-¡El verdadero hijo del conde Namikaze hará su aparición! - 

A menos de un día que se confirmo el debut de el "verdadero heredero", la noticia se extendió a través de todo Londres, incluso los del barrio bajo supieron el acontecimiento. 

Tsunade con una sonrisa dibujada en el rostro, dejo el periódico caer en el piso - Bien, nuestro muchacho lo esta haciendo muy bien - 

Una joven de cabello negro, se agacho para recoger el periódico y sus ojos se iluminaron al leer la noticia - ¿Esta hablando del hermano Naruto? - 

Tsunade asintió con la cabeza y le dio una calada a su cigarro - Así es, nuestro muchacho se esta volviendo famoso - 

-¿Por que no hay ninguna fotografía de él? - La joven paso varias paginas, pero en ninguna tenia la foto de Naruto - ¿Cómo es que se esta volviendo famoso? - 

-A los nobles les gusta presumir, supongo que en el día del debut va a exponer a nuestro muchacho como si de un animal exótico se tratara - Tsunade hizo una mueca al imaginar a Minato pavoneándose de un lado a otro - No se si sentir lastima por nuestro muchacho - 

-¿Lastima? ¿Por que? Ese idiota debe de estar disfrutando de la buena vida - 

Gardenia una joven de cabello castaño y ojos verdes lanzo tal comentario y le arrebato el periódico a la joven azabache. 

-¡Lo estaba leyendo! - 

-¡Ni siquiera sabes leer! - 

Las dos se empezaron a pelear por un trozo de papel. 

Tsunade se cruzo de brazos y miro afuera de la ventana - Tal sacrificio debe tener su premio - susurro. 

-El verdadero heredero de los Namikazes ¿Qué apariencia tendrá? - 

-¡Debe ser muy guapo! -

-O alguien muy feo - 

Las señoritas se rieron ante tal comentario a excepción de una. 

Angie Wright dejo su taza con un movimiento elegante y se limpio las comisuras de los labios con un pañuelo - Señoritas, no debemos hablar mal de tal persona - 

Las jóvenes se pararon de reír y bajaron las cabezas algo avergonzadas. 

Angie lanzo un suspiro y enderezo la espalda - Minato Namikaze es un lord muy importante, si alguien nos escucha hablar mal de su hijo, nos meteremos en problemas - 

"Nos meteremos..." las damas repitieron esas palabras en su mente. Angie se agrego al murmullo a pesar de que ni hablo, como su nombre lo decía es un ángel. 

Angie Writting es una dama muy hermosa, cabellos dorados y ojos azules como el cielo, su tono de piel blanca la hacia asemejar a una muñeca de porcelana y su madurez y amabilidad hizo que se ganara el titulo de "ángel de Londres" 

Pero este ángel se comprometió con el mismo demonio; Sasuke Uchiha. 

-Bueno, yo creo que debe ser guapo ¿Han visto la apariencia de lord Namikaze? - 

Las señoritas suspiraron y esta vez controlaron su lenguaje. 

-Vaya me preguntaba porque había tanto canto de avecillas, nunca pensé que se trataba de mi prometida y sus amigas - 

Angie al escuchar la voz de su prometido, su rostro se puso rojo y bajo la cabeza apretando el borde de su vestido. 

Las señoritas hicieron una mueca. 

La fiesta de té se arruino. 

Sasuke sonrió y se acerco a su prometida con pasos lentos - ¿Las estoy molestando? - 

-No para nada - Angie se acomodo un mechón de pelo y miro al Uchiha -¿Supiste sobre la noticia? - 

¿Qué si lo sabia? Claro que si, en toda la ciudad se estaba hablando sobre el misterioso heredero ¿Qué si era guapo? ¿Qué si se parecía a su padre o a su madre? ¿Por que Minato lo busco después de tanto tiempo? Sasuke estaba algo harto, aunque una parte de él estaba curioso de saber la apariencia de tal persona. 

-Si, pero mejor hablemos de otro tema ¿Estas disfrutando tu fiesta de té? - 

Angie miro de reojo a sus amigas y asintió con la cabeza. 

-Me alegra, espero que mi pequeño regalo te haga más feliz - Sasuke metió una mano en el bolsillo de su pantalón y saco un pequeño estuche de terciopelo. 

Angie se tapo la boca con una mano y miro emocionada la pequeña cajita. 

-Feliz cumpleaños mi hermosa ángel - Sasuke abrio el estuche y mostro los dos hermosos pendientes de diamantes. 

-¡Por dios! - 

-¡Son muy hermosos! - 

-¡Esos pendientes están muy caros! -

Al escuchar los comentarios de sus amigas se animo a tomar la cajita y sus ojos azules brillaron a causa del reflejo - ¡Son muy bellos! No debiste gastar tu dinero de esta forma - 

-¿Qué dices? Mi prometida se merece esto y más - Sasuke tomo la mano de su prometida y le dio un beso en el dorso - Después de todo estas con el mejor partido - 

Angie sonrió, se sentía la mujer más afortunada del mundo. 

Naruto recibió un golpe en la mejilla en cuanto dejo la taza sobre la mesa. Una estridente voz retumbo en toda la sala.

-¡Bastardo! ¡¿Piensas que puedes humillarme?! - 

El golpe que recibió hizo que su cabeza girara hacia un lado. 

"Este idiota ¿Cómo es que tiene las agallas de golpearme?" pensó mientras luchaba contra las ganas de matarlo. 

-¡¿Has visto lo que pusieron en el periódico?! ¡El verdadero heredero! Ja ¡Más bien eres el verdadero idiota! ¿Solo porque te pareces a padre puedes ocupar mi lugar? ¿Solo porque los estúpidos profesores te halagan puedes encargarte de la mansión? ¡¿Quien te crees que eres?! -

Naruto lanzo un suspiro y se masajeo la mejilla. 

-¡¿Crees que te tengo miedo?! Mi madre se va a encargar de destruirte - 

"¿Crees que no lo ha intentado?" pensó Naruto. 

Durante esta semana ha estado cerca de la muerte. ¿Cómo es que de repente aparecieron alacranes en su cama? ¿O ha bebido un té envenenado? ¿O han aparecido asesinos en su recamara? Todo giraba en la madre de este bastardo. 

Después de eso, su padre lo cambio de habitación y de personal de confianza. 

-Mi señor, por favor no pelee contra el joven Namikaze - 

El nuevo mayordomo llamado Iruka se acerco a Caleb y hablo cerca de su oído - No se meta en problemas por favor - 

-¿Ah? ¡¿Quién demonios eres para darme ordenes?! - 

Naruto se sintió cansado y se dio la vuelta para salir de la sala. 

-¡Oye! ¡¿A donde crees que vas?! - 

El rubio se detuvo en la puerta y miro sobre su hombro - Caleb actúas como una mujer peleando con su marido - al decir esas palabras, continuo su camino. 

-¡Maldito bastardo! - 

El rostro de Caleb quedo rojo de la vergüenza "Esto no va a quedar así, me lo vas a pagar" de repente una idea se le vino en la mente, en el día del debut haría que pasara una enorme humillación.