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Capítulo 3

Los dos erizos estaban sentados en el comedor tomando el té, Amy se había sentado a una distancia un tanto exagerada del erizo, o bueno, eso pensaba el chico porque ya estaba acostumbrado a tenerla sentada a su lado, pensó que era su imaginación pero por forme fue pasando el tiempo, el silencio para él era incómodo y tenso mientras que para ella era cómodo, antes se entristecía ya que no podía platicar con aquel erizo que le había robado su corazón, lo único que se escuchaba era la cuchara que tenía la femenina chocando con el vaso de vidrio ya que le daba vueltas sin parar, ciertamente le parecía más interesante hacer y ver eso que intentar iniciar una plática con su líder de equipo...

-¿Te sucede algo Ames?- preguntó poniendole fin al silencio entre los dos, la rosada suspiró dejando de girar la cuchara, lo miró para luego hacer una mueca que acompañara su ligero movimiento de cabeza hacia los lados haciendole entender que no -Es que se me hace raro que no trates de hacerme plática, ¿qué ha pasado?-

-𝑁𝑎𝑑𝑎, 𝑠𝑜́𝑙𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑦𝑎 𝑛𝑜 𝑙𝑒 𝑒𝑛𝑐𝑢𝑒𝑛𝑡𝑟𝑜 𝑐𝑎𝑠𝑜 𝑡𝑟𝑎𝑡𝑎𝑟 𝑑𝑒 ℎ𝑎𝑏𝑙𝑎𝑟 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑖𝑔𝑜 𝑠𝑖 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒 𝑚𝑒 𝑡𝑟𝑎𝑡𝑎𝑟𝑎́𝑠 𝑖𝑔𝑢𝑎𝑙- pensó pero respondió -No ha pasado nada, lo que pasa es que no encuentro nada de qué hablar...

-Ah... Bueno, si tú lo dices- respondió bajando la voz de apoco para darle paso a otros minutos de silencio que iban a parecer eternos, Sonic sabía que ella no estaba así por nada y que no era por no tener un tema de conversación, sabía muy bien que era por otra cosa pero ¿qué? -Y bien, ¿no tienes algo que explicar?

-¿Como qué?- interrogó de inmediato con clara relajación y su voz era demasiado suave, más suave de lo normal se podría decir, pero aunque se veía así, dentro estaba hecha un manojo de nervios, le preocupaba que descubrieran las cartas que apenas estaba escribiendo aunque sabía que era practicamente imposible ya que era un cajón que nadie más conocía a excepción de ella y Cream, pero bien sabía que Cream nunca buscaría allí puesto que le especificó el uso de ese cajón, por lo que no lo habriría sin una razón importante

-No creas que no sé

-¿De qué hablas?- peguntó fingiendo que no tenía alguna idea de lo que se refería

-Estás distante, dime lo que te sucede

-No me sucede nada...

-Amy, hace unos días estabas como siempre, invitándome a citas, siendo curiosa, regalando sonrisas con tus ojos llenos de ilusión pero ahora, estás diferente, si dicen que uno no puede cambiar de un día a otro, es porque no te han conocido, pero siendo sincero eso es raro en ti, ¿por qué cambiaste de repente sin motivo?

-𝑆𝑖́ 𝑡𝑒𝑛𝑔𝑜 𝑚𝑜𝑡𝑖𝑣𝑜 𝑦 𝑒𝑠𝑒 𝑚𝑜𝑡𝑖𝑣𝑜 𝑒𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑡𝑜𝑑𝑜𝑠 𝑡𝑖𝑒𝑛𝑒𝑛 𝑠𝑢 𝑙𝑖́𝑚𝑖𝑡𝑒 𝑦 𝑑𝑒𝑠𝑎𝑓𝑜𝑟𝑡𝑢𝑛𝑎𝑑𝑎𝑚𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑦𝑜 𝑦𝑎 𝑙𝑙𝑒𝑔𝑢𝑒́ 𝑎𝑙 𝑚𝑖́𝑜 𝑐𝑜𝑛 𝑢𝑠𝑡𝑒𝑑𝑒𝑠...- contestó mentalmente -Todos tienen un límite Sonic- habló para luego darle un sorbo a su té -y yo ya estoy llegando al mío

-Ouh- fue lo único que escuchó decir por parte del azulado, volvió un silencio que ninguno de los dos soportaba pero era como si eso fuera mejor a que una plática se tornara incómoda como la que habían tenido

Los minutos pasaron pero Sonic no se pudo contener las ganas de preguntar algo más con la esperanza de iniciar una plática como las que ella deseaba y no le otorgaba, simplemente quería ver por lo menos unos minutos a aquella eriza que a kilómetros de distancia hacia notar que tenía aura, espíritu y alma de niña...

-No entiendo, ¿cómo es que ya estás llegando a tu límite?

-¿Y en serio preguntas?- dijo para mirarlo, esa mirada le hizo sentir que él era la razón principal por la cual estuviera casi al límite, esa mirada le hizo entender que ella no quería pero estaba sucediendo

-Ehm... ¿Es porque te estoy presionando con la misión? Jeje- preguntó nervioso, la rosada tenía una expresión algo seria -ok, ok, ya dejo mis jueguitos, es porque prácticamente llegué a decirte loca, fui frío contigo hoy...- la chica lo interrumpió

-Ayer- la miró -porque ya pasan de las 12:00 a.m- medio sonrió y este la imitó porque volvió a ver esa sonrisa sincera

-Es cierto, perdón damicela, ahora yo soy el distraído- el azulado se bajó de la silla y se acercó a Amy para después hacer una reverencia y extenderle la mano -¿me permitiría compensárselo con un baile?- alzó la mirada

Ella levantó una ceja -¿𝐴𝑐𝑎𝑠𝑜 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑟𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑏𝑎𝑖𝑙𝑒 𝑐𝑜𝑛 𝑒́𝑙 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑡𝑒𝑛𝑒𝑟𝑚𝑒 𝑓𝑒𝑙𝑖𝑧 𝑜 𝑐𝑜𝑛𝑡𝑒𝑛𝑡𝑎 𝑝𝑜𝑟 𝑢𝑛𝑜𝑠 𝑚𝑜𝑚𝑒𝑛𝑡𝑜𝑠 𝑦 𝑎𝑠𝑖́ 𝑙𝑢𝑒𝑔𝑜 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑎 𝑑𝑒𝑐𝑖𝑟𝑚𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑜𝑟 𝑓𝑎𝑣𝑜𝑟 𝑑𝑒𝑗𝑒 𝑑𝑒 ℎ𝑎𝑐𝑒𝑟 𝑙𝑜 𝑞𝑢𝑒 𝑠𝑒𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑒́ 𝑝𝑙𝑎𝑛𝑒𝑎𝑛𝑑𝑜?

-Oye, sé que te he estado tratando mal últimamente pero... Es de verdad, quiero bailar contigo aunque no sea un gran bailarín, así que ¿me concedes esta pieza? Por favor- pidió haciendo un mini puchero en frente de esta, no podía creerlo, de verdad quería bailar con ella por voluntad propia...

-Está bien, acepto este baile como disculpas- sonrió un poco divertida ante la situación y aceptó la mano que Sonic le había extendido

-¡Perfecto madam, le prometo que no se arrepentirá!- hizo que Rose se bajara de la silla y luego puso música desde su teléfono para que seguido de esto empezara a bailar con su "amiga"

NOTA DE LA AUTORA: imagínense el vals, please, es que prefiero que se imaginen el baile escuchando la canción :3

-Ames...- la llamó mientras bailaban -Eres importante para mí, lo sabes ¿no?

-Lo sospechaba pero no quería hacerme ilusiones en vano, por cierto, lo que dice la canción es muy hermoso, ¿lo que dice expresa lo que sientes o algo así?- preguntó un poco divertida y sentimental, la tensión e incomodidad se había quitado desde que Sonic se había esforzado un poco más por hacer hablar a Amy, por lo que ya hablaban como si nada hubiese pasado en el malecón

-𝑉𝑎𝑦𝑎, 𝑒𝑠 𝑚𝑢𝑦 𝑏𝑢𝑒𝑛𝑎 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑐𝑎𝑝𝑡𝑎𝑟 𝑖𝑛𝑑𝑖𝑟𝑒𝑐𝑡𝑎𝑠- pensó -¿Qué? No, no, nada de eso jeje, sólo... Me imaginé que te gustaría y pues no podía desaprovechar esta situación jeje...- desviaba poquito los ojos por estar nervioso y trataba de evitar sonrojarse

-Ok, si tú lo dices, te creeré- siguieron bailando con una sonrisa, mirándose mutuamente mientras que el de género masculino se aguantaba o mejor dicho, se obligaba a no cantar la canción porque estaría confirmando lo que la eriza le había preguntado, aunque sabía que la respuesta que él le dio anteriormente no se la creyó en lo absoluto, por ahora no quería, no cuando ella todavía estaba herida por lo de la tarde y tenía riesgo de que le diera hipotermia gracias a lo que pasó en el malecón, una vez terminada la canción le hizo una pregunta que la eriza nunca se hubiera esperado de su parte

-Humm... No sé si es el mejor momento pero... Ames, quisiera invitarte a salir, así como al estilo de una cita... ¿Puedes o quisieras o-?- claramente estaba nervioso, cosa que a ella le daba risa, puso su dedo índice en los labios del erizo y sonrió para luego responder con un "me encantaría" él se emocionó y la abrazó alzándola por los aires haciéndola reír, para el azulado, la felicidad de la rosada era algo que quería sentir todos los días, de eso se dio cuenta en este corto lapso de tiempo en el cual ella se comportaba extraño, su risa era música para sus oídos, cualquiera que los viera diría que eran una linda pareja, Sonic la bajó, le dedicó una sonrisa para a continuación decirle -Bueno, me tengo que ir, gracias por el té, por cierto, nunca dejes de ser tú misma ¿sí? Cuando te digo "ya madura", es porque solamente quiero que madures un poco pero que sigas siendo tú misma, ¿de acuerdo? Ahora, déjame ver esa hermosa sonrisa tuya- la femenina sonrió sinceramente, él besó su frente, se despidió y se fue de ahí dejándola sola pero con una agradable sensación, por otro lado, el erizo azulado al llegar a su casa cerró la puerta y unas lágrimas se resbalaron por sus mejillas y sintió cómo algo se oprimía contra su pecho y tenía un nudo en la garganta, ¿por qué seguía doliendo tanto? Lo único que quería era que a su amada no le pasara nada, pero al final de cuentas no lo lograría... Sólo tiene una oportunidad... Solamente una... Una oportunidad para disfrutarla más, para disfrutar más de su compañía... Pero, por más de que quiera cambiar la historia, no podrá... Porque esta ya está escrita y sellada por el destino, lo máximo que puede cambiar, será el cómo será todo al final, pero su dolor será el mismo o más fuerte que el anterior...

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