-¿Qué? ¿Te sientes orgulloso de que el duque Uchiha te va a dar clases? - 

-¿Te crees suficiente solo porque tu padre es Minato Namikaze? No importa tus modales o la ropa cara que poseas, una rata siempre será una rata - 

Caleb y su amigo John, se sientan frente a él, cada uno cruzado de piernas y con una taza de té en las manos. Sus espadas y caretas cuelgan detrás, en la pared, acomodados a la perfección. Naruto se fija en el amigo de Caleb, a pesar de ser joven ya tenia mucha barba para el gusto de alguien de su edad y Caleb, por otro lado, parece que le salieron más pecas. 

Había encontrado un libro interesante en la biblioteca y cuando estaba a punto de leerlo, llegan estos dos sabandijas a interrumpir su paz. 

Los dos tomaban té y cuando terminaban, sacaban el tema del duque Uchiha. 

-Es curioso, se que al duque Uchiha le gustan las damas de cabellos rubios ¿Será que por eso tomo interés en ti? - dijo John, mirando fijamente el rostro del rubio - Puede que seas de su gusto - 

-No lo había pensado - dijo Caleb, tomándose enserio las palabras de su amigo. 

-Si que tienes demasiadas agallas para hablar del duque Uchiha de esa forma, si alguien te llegara escuchar ¿No te meterías en problemas? - 

John sonrió - Digamos que me daría igual, todos conocen la clase de persona que es el duque Uchiha. Tu maestro no hizo cosas buenas para merecer respeto y tu lo sabes muy bien - 

Naruto se cruza de piernas y lanza un suspiro - Tienes razón, a pesar de que no me cae bien, puedo decirle lo que opinas de él y veremos si a él le da igual - 

-Adelante, tienes derecho de decirle - 

El rubio se siente molesto por el tono de burla que usa John. 

Caleb sonríe al ver que el bastardo se queda sin palabras. 

-Bien, joven Namikaze ¿No tiene cosas importantes quehacer? - 

Si fuera el Naruto del pasado, le hubiera roto la cara a este tipo, pero se aguanto para no darle la razón a Caleb y a su madre. 

-Es lo mismo que me pregunto, yo estaba aquí primero - 

John hizo como si le diera un sorbo a su té a pesar de ya no tener nada y dijo - Caleb estaba aquí primero y llegaste tu a quitarle sus cosas como una rata ¿No crees que es justo que te retires y le dejes su lugar? - 

El rubio miro a Caleb, este lo observaba de manera desafiante y con el pecho fuera. 

-Me pregunto quien es la verdadera rata ¿Has visto al duque Namikaze y me has visto a mi? Caleb que no se parece a su madre ni al duque Namikaze, vive aquí dándose los lujos que no se merece - 

-¡¿Qué dijiste bastardo?! - Caleb se levanta del sillón con los puños apretados. 

-Caleb, cálmate - 

Naruto sonrió satisfecho de ver la reacción de Caleb - Pero tiene razón el duque John, antes de quitarle todo a mi querido hermano, lo dejaré disfrutar de la comodidad del sillón, puede que sea la última vez que disfrute de estos lujos - se levanto del sillón dejando a un Caleb rojo de la ira.

**********
Naruto se prepara como cualquier día normal pero con una cara de enojo que ningún sirviente, más allá de Iruka, desea acercarse a él y encontrarse con su típica lengua venenosa. En el fondo se los agradece ya que prefiere desquitarse con el duque Uchiha y que se largue por su propia voluntad.

Desayuna con tranquilidad y se lee el periódico.

Va caminando por los pasillos y a veces se pasa por la biblioteca para leer algunos párrafos de los libros, a pesar de la concentración no puede evitar que sus ojos se dirijan en el reloj de la pared.

Falta poco para que Sasuke entre por esa puerta, abra su boca y arruine el poco humor que tiene. Obliga a una de las sirvientas que vaya en busca de Iruka, quien aparece en cuestión de segundos como si fuera un fantasma. Naruto chasquea la lengua, dirigiéndose a las escaleras mientras habla, sin dignarse a verlo en la cara.

-Si viene el duque Uchiha, llévalo al estudio. Ahí estaré -

-Por supuesto, joven amo -

El estudio es una de las partes favoritas de la casa ya que ahí es el lugar más silencioso, no se escucha ningún ruido de afuera y hay libros y pinturas que puede apreciar en silencio.

Minutos después escucha que tocan a la puerta e Iruka se asoma.

-Joven Amo - Le llama. Naruto lo mira y se pone de pie - Lord Uchiha está aquí -

-Dejalo pasar -

Iruka asiente con la cabeza para luego desaparecer por la puerta. Segundos después el duque Uchiha aparece con su típica sonrisa.

-Muchas gracias, Iruka - Sasuke le agradece a su mayordomo para luego cerrar la puerta tras de si.

Ahí se quedan, en silencio, uno frente a otro. Mientras Sasuke se dedica a observar el contenido de la habitación, Naruto se pone a analizarlo a él. Lleva un abrigo de color negro que le cubre lo suficiente como para llegar hasta sus rodillas, con unos guantes negros y un pequeño maletín colgando en el brazo. En seguida, Sasuke empieza a quitarse su abrigo y dejarlo en la perchera como si nada.

Naruto lanza un suspiro.

-Bonjour, Naruto - le saluda el Uchiha, sin borrar su sonrisa y coloca el maletín sobre una silla - ¿Cómo estás? -

-Esta habitación es anti ruido, no nos pueden escuchar -

-Oh, vaya, es el lugar perfecto para hacer todo tipo de cosas que no sea estudiar - y ahí esta su tono juguetón - ¿Quieres empezar? Me quito yo primero la ropa o ¿Tú? -

-Vete a la mierda -

-¿Te han dicho que tienes unos modales encantadores? Siento tanta envidia -

-No me interesa -

Sasuke deja escapar una risilla mirando a Naruto directo a los ojos.

-Encantador e inteligente. Ahora entiendo por que captaste la atención de la mitad de las mujeres - Sasuke se sienta en otra silla - même si vous n'etes pas trés intelligent en langues -