Home Run
Iré subiendo esto poquito a poco, solo son unas cuantas escenas sobre Karamatsu.
Si os gusta podéis comentar y tal y si no también.Hago estas cosas para practicar la narrativa (y por los feels, dulces y malditos feels)
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Aquel día se encuentran haciendo un picnic junto al río, ninguno de los seis había planeado nada, simplemente su madre les había levantado lanzando una cesta hasta los topes de comida alegando "que estaba hasta el moño de ellos, que quería pasar un día tranquilo y que no se les ocurriera volver a casa hasta la hora de la cena"
Lejos de parecerles una crueldad comprendieron a su madre y a sus ganas de librarse de aquellas seis mismas caras por un rato.
Ellos también se sentían así a veces.
En fin, la situación era esta: Habían terminado de picotear la comida, Osomatsu charlaba tranquilamente con Choromatsu y Todomatsu estaba tumbado junto a ellos jugando a algo en su móvil, por otra parte cerca de la orilla del río se encontraban Ichimatsu, Jiushymatsu y Karamatsu.
El menor del grupo lleva su inseparable bate de béisbol y no deja de repetir que quiere practicar su swing.
Karamatsu se coloca bien sus gafas de sol y posa como solo él sabe para hablar.
-Tu hermano mayor te lanzará la bola de la forma más estilosa que hallas visto nunca.
Jyushi hace como que no ha dicho nada e Ichi siente ganas de tirarle al río.
Aun así deciden que se turnaran para lanzar la pelota a su hermano.
Es en ese justo momento cuando pasa, Jyushimatsu con su acostumbrada energía empieza a dar vueltas emocionado con el bate en la mano, va tan rápido que parece un ciclón.
Y entonces "PAF"
Ese sonido es la mejor forma de resumir como el bate ha impactado con la cara de Karamatsu de forma brutal lanzándole hacia atrás y a Ichimatsu le parece hasta raro que no le haya reventado la cabeza como un melón maduro.
Karamatsu yace tirado en el suelo, le sangra la nariz y parece que los ojos se le están hinchando rápidamente.
Jyushimatsu para de dar vuelta y se queda estático mirando a su hermano con la expresión turbada, Ichimatsu cuenta mentalmente los segundos desde que ha caído al suelo.
Usualmente cuando pasan unos diez segundo Karamatsu suele recobrar la compostura lo suficiente como para levantarse y hacer alguna pose ridícula.
10.
20
30.
Ichimatsu también está empezando a asustarse y Jyushi empieza a llorar sin cambiar la expresión de su cara con su usual boca abierta.
Choromatsu que ha visto todo desde su sitio también estaba contando los segundos y ahora se dirige espantado hacía sus hermanos. Este se arrodilla junto a su hermano mayor notando que el corazón se le quiere salir del pecho.
-¿Karamatsu?
Los dos hermanos que faltan se acercan al escenario notando que lo mismo no están haciendo un número de teatro.
-¿¡Karamatsu!?
Con los nervios no puede evitar zarandearle un brazo y consigue volver a respirar cuando nota a su hermano abrir los ojos.
Los tiene amoratados y no está muy seguro de que este enfocando la imagen, pero es un alivio.
-"Egusbggn"
-Tiene la nariz rota, ayúdame a incorporarle.
Es Osomatsu el que habla esta vez tomando su papel como hermano mayor, papel que solo toma en situaciones como esta.
-No creo que debamos hacer eso, lo mejor sería llamar a una ambulancia.
-Hazme caso.
Aunque no es algo por lo que presumir Osomatsu sabe lo que es romperse la nariz, su historia tiene que ver con una borrachera que no le dejaba andar recto y una farola que no vio en su camino.
Choromatsu le hace caso y le ayuda a incorporarle delicadamente y en cuando el Matsuno azul tiene la cabeza en una posición erguida la sangre que estaba reposando dentro de su nariz cae hacía abajo en cascada mientras tose un poco ahogado.
Los ojos le lloran y durante los segundos que ha estado inconsciente la boca se le ha quedado seca.
Todomatsu le pasa a su hermano mayor uno de esos pañuelos de tela tan monos que suele llevar en el bolsillo mientras llama a un médico.
-Hey, Karamatsu ¿Me escuchas?- El mayor de los Matsuno agita la mano frente a él sintiéndose aliviado de que su segundo siga el movimiento con los ojos, le pone en una mano el pañuelo y se la levanta en dirección a la cara. –Quiero que muevas la cabeza un poco hacía atrás y te la aprietes un poco con esto, Choromatsu, agárrale la espalda, creo que sigue mareado.
Ambos hermanos obedecen y mientras tanto Ichimatsu centra su atención en Jyushimatsu al cual parece que le va a dar un ataque.
-De verdad que lo siento muchísimo, de verdad, hermano, lo siento.
El amante de los gatos le pone una mano en el hombro mientras le dice que todo va bien y que Karamatsu esta tan vivo como siempre.
Mientras tanto el protagonista de este relato consigue enfocar al hermano que ha hecho un home run con su nariz.
-No te preocupes,"my little Jyushimats", tu hermano mayor sigue igual de vital que siempre.
Y aunque la voz suena gangosa, estrangulada y le tiemblan los labios al hablar esa frase les hace saber que Karamatsu va a estar bien.
-Quizá pueda aprovechar para hacerme unos arreglitos en la nariz.
Sus hermanos, incluso Ichimatsu, sueltan algunas risillas mal disimuladas ante la ocurrencia.
Cabe decir que el único cambio que nuestro chico consiguió fue unas gafas de sol nuevas un poco más anchas que le ayudaron a cubrir el par de moratones que le surcaban la cara.
Ni siquiera una nariz rota iba a acabar con su "Perfect Fashion".
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