos encaminamos junto a los demás.

Después del gran día que habíamos tenido fuimos a acostarnos, al día siguiente levantaríamos todo para regresar a casa.

Fin del POV de Yuya.

----Continuará----

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El momento Counterpaaaaart♥ ellos tienen mi corazón *-* espero que les haya gustado, también los momentos Puzzle tan románticos, tan bellos, tan perfectos *-* y el Puppy 7u7, como sea nos leemos en el próximo capítulo, cya :D