Paola estaba de mal humor.

Ni siquiera el paisaje a su costado lograba sacarle ese sentimiento amargo y molesto en su corazón. Además que el ambiente no ayudaba para nada, el ambiente en el jet privado, era tenso e incómodo aumentando más su mal humor.

¿Y quién tenía la culpa de su mal humor?

Era de la boluda de Jane.

¡La odiaba!

¡Volvía a odiarla como antes!

¡¿Quien demonios se creía para usar su don contra ella y Becca?!

¡Encima las reinas no le dijeron nada!

¡Nada!

Paola en ese momento se sintió traicionada por sus reinas. Esta bien, puede que haya estado mal en dejar a sus reinas sola pero... ¡¿Defender a una sádica que le gusta torturar a gente inocente estaba bien?! ¡Claro que no! Y además... ¡¿Que hizo ella para que la estúpida de Jane usara su don?!

¡Estaba loca!

¡Loca!

Y lo peor de todo esto, de su gran mal humor, es que nadie le hablaba. Ni las reinas, ni Félix, ni Demetri ni mucho menos Alec.

¿Por qué?

Porque tuvo una fuerte discusión con Jane en donde... no quedó muy bien parada.

FLASHBACK

—¡Por favor Jane, basta!— gritó Rebecca en el suelo mientras se retorcía del dolor.

—¡Hija de puta!— gruñó medio gritó de furia Paola en la misma situación que la rubia a su lado. No sabía que Jane podía influir su don en dos personas a la vez, hasta parecía que su hermano tampoco sabía porque se encontraba en un estado de shock.— ¡Basta Jane!

—¿Que sucede aquí?

—¡Mi reina!— sollozó Rebecca.

—Jane suficiente.— habló Athenedora con voz firme, confundida, preocupada y sorprendida, al ver las dos sufrir de dolor.— Jane.

—Hermana.— llamó Alec, colocando su mano en el hombro de su hermana logrando su atención, que dejó de usar su don en ambas.

Athenedora estaba a punto de hablar para saber que estaba sucediendo cuando el estallido de un trueno a las afueras del castillo retumbó en el ambiente que hasta parecía que había hecho temblar las paredes.

—¡¿Que demonios te pasa perra?!— le gritó furiosa Paola, levantándose del suelo ignorando por completo el jean atascado entre sus piernas que agarró una sábana y se tapó toda su parte baja como una pollera y se acercó enfurecida hacia Jane.— ¡¿Te caíste de tu cama cuando eras pendeja o qué?!

》¡¿Tenés algún problema conmigo?!《

—Paola, tranquilízate.— ordenó Sulpicia al escuchar otro trueno retumbar en los cielos.— Paola.

—Tienes el descaro de gritarme cuando la que tiene problemas eres tú.— masculló con la mandíbula tensa Jane, dando un paso quedando frente a frente de la neófita que gruñía de furia.— Faltándole el respeto a nuestras reinas, de su amistad, desapareciendo si...

—¡Oh vamos!— interrumpió Paola con una sonrisa cínica en sus labios.—
¡¿Vas a meter de excusa a las reinas cuando claramente a la que le falla la cabeza sos vos?! ¡Medicate loca!

Jane gruñó furiosa.

—¡Eres tan irrespetuosa, mal hablada e insoportable!

—¡Jane!

—¡Y vos sos una niña malcriada, prejuiciosa que nadie te quiere Jane!— le gritó en la cara, que con cada palabra los truenos rugían en los cielos, preocupando a los presentes allí.— ¡Date cuenta mujer! ¡No todo gira alrededor de vos! ¡No sos el centro del universo!

》¡Nadie te quiere! ¡El único que te puede querer es Alec pero porque es tu mellizo! ¡¿Pero los demás?! ¡Los demás te tienen miedo! ¡Ni siquiera te tienen respeto, solamente miedo! ¡¿Y sabes qué es lo más triste?! ¡Es que te crees importante por tu estúpido don cuando eres nada sin él! ¡Eres nada!
¡Porque sino solamente sos una niña debilucha que sin su don no puede hacer un carajo! ¡Una niña que dice ser mujer pero que no se comporta como tal al regodearse en el sufrimiento de los demás! ¡Sos patética Jane! ¡Y vos y tú mirada de desprecio hacia todo el mundo y más hacia mí me tienen las pelotas llenas que no tengo! ¡Creí que podíamos ser amigas pero veo que claramente eso no se puede pero mejor para mí! ¡Porque no me quiero juntar con una persona horrible como vos!《 

Silencio.

Paola frunció el ceño confundida al ver que los orbes rojizos de Jane se nublaban lentamente y más al verla girar sobre sus talones yéndose de allí, sin antes inclinar su cabeza ante las reinas.

La pelinegra estaba confundida y aturdida ante la mirada de desprecio de Alec que luego se fue detrás de su hermana, saludando a sus reinas, que sus orbes se dirigieron hacia las reinas que la miraban seriamente provocando un escalofrío en su columna vertebral.

FLASHBACK

¿Y ahora qué había hecho mal?

¿Decirle ciertas verdades ahora la hacían la mala de la película?

¡Pero por favor!

La que empezó todo fue Jane y la culpa la tiene ella.

Si.

No.

Paola arrugó la nariz y negó con la cabeza en un intento de quitarse esos pensamientos y esa mirada de la rubia e hizo un puchero mirando hacia la ventanilla del avión viendo el cielo celeste y las nubes blancas, mientras volaban hacia anda saber donde por un ejército de neófitos que estaban llamando mucha la atención de la mirada humana.

Pero... ¡¿Por qué tenia que ir ella?!

¡Y luego de esa discusión de hace tres días!

¿Era un castigo?

No era un buen momento para su primer misión.

Si, era su primer misión y no estaba siendo como ella una vez se lo imaginó. Repetía, el ambiente en el avión no la hacía sentir cómoda. Odiaba el silencio y más odiaba que Félix y Demetri la ignoraran como si no estuviera con ellos.

¡Y estaba a su costado!

Pero la ignoraban por completo mientras jugaban tranquilamente al ajedrez entre ellos. Miró de reojo a Demetri sentado a su lado mientras éste pensaba estratégicamente que pieza mover.

Y una idea se le vino a la cabeza.

Se inclinó suavemente hacia el lado del castaño y lentamente movió su mano hacia la mejilla y rápidamente con su dedo índice lo picó.

Nada.

Lo volvió a picar.

Nada.

Lo hizo otra vez.

Nada.

Una vez más, mientras Félix sonreía divertido al ver la escena en frente suyo.

Paola frunció el ceño molesta ante la ignorancia de Demetri, por lo tanto, lo volvió a picar varias veces aumentando su velocidad.

Una tras otra.

—¡Ya basta mujer!

—¡Si!— festejó Paola alzando sus dos brazos como una campeona.— ¡Me hablaste!

—¡Yo no...— estaba a punto de negarlo cuando era inútil negarlo.— mierda, si.

》Pero no te voy a hablar, no hablo con traidoras.《

Paola jadeó y le dijo.

—¡Retráctate!— lo sacudió del hombro.— ¡Retráctate hombre!

》¡No soy una traidora!《

—Me abandonaste.— se quejó el castaño llevando una mano hacia su pecho, indignado.— me abandonaste por una rubia, por tu nueva amiguita.

Paola rodó los ojos, sin saber quien era más exagerado él o ella y le respondió.

—Becca no es mi amiga, puede llegar a ser mi futura novia o hasta esposa pero ahora no somos amigas.

Demetri miró a Félix que éste también lo miró para luego ambos mirar a la neófita que los miraba con un ceño fruncido que molesta ante el silencio, les preguntó.

—¿Qué?

—¿Te gusta Rebecca?— preguntó con curiosidad Félix.

Paola sin pensar, dijo.

—Es mi tipo.— respondió con sinceridad.— rubia, divertida, tiene buen gusto de la ropa...

》Debería conocerla un poco mas, no puedo decir que me guste de gustar, pero que claramente es hermosa y de mi tipo... si.《

Demetri estaba a punto de hablar cuando la voz por los parlantes, los interrumpió.

—Señores estamos llegando al lugar.

—Mierda...— insultó Paola nerviosa.— ¿Por qué mierda estoy aquí?

—Felicidades.— se burló Félix con veneno.— tu primera misión.

》Espero que recuerdes todo el entrenamiento oh... espera, has estado faltando.《

Paola tragó saliva nerviosa ante la mirada furiosa y sonrisa cínica de Félix hacia ella, sabiendo que estaba furioso con ella.

Estaba jodida.

El viento helado y la nieve que caía haría a la pelinegra feliz ante

Paola miraba desde la oscuridad de la azotea de un edificio como había unos diez vampiros atacando a un grupo de humanos. Apretó con fuerzas sus manos y miró hacia otro lado, sin poder soportar ver como esas bestias mataban a gente inocente, incluyendo a unos dos niños que estaban entre el grupo.

Quería hacer algo.

Pero Demetri le negó con la cabeza.

—Debemos actuar.— intervino Félix, que Paola le agradeció mentalmente.— están llamando mucho la atención.

—Mmm...

—Hermana.

—Aro me dio a mí la autoridad.— habló con voz firme Jane, mirando con indiferencia hacia esos neófitos y humanos.— debemos buscar al responsable de todo este escándalo... sin embargo, no podemos dejar a estos neófitos que sigan actuando así...

》Mmm... decisiones, decisiones...《

Pequeños sollozos llamó la atención de Paola que miró aterrada como una niña de unos ocho años salía de su escondite, que era detrás de un basural, mientras abrazaba con fuerzas un osito de peluche, llorando con fuerzas completamente aterrada.

—¡Hay que hacer algo ya!— gritó preocupada Paola viendo que la niña llamó la atención de un neófito.— ¡Jane!

La rubia la ignoró por completo provocando que Paola se enfureciera con ella.

—¡A la mierda!— gruñó Paola enojada, ignorando por completo los llamados de Demetri y saltó desde el techo, gritando a la vez.— ¡No voy a dejar que esa niña muera!

Paola aterrizó perfectamente de pie y rápidamente se abalanzó contra aquel neófito que estaba a punto de morder el cuello de la niña. La pelinegra lo agarró del cuello a la vez que pateaba la rodilla obligándolo a inclinarse que con rapidez cruzó su brazo sobre el cuello y con presión, comenzó a intentar arrancarle la cabeza.

—Pequeña.— le sonrió amablemente a la menor que miraba asustada hacia ella.— cierra los ojos, por favor.

Paola al ver que no la entendía cerró los ojos para luego abrirlos y señalarla, apenas con su mano libre mientras forcejeaba con el neófito, para que lo hiciera ella. La pelinegra sonrió de alivio al ver que la nena hacía lo que le pedía que inmediatamente le arrancó la cabeza a ese vampiro que como lo había hecho la última vez, lo mandó a volar por los aires ante lo asqueroso que era sostener una cabeza entre sus manos.

Apenas se liberó se acercó lentamente a la menor, sacándose la capa y con cuidado se la colocó encima de ella que le quedaba obviamente gigante. Paola al verla temblar, sin saber si era por su baja temperatura o por el miedo, apartó sus manos de ella y le sonrió amablemente a la menor que había abierto los ojos mirándola con miedo pero con curiosidad.

—Vas a estar bien.— le habló lentamente.— todo estará bien.

Un gruñido furioso vino detrás suyo provocando que Paola se tensara y se levantara girando rápidamente sobre sus talones encontrándose un neófito acercándose hacia ella cuando no tuvo otra oportunidad de caminar al haber sido interceptado por Félix y Demetri que le arrancaron la cabeza, que tiraron junto con el cuerpo que Paola había destrozado, para prenderlo fuego.

—¿Que parte de que yo estoy a cargo no entendiste neófita?— gruñó furiosa Jane, colocándose en frente de la pelinegra ignorando a la pequeña humana detrás de ella.— No somos héroes... no los salvamos nos lo comemos.

》Ella tiene que morir.《

—Es solo una nena.— exclamó indignada Paola mirando furiosa a aquellos orbes rojizos vacíos, sin ninguna emoción de compasión por la pequeña.— Joder, sos un monstruo.

》¿Que mierda te hicieron en tu vida humana para que seas así?《

—No sabes nada mí.— masculló con la mandíbula tensa Jane, dando un paso más quedando a centímetros de la pelinegra que la miraba furiosa.— y te lo vuelvo a repetir, yo estoy a cargo y harás lo que yo te diga.

》Mata a esa niña.《

Paola inclinó un poco más su cabeza hacia Jane, que estando tan cerca una sonrisa de superioridad creció en sus labios y con firmeza, le respondió.

—No.

Jane gruñó furiosa a punto de usar su don contra la neófita cuando siente la mano en su hombro sabiendo que era su mellizo mientras que Félix agarró a Paola alejándola de ella y Demetri tiró hacia atrás a la humana que agarraba fuertemente su osito de peluche sin entender lo que pasaba.

—Tranquilícense las dos.— demandó seriamente Félix.— peleando entre sí no llegaremos a nada.

—Félix tiene razón.— respondió esta vez Alec, teniendo la atención de su hermana.— Luego nos encargaremos de la humana.

》Ahora tenemos algo más importante que hacer.《

Paola rodó los ojos e ignorando a los mellizos giró sobre sus talones para ver a la humana cuando se sorprende no verla detrás de Demetri.

—¿En donde está?

Demetri miró detrás suyo sorprendiéndose al no ver a la pequeña humana. Sus ojos recorrieron cada lado de aquel callejón, teniendo una rara sensación en su pecho.

—¿La buscaban a ella?

La guardia real miraron como una persona salía de la oscuridad del callejón, encontrándose al hombre que había hablado sosteniendo del cuello a la pequeña que pataleaba por aire para sus pobres pulmones.

Paola miró con terror tensando cada parte de sus músculos al ver a la pequeña en las manos de aquel monstruo.

¿Cómo había llegado a ella?

¿Cómo no la sintieron o escucharon?

¿Cómo no sintieron la presencia de ese vampiro?

—Vulturis.— escupió con desprecio.— Al fin tendré mi venganza.

—¡Si tenés pelotas grandes enfrentate a nosotros pero deja a la nena!— gritó furiosa Paola siendo detenida por Demetri que se encontraba serio, observando la situación.— debemos salvarla.

—Te recuerdo.— habló Alec, mirando aquel vampiro, seriamente.— Eres aquel humano que supo la verdad de nuestra especie.

》Hace unos meses acabamos con un clan de vampiros que habían revelado nuestra existencia a un humano... Estoy seguro que acabamos con toda la amenaza.《

Aquel vampiro apretó con más fuerza el agarre del cuello asustando a Paola y a Demetri. El hombre de cabellos castaños de ojos rojos y sonrisa cínica habló.

—Mataron a mi gemelo.— respondió con la mandíbula tensa.— mataron a mi familia, a todos los que amaba malditas escorias.

》He estado preparándome por meses... y ahora, que se que soy más fuerte que ustedes... mi ejército de neófitos y yo... ¡Los acabaremos! ¡Ataquen!《

Rápidamente la guardia real fue rodeado de un gran grupo de neófitos. Paola se tensó como la cuerda de un violín queriendo ir y salvar a aquella niña cuando un vampiro saltó sobre ella que logró esquivarla por un pelo.

—¿Que demonios?

La pelinegra dando golpizas, esquivando, intentando avanzar a aquel vampiro escuchó los gruñidos furiosos de Jane a la misma vez que Alec jadeaba sorprendido esquivando y golpeando a varios neófitos.

—¡¿Que carajos pasa?!— gritó Paola sacándose de encima un neófito mientras veía de reojo los rostros de frustración de los mellizos.— ¡¿Por qué mierda no están usando sus dones?!

—Lo estamos usando pero...— respondió Alec esquivando a un neófito.— no funciona.

—¡¿Que mierda?!— chillaron Demetri y Paola a la vez sorprendidos.— ¡¿Como qué no funciona?!

—Lo que escucharon idiotas.— gruñó Jane, arrancando la cabeza a uno.— Nuestros dones no funciona, es como si no lo tuviéramos.

》Como si algo nos lo bloqueara.《

Paola frunció el ceño terriblemente asustada en su interior al saber que estaban jodidos. Sin el don de Alec que atrapa a varios a la vez y sin el don de Jane que, ahora pareciera ser, puede por lo menos capturar a dos con su don estaban realmente jodidos.

¡¿Que mierda iban hacer?!

Paola tuvo unos segundos de procesar la situación, cada vez aparecían más neófitos rodeándolos, encerrandolos a ellos. Sin embargo, ahora no le preocupaba su bienestar sino en la pequeña humana que todavía estaba debajo de las garras de aquel monstruo.

—¡Hermana!

Paola giró sobre sus talones, mientras forcejeaba con un neófito, buscando con la mirada a la rubia sádica, sorprendiéndose al ver a Jane tirada en el suelo mientras intentaba quitarse de encima a otro vampiro. La pelinegra intentó sacarse de encima al vampiro que peleaba con ella para ayudar a la rubia cuando su mundo se detiene al ver con sus propios orbes como Jane besaba a aquel neófito.

Si, Jane estaba besando a aquel vampiro.

Un sentimiento amargo nació desde las entrañas de Paola al ver aquello, sin embargo no podía quitar su mirada de esa escenita.

¡¿Por qué demonios lo estaba besando?!

¡¿Por qué seguía besándolo?! ¡¿Acaso le va chupar el alma o que?!

Era tan amargo pero tan amargo aquel sentimiento que comenzaba a mezclarse con la furia en su pecho, que ni siquiera se dio cuenta que el neófito que tenia entre sus manos literalmente explotó en el aire.

Todos quedaron mudos, tanto los neófitos que los rodeaba como Félix, Demetri, Alec e incluso ese vampiro que creó el ejército se congelaron en el lugar shokeados al ver que la pelinegra ni siquiera se había dado cuenta que había hecho aquello. Es más, su mirada solamente se encontraba en la pequeña rubia que, ignorando una mirada furiosa sobre ella, se apartó de aquel neófito y rápidamente aprovechó en arrancarle la cabeza.

Jane rápidamente se levantó del suelo limpiándose con las mangas de su uniforme sus labios mientras fruncía el ceño al ver a todos congelados en el lugar mirándola a ella para luego mirar a la neófita como un partido de pin pon.

Harta del silencio en el ambiente, preguntó.

—¿Qué?

Paola con un tic en su ojos derecho al tener la mirada de Jane sobre ella, le sonrió inocentemente y le respondió.

—Veo que copiaste mi técnica.

Jane rodó los ojos y no le respondió, ignorándola,  provocando que esos sentimientos amargos incrementaran.

— Oigan... ¿Acaso vamos a ignorar que Paola acaba de hacer explotar a un neófito?— interrogó Félix destrozando a un neófito, que como si alguien hubiera apretado un botón de 》continuar.《 los neófitos volvieron a atacar a la guardia real.

—¿Que yo hice qué?— preguntó confundida Paola esquivando a un neófito.

—¡¿En serio no te diste cuenta?!— bramó enojado Demetri ante la situación en la que estaban.— ¡Hiciste explotar a un neófito!

—¡Acaben con la pelinegra!— gritó aquel vampiro, que se encontraba ahora en la azotea de un edificio bastante lejos, ordenando a los neófitos que atacaran a Paola que chilló del miedo al tener más de 15 pares de ojos con instinto asesino sobre ella.— ¡Destruyanla!

—¡Ay mamá!— chilló corriendo escondiéndose detrás de Demetri que éste se sorprendió.

—¡¿En serio Paola?!— gruñó furioso Demetri dando varios pasos hacia atrás al ser rodeado por varios neófitos.— ¡Maldita sea! ¡Alec usa tu maldito don!

—¿Que parte de que "algo" me está bloqueando no entiendes?— gruñó el castaño molesto.

Paola frunció el ceño al volver a escuchar aquello. Rápidamente su cerebro comenzó a trabajar pensando que ese "algo" no es una cosa sino que es un "alguien" una persona. Es decir, uno de esos neófitos tenía un don de bloqueo. Sin embargo, sus orbes se dirigieron a aquel vampiro líder del ejército teniendo el presentimiento de que ese hombre tenía aquel don y como en el caso de Jane, solo tiene el poder de utilizarlo a un individuo, o dos personas en este caso. Y ese vampiro solo sabía que los únicos que tenían un don destructivo eran los mellizos; Demetri y Félix no tenían un don para retener y torturar a los vampiros y él no sabía que ella tenía un don que podría compararse con las joyas Vulturi. Por lo tanto... ahora que vio haber aquello, quería que desapareciera ya que no podía dejar de usar su poder contra Alec y Jane sino quería perder.

Tenían un don limitado.

Pero ella no.

Paola sonrió con todos los dientes.

—¡Demetri haceme enojar!

—¿Qué?— preguntó aturdido el castaño mirando sobre su hombro derecho a la pelinegra, ambos esquivando a varios neófitos que se abalanzaban sobre ellos.

—¡Que me hagas enojar!— gruñó Paola sin sentir ese hormigueo a la hora de usar su poder.— ¡Tengo un plan!

—Bueno...— dudó Demetri.— ¡Tus chistes son pésimos!

—¡Chee!— se quejó Paola cuando un puchero sale de sus labios.— ¿En serio son tan malos?

—¡¿No era que tenias que enojarte?!

—¡Pero!

—¡Tu ropa es horrible! ¡Tienes pésimo gusto!— interrumpió Demetri.

—¡Bue, miren quien habló!— se quejó Paola.— ¡El Antonio Banderas le dicen!

—¡Paola!— le regañó Demetri, golpeando a un neófito.— ¡Enójate mujer!

—¡Eso me molesta pero no me enoja!— le respondió en la misma situación la pelinegra.— ¡Tiene que ser otra cosa!

—¡Oye Jane!— le gritó Félix llamando la atención de los demás.— ¡¿Disfrutaste besar aquel vampiro?!

Jane alzó una ceja a la vez que esquivaba a varios neófitos, respondió con sinceridad.

—Fue solo un choque de bocas.

—¡¿Solo un choque de bocas?!— se burló Demetri comprendiendo rápidamente lo que quería hacer Félix.— ¡Yo creo que hubo lengua!

Jane estaba a punto de negarse cuando se sorprende al escuchar hablar su mellizo.

—Y duró bastante.— se divirtió Alec mientras golpeaba a unos neófitos, disfrutando de ver a su hermana confundida y más al ver como el TIC en el ojo de la neófita incrementaba y el cielo se oscurecía sobre sus cabezas.— Dime la verdad hermanita... ¿Lo disfrutaste?

》Lo besaste con mucha pasión.《

Paola gruñó furiosa apretando tan fuertes sus manos en puños no queriendo perder el control con algo tan banal y estúpido como el beso de Jane y aquel neófito. De hecho, no entendía muy bien porque estaba tan furiosa al recordar como Jane besaba aquel neófito... con tanta pasión.

Seguro era porque copió su técnica.

Si, eso era.

—No hubo lengua y no lo besé con pasión.— respondió Jane llamando la atención de Paola, logrando calmar aquella furia en su interior.— Sin embargo...— sonrió ladinamente con una mirada peligrosa y divertida.— yo si se besar... no como otras.

—Uhhh...

Y Paola perdió la calma.

Varios rayos cayeron del cielo destrozando a varios neófitos que quedaron en shock al ver semejante poder. Los neófitos que apenas se salvaron temieron ante el aura furiosa de la pelinegra, tragando saliva al ver a aquella muchacha ser rodeada de pequeños rayos, con sus cabellos elevados en el aire y sus ojos brillando en blanco.

—Oh mierda...— exclamó completamente sorprendido Demetri al ver a Paola de esa manera, increíblemente poderosa.— increíble.

Félix y Alec asintieron con la cabeza sorprendidos y orgullosos al ver a la neófita usar o por lo menos mantener su poder. Alec miró de reojo a su melliza que tenía un rostro neutral sin embargo en esos orbes rojizos brillaban una pequeña puntita de orgullo.

—¡¿Que esperas Paola?!— rugió Demetri.— ¡Acabalos!

Paola ni siquiera escuchó las palabras del castaño estando maravillada por su don. Miró sus brazos sorprendida al ver varios y pequeños rayos rodear su brazo, o mejor dicho todo su cuerpo. Giró su rostro, encontrándose en el suelo su reflejo de un charco de agua sucia chocando con su mirada blanquecina y brillante.

Jadeó sorprendida.

—¡No te pases boludooooo!— chilló sorprendida volviendo su atención a sus brazos y cuerpo.— ¡Es posta! ¡Soy como Storm de los X-men gilas!

—¡Acabenla!— rugió aquel vampiro aún teniendo de rehén a la pequeña.

—¡Yo te voy a cagar a trompa...— no pudo terminar de hablar al ver que de sus manos, al haber señalado aquel vampiro salió un rayito que apenas logró esquivarlo.— ¡Ohhhhhhhhhh! ¡Salen rayitos de mis manos!— chilló emocionada, señalando a un neófito que en efecto, un rayo salió de su dedo tan fuerte como los que caen del cielo, destrozando a aquel vampiro. Paola sonrió peligrosamente  y señalando a cada uno de los neófitos, gritó.— ¡Pium, pium! ¡Pium,  pium!

》¡Pium, piuum! ¿Pium, pium?《

Paola señaló varias veces a los neófitos pero nada salió de sus dedos, de hecho ya ningún rayo rodeaba el cuerpo, comprendiendo rápidamente que el vampiro estaba bloqueando su poder.

—¡Jane!— llamó rápidamente a la rubia, teniendo su atención.— ¡Usa tu don contra el!

La rubia frunció el ceño sin embargo no le discutió y miró a aquel vampiro diciendo.

—Dolor.

Por unos segundos se sorprendió al ver que su don volvía a ella al mirar a aquel vampiro gritar de dolor, donde rápidamente Alec, al notar que el don de su melliza volvió él la usó también al igual que Paola, destruyendo a los pocos que quedaban.

—¡Malditas!— gruñó furioso arrojando a la humana al vacío que Demetri la atrapó en el aire, salvándola mientras que Paola furiosa con aquel castaño se elevó en el aire y con todo su poder, le arrojó desde sus brazos un gran rayo quedando sin nada de él, ni siquiera cenizas como si nunca hubiera existido.— mierda...— insultó al tener un mareo, perdiendo la estabilidad en el aire sin haberse dado cuenta que estaba flotando, donde rápidamente Jane la agarró en el aire, por la cintura.— gracias...

Miró de reojo a la rubia llegándole a sus fosas nasales el dulce aroma a vainilla de los cabellos de Jane relajándose por completo al estar abrazada por ella, cerrando los ojos, perdiendo la consciencia.

No otra vez.

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Que decirles... amo a Storm.

¡Pude terminar el capítulo!

¡¿Qué les pareció?!

¡¿Les gustó?!

¿Que piensan de lo que le dijo Paola a Jane?

¿Que piensan del comportamiento de Paola al ver a Jane usar la misma técnica de distracción?

QUIERO ACLARAR  COSITAS.

Primero, Paola tiene un gran poder pero también es un gran problema. No quería que fuese tan fácil para ella usar su don, por eso decidí complicarle un poco la vida ahre.

Segundo, cambié un poquito el don de Jane. O sea.. es re triste saber que Jane solamente puede usar su don con solo una persona, hubiera sido piola que se desarrollara, con todos los años que tiene, pero bueno... como no es así, yo decidí modificarlo por un capítulo.

Tercero, por si no se entendió, aquel vampiro tenia el poder de bloquear los dones solamente a dos personas, eso dedujo Paola, nuestra chica es inteligente.

Cuarto, en esta historia la guardia real, Demetri, Félix, Alec y Jane no se enfrentaron con el ejército de neófitos que pasa en los libros, aclaro.

¡Voten y comenten!

Todavía acá en mi país es 15 de Julio, soooooo ¡Hoy es su primer añito! Ya agradecí en el tablero, pero quería agradecerles por su apoyo, votos y comentarios.

Nos vemos dentro de dos semanas.

Las amo con todo mi corazón.

Besitos.

~M.