NARRADOR OMNIPRESENTE

Los días fueron pasando, la relación entre los hermanos no era tan tensa en ese momento, mientras que el pequeño omega y su amigo seguían reuniéndose por las noches, jugaban un rato o solo el alfa dejaba que el menor hablara sobre su día, sus amigos o sus juguetes, desde un inicio tenía la necesidad de siempre estar atento que el, lamentaba el hecho de no poder estar más tiempo con el pues solo media hora o poco más duraba el menor despierto antes de caer dormido.

No tenía en cuenta que ya hacía unos días alguien siempre lo veis entrar y salir de aquel hogar humano, su emoción era tal al pensar en reunirse con ese pequeño que olvidaba revisar si alguien lo seguía, este día no fue de otra manera. Hace unos días describió entre las cosas de su vieja y guarda de su madre el collar de Omega cuando era joven, lo limpio con cuidado dejando ver que bajo toda esa cantidad de polvo se escondía una hermosa pieza con algunas incrustaciones con algunas gemas, su único pensamiento fue lo bien que se le vería al pequeño, y tomó una decisión, se lo regalaría. Se tomó el tiempo suficiente para arreglar cualquier detalle imperfecto, el collar al ser ajustable podría usarlo largo tiempo, era un hermoso regalo no se detuvo a pensar que pasaría con el hermano del pequeño omega solo pensó en darle ese detalle, tras asegurarse que no tuviera su aroma o cualquier otro lo escindió entre sus prendas y una vez tengo el momento de salir de cacería junto  su "clan" no perdió tiempo y fue dirección hacia el hogar del pequeño.

Empujo con su mano aquel ventanal testigo de sus reuniones, ingreso al estudio y después camino hasta llegar a los pasillos, últimamente la casa estaba más cálida por la llegada del invierno y pronto no podría ver al menor por un par de meses así que era un buen regalo para compensar ese tiempo. Camino son sigilo hasta llegar ala habitación del menor donde se pudo relajar y finalmente acercarse a aquella cama donde reposaba el Omega, ni siquiera tuvo que despertarlo pues este lo hizo solo, abrió sus ojos con pesadez y al ver que su amigo alfin había llegado termino por despertar y bajo de la cama para abrazar a su amigo con clara emoción reflejada en su sonrisa y mi mirar.

Ecuador: al fin llegaste!, hoy paso algo muy bueno!

Rumanía: Mmm?. Que paso para que estes tan emocionado? -dejo que el menor tomara su mano y lo llevó hasta su pequeño escritorio de donde tomó una carta y se la entregó.

Ecuador: papá mandó una carta!, dijo que ya encontró un buen lugar para vivir y abrir su panadería!

Rumanía: me alegro por ti pequeño.

Ecuador: estoy muy feliz!, podre enviarle dibujos a papá y a Venezuela, además dijo que cuando ya estén bien podremos irnos con ellos!

Rumanía: te marcharas?  -vio con cierta tristeza como el menor asentía rápidamente emocionado.

Ecuador: sip, los extraño mucho. también te extrañaré si nos vamos -corrio hasta unos estantes bajos de donde saco un par de hojas y se las entrego-  para que me recuerdes!, no te olvidarás de mi verdad?

Rumania: claro que no, quien podría olvidarse de ti?, también te tengo un regalo -de entre su ropa saco el collar- me dejas ponértelo?

Ecuador: es muy bonito!  -rápidamente llevo la manos a su cabello y lo levantó. El mayor se arrodillo y con cuidado colocó aquel collar de cuero y unas gemas, cubrió ala perfección del cuello del pequeño.

Rumanía: te queda bien pequeño, así tampoco me podrás olvidar.

Ecuador: nunca lo haré!, siempre usaré tu collar.

Rumanía: ahora es tuyo Ecuador.

Ecuador: entonces, nunca me quedare mi collar!, muchas gracias Rum.

El joven solo río ante aquel apodo, escuchó cada palabra que le decía el menor, memorizo cada expresión que podía ver con la tenue luz de las lámparas, cada movimiento que hacía cuando corría a mostrarle sus tareas o dibujos hechos a lo largo del día, no sabía el porqué pero algo le gritaba que no apartara su mirada de él y no lo hizo hasta que el menor cayó dormido en aquella alfombra enorme de la habitación, quedó dormido mientras dibujaba lo que le había dicho era un retrato de el, vio con ternura los rayones hechos al quedarse dormido. Con mucho cuidado tomo en brazos al menor y lo llevo ala cama, lo cubrió bien con la manta y finalmente decidió regresar a su hogar.

Antes de alejarse se giró viendo el hogar el sueño Omega, no lo vería por unos meses así que quería recordar bien el lugar. Finalmente se reunió con los que habían salido de su clan y fueron de regreso a sus hogares en las entrañas del frondoso bosque que se extendía por cientos si no es que miles de kilómetros, al llegar fue recibido por las miradas de sus padres, algo supo que ellos finalemnte se habían enterado de todo.

Decir que fue un castigo era poco, prácticamente fue torturado por sus padres por haber formado un lazo con un humano, su comida, al tratar de explicar que estaba seguro de ser destinados con ese Omega humano recibió más tortura además de miradas de repulsión de parte de su familia directa, hermanos. Lo hicieron decidir, entre ellos o el humano.. cual fuera su decisión terminarían con la vida de ese pequeño, decidió a su clan o eso ellos pensaron, le pudieron llevar el cuerpo del humano que visitaba y decorarlo frente todo el clan. Como nadie conocía la apariencia del omegas fue fácil engañarlos pero lamentablemente  no pudo regresar con su preciado humano, una de ala razones era el frío invierno que azotaba si no que también lo cargaron de responsabilidades pues apresar de ser el menor de sus hermanos según sus padres era el más apto para liderar el clan.

Los meses pesaron y finalmente llegó el final del invierno, lo primero que hizo al anochecer fue ir directo a su pequeño omega, pero al entrar por el ventanal no encontró nada, el estudio estaba vacío, su mente prefirió pensar que talves estaban remodelando, corrió hasta la habitación del Omega.. vacía, esa habitación tan cálida ahora estaba helada, completamente vacía y lo único que había era un papeles tirado en el suelo, lo tomo entre sus manos y vio que era un dibujo del humano, eran lo que aprecian ser los dos y unas palabras: "papi regreso, nos vamos a mudar. Te voy a extrañar mucho ♡xoxo ".   Sonrió enternecido por un par de palabras tachadas y el corazón pintado con crayones. El papel tenía algo de polvo así que ya habían pasado tiempo desde que se marcharon, salió de la casa vacía y regresó a sus deberes. Esperaba volver a ver a ese pequeño humano, escucharlo reír o emocionarse por sus dibujos, sus últimos momentos los apreciaría por mucho tiempo .

Los años pasaron, el joven alfa finalmente tomó su puesto como el líder de si clan, cambio un par de reglas como el hecho que todos los jóvenes tenían que cazar por su cuenta para poder ser vistos como parte del clan, tomó el liderazgo un poco antes de lo planeado pues sus padres habían sido cazados por unos licántropos y humanos, seria mentir si dijera  que dolió es perdida, no tenía un verdadero lazo con sus padres aparte de ser de la misma sangre y especie. Las cacería de humanos siguió de la misma forma pues aún que lo intentaron, no podían alimentarse solamente de animales. Ahora asiendo ya un hombre salía de cacería alrededor de dos a tres veces por mes, como últimamente había mucha gente en los pueblos y estos cada ves de hacían más grandes podría darse esa libertad de casar más veces, últimamente se sentía algo extraño, como si tuviera que buscar a alguien, aquel sentimiento no lo tuvo desde hacía muchos años atrás, tratando de ignorar ese sentimiento fijo su mirada a alguien caminando por sendero que conectava pueblos, se alistó para lanzarse. Finalmente tomó vuelo y arremetió encontrar del humano que forma idiota caminaba por un bosque completamente solo. Lo empujo y una ves vestido en el suelo lo presiono de espaldas para que este no se pudiera mover, solo escucho sus gritos y sus inútiles intentos de liberarse, cuando abrió su boca listo para desgarrar su cuello, vio algo que lo hizo paralizarse, su cuello estaba cubierto por un collar que nunca pensó volver aver, ella el collar que le había regalado a aquel pequeño Omega humano, lo soltó de su agarre y retrocedió, cuando el humano se giró asustado allí lo vio, aquel pequeño ya había crecido y a diferencia de cuando era un niño ahora lo veía con terror.  Solo atino a decir su nombre en un susurro que el humano si logró escuchar, antes que pudiera hablar tomo vuelo y se alejó del lugar lo más rápido que pudo.

Debía estar soñando, no podía ser verdad.. o si?

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1512 palabras.

Que la pasen bien en las fiestas;3

Bye~