Ruta hacia el infierno
Me pregunto que piensan las personas de mí, hasta este punto de mi historia ¿Les parezco la villana? ¿Cuantos me habrán sentado en el banquillo de los acusados? Me llena de curiosidad saber quienes de ustedes han sido mis jueces, mis preciados espectadores, ya deberían saber que soy una demente, que cada paso que doy me conduce a mi inevitable destino y si piensan que hablo del infierno están muy equivocados, esa ruta ya la transité y conozco cada fase de ese asqueroso lugar, tu infierno es el purgatorio para mí, para las personas como yo, el morir y no volver a sentir y pensar nada, es el verdadero paraíso.
Espero que mi madre en la otra vida tenga prohibido concebir hijos, que cuando vuelva a nacer su vientre esté marchito y en cuanto a mi...yo solo quiero regresar el tiempo y que la niña de cinco años pueda tener un cumpleaños feliz y una vida con menos sangre en sus manos, si alguien divino puede escuchar a un ser como yo... por favor, deja que yo cargue con toda la culpa, pero a ella déjala ser feliz, esa niña solo está asustada.
La lluvia caía con tanta fuerza que en las calles corrían riachuelos pintados ligeramente de carmín, Lisa había subido el cuerpo de su madre a su camioneta roja, tenía pensado tirar el cuerpo en el bosque, ella había sido un estorbo para todo lo que estaba pasando, Dan la había amenazado pidiéndole que se fugara con él a cambio de dejar en paz a la bestia, debía actuar rápido antes de que su estrella creyera que podía manipular al sol.
—Me estás retrasando mamá, ni siquiera muerta dejas de causarme problemas, mis hijos corren peligro y yo estoy aquí perdiendo el tiempo contigo... oh, Dan, más te vale no tocar a mis perros, lo digo por tu propio bien, ya me he quitado la correa y te voy a despedazar si no te comportas.
Lisa por fin había llegado al bosque, terminó tirando el cuerpo de su madre por un acantilado.
—Igual no podías caer más bajo, hasta nunca mamá.
En ese mismo instante el teléfono de Lisa sonó, era Ben, quien llamaba con insistencia.
—Maldita sea ¿qué demonios quieres ?
—¿Lisa? —Ben se quedo callado por un momento, no sabía que decir ¿Era su Lisa la que le había contestado? Se pensaba extrañado.
—Oye idiota, no tengo tiempo para ti, no vuelvas a llamarme, ya no tengo porque fingir, así que piérdete.
—Lisa...¿Estás bien? ¿Porque actúas de esa forma? Si te hice algo perdóname.—le dijo ven con preocupación y tristeza.
—No estoy actuando, esta soy yo ¿tu pureza no puede conmigo? Hahahaha, pequeño Ben, aléjate si no te quieres corromper, estoy apunto de hacer cosas muy malas así que ocúltate en alguna iglesia o enciérrate bien en tu casa, vas a escuchar cosas muy feas de mí y debes creerlas.
Lisa colgó la llamada dejando a Ben desconcertado.
—¿Ahora me crees? ¿Era ella verdad? Esta loca...ella y ese policía son los verdaderos asesinos de field.
Emily apareció detrás de él, había escuchado la llamada, iba dispuesta a convencer a Ben de que permanecer al lado de Lisa era un error, estaba aterrada y sabía que si Dan se enteraba de que seguía insistiendo en desenmascararlos la mataría de la peor manera, pero amaba mucho a Ben y no quería que lo lastimaran.
—Emily ¿Que haces aquí? Ya déjame en paz, no quiero escucharte.—le dijo Ben con tristeza.
—Por favor escúchame, te lo ruego...solo por esta vez.—le pidió Emily entre lágrimas.
—!Ya te dije que no¡ vete de aquí, he tratado de no ser grosero contigo, pero hoy no estoy de humor para soportar tus teorías paranoicas sobre Lisa, por eso debe estar actuando de esa forma...debe estar cansada de las personas que quieren lastimarla.
—Te amo... —le confesó Emily casi temblando.
—Ya deja eso, yo no siento lo mismo por ti, ya veo de que va todo, entiende que jamás dejare de amar a Lisa.
—Lose... pero aún así tengo que pedirte que me escuches...después dejare que tomes tu decisión.
—¿Como puedes ser tan insistente y terca? Emily no quiero lastimarte, yo no soy el chico que tú esperas, nunca podré corresponderte, ella llego primero.
—No quiero que te haga daño... por favor escucha este audio...¿Sabes porque estuvimos faltando los últimos días? Por miedo a ella, la villana de esta historia siempre fue ella, tú no eres el único a quien ha manipulado, el policía la está encubriendo, yo vi con mis propios ojos como sus perros asesinaron a dos hombres mientras ella ignoraba sus gritos.
—¿Otra vez con esa ridícula historia? —le pregunto Ben alzándole la voz, pero Emily lo callo en el momento donde le dio click al audio.
Bessie había grabado parte de la conversación que habían tenido con Dan aquella vez en el bosque, cada amenaza, cada palabra donde Lisa estaba involucrada, pero para su desgracia no había suficientes pruebas en contra de ella, solo Dan salía revelando su verdadero yo.
—!Ese maldito de Dan¡ !Sabia que era el culpable de todo¡ !Estoy seguro que él es la bestia¡
—!Ella también es una asesina¡ !no necesita una máscara para ser un monstruo¡ él está encubriéndola ¿porque te cuesta tanto trabajo créeme?
—Tengo que hacer algo, no puedo dejar que pase más tiempo, ese tipo es un peligro para todos aquí, para ellos...(Ben se refiere a Davys y a Lisa)
—Se que este audio no exhibe a Lisa pero ella es la más peligrosa de los dos, no voy a dejar que te le acerques.
—¿Que haces? —Emily le puso unas esposas a Ben y quedaron unidos por ellas.
—Iré a donde tú vayas y si es que quieres comprobar con tus propios ojos que lo que te digo es verdad, adelante, pero yo no me despego de ti, no dejaré que te lastimen.
—Eres incorregible.—exclamó Ben mirándola a los ojos.
—Y tú un tonto.
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