Cap. 3
Después de dormir como un troco toda la noche, Jane se despierta, esta tapada con sus sábanas y todo su cabello se encuentra revuelto.
-Ay... ¿Qué pasó anoche? -murmura asomándose por debajo de las sábanas.
-No tengo idea. -respondo, entonces ambos abrimos bien los ojos, miro a la derecha y me encuentro con Jane, se ve aterrada.
-¡Ah! -gritamos al mismo tiempo y caemos a los lados de la cama.
-¿Qué pasa...? -Miro mis manos y toco mi cara -Tengo un cuerpo.
-¡¿Quien sos?! -me pregunta Jane estando armada con una escoba.
(Eh... eso no es necesario que narres) Pero te veías tan aterrada.
-Cálmate Jane, baja esa escoba lentamente y patéala hacia acá. -digo poniendo mis manos hacia adelante.
-¿Qué haces en mi cuarto? y estas... -rápidamente se cubre los ojos avergonzada.
Si, estoy desnudo.
-No es para tanto, como si fuera la primera vez que vez a alguien...
-¡No ví nada! -interrumpe agachando la mirada.
Tomo las sábanas y me cubro -Claro que sí, recuerdas que le viste al hijo del vecino que accidentalmente dejó la puerta abierta del baño.
-¿Cómo sabes eso? -pregunta confundida.
Me acerco al armario y encuentro ropa allí, de hombre, me pongo unos jeans negros, una remera "Monsters" cortada en partes y unas zapatillas blancas.
-¿De dónde salió esa ropa? -dice ella, continúa cubriendose su cara.
-Listo, ya no estoy desnudo.
-¿Jane, qué pasa? -su mamá entra rápidamente por la puerta estando muy preocupada
-Ese tipo apareció en mi cuarto. -responde apuntándome con su dedo.
-Llegó dos horas tarde, si era un asesino hace rato te mataba, Jane. -digo rodando los ojos.
-¿Ves? -su mamá la mira preocupada.
-Jane, aquí no hay nadie. -murmura mirándola a los ojos.
-¿Qué? -la sorprensa de la castaña es monumental.
Me acerco a su mamá y muevo mi mano frente a su cara -No puede verme. -hablo.
-Baja, el desayuno ha está listo. -su mamá le da un beso en la frente y sale del cuarto.
-Tampoco puede oirme. Genial, soy como un fantasma. -en ese momento Jane me da un fuerte golpe con la escoba -¡Ah! -suelto por el dolor.
-Yo si puedo verte, escucharte y golpearte. -dice Jane intentandome pagar de nuevo con la escoba.
-Basta de estupidecez. -tomo la escoba y se la quito -Escucha, esto es muy, muy, muy, muy raro.
-Sí, encontrar a un tipo que no conozco en mi cuarto desnudo es raro. -interrumpe frunciendo el ceño.
-No sé qué pasó, pero salí de ahí adentro. -toco su frente.
-¿Mi... ca-cabeza? -deduce.
-Sí, soy la voz que te dice las cosas.
-Probalo. -pide seria.
-Yo te dije que no te acerques a Elliot y que Abril se sentaría para copiarte ayer. -respondo cruzándome de brazos.
-Es cierto... -murmura teniendo los ojos en la nada -Por eso no contestabas.
-Exacto, captaste muy bien. -asiento sentándome en la cama.
-¿Pero por qué saliste? -pregunta ella *El golpe*
-No sé. -respondo *El golpe*
-Seguramente fue por un embrujo, una mandición o algo así. -habla caminando de un lado al otro *El golpe*
-Tal vez. -asiento * El golpe*
(¡Ya entendimos! continúa narrando) Es que ahi todavía no sabíamos la razón.
-Mejor bajamos a desayunar, tenemos hambre. -digo abriendo la puerta y bajando las escaleras con Jane siguiendome de cerca.
-Mmm... nuestro favorito, tostadas con dulce de leche. -digo tomádolo y lamiendo la tapa.
-Yo siempre hago eso. -murmura ella mirándome.
-Exacto. -asiento arrogandole el dulce que atrapa sin problemas.
Mientras que ella desayuna yo me siento en el sofá y miro la tele, Pokemon, dibujitos que siempre miramos.
-Sé lo que estás pensando, que soy infantil. -hablo mirándo a Jane, ella abre grande los ojos.
-Sí... eso es-estaba pensando. -dice paralizada.
-Creo que sigo conectado a vos. -pienso y sé que ella puede escucharme.
-¡Basta, esto es una locura! -dice golpeando la mesada con sus puños.
-¿Qué es una locura? -le pregunta su mamá un poco extrañada por el extraño comportamiento de su hija. Ella está alimentando a su hermanito que se encuentra en una de esas sillas para bebés.
-Cuidado con lo que dices, si sigues así todos te creerán loca. -le aconsejo mirándola sobre mi hombro.
Vamos a la escuela y naturalmente la acompaño, en el camino ella me hacer unas cuantas preguntas sobre mi origen.
-¿Desde cuando existes?
-Desde que tienes memoria.
-Pero soy una chica. -habla haciendo una mueca.
-¿Y?
-¿Que mi conciencia no debe ser mujer?
-Jajaja, no me hagas reir. -suelto sonriente.
-No entiendo.
-La cosa es así, si eres mujer. -la señalo -Tu conciencia es hombre y viceversa. - después me señalo.
-Ya entiendo, ¿Y por qué? -pregunta curiosa.
-Bueno... todas las personas tiene dos personalidades, hombre-mujer y como ya te expliqué sus conciencias son diferentes.
-Ah, ¿Y si eres gay?
-Eso lo explica ¿No? La conciencia de ese chico o hombre lo está controlando. -respondo encogiendome de hombros.
-Wau... no tenía idea. -murmura.
-Claro que no. -hablo serio.
-¡Hola Jane! -saluda Abril con la mano, está muy emocionada.
-Ay no, ¿Y ahora qué quiere ésta? -comento rodando los ojos.
-Jane, hay un chico nuevo en la escuela, es muy lindo. -suelta un molesto chillido.
-¿Eh... serás vos? -piensa la castaña asustada.
-No creo, nadie puede verme. -respondo negando.
-Allá está. -dice colgandose de su brazo por la emoción, en eso un chico pasa caminando frente a nosotros, es pálido de ojos claros y tiene el cabello azul. ¿Normal?
-Parece un poni de arcoiris. -digo haciendo reir disimuladamente a Jane.
-¿Ves? Te dije que era lindo. -susurra Abril sonriendo.
-Que desesperada. -comento. Entonces ella me da una disimulada patada -¡Cállate!
-¿Me lo digiste a mi? -le pregunta Abril ofendida al escucharla.
-No me hagas caso. -suelta una risa nerviosa.
En eso algo llama nuestra atención, es una chica, nueva porque nunca la habíamos visto.
Tiene la piel pálida, ojos claros y en su cabello negro tiene un mechón azul desde su flequillo hasta las puntas de su cola de caballo.
-¿Quién es ella? -me pregunto.
-No sé, Abril no dijo nada de ella. -susurra Jane.
Se nos ocurre preguntarle a nuestra supuesta amiga Abril pero ella ya se fue corriendo detrás de chico nuevo.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro