Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

¿Qué prometida?

Ni Yu-Gi-Oh! Ni ninguno de sus personajes me pertenecen, estos pertenecen al gran maestro Kazuki Takahashi y a Kamishiro Tsutomu. :3

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

"No te rindas, por favor no cedas, aunque el frío queme, aunque el miedo muerda...".


—Mi pequeño príncipe, ¿quieres ir a tomar algo conmigo?, desde que estoy en Domino no hemos pasado ni un poco de tiempo juntos, siempre estás con tus amigos y dejas olvidada a tu hermosa madre -Mencionó mi madre fingiendo melancolía cuando ya estábamos fuera del aeropuerto.

—Claro má, ¿a dónde quieres ir? -Cuestioné sonriéndole levemente, además de tomar algo aprovecharía el momento para hablar con ella de Becky.

—Vamos al restaurant Serena(1) -Mencionó feliz, yo sentí y los dirigimos al lugar.

Al llegar al lugar salimos al jardín, era una mañana levemente fresca así que disfrutaríamos de la frescura de esta, nos sentamos en una de las tantas mesas y después de que un mesero nos atendiera esperamos por nustro pedido, mi madre un café express americano y yo un frappe de capuccino.

—Má, me gustaría hablar de algo importante contigo -Mencioné algo turbado, no sabía como le iba a caer la idea de que no me quisiera casar con Becky.

—Claro, dime lo que quieras mi pequeño principe, me he perdido tanto de ti que ahora quiero saberlo todo -Mencionó emocionada.

—Es cierto te has perdido muchas cosas de mi vida -Mencioné algo afligido pensando en el pasado.

—Sabes que no ha sido mi intención, todo es por mi trabajo -Mencionó mirandome fijamente.

—Yo lo sé, solo que extraño esas tardes donde compartiamos juntos, donde tenía a mi madre y no a la estrella pop del momento, Yui Mutou -Mencioné tristemente.

—Yugi... hijo, sabes que siempre estaré para ti a pesar de que tenga una agenda ocupada -Mencionó soltando un suspiro.

—Si, pero hay cosas muy importantes que te has perdido debido a tu carrera de cantante -Mencioné haciendo una mueca.

—Pero puedes contarme cuales fueron todas esas cosas -Mencionó poniendo su mano izquierda en su frente, yo negué con mi cabeza.

—No es lo mismo que vivirlas a mi lado -Mencioné tristemente, antes de decir más llegó el mesero con nuestro pedido, comencé a tomar mi café algo triste de repente estaba diciendole a mi madre todas esas cosas que guardé durante años y que pretendía que no me importaban.

—Oye mi pequeño principe -Mencionó mi madre mirandome fijamente yo solo la miré para que continuara hablando.

—Desde el sábado que llegaste de Ciudad Maiami tengo la curiosidad de saber sobre ese anillo en tu dedo anular y veo que ahora también traes uno más en tu dedo índice -Mencionó extendiendo su mano para tomar la mía y acariciar los anillos suavemente -¿Quién te los dio ó los compraste? -Cuestionó sonriendo, ¿acaso era momento de hablarle de mi relación con Yami?

—Pues... -Comencé a decir, pero en ese momento sonó su celular.

—Espera un segundo -Mencionó respondiendo la llamada yo asentí -Si ¿qué pasa? -Cuestionó a la persona en la otra línea -¡Qué! Eso es una completa estupidez, ¿acaso sabe como va a afectarme eso a mi? -cuestionó molesta, yo solo la miraba atento -Pues si piensa hacer eso desde este momento deja de ser parte de mi elenco de baile, no estoy dispuesta a estar involucrada en los medios con semejante noticia -Mencionó con coraje -No quiero saber más, que mucho menos piense en invitarme a la boda, no me voy a prestar para asistiar a ese tipo de cosas para que hablen de mí -Mencionó finalmente colgando la llamada yo solo la miré extrañado por las ultimas palabras.

—¿Qué es lo que pasó? -Cuestioné algo extrañado.

—¡¿Por qué me hacen esto a mí?! -Se quejó como una niña pequeña -Mi coreógrafo estrella, el que monta cada uno de mis performance decidió casarse -Mencionó molesta, yo sonreí mirándola.

—¿Cuál es el problema de casarse? -Cuestioné divertido -Puede seguir trabajando contigo aún estando casado -Mencioné sonriéndole.

—Ja, nunca permitiría eso -Mencionó con un tono acido que no le conocía.

—¿Cuál es tu reticencia? -Cuestioné extrañado.

—Va a casarse con otro hombre -Mencionó finalmente, al escucharla sentí un gran hueco en mi estómago y mi sonrisa se borró completamente.

—¿Qué? -Cuestioné en voz baja atonito.

—Lo que escuchaste, se casará con un hombre, ¿sabes lo que me hará la prensa si se entera de esa noticia? -Cuestionó furiosa -Me destrozarán en un segundo, no sabes como son esas personas, se aprovechan de todo en la vida de los artistas para destruirlos, claro seguramente andarían divulgando por ahí que estoy a favor de esas cosas y no es así -Mencionó dando un sorbo a su café -No sabes como afectará esto a mis futuras presentaciones.

—¿Pero que hay de malo en que se haya enamorado?, ¿qué no piensas que el amor es el mismo sin importar la forma? -Cuestioné algo decepcionado.

—No me malinterpretes, pueden enamorarse de quien quieran, es su vida, pero no vivimos en un mundo donde las personas de ese tipo sean completamente bien vistas, no sabes lo atacados que son las personas así o las personas que apoyan a los mismos en los medios -Mencionó molesta.

—Pero mamá... -Comencé a decir, pero no me dejó decir más.

—Pero nada, la imagen pública es algo que debe cuidarse ante todo y no estoy dispuesta a ser blanco de futuras habladurías, pero ya, no quiero seguir hablando de esas cosas -Mencionó finalmente, yo solo guardé silecio ocultando mis ojos entre mi fequillo -Entonces... ¿me decías sobre tus anillos? -Cuestionó un poco más calmada.

—¿Huh?, ah, sí, los compré en Maiami -Respondí pesadamente.

—¡Son lindos! -Exclamó sonriendo, yo solo asentí pesadamente.

No podía creer que mi madre pensara de esa forma, tal vez no estaba del todo en contra de las relaciones entre personas del mismo sexo, pero no aceptaría nada que manchara su figura pública, sentí como mi corazón dolía, ahora el asunto de Becky y el hablarle sobre mi relación con Yami serían cosas casi imposibles.

Pov de Yuri

Regresé corriendo al salón cuando entré los chicos se me miraron aliviados.

—Pensé que de nuevo no entrarías a una clase -Mencionó Marik sentándose en su lugar.

—Lo siento, se me hizo un poco tarde -Mencioné apenado.

—Bueno lo importante es que estás aquí y dinos, ¿hay algo nuevo para contar? -Cuestionó Yuya rodeándome mientras me sonreía pícaramente.

—¿Contar?, ¿huh?, ¿por qué habría algo para contar? -Cuestioné apenado riendo nerviosamente.

—No lo sé, solo pensaba que tendrías algo nuevo -Mencionó sentándose en su lugar, yo solo sonreí sin afirmar ni negar nada.

—Bueno, como sea, lo importante ahora es saber que pasa con Yu-chan -Mencionó el albino soltando un suspiro.

—Si, eso es verdad -Mencioné sentándome en mi lugar, primero debíamos saber que pasaba con Yugi, ya después vendría la noticia de mi noviazgo con Yugo, lo primero era nuestro tricolor amigo.

Fin del POV de Yuri.

Saliendo de clases como me habían dicho los chicos llegaron a mi casa, una vez más hice las presentaciones correspondientes entre Yuri y Reiji-san, estaba algo turbado por contarles el asunto de Becky, también tenía el hecho de que mi madre era la de todo y no sabía como zofarme del asunto, por otra parte estaba Yami a quien sentía la necesidad de contarle todo lo que había pasado, pero como podría llegar y decirle "Hola, Yami, ¿sabes qué?, tengo prometida, no lo decidí yo, fue la elección de mi madre y quiere que me case con ella lo más pronto posible, ah y además no acepta relaciones entre personas del mismo sexo que afecten su figura pública", eso era totalmente un imposible, Yami no aceptaría tal cosa al igual que yo no lo estaba aceptando, no después de todo lo que hemos pasado juntos, de todo lo que nos hemos prometido, simplemente era un gran problema que tendríamos que solucionar.

Subí con mi primo y los chicos a mi habitación, al entrar a esta abracé fuertemente a mi primo quien correspondió mi abrazo acariciando gentilmente mi cabello.

—¿Qué es lo que te pasa ani-chan? –Cuestionón preocupado.

—Me pasa todo –Respondí ocultando mi rostro en su pecho sintiéndome triste.

—Yu-chan ya no nos preocupes más y cuéntanos que te pasa –Pidió Ry-chan algo turbando con mí accionar.

—Esta bien –Mencioné débilmente dejando a mi primo para sentarme en la cama con él y Ry-chan mientras Jonouchi-kun, Yuya y Yuri tomaban haciendo en la alfombra.

—Yu, ¿realmente es tan malo lo que pasa? –Cuestionó Yuya algo extrañado y preocupado por mi semblante.

—Sabes que cualquier cosa nosotros trataremos de ayudarte siempre –Mencionó Yuri sonriéndome levemente.

—Así será siempre Yug, si podemos hacer algo por ti no dudes en decírnoslo –Mencionó Jonouchi-kun sonriéndome, pero sus ojos denotaban la preocupación que tenía, me sentí bendecido una vez más por los amigos que me rodeaban.

—Tengo prometida –Mencioné finalmente pesadamente soltando un muy hondo suspiro.

—¡¿Prometida?! –Cuestionaron todos al unisolo más sorprendidos y asustados de lo que yo había reaccionado al recibir la noticia.

—¡Eso no es posible ani-chan! –Exclamó mi primo muy extrañado.

—Al parecer si... –Mencioné levantándome de la cama dirigiéndome hacia la ventana –Según los intereses de mi madre debo casarme con la señorita Rebecca Hopkins –Mencioné soltando un hondo suspiro.

—¿Y quién es ella? –Cuestionó Yuri extrañado.

—La hija del vicepresidente de nuestra empresa en Los Ángeles –Mencioné algo frustado.

—¿Qué?, no puedo creer que esto tenga que ver con algo referente a la empresa, eso no es aceptable, ¿quién acordó semejante estupides? –Cuestionó mi primo molesto.

—Mamá –Mencioné finalmente, los chicos empalidecieron al esucharme.

—Mi tía Yui, ¿cómo hizo tal cosa? -Cuestionó empuñando sus manos en señal de desagrado total.

—Solo lo decidió, no entiendo cómo pudo hacer algo así -Mencioné abrumado.

—¿Qué piensas hacer Yu? –Cuestionó Yuya con un semblante trsite, los chicos estaban siendo muy empáticos conmigo.

—No casarme claro está –Mencioné decidido.

—¿Y ya viste físicamente a esa tal Rebecca? –Cuestionó el rubio extrañado.

—Si, en cuanto llegamos de Maiami me la encontré aquí en la casa y hoy en la mañana la llevamos al aeropuerto de Narita para que regresara a Los Ángeles.

—¿Y qué pasó mientras estuvo aquí? –Cuestionó el albino mirándome fijamente.

—Nada... bueno si... salí con ella el domingo, la llevé a conocer un poco de la ciudad, al final fuimos al cine y sin quererlo... me besó –Revelé apenado.

—¡¿TE BESÓ?! –Gritarón a coro extrañados y porque no decirlo, un poco molestos.

—Si, me tomó desprevenido y me dio un pequeño beso y hoy también, antes de irse –Mencioné afligido.

—Por eso no querías ver a Yami –Mencionó mi primo soltando un hondo suspiro.

—Si... no sé con que cara lo voy a ver, no sé como podría besarlo después de no poder impedir que ella me besara –Mencioné frustrado.

—Yugi, debiste dejar las cosas claras desde el principio -Mencionó Yuri soltando un suspiro.

—Lo sé, pero al ver a Becky tan ilusionada... no supe como hacerlo, es que si ustedes la hubieran visto... ¿cómo podrían romperle el corazón a alguien que ya tiene la ilusión de algo de una magnitud así? -Cuestioné pesadamente -No es cualquier cosa, es una boda, se supone que es el sueño más grande de las chicas, cómo podría ser tan malo para romperle sus ilusiones -Mencioné empuñando mis manos.

—¿Entonces estás dispuesto a romper las tuyas de pasar tu vida junto a Yami solo para no romper las ilusiones de ella? -Cuestionó Ryo molesto.

—Claro que no, no me pienso casar, ya lo dije, no lo haré, pero a decir verdad solo debo buscar un momento para hablar con ella y después hablaré con mi madre y también le diré de mi relación con Yami, aunque sé que no le gustará nada la idea, me gustaría que lo aceptara tanto como papá -Revelé soltando un suspiro, solo de pensar en hacer eso después de lo que habíamos hablado esta mañana parecería como si con esto estuviera sentenciándome.

—¿Cómo?, ¿mi tío ya sabe? -Cuestionó Mariku-chan helado ante mi comentario.

—Si, el día antes de ir a Maiami salí con Yami, al regresar mi padre nos llevó con él al despacho y nos dijo que ya sabía lo que sentíamos el uno por el otro y él dijo que nunca me alejaría de la persona que me hace feliz, gracias a los dioses aceptó muy bien nuestra relación -Mencioné esbozando una pequeña sonrisa.

—¡Eso es genial Yu! -Exclamó Yuya emocionado.

—El problema es mi madre, hoy mientras hablaba con ella recibió una llamada, no sé quien era, a decir verdad, pero esa persona le dijo que su coreógrafo se casaría y está de más decir que con otro hombre, a ella no le pareció para nada la idea, a pesar de no estar en contra de eso me dijo que no está dispuesta a participar en nada que manche su figura pública, así que... sé que no le agradará nada -Mencioné frustrado.

—Es impresionante que piense de esa manera -Mencionó el albino impresionado.

—Con eso de estar metida en la farandula, no sé como le vaya a caer la noticia, ella dice que eso en los medios no es muy bien visto, por eso dijo que nisiquiera iría a la boda de su coreógrafo para que no pensaran que estaba a favor de algo así -Mencioné haciendo una mueca.

—No puedo creer que tu madre piense así Yu -Mencionó Yuri sorprendido.

—Bueno... ni yo, por cierto, aún no la conoces, en un rato llegará, después de que llegamos salió junto a Bakura a arreglar un asunto de una entrevista, en un rato te la presentaré -Mencioné sonriendo levemente, Yuri asintió, Al albino le brillaron los ojos al escuchar el nombre del albino mayor.

—¿Hablando de Bakura?, ¿es el mismo Bakura de Ryo? -Cuestionó sonriendo picaramente.

—Si, es él, también conoceras a su amor -Respondí sonriéndole.

—Ya quiero verlo -Mencionó Ryo ilusionado.

—Bueno, ¿y cómo va todo con Bakura? -Cuestionó mi primo mirando al albino.

—Pues... Kura dijo que me quería -Mencionó sonrojándose dulcemente.

—¡Eso es genial Ry-chan! -Exclamé feliz -Me da gusto que tú también ya puedas ser completamente feliz al ser correspondido -Mencioné sonriéndole, los demás asintieron a mis palabras.

—Entonces solo falta nuestro buen Yuri y Marik -Mencionó Jonouchi-kun sonriendo, los mencionados solo se sonrojaron.

—Bien, yo sé que pronto todos seremos felices -Mencioné sonriéndoles confiando en que yo también pronto iba a poder volver a ser muy feliz con Yami como antes de llegar de Maiami.

La tarde pasó rápido y más temprano que tarde Reiji-san subió a mi habitación a avisarnos que la comida estaba servida así que bajamos para encontrarnos en el comedor con mi madre y Bakura, y tal vez mi padre si es que no había tenido tanto trabajo en la empresa.

Al llegar al comedor encontré a mis padres junto a Bakura, así que solo saludé y les presenté a los chicos.

—Pá, má, Bakura, buenas tardes, les presentaré a mis amigos Yuri Houchun y Yuya Sakaki, no había tenido la oportunidad de presentárselos antes -Mencioné sonriéndoles.

—Mucho gusto señores Mutou, Bakura -Mencionó Yuri haciendo una leve reverencia.

—Es un placer conocerlos -Mencionó Yuya imitando a Yuri.

—Mucho gusto Yuri, Yuya -Mencionó mi padre sonriéndoles.

—El gusto es todo mio Yuri, Yuya ¡Que lindos son! -Exclamó mi madre emocionada -Mi pequeño príncipe siempre rodeado de amigos guapos -Mencionó feliz, yo solo sonreí levemente.

—Un gusto -Mencionó Bakura sin más.

—Hola tios, Bakura -Mencionó mi primo sonriendo.

—Benas tardes -Mencionaron los demás a coro.

—Buenas tardes chicos -Mencionaron mis padres sonriéndoles.

Nos sentamos en la mesa y nos dispusimos a comer, una vez que terminamos salimos al jardín un rato para seguir platicando.

POV de Ryo

Mientras comíamos junto a los padres de Yu, no podía dejar de desviar mi mirada hacia Bakura, me sentía feliz de solo verlo, él solo me sonreía levemente y después volvía a seguir comiendo, solo espraba a terminar de comer para regresar a la habitación de Yu, dar una excusa y bajar para buscarlo.

Cuando terminamos de comer en vez de regresar a la habitación salimos al patio para disfrutar un rato de la frescura de la tarde, mientras estábamos sentados en la mesita de jardín pensaba en como ir a buscar a Bakura, me encontraba mirando insistentemente la puerta, solo anhelaba verlo salir.

—Ry-chan... -Mencionó Yu-chan sacándome de mis pensamientos.

—¿Qué pasa? -Cuestioné sorprendido.

—Si quieres ir a ver a Bakakura solo ve -Mencionó sonriéndome.

—Pero... -Comencé a decir algo apenado.

—Hablando de Bakura... Se ve que es algo reservado, ¿no? -Cuestionó Yuri con una sonrisa.

—Parece que es así, pero la verdad es que no lo es -Respondí feliz, tal vez esa era la imagen que aparentaba, pero yo lo conocía bien.

—Si lo dices tú no hay más que decir, Bakura debe ser así -Mencionó Yuya sonriéndome, yo asentí.

—Bueno, entonces ahora regreso -Mencioné algo apenado, los chicos asintieron con una gran sonrisa, me sentía feliz de que los chicos aceptaran que estuviera enamorado de Bakura a pesar de que el fuera mayor y todo eso.

Caminé por los pasillos de la casa de Yu sin tener éxito, supuse que tal vez la señora Yui estaría con él hablando de algún proyecto nuevo o algo así, estuve a punto de abandonar mi ilusión de verlo y marcharme, pero sentí curiosidad de ir a la habitación de Kura, digo es normal querer saber todo de la persona que amas y no hay mejor lugar que su habitación, así que subí rápidamente las escaleras y me encaminé por el pasillo de las habitaciones donde miré cuidadosamente las puertas, una dea las tantas veces aquí había visto a Bakura entrar en la última puerta del lado donde se encontraba la habitación de Yu-chan, pensé un poco, ¿realmente sería capaz de irrumpir en su habitación?, si, lo haría, tenía ganas de saber algunas cosas extra de él y esta era mi oportunidad, me encaminé rápidamente hasta estar frente a la puerta de la habitación de Bakura y miré la perilla, era una locura lo que iba a hacer pero muy poco me importaba, subí mi mano suavemente y la coloqué en la perilla, comencé a girarla despacio y abrí con cuidado la puerta, al hacer esa acción pude sentir el maderoso y fresco aroma de Bakura inundar mis fosas nasales, no había duda de que esa era su habitación, esa era su escencia.

Entre y miré todo en perfecto estado, por lo visto Bakura era muy organizado, miré sobre la mesita de noche y sobre el tocador las cosas que había adornándolos, eran pequeñas pero clásicas y elegantes cosas, me sentí feliz de estar en ese lugar, me acerqué a su closet y di una vista dentro, había muchas camisas de varios colores, unos trajes y ropa casual todo organizado por secciones, sus zapatos estaban organizados en las secciones de abajo, pasé mi mano por sobre la ropa con solo moverla un poco sentía la escencia de Bakura una vez más, tal vez pensaría pedirle alguna de sus camisas... no eso no era correcto porque no se vería bien, pero quería tener algo de él conmigo para así aminorar el extrañarlo tanto cuando no podía verlo, después de inspeccionar todo por unos segundos cerré perfectamente todo y fui a sentarme a la cama, sonreí al pensar que cada noche Bakura entregaba sus sueños en este lugar, me acosté de lado y tomé la otra almohada que había para abrazarla, aspiré suavemente y pude sentir el aroma del cabello de mi amado Kura, acaricie suavemente la almohada con una sonrisa.

—Bakura -Mencioné suavemente con una gran alegría en mi corazón.

—Yui, por favor, tranquilizate, todo estará listo para cuando lo quieres, ¡Ra! Aún no entiendo tus ganas de adelantar todo -Escuché la voz de Bakura tras la puerta, sentí que me helé por un momento, no podía encontrarme aquí, dejé todo rápidamente como lo había encontrado y me metí dentro del closet para que Bakura no me encontrara, sé que no debería de ocultarme, pero no sé que pensaría al verme de aquí.

—Eso es algo que luego sabrás -Mencionó la madre de Yu-chan.

—Como sea, necesito descansar un rato, en la noche seguimos con los planes -Mencionó abriendo la puerta.

—Osshh, esta bien -Mencionó la señora Yui fastidiada, escuché sus pasos alejarse y los de Bakura entrar cerrando la puerta, ya que el closet era de rendijas podía ver lo que estaba pasando afuera, aunque desde afuera no se pudiera ver lo que había dentro del closet.

Miré a Bakura desabotonarse los tres primeros botones de su camisa y posteriormente dirigirse a su cama y recostarse boca a bajo justo en el lado de la cama donde yo me había acostado, tomó la almohada y la abrazó a él, a los segundos noté que hizo una cara extrañada, se levantó de golpe y se sentó en la cama con la almohada aún en sus manos.

—Ryo... -Mencionó débilmente con una sonrisa, sentí un hueco en el estómago, ¿acaso me había descubierto? -Encanto sal, sé que estás aquí -Mencionó con una sonrisa ladina, mi corazón comenzó a latir con mucha fuerza, abrí lentamente la puerta y salí del closet con la mirada agachada.

—Hola Kura... -Mencioné apenado -¿Cómo sabías que estaba aquí? -Cuestioné nervioso.

—No lo sabía, pero tu aroma, esta impregnado en mis almohadas y también en la habitación... solo hice un pequeño experimento -Mencionó levantándose de la cama viniendo a mí, me tomó por la cintura y subio mi mentón con su mano, sentí mi rostro arder de la vergüenza al ser descubierto.

—¡Eso es trampa! -Exclamé haciendo un pechero, Kura solo me sonrió -Yo solo quería... conocer un poco más de ti -Mencioné mirandolo a los ojos, sus hermosos ojos que me hacían tan vulnerable a él.

—Siempre serás bienvenido aquí -Mencionó acercando lentamente sus labios a los mios hasta juntarlos en un dulce beso que no tardé en profundizar pasando mis brazos tras su cuello.

—Kura te extrañé mucho -Mencioné al separarnos para tomar un poco de aire.

—Yo también te extrañé encanto -Mencionó sonriendo ladinamente, sentí como me emocioné al escucharlo.

—No sabes lo feo que fue estar tantos días sin ti -Mencioné tirandome encima de él enrrollando su cadera con mis piernas mientras mis brazos seguían detrás de su cuello y le daba pequeños besos en todo el rostro -Ahhg Kura -Gemí al sentir como sus manos comenzaban a masajaer mis glúteos con firmeza.

—Para mi también fueron terrible Ryo -Mencionó sonriendo ladinamente encaminandose a la cama para costarme en este y por ponerse a horcajadas encima de mí.

—Ahhg Kura, si... ahhg si haces eso ahhg no... podre detenerme -Mencioné entre gemidos debido a que ahora las rápidas manos de Kura ya se encontraban bajo mi camisa jugando con mis tetillas y su boca devoraba mi cuello.

—Entonces no te detengas -Mencionó sensualmente en mi odio pasando su lengua por el borde de mi oreja, un escalofrío recorrió mi cuerpo, estaba a punto de dejarme llevar cuando recordé a los chicos.

—Estoy con Yu-chan... y lo demás, debo volver -Mencioné tratando de contenerme, realmente era algo difícil de hacer.

—Mmnn... lo entiendo -Mencionó dejándome finalmente, no sin antes plantarme un demandante beso.

—Solo quería verte un ratito -Mencioné mirando que se sentó en el bordé de la cama, rápidament fui a abrazarlo por la cintura recargando mi rostro en su espalda dejando esporádicos besos en esta mientras mis manos acariciaban suavemente su bien formado abdomen.

—Encanto no hagas eso o te encerraré aquí y no te dejaré volver con tus amigos -Mencionó riendo ladinamente.

—Que más me gustaría que hicieras eso -Mencioné sonriendo -Pero los chicos saben que vine para acá y no quiero ser blanco de preguntas bochornosas.

—¿Saben de nosotros? -Cuestionó miirandome con una ceja arqueada.

—Lo descubrieron solos -Revelé apenado, tal vez no le gustaba la idea de que los chicos supieran -¿Te molesta? -Cuestioné soltándolo sentándome en la cama con las piernas flexionadas agachando mi rostro.

—No, no me molesta, al menos saben que eres mío -Mencionó volteándose para tomar mi mentón con su mano y subir mi rostro para recibir un dulce beso de él, al separarnos solo sonreí, me daba gusto que no se hubiera molestado o algo así.

—Volveré con los chicos -Mencioné mirandolo a los ojos con una sonrisa, él asintió, me levanté y me acomodé la ropa mientras me dirigía a la entrada volteé a ver que se había recostado en la cama mirandome mientras me iba -Te quiero Kura -Mencioné sonriéndole antes de salir, estaba seguro que solo asentíría o algo así, así que no esperaba una respuesta.

—Yo también te quiero Ryo -Mencionó sonriendo, al escucharlo me regresé corriendo donde él, subiéndome a la cama para plantarle un gran beso, después me quité rápidamente y corrí a la entrada saliendo de la habiitación antes de que Kura no fuese a dejarme marchar, estaba feliz, me gustaba el Bakura que era así de lindo y sincero, cada día me enamoraba más de él.

Fin del POV de Ryo.

Más tarde los chicos tuvieron que irse a sus casas puesto que ya era tarde y habían pasado toda su tarde conmigo, cuando los despedí volví a sentirme triste por un rato, subí a mi habitación y me recosté en mi cama pensando en todo lo que había pasado.

En todo el día no había hablado con mi Yami, lo extrañaba, pero a la vez no quería hablarle, me sentía culpable del hecho de no aclarar lo de Becky y por las palabras de mi madre, estaba hundiéndome en un mar que yo mismo estaba creando.

Me dispuse a ir a ducharme para olvidar todo un rato, solo quería ducharme e ir a dormir y no saber nada hasta el siguiente día.

Cuando salí de ducharme Yami me estuvo llamando, pero no respondí a ninguna de sus llamadas, ya no quería nada, me sentía tan mal que sentía ganas de abandonar todo, sé que había dicho que no sacrificaría mi felicidad por la de alguien más, pero en ese momento ya no sabía que pasaría y que traería todo esto, solo quería que las cosas volvieran a ser como antes, quería declinar todo, aunque eso significara ser infeliz por el resto de mis días.


----Continuará----

  ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~  

Tenía algo de tiempo con este capítulo guardado, no tengo idea por qué no lo había publicado x'D, pero aquí está la actualización, espero que nos leamos en el próximo capítulo, cya n.n 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro