La búsqueda continuaba, Ben, Davys y Dan, recorrían todo el pueblo tratando de encontrar al culpable, tenían tres sospechosos así que primero. Fueron por Thomas, un chico bajito y escuálido de piel blanca y lentes gruesos, el cual salió al instante al escuchar que llamaban a la puerta,  Thomas no había asistido a clases porque su abuelo había salido del hospital por un pre infarto y el se había quedado a cuidarlo mientras su madre volvía del trabajo, les mostró el permiso que habían pedido al director, así que fue descartado al instante.

—Es lógico que alguien como el no sea el imitador, se ve que no es capaz de levantar la tapa del baño al orinar, hahaha, es un debilucho.—expresa Dan de manera burlona mientras se fuma un cigarrillo.

—No todos son unos mastodontes como tú... murmura Davys enojado.

—¿Que dijiste mocoso?

—vamos, nos faltan dos más, no perdamos el tiempo.—expresa Ben cansado.

—Es el turno de Jarol, veamos si este inadaptado es el tipo que buscamos ya me estoy hartando de ustedes dos.—Dan se adelanta mientras arroja la colilla de cigarro en la cabeza de Ben.

—¡Ay ese mal nacido! —Ben quiere írsele enzima, pero Davys lo detiene.

—Ya déjalo, terminemos con esto, tu también quieres qué esto acabe y proteger a Lisa de ese loco.

—Me está colmando la paciencia, no confío en él, es un enfermo, cree que Lisa es de su propiedad.—insiste Ben indignado.

—Tu también crees eso.—Davys lo deja atrás y sigue a Dan.

—¿Que? No es cierto, yo no...

La verdad es que los tres estaban enamorados de Lisa, quizás a la misma magnitud, con la misma fuerza he intensidad, Dan sentía que tenía el derecho de reclamarla como suya , pues de alguna manera era el único que compartía la cama con ella, era su confidente, su amigo y la aceptaba tal y como era, sabia todo sobre su doble personalidad, su extraña obsesión con la bestia y también conocía su maldad y aún así la amaba.

Ben por su parte sentía que era el único que la quería tal como era, amaba su belleza, su inteligencia y su aparente pureza, estaba enamorado de su otra cara, la parte moral he íntegra que Lisa aparentaba, pero aunque no la conocía del todo, sus sentimientos por ella eran verdaderos y sinceros, no dejaría que nadie la lastimara, incluso se arriesgaría por ella.

Davys sin embargo, no demostraba sus sentimientos, era el único que había llegado hasta el fondo , hasta el ser fangoso y oscuro de la chica demonio, pero no se atrevía a declararle su amor, pues sabía que amar a un ser maligno era imperdonable, riesgoso y peligroso, se sentía usado y no confiaba del todo en ella, además competir contra esos dos era algo impensable, sentía que Dan y Ben lo superaban en todo.

—Como si ella fuese a elegirme...—Davys sentía un gran dolor en su corazón, el amor que sentía lo estaba matando, el dolor de sentir que no era correspondido.

Los golpes a la puerta llamaron la atención de la madre de Jarol, él estaba cubierto con una manta y tenía todo tipo de golosinas a su alcance, los videojuegos que tenia eran violentos y cada que le disparaba a uno de los personajes del juego gritaba el nombre de sus acosadores, algunos conocidos de Ben.
—Si, ¿En que puedo ayudarlos?

—Buenas tardes señora, soy el oficial Dan, venimos hacerle algunas preguntas sobre su hijo, estos chicos son compañeros de su escuela y no se si ya esté entera del indigente de esta mañana.

—No, ¿Cuál incidente? —pregunta la señora Sullivan con preocupación.

Una vez que le contaron todo, la madre de Jarol deja que Dan y los chicos entren al sótano para que hablen con él y así pueda ayudarlos.

—Mi hijo no es el culpable de esto, créanme, si bien lo han molestado en la escuela, él no es del tipo de chico que se vengaría de alguien de esa forma tan retorcida, lo único que hace es gritar los nombres de quienes lo molestan es todo lo que hace, créanme mi Jarol no es un desquiciado.

—Eso esperamos señora, lo que esté alumno hizo no es solo acoso si no un delito, prácticamente amenazo de muerte a esta alumna y hay muchos testigos de esto. —expresa Dan con seriedad.

—Lo se, pero mi hijo es inocente.—exclama la señora Sullivan con certeza.

Dan, Ben y Davys se dirigen al sótano de la casa donde se encuentra Jarol, este seguía jugando videojuegos cuando de repente Ben le desconectó su pc con violencia.

—¡pero que demonios! —Jarol se asusta al verlos en su cuarto.

Dan agarra a Jarol de la playera y lo azota contra la cama mientras Davys acomoda todas las cosas que sus compañeros furiosos tiran por doquier.

—Dejen de tirar todo... su madre podría escucharnos.—les susurra Davys angustiado al ver cómo todo parecía una escena de películas policiacas.

—¿Que está pasando aquí? ¿Que hacen en mi guarida? —exclama Jarol con el corazón acelerado.

—¡Que guarida ni que nada! Tú madre nos dejó entrar a esta pocilga, más te vale guardar silencio.—
Le dice Ben enardecido al escuchar cómo Jarol le grita a su mamá que lo ayude pero Dan le tapa la boca con rapidez y lo amenaza.

—Cierra la maldita boca o te aplasto las bolas para que grites enserie marica.—Dan lo enmudeció con esas palabras mientras que Davys se llenaba de estrés al pensar en que si madre podría llegar en cualquier momento.

—Eso es, copera y te dejarán en paz, lo prometo.—le dice Davys con una sonrisa desesperada.

—Ay, ya empezó a llorar.—Dan se da la vuelta mientras Jarol llora como un bebé y añadió.—Vamos amigo, seguramente te han golpeado más fuerte, no me digas que también lloraste como un niño mientras te daban una paliza ¿no entiendes que eso alienta más a los abusadores? Mientras más lloras más satisfactorio es.

—¿Que quieren de mi? ¿Que fue lo que hice? Acaso fue por la flor que le dejé a Lisa en su casillero? ¿Cuantas veces me van a golpear por eso?

—¿Que le dejaste que? —preguntan los tres al mismo tiempo.

—La flor...—dice Jarol mientras los mocos le escurren por la boca y se los come inconscientemente.

Dan y Ben se llenan de asco y sus ganas de vomitar se hacen presentes.

—Maldición eres un asco con patas.

—Lo que queremos saber es si tienes algo que ver con lo que sucedió esta mañana, sospechamos que tú o Jeremy Torner fueron quienes pusieron la cabeza de ciervo y el mensaje en la butaca de Lisa. —le dice Davys mientras lo mira fijamente.

—¿Que? ¡Yo no tengo nada que ver! —expresa Jarol de inmediato.

—¿Por que faltaste a la escuela?—le pregunta Ben con rudeza.

—Porque ya estaba arto de recibir palizas por la flor que les mencioné, nunca espere que Lisa me agradeciera o notara mi existencia, simplemente le quise declarar mis sentimientos, eso es todo.

—¿Y quien te golpeaba por eso? ¿Tanto miedo les tenias que decidiste no ir a la escuela?—le pregunta Dan sin una gota de paciencia.

—¡Si! Se ve que a ti nunca te acosaron, estar enamorado de Lisa puede ser peligroso, si no pregúntale a Davys, que por sólo ignorarla lo mandaron al hospital.

Davys desvía la mirada hacia otro lado y Jarol continúa con su defensa.

—Nadie se hubiera enterado si no fuera por ese estúpido de Jeremy, estoy seguro de que el les fue con el chisme a esos fanáticos Neandertales , está obsesionado con Lisa desde siempre, incluso vende fotografías suyas a sus enamorados.

—Ese imbécil...

—¿Que tipo de fotos? —le pregunta Dan furioso.

—bueno...fotos de ella que le toma sin su permiso.

—¿Fotos cómo estás? —Ben saca las fotos de uno de sus cajones y se las avienta en la cara.

Eran fotos de Lisa en la cafetería y también en la clase de gimnasia, donde salían sus muslos y esos shorts que la hacían lucir su cuerpo esbelto y llamativo.

Davys miro con enojo a Jarol mientras esté avergonzado veía cómo Ben las rompía en su cara.

—Maldito parasitó de mierda ¿Que más sabes de esa basura?

—¡Solo eso! ¡Lo juro! — perdón por las fotos no lo volveré hacer más.

—¡Claro que no lo harás! —Dan sacude a Jarol con fuerza y este dice algo que los deja estupefactos.

—Jermy podría ser la persona que buscan, no solo está obsesionado con Lisa, si no que solía ir a su casa a espiarla, incluso se atrevió a declararle su amor hace unos días, pero obviamente Lisa lo rechazó y Jeremy se llenó de rabia y la amenazo diciéndole que se arrepentiría, probablemente sea el sospechoso que están buscando.

—¿Donde encontramos a ese bastardo? —le pregunta Ben lleno de rabia.

—Bueno, pues.. el vive cerca de aquí.

—Tu nos vas a llevar con él. —Dan agarra a Jarol de la ropa y lo obliga a acompañarlos.

Le aviso a su madre que saldría y está lo dejo ir sin reclamos, se dirigían a la casa de Jeremi Torner el posible culpable de la amenaza contra Lisa.