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Capítulo 60: Desenlace

"Sasuke..." es lo primero que viene a su mente incluso antes de tener una imagen de lo que está sucediendo, el sonido del chidori es reconocible a pesar de no tener sus sentidos aún al máximo. Un fuerte movimiento y una gran ráfaga de aire parecen alejar el sonido de ella, pero a la vez le permiten notar otras voces con lo que entiende que esta probablemente sea la última pelea en la que vaya a participar "Sino hubiera regresado no aguantaría más de un minuto en este lugar"

Lentamente abre los ojos y logra tener un panorama bastante preciso de la situación nada grata en la que se encuentra. Su zorro, sobre el cual estaba parada, había dado un gran salto para evitar un grupo de senbons formados de electricidad provenientes del menor de los Uchiha que ya está nuevamente encaminado a atacarla luego de no haber logrado acertar su ataque anterior.

Con cierto fastidio desenvaina sus espadas y se impulsa para interceptar a Sasuke en el aire deteniéndose momentáneamente en el vacío cuando sus armas chocan con la de él -No pensé que estuvieras tan ansioso por morir- se mofa al tener al joven frente a ella -Sabes que los genjutsus hace mucho que no funcionan conmigo- añade divertida al notar un intento de hacerla caer en uno cuando cruzó miradas con él -No es sólo por los ojos de tu hermano y lo sabes- agrega mientras ambos caen rápidamente al desvanecerse el impulso de sus saltos. Empujándose mutuamente con sus espadas ambos shinobi regresan hacia sus compañeros de combate, Degei una serpiente de dos cabezas y Orion un gran zorro de dos colas.

-Tan callado como siempre- murmura la pelirroja observando a su adversario, aún un poco desubicada luego del pequeño salto temporal del que acababa de regresar.

-Regresaste... ¿Me encargo de Degei?- pregunta zorro tranquilo y ahora bastante confiado.

-Si, es mejor ir limpiando el lugar lo más rápido posible- responde asintiendo con la cabeza mientras desvía la mirada un segundo para asegurarse que las cosas estén ocurriendo como deberían y que no haya algún extraño suceso como una alianza de último momento "Naruto está peleando contra Pein, eso no me preocupa, pero Madara y Orochimaru..." reflexiona al ver que ambos hombres se encuentran frente a frente uno sobre Grafvitnir un imponente dragón rojo y el otro sobre su antigua invocación que fue reanimada con las habilidades de Kabuto: Manda.

-Me estás subestimando- exclama Sasuke al notar que la kunoichi no está completamente centrada en su batalla contra él, lanzándose nuevamente al ataque.

-Bueno, yo no soy la que tiene una invocación de segunda- ríe provocando que el muchacho se enfade más de lo que ya parecía estar "Estamos demasiado cerca de Konoha... esto tiene que terminar rápido antes que vengan a tratar de hacer algo y mueran inútilmente" se dice a si misma mirando fijamente a Sasuke a la vez que sus manos empiezan a emitir unas leves llamas de un intenso color rojo.

Sujetando fuertemente ambas espadas las lanza en dirección a Sasuke, el joven las evita en el aire, pero es golpeado por una gran bola de fuego emitida desde las manos de la kunoichi a la vez que las espadas terminan de caer y se clavan fuertemente contra el suelo. El cuerpo del muchacho cae carbonizado, pero la pelirroja no tiene la atención puesta en eso, sino parece estar buscando algo más "Esas son las malas costumbres de Orochimaru..." piensa con una sonrisa en el rostro al momento en que cae a tierra a unos metros de sus espadas "Esto va a durar demasiado si no logro mantenerlo en el campo de batalla permanentemente"

Para esos momentos su zorro se había lazado ya sobre Degei. La serpiente tiene una sola ventaja sobre el animal rojizo y esa es que puede utilizar sus dos cabezas además de su cola para atacar, mientras Orion no tiene sus colas tan hábiles para poder usarlas como miembros extras altamente eficientes en el ataque. Aunque a pesar de la ventaja numérica de miembros útiles el zorro es más grande que la serpiente y bastante más ágil que ésta por lo que logra evitar que lo enrosque o muerda mientras busca un buen ángulo para atacar procurando no aplastar a su dueña que se encuentra cerca de sus patas.

-Sasuke- llama tranquila caminando hacia sus espadas para recogerlas -Esta va a ser la última pelea que alguno de nosotros seis tenga, así que no me parece adecuado que juegues a ocultarte como Orochimaru... tú tienes otras habilidades más interesantes que me agradaría probar- continúa recuperando sus espadas -¿Qué es mejor?- pregunta aún sin rastros del Uchiha sonriendo mientras observa su reflejo en la hoja de una de sus armas -¿Una espada recta? ¿Dos espadas curvas? ¿O simplemente la habilidad de quien las empuña?- agrega dando un salto al sentir a su contrincante aparecer muy cerca de ella con su espada en las manos.

Mientras se desarrolla lo que parece será un combate de espadas acompañado en menor medida por técnicas ninjas y una serpiente que no aparenta tener muchas oportunidades contra el zorro, a no mucha distancia dentro del mismo claro una pelea bastante más confusa y explosiva se está llevando a cabo. Los oponentes parecen ser más de dos, en realidad se pueden contar doce.

Naruto se enfrenta contra los seis clones de Pein, el combate se ha divido en varias peleas entre los Kage bushing y los cuerpos del líder de Akatsuki. Una apariencia etérea envuelve a cada uno de los clones de Naruto, la energía que lo cubre tiene la apariencia de un zorro de cuatro colas y es de un color rojizo, aunque el cuerpo del ninja es completamente visible y deja apreciar lo acentuados que están los rasgos de su rostro, en especial sus ojos que son de color rojo con el iris alargado como si se tratase de los ojos de un animal.

Los intentos de Gamabunta por ayudar a Naruto se ven entorpecidos por la excesiva cantidad de movimiento, la mitad proveniente del muchacho al que desea ayudar y que por la acción no es capaz de distinguir si es que lastimaría al original en lugar de a un clon. En un instante aparece un Naruto extra en el combate impulsando a otro hacia el aire antes de detener el ataque de uno de los cuerpos de Pein. Los seis clones que se encontraban peleando generan en su mano derecha un rasengan elemental de viento combinado con el chakra que los cubre lo que le da una tonalidad roja a la esfera, al tener el jutsu listo tratan de impactarlo contra los cuerpos de Pein, éste logra hacer que sus cuerpos no reciban directamente el ataque y encuentren la mejor manera de esquivarlo al poder apreciar por completo el campo de batalla. Los rasengan chocan contra el suelo a la vez que se deshacen por el daño que reciben por el mismo ataque.

Con una densa nube de polvo y tierra que se levanta hacia el cielo Naruto trata de impulsarse hacia Gamabunta, pero es interceptado por una especie de lengua que se enrosca en su pierna y a pesar de dañarse por el chakra que lo cubre logra jalarlo hacia el suelo. En la tierra los cuerpos de Pein, algunos de ellos severamente dañados a pesar de no haber recibido el ataque de forma directa, se encuentran acompañados por seis invocaciones, una de ellas es quien sostiene a Naruto.

En el momento en que Pein planeaba reanudar el ataque una ola de aceite golpea a parte de los atacantes empapándolos y haciendo que caigan al suelo por la potencia con que fueron golpeados, Naruto aprovecha y utiliza una técnica de fuego, no necesita nada demasiado grande, pero con sólo una chispa el aceite se enciende cubriendo la zona y sacándolo del apuro por el momento. Regresando sobre Gamabunta controla el chakra que lo rodea para impedir que este comience a dañar al gran anfibio a la vez que descansa un poco, usar el rasengan a ese nivel, aunque sea generado por los clones e impida que dañe su cuerpo directamente no soluciona el problema de la cantidad de chakra que utiliza que sumado a tener que controlar el chakra del Kyuubi es una presión muy grande.

En tierra las llamas son contenidas por una gran corriente de viento que rodea a los que deberían de estar quemándose en esos momentos. Cuando las llamas terminan de consumir los cuerpos de Pein regresan la mirada hacia el portador del Kyuubi y nuevamente el ataque comienza.

Madara y Orochimaru se han mantenido observando a los otros cuatro, tranquilos sin apresurar demasiado el paso de las cosas. Con las otras dos batallas ya moviéndose a buen ritmo y los participantes relativamente centrados sólo en sus combates ambos ninjas cruzan miradas sonrientes y listos para comenzar con su pelea, una que al parecer ambos llevaban bastante tiempo esperando.

-Te ves demasiado confiado Madara... eso es peligroso- comenta Orochimaru sonriendo levemente -Desde que poseí el cuerpo de Kabuto hacerme daño se volvió algo bastante complicado- declara con un notorio exceso de confianza.

-Lo sé, pero eso no va a salvarte de una sorpresa que te tengo... ni tú vas a poder regenerarte a suficiente velocidad los ataques- responde el Uchiha tranquilo con un aire de curiosidad, sabe que Orochimaru es un shinobi de muchos recursos y al parecer vino a la pelea preparado para la ocasión.

-Que coincidencia... yo también te tengo una sorpresa- responde sin perder la confianza, tanto él como Madara se han caracterizado por todo el conflicto en dedicarse a mover a la gente a su beneficio así como en explotar al máximo las debilidades ajenas.

-Edo Tensei (Resurrection to the Impure World)- pronuncian ambos ninjas saltando hasta la tierra haciendo que en frente de cada uno aparezca un sarcófago de color amarillento que lentamente se abre dejando ver su contenido.

Orochimaru sonríe complacido cuando en frente de él una mujer de un largo cabello rojo se pone de pie bajo sus órdenes. Madara parece encontrar con gracia la invocación de Orochimaru mientras ve como de su sarcófago un hombre de cabello rubio da un paso al frente. Ambas invocaciones se encuentran pálidas, de cierta manera los cuerpos se ven un poco desgastados, pero los ojos de ambos ninjas invocados están alertas, lo suficiente como para que ninguno de los dos se quede demasiado cerca de quienes los invocaron quitándoles la oportunidad de tomar el control sobre sus cuerpos por completo.

Kushina se voltea velozmente, confundida, buscando con la vista lo último que lograba recordar en vida, a su hijo recién nacido. Orochimaru que se encontraba detrás de ella con una nota roja sujetada a un kunai listo para depositarla dentro de la kunoichi se detiene por unos instantes, no esperaba que la mujer reaccionara de manera tan rápida. Minato por su parte se ve bastante serio, está seguro de que debería de estar muerto luego de que selló al Kyuubi, pero el cambio de ambiente y el ver a su notoria pareja pelirroja al frente hacen que note que algo está mal. En el momento en que Madara se acerca para tomar control por completo del cuarto Hokage éste se mueve velozmente hacia un costado en cuanto sintió que tenía a alguien en su espalda, con una rápida mirada reconoce al ninja que trataba de insertarle un kunai en la cabeza y que lo acompaña algo bastante llamativo, un dragón rojo que parece estar algo impaciente y aburrido.

-No importa si estoy muerto y se te ocurrió revivirme, pero no voy a permitir que me claves un kunai en la cabeza- comenta mientras analiza un poco más la situación hasta que la voz femenina que escucha lo desconcentra temporalmente.

-¡Madara!- grita la pelirroja al posar la vista al frente, por unos segundos lo primero que pensó fue ir donde Minato, pero la presencia del Uchiha hace que cambie de opinión y emprenda inmediatamente un ataque en contra de él.

Orochimaru sonríe satisfecho, aunque no la tiene controlada al menos está haciendo la labor para la cual la invocó. Con una señal envía a Manda a que ataque también a Madara, pero la serpiente es interceptada por Grafvitnir que ya se encontraba harto de estar perdiendo el tiempo viendo como los humanos se dedicaban a pelear.

Minato está aún algo desubicado, acaba de ver pasar a una Kushina bastante molesta en frente de él para atacar a Madara, por un lado la intención de ayudarla pasa por su mente, pero hay algo más que lo perturba, Orochimaru que sea lo que sea que esté ocurriendo no planea dejar al sannin sólo. En un abrir y cerrar de ojos Minato se encuentra frente a un sorprendido Orochimaru y comienza el combate entre ambos.

Los ataques de Kushina parecen obligar a Madara a mantenerse en constante movimiento, aunque por el momento parece poder mantenerse alejado de las constantes ráfagas de viento que la mujer utiliza a voluntad para impulsarse y tratar de golpear o desestabilizar al ninja. Orochimaru en contraste parece encontrarse en problemas bastante más graves, Minato es capaz de evitar cualquier intento de él por contenerlo quieto en un solo lugar y se ve incapaz de evitar los golpes certeros que son dados continuamente sobre su cuerpo.

A pesar de los constantes ataques de Minato Orochimaru aún se encuentra confiado, a pesar de estar gastando una buena cantidad de chakra puede regenerar casi instantáneamente cada herida que recibe su cuerpo. Minato observa preocupado a su enemigo, él conocía a Orochimaru y sabía que las habilidades que estaba mostrando le eran desconocidas ¿Cuanto tiempo había pasado? ¿Qué estaba ocurriendo? Eran preguntas que deambulaban por su mente hasta que por breves instantes en un momento en que decide detener sus ataques contra Orochimaru logra apreciar el panorama completo de la batalla en la que se encuentra.

-Esa muchacha...- murmura al observar a Katt peleando contra Sasuke -¿Ese es Uchiha Itachi?- se pregunta confundido, recuerda a Katt y el muchacho con el que está peleando es sin duda un Uchiha y la imagen del pequeño Itachi viene a su mente por unos instantes, las invocaciones que los acompañan por más llamativas que sean no parecen causar tanto impacto en el cuarto Hokage. Los ojos de Minato parecen comprender mejor las cosas cuando los posa en la otra pelea, cuando logra ver a Gamabunta y cuando ve al muchacho rubio que está envuelto por lo que reconoce como el chakra del Kyuubi -...Naruto- susurra al verlo, con eso ya tiene una idea bastante clara de que ha pasado bastante tiempo.

-No tienes idea que está ocurriendo- interrumpe Orochimaru aprovechando para regenerarse aún más, preocupado por el estado en el que se encuentra su invocación, Manda parece no ser rival para Grafvitnir que con simplemente emprender vuelo consigue esquivar la mayor parte de ataques de la serpiente.

-No creas que voy a ayudarte, a diferencia de Kushina yo te considero más peligroso a ti- responde mirándolo bastante serio y alejando la vista de su hijo.

Orochimaru masculla algo entre dientes y luego levanta la voz en dirección a Kushina -Ataca su torso, aún no se recupera del ataque de la octava puerta que casi lo mata- dice sonriente provocando que Madara lo observe con odio.

Muy cerca de él el combate entre Kushina y Madara cambia un poco de rumbo luego de que la mujer acepta los consejos del sannin, Madara comienza a tener problemas para evadirla e incluso está comenzando a perder mucho terreno para su gusto. Madara de la nada se coloca más serio, estar en desventaja es algo que no lo complace en absoluto así que luego de meditarlo unos segundos la sonrisa regresa a su rostro, una sonrisa que perturba a Kushina.

-No tengo idea porque me estás atacando, yo no tengo a tu hijo- comenta con sorna notando como la mujer se detiene por unos instantes esperando a que el Uchiha diga algo más, lo que sea sobre el paradero de su hijo -A diferencia de Minato aún no has captado que es lo que está ocurriendo, ha pasado mucho tiempo y lo que buscas ya no es un recién nacido... además si esta cólera es por lo que te quité hace tanto deberías de reconsiderarlo porque considero que es bastante obvio el paradero de esa niña.

-¿Niña...?- pregunta dejando de mirar a Madara y notando por primera vez al resto de las energías de los que se encontraban presentes en el campo de batalla, pero que hasta el momento no había sido capaz de contemplar. La misma imagen que Minato observó se revela ante la kunoichi, pero a diferencia de él la mujer no logra quitar la vista de la pelirroja y el rubio que combaten a lo lejos.

-¡Katt!- grita Madara al notar que Kushina parece haber perdido por completo la concentración, por suerte la mujer parece sentir demasiado cerca la ausencia del niño que debió de haber tenido en los brazos antes de morir -¿Por qué no vienes y saludas a tus padres?- añade con una gran sonrisa en el rostro, Kushina parece haber olvidado por completo que él no es alguien al que se debe de quitar la vista de encima.

Por breves instantes los cuatro shinobis que se encontraban en duelo se detienen a observar el combate de Madara y Orochimaru al que se han unido dos ninjas más, uno de ellos conocido por los cuatro, en cambio la kunoichi sólo es reconocible por Katt que aunque jamás había visto a la mujer tiene una idea bastante clara de quien es y porque Orochimaru la invocaría a ella para pelear contra Madara, desde hace bastante que Orochimaru deseaba enfrentar a Madara contra alguien con un chakra como el de él.

Sasuke regresa la vista a donde Katt quien se encuentra de pie, quieta, frente a él, el giro inesperado de cómo se realiza el combate entre Madara y Orochimaru parece haber perturbado un poco al muchacho, incluso ahora hay cosas de las cuales parece no estar enterado y que su instinto le indica que hay algo que está pasando por alto -Madara realmente está disfrutando esto- comenta la pelirroja regresando la vista hacia Sasuke -Namikaze Minato, el cuarto Hokage, a él ya lo conoces de tanto que debes de haber visto su rostro en el cerro... ¿No tienes idea quien es la mujer no es así?- pregunta observando con interés al Uchiha que simplemente la observa sin responder -Uzumaki Kushina- declara sonriendo levemente provocando que la mirada de Sasuke se desvié por unos segundos hacia Naruto -Parece que ya hiciste la suma, Naruto aún no la hace, nadie se ha tomado el trabajo de decirle y no ha tenido a su disposición ninguna fuente de donde se hubiera podido enterar- comenta tomando algo de aire aliviada de que Madara sólo la haya relacionado a ella con sus padres, no tiene idea como reaccionaría Naruto si se enterara, en especial en una situación tan tensa como en la que se encuentra -Tú y Naruto tienen una cosa en común... malos hermanos mayores.

El último comentario provoca automáticamente que Sasuke se vuelva a lanzar a pelear en contra de ella. La pelea de Naruto y Pein continúa estática por unos momentos más, Naruto parece haberse quedado inmóvil al escuchar lo que Madara gritó hacia Katt, la idea de que ella sea hija de un Hokage, del cuarto Hokage, simplemente hace que su sangre arda con más cólera de la que ya lo hacía cuando posaba su mirada en la figura de la pelirroja, no puede concebir que la descendencia de un Hokage haya sido quien diera muerte a Tsunade y quien abandonara Konoha cuando la villa estaba tan necesitada.

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En Konoha muchos ninjas empiezan a movilizarse por las calles, la villa se encuentra temblando cada cierto periodo de tiempo y los rumores empiezan a expandirse por las calles sin control. Las cosas están igual de alborotadas en el edificio del Hokage donde un ninja que se encontraba realizando sus guardias alrededor de Konoha fue testigo del inicio del enfrentamiento y regresó a la villa lo antes posible para informar.

-¿Qué está ocurriendo?- pregunta Kakashi cuando aparece un ANBU en su oficina al costado de él -¿Realmente están los seis reunidos?

-Si- responde seriamente -Están demasiado cerca, en cualquier momento alguno podría decidir acercarse a la villa.

-¿Los seis?- repite preocupado, tenía la esperanza que el informe que recibió tuviera alguna falla o exageración, el tener a uno de ellos cerca ya era un peligro inminente, pero a los seis juntos era demasiado.

El ANBU asiente con la cabeza -Sasuke y Katt se están enfrentando en estos momentos, así como Pein y Naruto... lo que me preocupa son Madara y Orochimaru hace unos instantes...- explica el ninja con el rostro clavado en el horizonte como si estuviera observando lo que ocurre -Hay dos ninjas más ahí, pero...

-¿Dos más?

-Edo Tensei- aclara antes de continuar -Uno de los chakras de los cuerpos es similar al de Katt y Madara... el otro... el cuarto Hokage.

El ojo visible de Kakashi se cierra por unos instantes, ya antes Orochimaru había usado a los Hokage como armas, pero no esperaba que se repitiera de nuevo -¿Ambos por Orochimaru?

-No, la mujer fue invocada por Orochimaru, al cuarto lo invocó Madara- corrige sin moverse de su lugar.

Kakashi baja la vista por unos instantes, la idea de que su maestro se encuentre en ese combate además que la mujer es muy probable que se trate de Kushina, sólo hace que su preocupación aumente, él sabe que Naruto no está enterado sobre sus orígenes, si se entera en la mitad de la pelea los efectos en sus emociones son impredecibles, pero está seguro de que nada bueno saldrá de todo eso. Kumori también parece pensar lo mismo, el control de Naruto sobre el Kyuubi se basa mucho en su estado anímico, es cierto que con los años ha aprendido a controlarlo a pesar de encontrarse enojado, pero una emoción demasiado fuerte en un punto que Naruto jamás había conseguido llenar podría desencadenar algo muy peligroso.

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Minato observa por unos segundos como los otros cuatro shinobi se detienen, lo que sea que provocó a Madara a gritar eso no puede ser bueno, sin pensarlo Minato golpea con un rasengan a Orochimaru que no pudo ver el ataque por la velocidad con el que el ninja se acercó a él. A la vez Madara acumula una extraña energía negra y la lanza contra Kushina que queda envuelta en la oscuridad. Orochimaru observa eso y maldice, la victoria parece estar ya asegurada en las manos de Madara, en el momento en que Minato voltea la vista en un intento por ayudar a Kushina una ráfaga de fuego negro lo envuelve junto con Orochimaru y lo que quedaba de Manda, mientras las orbes doradas del dragón los observan satisfechos.

Madara sonríe, su dragón acaba de terminar con Orochimaru aunque está seguro que su pequeña obra aún se encuentra en movimiento, sabe que Minato es demasiado rápido para caer en algo como eso. Cerrando los ojos espera a que el rubio trate de venir por él y cuando lo siente simplemente sonríe y voltea en la dirección quedando frente al rostro adolorido del Hokage.

-Te olvidaste que yo te invoqué y si lo deseo puedo des-invocarte- aclara en un tono de superioridad siendo lo último que el cuerpo de Minato logra escuchar antes de caer inerte al suelo.

Katt observa como Kushina y Minato junto con Orochimaru y Manda acaban de caer, realmente no esperaba eso, aunque sabía que Madara no iba a perder esperaba que fuera algo más lenta su victoria, Orochimaru jugó mal su carta, traer a Kushina a la vida con ella y Naruto cerca sólo provocarían que Madara utilizara los sentimientos de la kunoichi a su favor para distraerla, además esa criatura que lo está acompañando es demasiado fuerte, ese fuego negro parece demasiado efectivo. Meditándolo un poco Katt decide que va a tener que terminar su batalla ahora, no puede perder más el tiempo con Sasuke, necesita mantener ocupado a Madara y rogar porque Naruto venza a Pein y decida atacar a Madara sin perder el control sobre el Kyuubi ya después vería ella para escapar del rubio si era posible "Primero necesito capturar por unos segundos a Sasuke" piensa preparándose para lo que sabe es una jugada algo riesgosa, en especial si luego planea enfrentarse a Madara.

La espada de Sasuke se clava muy cerca del estómago de Katt, una pequeña sonrisa se deja ver en el rostro del muchacho al acertar el primer golpe preciso con las espadas, pero no dura demasiado, la mujer clava las suyas en el piso, cruzadas, y las junta a la altura del arma de él haciendo que estas queden como soportes para que no la mueva y utiliza un jutsu de tierra que envuelve las piernas del Uchiha endureciéndose hasta formar roca sólida.

Ahora con la sonrisa en el rostro de ella se impulsa hacia atrás librándose de la espada que la había conseguido herir -Dije que pelearíamos en serio, nunca dije que pelearía justamente- susurra con la mirada puesta en el joven mientras asciende en un salto y se posa sobre la cabeza de su zorro "Madara no puede quedarse libre sin pelear con nadie o va a mover las cosas a su favor"

Sasuke la observa con rabia y busca con la mirada a su invocación. Con algo de desesperación nota como los restos de su serpiente se encuentran esparcidos detrás del zorro, solo una de las cabezas es reconocible el resto esta demasiado chamuscado o disperso en las cercanías.

-Lo siento, pero hasta aquí llegas...- anuncia la pelirroja realizando una secuencia de sellos, esto parece captar la atención no sólo del Uchiha capturado sino también de Madara que observa con curiosidad -Shinzui kankei (Soul connection)- al terminar la secuencia el pelo rojizo que recubre al zorro comienza a erizarse y puede sentirse en el ambiente como una gran corriente de energía emanando de cada parte del cuerpo del gran zorro fluye en dirección hasta la kunoichi.

Sasuke retoma la compostura, no planea quedarse mirando que es lo que la pelirroja traicionera planea hacerle. Con una rápida y corta secuencia de handseals su cuerpo comienza a emitir descargas eléctricas, algunas dirigidas hacia el gran zorro que las recibe directamente y otras hacia la roca sólida que lo sujeta.

La energía palpitante que emana la gran invocación rodea el cuerpo de su dueña dejando ver una acumulación de chakra alrededor de ella, mezclándose con su propio chakra -Muy lento Sasuke...- susurra Katt saltando para acomodarse directamente sobre el muchacho a la vez que el zorro se impulsa fuertemente en dirección contraria alejándose del lugar.

La dirección del ataque de Sasuke cambia radicalmente al verla rodeada por lo que parece ser la energía del zorro, los rayos van directamente hacia ella, tratar de liberarse tomará más tiempo que atacarla y deshabilitar lo que sea que planee. A la vez que los rayos se dirigen hacia arriba todo el chakra acumulado empieza a tomar forma, la forma de una gran masa de fuego que avanza velozmente hacia el suelo chocando y anulando los rayos de Sasuke. Consecutivamente el lugar donde estaba el cuerpo del Uchiha es golpeado por una ola de fuego que no deja de avanzar hasta secar por completo la energía que usa como combustible.

La mirada de un golpeado Naruto por una agobiante batalla se desvía, al igual que la de su atacante, en dirección al potente ataque, los ojos del joven se abren sorprendidos por la magnitud, en especial cuando el polvo se asienta y deja ver varios cráteres centrados en el mismo lugar con los resto de alguien en el centro. Los ojos de Naruto se cierran por unos instantes y al volver a abrirlos una fuerte ola de chakra envuelve a los cuerpos aún activos de Pein.

Cólera, eso es lo que ha llenado por completo los ojos del muchacho que no permite que el líder de Akatsuki escape de su chakra, su nivel inferior como ninja contra Pein sumado al ataque que acaba de presenciar en ese instante además del poder que Madara posee con su contrato con dragones hace que entienda lo que el Bijuu había estado murmurando en su mente durante todo ese tiempo, sin el poder completo que él puede ofrecerle jamás llegará a ganar esa pelea. Con el sol terminando de ocultarse en el horizonte dando paso a la noche, bajo la vigilante mirada de Madara y observando como el zorro de dos colas recoge a su dueña en el medio del aire, una inmensa cantidad de chakra crea una gran explosión llevándose a su paso a Pein y a Gamabunta, que se encontraba aún terminando de deshacerse de las invocaciones de Pein.

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-Esa fue una explosión muy fuerte- comenta preocupada una mujer de cabello rosa sujeto con una cola mientras observa a Kakashi, acompañada por varios ninjas que se encuentra reunidos en la oficina del Hokage.

-Lo sé- responde él mirando de soslayo a Kumori que se encuentra de pie a su costado -Hanabi...- añade cambiando la dirección de su mirada hacia la joven.

La joven Hyuuga se encuentra callada con la mirada quieta en dirección a donde ocurre el combate, su byakugan está activado, pero desde que empezó a observar se encontraba en silencio. No habían pasado más de unos diez minutos desde que llegó el aviso de ese combate y desde que los movimientos ocasionados por las ondas de las técnicas provocaban fuertes temblores en la villa. Kakashi había ordenado una reunión de emergencia con los jonins que estaban a cargo de los grupos de combate en la villa.

-Hanabi...- insiste al no recibir respuesta.

-Orochimaru... Pein y Sasuke están muertos- declara fríamente provocando que algunas sensaciones encontradas en algunos de los presentes.

-¿Qué ocurrió?- pregunta Kakashi en cierto aspecto aliviado de que haya sido Sasuke el que acabó muerto y no Katt, aunque sabe que no puede dejar que eso se note, en especial con Sakura presente que parece bastante confundida sobre como tomar la noticia y por el hecho de que Katt es considerada una amenaza al igual que cualquiera de los otros.

-El último ataque de Katt fue directo contra Sasuke, no logró escapar a tiempo... y Naruto...- explica deteniéndose unos instantes -Tenemos un problema, casi no distingo a Naruto del Kyuubi creo que perdió el control por completo.

-O está muy cerca de hacerlo- interrumpe la voz de Kumori, que se encontraba callado simplemente esperando junto a Kakashi.

-¿Naruto...?- repite Sakura bajando un poco la mirada y cerrando los ojos por unos instantes, la idea de que Naruto perdiera el control era algo que estaba bastante presente en su mente desde que el joven abandonó la villa -¿Qué debemos de hacer?- pregunta levantando la mirada -Si alguno de esos tres decide venir a atacarnos cuando terminen...

-Ni Katt o Madara van a venir, ellos esperarán estar en mejor estado antes de hacer algo más... Naruto... si es el Kyuubi es probable que sí se dirija hacia la villa a atacar- explica Kakashi bastante serio con la mirada al frente -No importa quien venga, tenemos que proteger Konoha a toda costa mientras evacuamos a la gente, no es seguro que la villa se mantenga con los habitantes. Cualquiera que se acerque de manera hostil a la villa debe de ser eliminado- concluye el Hokage.

-Eso incluye a Naruto... o a Katt- añade mirando a Kakashi que asiente con la cabeza, a diferencia de Sakura él conoce a Katt y sabe que no va a ir en un ataque suicida contra la villa, no como probablemente Naruto lo haga si es que sale vencedor de esa pelea.

Muchos murmullos recorren la habitación, esperaban una orden como esa, pero no esperaban que fuera pronunciada desde quien había sido amiga de uno de los tres -Si alguno no está seguro o dispuesto a enfrentarse a Naruto es mejor que no participe en la pelea y ayude con la evacuación, no podemos permitirnos errores- concluye Kakashi observando con cierta satisfacción que ninguno de los presentes decide retirarse.

-¿Cómo contendremos a Naruto?- pregunta uno de los presentes, una cosa es tener la intensión y otra es tener los medios.

Kakashi coloca sus manos sobre unos pergaminos viejos que se encuentran en su escritorio -Son los textos sobre los Bijuu, algunos son de la villa, otros de Suna y algunos fueron los extraídos por Ino cuando estuvo infiltrada en Akatsuki- explica Kakashi bastante serio -Si el Kyuubi escapa del cuerpo de Naruto o toma el control por completo habrá que sellarlo nuevamente en otra persona.

-Kakashi-sensei- interrumpe Sakura dando unos pasos al frente visiblemente preocupada -El que realice esa técnica...

-Morirá, eso lo sé, pero si el Kyuubi se libera no habrá otra opción. Desde que Naruto se fue estuve estudiando los pergaminos, los de Akatsuki en especial...

-Pero en dónde lo sellaría- cuestiona otro ninja.

-No tiene porque ser un niño, puede ser una persona adulta capaz de mantener al margen sus emociones, además el sellado sería completo, no permitiré que el chakra del Bijuu se fusione con el del cuerpo en el que se encuentre- responde Kakashi de manera indirecta -No interesa en el cuerpo de quien sea, si el Kyuubi se libera lo sellaré en quien esté más cerca.

-Eso es si Naruto sale vencedor- interviene Kumori que había estado casi en completo silencio durante toda la conversación.

-En caso sea Katt o Madara no creo que tengamos tantos problemas, ambos pueden causar mucho daño, pero no son el Kyuubi- responde mirando al resto de ninjas -Por ahora hay que prepararnos para el peor escenario y ese es que Naruto pierda el control por completo y venga a Konoha.

Los ninjas abandonan la habitación a excepción de Kumori y Sakura -Kakashi-sensei... si hace eso y Katt no logra salir viva...- comenta la Kunoichi un tanto triste.

-No pensé que te preocuparas por Katt- responde sonriendo levemente.

-No es eso, pero...

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La imagen demoníaca donde ya no es visible la figura de Naruto es lo único que Katt observa, está preocupada, hacía ya mucho que Naruto no perdía el control sobre el Kyuubi y ahora son seis colas las que se mecen detrás de él mientras posa su mirada sobre Katt y Madara al parecer decidiendo sus movimientos. El Uchiha parece estar extrañamente satisfecho y se coloca sobre Grafvitnir, el dragón por su lado parece haber cobrado algo de interés al ver la figura de Naruto.

-Recuerda, yo no he matado a nadie de los que tú aprecias- comenta Madara confiando en que los recuerdos y emociones de Naruto aún marquen el curso de la acción que tome el Kyuubi en cierta medida.

Katt que se encuentra posada sobre Orion sabe que se encuentra demasiado cerca de Konoha como para dejar que el Kyuubi ande libre "Kakashi ya debe de haber empezado a evacuar la villa" se dice a si misma tratando de bloquear de su cabeza la preocupación que le genera saber lo cerca que está esa cosa de su pequeña a la que había dejado al cuidado de su padre "No la dejé en Konoha para que al final el Kyuubi la termine matando" -Orion... ve a Konoha en caso el Kyuubi trate de acercarse- ordena la pelirroja dando un salto al frente antes de que el zorro expresara su inconformidad con seguir esa orden.

La kunoichi se impulsa y usando en esta ocasión su propio chakra se envuelve en unas llamas rojas generadas por su propia energía, la velocidad con la que se acerca es inmensa y el fuego sirve como protección que repele los ataques del chakra rojo de Naruto. Madara observa satisfecho la escena, está seguro de que Naruto es el que vencerá y luego él conseguirá al Kyuubi de una vez, ya había esperado demasiado tiempo para conseguir al último de los bijuu. Envuelta en su propio chakra Katt golpea al cuerpo de Naruto desestabilizándolo un poco, lo suficiente como para posarse en frente de él y dar un golpe más, uno que eleva a ambos hacia el cielo dejando en el camino la silueta de un dragón de fuego. Katt deja que el jutsu continúe llevando a Naruto aún más alto mientras ella empieza a descender.

Cae al suelo, no parecen haber rastros de Naruto por ningún lado cosa que extraña a la mujer y por unos instantes preocupan a Madara. Katt observa impaciente la escena sabe que ese ataque no debería de destruir al Kyuubi, quizás podría matar a Naruto, pero no si el chakra del bijuu estaba presente. De improvisto desde el cielo un rayo de luz parece caer directamente hacia donde se encuentra, un ataque proveniente del Kyuubi que se encuentra intacto en el aire, el ataque parece simplemente haberlo elevado sin causarle ningún daño real.

Katt observa sin tratar de escapar, luego de la pelea contra Sasuke y el último ataque no tiene suficiente energía como para escapar a tiempo, pero cuando estaba a punto de cerrar los ojos y esperar lo inevitable una sombra se posa sobre ella cubriendo el ataque con su cuerpo. El gran zorro de dos colas se había interpuesto en el camino del ataque cubriéndolo por completo y desplomándose en el suelo con una gran herida abierta en su espalda.

La pelirroja se queda quieta observando el cuerpo de Orion, la invocación había sido su compañero desde más de quince años atrás, el único que había estado con ella durante todos los movimientos que muchos consideraron erráticos en su vida. Acercándose lentamente hasta tocar el pelaje no puede asimilar la idea de que Orion haya caído antes que ella, le había ordenado que fuera para Konoha en cuanto ella muriera cualquiera que lo deseara podría firmar un contrato con él y podría ayudar en Konoha, no se suponía que muriera ahí -...Y menos cubriéndome...- susurra con la mirada baja captando a medias lo que estaba ocurriendo, la idea de perder a su zorro parece haberla dejado fuera de si por unos instantes.

Una energía a sus espaldas hace que reacciones y se encuentre cara a cara con el deformado rostro de lo que es ahora Naruto, el chakra del Kyuubi la sostiene de la cintura mientras lentamente empieza a quemar esa zona "Si esta cosa llega a Konoha" piensa horrorizada al ver como la criatura ha ganado una cola más. Con sus últimas fuerzas extiende una de sus manos hacia el rostro de Naruto y empieza a hacer fluir algo de su chakra.

Observando a una distancia prudencial Madara parece sonreír un poco -¿Jutsu curativo?- se pregunta intrigado por lo que está viendo, hasta que un gemido emitido por el Kyuubi hace que entienda lo que está ocurriendo -Esa cosa... por eso el cuerpo de Itachi estaba en tan mal estado y Orochimaru no pudo usarlo...- comenta algo sorprendido al ver como la zona donde Katt aplica el chakra empieza a carcomerse como si estuviera aplicándose una especie de ácido.

Un rugido por parte de la bestia y el chakra alrededor de él provoca una pequeña explosión que termina con Katt antes de que continúe haciéndole más daño. Madara observa satisfecho lo que tiene al frente, todos muertos excepto por Naruto. Acercándose con cuidado listo para pelear al lado de su dragón Madara se posa en frente del Kyuubi -Naruto, me sorprendes, no te creí capaz de matar a tu propia hermana- comienza a decir con la intención de desconcentrar a lo que quede del muchacho, pero se detiene al ver como los ojos de la criatura parecen comenzar a temblar, a observar sus manos y el lugar donde hasta hace unos momentos terminó con la vida de Katt, luego su cabeza gira velozmente hacia donde están los restos de la pelea de Orochimaru. La débil mente de Naruto que aún se encontraba tratando de no ser asimilada por completo simplemente no logra soportarlo, si Katt es su hermana quiere decir que los dos cuerpos con los que Orochimaru y Madara estaban jugando eran sus padres, los padres a los que nunca conoció y que incluso en esa extraña segunda oportunidad no fue capaz de defender o siquiera tratar de hacerlo.

Un grito mucho más potente es emitido desde el Kyuubi mientras una octava cola empieza a crecer y Madara comprende que tal vez cometió un error -No lo sabía...- murmura preocupado al observar como a pesar de que acaba de crecer otra cola el chakra no se ha estabilizado.

-Eres un idiota- murmura Grafvitnir -Acabas de hacer que lo que quedaba del muchacho desaparezca- añade analizando la situación, sabe que el Kyuubi en todo su potencial es un adversario demasiado fuerte, un adversario del cual no tendría opción más que escapar y no planea esperar a que lo humillen para hacerlo -Estas solo en esto Madara, no planeo arriesgarme por un error tuyo- concluye antes de desaparecer y abandonar a Madara a su suerte que observa como el Kyuubi posa una furiosa mirada sobre él.

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-¡Papá!- exclama una pequeña genin de doce años, cabello plateado y ojos ámbar entrando de golpe en la oficina del Hokage -¿Es verdad?- pregunta respirando agitada, al parecer había venido corriendo por un buen trecho.

-Sayuri...- susurra Kakashi al ver a la pequeña acercarse a él mientras Kumori retrocede unos pasos para darles algo de espacio.

-¿Es verdad lo que dicen? ¿Que los temblores son por una pelea y que mamá está ahí?- insiste poniéndose en frente de su padre -¿Vas a ir?- pregunta al no recibir respuesta y tomar el silencio como un si.

-Hay que evacuar Konoha- explica observando por la ventana.

-Pero... ¿mamá?- murmura apretando fuertemente los puños -Escuché que Naruto-san está ahí también... él va a tratar de matarla...- dice esperando alguna reacción de su padre.

-Tienes que ir con los otros genin fuera de Konoha escoltando a los civiles- indica sin responder ninguna de sus preguntas -Ustedes no están al nivel de una pelea como esta y los habitantes de la villa necesitan protección.

-No puedes hacer que lleve gente fuera de Konoha con mamá tan cerca- reclama frustrada acercándose hasta el costado de él -Además yo no voy a irme si no estamos juntos.

En ese momento Kakashi observa un fuerte brillo en la dirección donde ocurre la pelea casi sin pensarlo se voltea, sujeta a su hija y se aleja de la ventana cubriéndola con su cuerpo antes de que los vidrios estallen por una poderosa explosión en las cercanías. Kumori que también vino venir la explosión imitó al Hokage en lo que respecta a alejarse de las lunas. Unos segundos después la pequeña abre los ojos, su padre aún la está cubriendo y abrazando fuertemente sin quitarle la mirada de encima.

-La situación es mala, sólo queda uno- interrumpe Kumori haciendo que el Hokage regrese la vista dentro de la habitación.

-¿Quién está viniendo?- pregunta suponiendo que ese último movimiento fue el final de la batalla.

-Na... el Kyuubi- responde Kumori observando en dirección a donde estuvieron las lunas unos segundos atrás -Aún está en el cuerpo de Naruto, pero... no creo que quede mucho de él.

Por entre el abrazo de su padre Sayuri observa a Kumori, no entiende como está afirmando algo que hasta el momento no se puede ver desde ese lugar, la única que hacía cosas como esas era su sensei, Hanabi. Pero sus pensamientos cambian al realmente comprender lo que el ANBU había mencionado, levanta la mirada para ver a su padre y luego gira la cabeza en dirección a Kumori -¿Mi mamá?- pregunta bajando un poco la vista y respirando despacio en un intento por controlar sus ojos que empezaban a humedecerse lentamente.

Kakashi cierra los ojos por unos instantes, no quiere tener que responder eso, no hay necesidad de que lo haga, su hija es capaz de entender o al menos eso le había parecido hasta ese día. La pequeña siempre había estado con la idea de que su madre regresaría, a pesar de los tantos comentarios negativos que escuchaba. Su padre había alimentado esa esperanza de alguna manera, él mismo jamás había aceptado los comentarios que llenaban las calles de Konoha y cuando hablaba sobre Katt podía notarse cierta tristeza, pero no odio o temor como el que podía sentirse en el resto de personas, incluso personas cercanas al entorno del Hokage como Sakura que no podía olvidar el incidente con Tsunade, Kumori era una excepción siempre estaba cerca de Kakashi y aunque no se inclinaba positivamente a Katt tampoco parecía verla de forma negativa.

-¿Kumori?- insiste al ver que no consigue respuesta por parte de su padre.

-Se está acercando- es lo único que dice el ANBU dirigiéndose al Hokage.

-Necesito que vayas con los genin también- interrumpe Kakashi haciendo que el hombre se sorprenda un poco -Si peleas es posible que distraigas a muchos... Neji, además quiero asegurarme que Sayuri esté a salvo.

-¿Neji?- susurra confundida observando al ANBU, ese es el nombre del primo de su sensei que falleció a manos de Madara años atrás -¿Vas a dejarme?- pregunta Sayuri soltándose de los brazos de su padre y alejándose un poco -Mamá está muerta... y...

En ese momento Sayuri trata de retroceder al sentir un veloz movimiento con el que Kumori se sitúa en frente de ella, a pesar de haberlo sentido no logra alejarse de él. Sin mayores problemas el ANBU coloca una de sus manos sobre la frente de la genin dejándola inconsciente -No hagas esto más difícil para tu padre- es lo último que escucha antes de ser sujetada por el ninja momentos antes de caer al suelo.

-Con Madara muerto ya no tiene sentido que te sigas ocultando, pero en un momento como este tu presencia más que ayudar haría que muchos perdieran la concentración por la sorpresa- explica Kakashi acercándose y cargando a su hija.

Kumori niega con la cabeza -Sayuri no va a tomar esto bien, está demasiado apegada a ti, incluso de cierta manera lo estaba a Katt, a pesar de que nunca estuvo cerca de ella.

-No hay muchas opciones, no puede quedarse aquí y yo no puedo abandonar Konoha en una situación como esta... aunque lo hiciera el Kyuubi en algún momento podría afectarnos, es mejor enfrentarlo ahora que hay más gente para debilitarlo- aclara Kakashi sin quitarle la mirada a su hija, no quiere dejarla, pero lo último que desea es ponerla en peligro manteniéndola a su lado -No pude hacer nada por Katt, pero no voy a dejar que Sayuri salga lastimada de todo esto.

Neji observa por unos momentos al Kakashi que se mantiene de pie con su hija inconsciente en los brazos -Veré que la evacuación esté procediendo como se debe... luego vendré por Sayuri- dice saliendo de la habitación dejando al hombre solo con su hija al menos por unos minutos, quizás los últimos.

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-Naruto...- susurra tristemente observando desde la muralla de la villa la figura envuelta en chakra rojo que se aproxima a toda velocidad, pero la decisión ya estaba tomada y ella sabía que era lo que tenía que hacer si la villa se encontraba en peligro.

-¿Sakura-san?- pregunta un ninja que se encuentra a su costado esperando la orden para empezar a movilizar a los grupos de ataque.

-Tenemos que impedir que continúe avanzando y entre a la villa... prosigan según el plan- indica la kunoichi sin quitar la mirada del frente y de su antiguo compañero de equipo.

Con la orden de avanzar ya dada, varios grupos de ninjas bajan por la muralla a darle el encuentro al Bijuu bajo la triste mirada de la kunoichi de cabellos rosa. Sabe que esa noche no sólo perderá lo que queda de su amigo sino también muchas vidas que no podrá salvar cuando el combate empiece, ella ya había vivido en carne propia lo que era un golpe dado por ese chakra rojizo y varios terminarán envueltos por él. Dando una última mirada al Kyuubi voltea para encontrarse con un grupo bastante grande de médicos ninja listos para integrarse al campo de batalla cuando ella lo ordene.

El choque contra la amenazante criatura es el paso más difícil de todos, los primeros ataques son los que decidirán si son capaces de frenarlo o simplemente pasará por encima de ellos matándolos o ignorándolos. Algunos grupos se alejan un poco para rodear a la criatura y atacarlo desde la espalda, mientras un grupo bastante numeroso se detiene para comenzar sus ataques. A la cabeza del grupo que espera al Kyuubi se encuentra un joven de cabello y ojos oscuros que inmediatamente invoca a un mono un poco más grande que él.

-El Kyuubi nuevamente...- lamenta la invocación con aire preocupado -¿Estás seguro que podrás pelear contra él Konohamaru?

-Si, defender Konoha es la prioridad... eso ya no es Naruto- responde bastante serio -Hay que detenerlo por unos instantes Enma- añade observando al mono que luego de asentir con la cabeza se transforma en un gran báculo negro.

Sujetando a Enma transformado se dirige directamente contra el Kyuubi dejando atrás al resto de shinobis. Unos metros antes de encontrarse cara a cara con Naruto Konohamaru da un salto, quedando por encima del chakra que envuelve el cuerpo y lanzando el báculo en dirección a la criatura.

-Kongou Rouheki (Indestructible Prison Wall)- - se escucha decir a la voz del mono proveniente del báculo, instantáneamente el objeto se replica varias veces y luego se alinean formando una especie de jaula conteniendo momentáneamente al Kyuubi.

La respuesta de la criatura no se hace esperar y expandiendo su chakra logra librarse de la prisión, pero esos escasos segundos en que se encontró quieto fueron usados por los otros ninjas para lanzar varios ninjutsus elementales sobre él. El grupo que estaba rodeándolo logra llegar haciendo que el Kyuubi divida su atención. Aprovechando que no se encuentra centrado en un solo enemigo un grupo de serpientes emergen desde la tierra y sujetan fuertemente a Naruto, la fuente de estas es Anko que se encuentra envuelta por las marcas negras del sello maldito de Orochimaru, cosa que parece reforzar su jutsu e impedir que sea quemado instantáneamente.

Posándose en frente aparece Hanabi con el byakugan activado y con la intención de tratar de cortar el flujo de chakra, al estar aún dentro del cuerpo de Naruto necesita usar sus tenketsus como camino para controlar el cuerpo, si se bloquean el chakra estará inútil por unos instantes hasta que fuerce la salida, suficiente tiempo como para matar a Naruto. Con Naruto sujetado por las serpientes Hanabi intenta realizar su ataque, cada golpe provoca un dolor muy intenso en sus dedos y manos que al entrar en contacto con el chakra son fuertemente quemados. Antes de lograr llegar a la mitad del ataque Hanabi se ve obligada a retirarse, no por el dolor sino por el movimiento inusual en el chakra que a los pocos segundos se vuelve en un horrible espectáculo de extensiones rojizas que atacan a voluntad propia a varios ninjas, incluso los que no están tan cerca.

La batalla es complicada, el cuerpo de Naruto no es un blanco tan grande como lo sería el Kyuubi, a pesar de ser muy llamativo por el vibrante color rojo que lo envuelve no es un objetivo sencillo. La velocidad de movimientos, la potencia de los golpes y el chakra actuando como un ente diferente empiezan a cobrar víctimas casi de inmediato, los primeros en caer son los menos experimentados o los que dejaron que las dudas o inseguridades nublaran su juicio por unos segundos. Desde lo alto de la muralla Sakura observa, la mitad de los heridos mueren casi instantáneamente al ser envueltos por el chakra, los otros son impulsados varios metros por el aire al ser golpeados. De un momento a otro el cuerpo de Naruto se impulsa hacía el cielo, con una asombrosa velocidad, en dirección a la muralla pasando por encima de los ninjas que se encontraban combatiéndolo.

-Udon... atiendan sólo a los que se puedan salvar- ordena la kunoichi endureciendo su mirada y observando de soslayo al muchacho de lentes que asiente con la cabeza.

Sin necesidad de siquiera pensarlo, se impulsa con el chakra acumulado en sus pies derrumbando una parte de la sección de la muralla donde se encontraba y apareciendo en el aire al frente de Naruto. Apretando con fuerza su puño derecho y emanando una gran cantidad de chakra azulado logra darle un potente golpe que envía al cuerpo de su amigo, junto a la energía que lo rodea, hasta la tierra formando un gran cráter e impidiendo, al menos por unos segundos más, que esa criatura se acerque a Konoha y dando tiempo a que los ninjas se reagrupen para seguir atacando. En una situación como esta no puede darse el lujo de estar al margen de la batalla a pesar de la cantidad de ninjas ofensivos que se encuentran atacando en esos instantes, la gente que esté demasiado grave simplemente no sobrevivirá, de nada sirve que se dedique incontables y valiosos minutos en tratar de impedir que mueran, apoyando activamente en el combate está ayudando a que hayan menos bajas y los otros médicos pueden encargarse de quienes estén heridos.

Al momento en que toca el suelo la visión del rostro casi irreconocible de Naruto aparece en frente de ella, sin ningún daño por el golpe que le propinó segundos atrás. En ese instante un gran brazo la protege parte del ataque permitiéndole impulsarse varios metros en dirección contraria observando una gran cantidad de armas que acaban de cubrir por completo al Kyuubi. Con varios metros de distancia entre ella y la criatura nota como los ninjas que habían quedado atrás por el repentino intento de ingresar del Kyuubi ya habían logrado retomar sus posiciones de ataque.

Rápidamente observa su mano derecha, su guante ha desaparecido y su mano parece como si hubiera sido bañada en alcohol y prendida en llamas, buscando con la mirada nota a Chouji que no se encuentra en mejores condiciones luego de cubrirle el último ataque con su brazo. Logrando realizar los handseals necesarios a una gran velocidad su mano derecha empieza a emitir el chakra verdoso característico en los jutsus médicos y comienza a regenerarse lentamente, demasiado lento para su gusto.

El combate contra el Kyuubi prosigue cuando este derrite todo el armamento que lo cubría, ella sólo necesita unos segundos más para poder empezar a golpear con esa mano nuevamente, no la necesita completamente curada. Al frente puede ver muchos rostros conocidos tratar de hacer algo, aunque nada parece dar resultado, simplemente están entreteniéndolo, haciendo tiempo para que la gente que no pueda pelear escape y para que el Hokage termine las preparaciones de lo que cree es la única opción para contener el problema.

Cuando logra mover los dedos con algo de facilidad se pone de pie, lista para ir nuevamente a atacar al Kyuubi -Tsunade-shishou...- susurra observando el chakra verdoso de su mano, lamentándose no haber estado lista para aprender la técnica más grande de la Sannin mientras esta estaba viva -No es lo mismo, pero...- murmura haciendo que ambas manos estén rodeadas por su jutsus curativo.

Juntándose con algunos otros ninjas que podían tratar de pelear cerca de la criatura empieza atacarlo constantemente, cada golpe contra el chakra que envuelve a Naruto causa gran daño en sus puños que por el jutsu que los rodea se regeneran lentamente, no tan aprisa o efectivamente como la técnica de su maestra lo haría, pero le dan la oportunidad de poder atacarlo a su máximo. Estar tan cerca de Naruto es algo complicado, no es solamente le cuesta atacarlo, también es evitar el impredecible chakra, que por el momento parece estar ocupándose de las molestias que atacan de lejos tratando de sujetarlo con cadenas invocadas.

-¡Sakura, Hanabi, salgan de ahí!- grita de improvisto Konohamaru acompañado por Enma su invocación, antes que unas extrañas esferas de chakra, generadas por los apéndices en movimiento que brotan del cuerpo de Naruto, empiecen a flotar en el aire e inmediatamente generen una intensa luz, seguida de una gran explosión que se extiende por varios metros, envolviendo a todos los que se encontraban peleando contra el Kyuubi.

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-¿Estás bien Sayuri-san?- pregunta un muchacho de su edad, de cabello negro deteniéndose y acomodándola bien en su espalda.

-Kiyoshi...- susurra observando el lugar donde se encuentra, puede escuchar y ver bastante gente de Konoha moviéndose tan rápido como pueden por entre los árboles, adelante de todo el grupo distingue la figura de Kumori dando indicaciones a algunos genins "La gente de la villa..." piensa manteniendo los ojos entre abiertos.

-¿Qué te sucedió? Momentos antes de proceder con la evacuación Kumori-san me encargó que te llevara- pregunta el joven esperando una respuesta mientras la gente continúa avanzando.

-Nada...- responde acomodándose antes de generar una descarga eléctrica a través de sus manos sobre el pecho del muchacho provocando que éste caiga inconsciente al suelo llamando la atención de algunas personas por el sonido de la caída, por suerte el ataque fue directamente al interior del cuerpo del chico y no llegó a ser visto por la gente que estaba más preocupada por alejarse. Con algo de dificultad Sayuri se pone de pie y revisa al muchacho -Se desmayó, ayúdenme a llevarlo- indica haciendo que un par de personas lo lleven mientras ella empieza a quedarse atrás hasta ver una oportunidad para alejarse del grupo regresando hacia Konoha con los pensamientos puestos en una sola persona: su padre. Cuando logra ver parte de la muralla de la villa nota un gran destello desde el lado opuesto, seguido de una explosión -Papá...- susurra muy preocupada acelerando el paso.

Acercándose a gran velocidad y también notando la explosión se acerca Neji, aún con la máscara puesta sobre su rostro ya la ha llevado demasiados años como para no haberla adoptado como parte de él -Imprudente...- murmura observando con su byakugan como el único chakra llamativo que continúa activo se mueve con rapidez dentro de Konoha y maldiciéndose por no haber previsto que la pequeña atacaría a quien fuera que la estuviera alejándola de su padre -Tengo que sacarla antes de que se acerque a la zona de combate.

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Observando como los últimos halcones mensajeros se alejan en diferentes direcciones, con el aviso de lo ocurrido en Konoha en sus patas, Kakashi cierra un pergamino bastante antiguo que había terminado de leer. Sintiendo la cercanía del Kyuubi sabe que ya no hay otra opción más que simplemente tratar de contenerlo nuevamente, con suerte los que queden vivos podrán buscar una manera para eliminar o sellar al Bijuu permanentemente.

Saliendo del edificio en dirección hacia la muralla donde ordenó que se contuviera al Kyuubi, imágenes de lo ocurrido veintinueve años atrás vienen a su mente. Hace veintinueve años se encontraba corriendo por ese mismo camino, claro que en esa ocasión no pensaba más que en tratar de improvisar algo para ayudar a su sensei, pero fue ahí donde con su recién adquirido sharingan vio el final temporal de la bestia de nueve colas y la caída del cuarto Hokage.

Una sonrisa triste y nostálgica se dibuja en su rostro, jamás pensó que haber copiado esa técnica hubiera servido para algo, ¿cuáles eran las posibilidades de que otro Bijuu atacara Konoha mientras él siguiera con vida? era lo que siempre pensó, al menos hasta la aparición de Akatsuki y en estos momentos en los que se encuentra ya muy cerca del final de lo que parece haber sido una gran explosión. La devastación de lo que tiene al frente es inmensa, un gran cráter que a pesar de tener su centro fuera de la muralla ha destruido parte de esta e incluso del interior de la villa, el cráter tiene a la criatura en el centro y ni rastros de cuerpos cerca de él, mientras más distancia hay es que se puede notar pequeños restos humanos... lo que haya estado cerca del centro simplemente desapareció por completo sin dejar rastro.

La situación no es buena, Kakashi esperaba poder usar de contenedor a alguno de los jonin, eran gente mucho más fuerte psicológicamente de lo que Naruto había sido, probablemente podrían contener a la criatura sin esos episodios de descontrol que hacían que esta tomara posesión del cuerpo del rubio. Hay ninjas vivos aún, pero ninguno lo suficientemente cerca como para realizar rápidamente la técnica.

-¡Nimpou: juuryoku ryoku! (Gravity power)- exclama al llegar al borde del cráter provocando que el Kyuubi se incruste contra la tierra al igual que cualquiera de los restos que hubieran alrededor de él, la gravedad del lugar parece haber aumentado considerablemente manteniendo al menos al cuerpo de Naruto estático y restándole movimiento al chakra que lo rodea, que a pesar de ser energía parece que también se ve de cierto modo afectada.

Kakashi observa la situación, sabe que no deben de quedar vivos muchos de los jonin o chunin y la energía del Kyuubi en cualquier momento empezará a atacar a pesar de que su parte física no puede moverse. Al ver a su líder y el Kyuubi contenido momentáneamente varios ninjas se acercan para continuar el ataque y los pocos que tienen idea de que es lo que Kakashi planea se acercan directamente a él.

Al momento de sentir tantas presencias el chakra regresa al ataque, lentamente logra salir del área que está influenciada por la técnica y empieza a mantener alejados a los ninjas, tal vez de alguna manera tiene una leve idea de que es lo que planea Kakashi. Mantener a los shinobi alejados no es un buen presagio, si él encierra al Kyuubi en su cuerpo simplemente se liberará cuando él caiga muerto, necesita sellarlo en alguien que no vaya a morir, pero el zorro de las nueve colas simplemente no le permite a ningún ninja acercársele y al paso que va pronto acabará con todos.

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No es la primera vez en su vida que Sayuri observa un espectáculo tan aterrorizante, ya antes había visto a Naruto pelear usando al Kyuubi cuando ella era pequeña y él aún vivía en Konoha, pero en esta ocasión el chakra rojizo está mucho más agresivo e incluso atacando ninjas de la villa. Revisando rápidamente con la mirada divisa a la persona que estaba buscando, de pie en el borde de un cráter -¿Por qué no se mueve?- se pregunta preocupada decidida a acercarse al lugar, en ese momento poco le importa lo estúpido que pueda parecer.

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Las opciones se le están acabando, no falta mucho para que su jutsu termine de afectar al cuerpo de Naruto y aunque pudiera repetirlo inmediatamente no está llegando a ningún lado con todo eso, necesita sellar al Kyuubi en un nuevo cuerpo lo antes posible. En medio de una situación tan poco favorecedora logra escuchar un pequeño sonido, como de una piedra pequeña rodando por algo que provocó que se moviera. Dirigiendo la vista con cuidado hacia el lugar de donde provino el sonido nota algo que tensa cada músculo de su cuerpo -... Sayuri- susurra preocupado al ver como su hija se acerca desde la parte posterior sin ser atacada por el chakra del bijuu.

La preocupación se transforma por unos instantes en curiosidad, ¿cómo es que el Kyuubi no la ha atacado también? aunque la respuesta viene de prisa a su mente: El cuerpo de Naruto y por ende el Kyuubi no pueden ver que es lo que está ocurriendo fuera del cráter en donde están siendo retenidos, sus ataques están siendo guiados por las presencias que puede sentir y Sayuri, al igual que su madre no eran ninjas que pudiera descubrírseles de esa manera.

A cada salto que da su hija en dirección a él una idea que rondaba su mente en lo más profundo empieza a salir, la desesperación de la situación, el peligro en que se está poniendo su hija al acercarse sólo ayudan a que no pueda negar la posibilidad. Necesita encerrar de prisa al Kyuubi, necesita un cuerpo donde encerrarlo. Su lógica no ve otra salida, al paso que va sino lo encierra en unos segundos ella y los que aún se encuentran combatiendo acabaran muertos, por otro lado la idea le parece simplemente aberrante, él sabe lo que pasó con Naruto, sabe que su hija no va a estar en las mejores condiciones cuando se quede sola y lo último que el desea hacer es lastimarla y proceder con el jutsu usándola a ella sería no solamente abandonarla luego de acabar la técnica sino condenarla a un destino incierto.

Los resultados reales de un sellado en alguien que no sea un recién nacido no los conoce por completo, físicamente está seguro de que no la dañará, pero mentalmente no tiene idea a que grado pueda afectarla. El tiempo se termina la técnica con que lo está conteniendo pronto acabará y es más que obvio que el Bijuu no planea dejar que nadie se acerque lo suficiente. Pese a los intentos de acercarse de los ninjas, ninguno es capaz de pasar los ataques del chakra del Bijuu.

-¡Papá!- exclama la pequeña ya muy cerca de él advirtiéndole al Kyuubi de una presencia que no había sentido antes.

Kakashi observa por un instante a Sayuri luego puede ver una de las extremidades formadas por chakra dirigirse en dirección de donde provino la voz. Sin pensarlo realiza los sellos necesarios para realizar la técnica de sellado, no sabe las consecuencias exactas, pero no planea ver como esa cosa mata a su hija en frente de él.

Una intensa y cegadora luz blanca lo cubre todo, a él, a su hija, a la energía y al cuerpo que se encuentra en el centro del cráter. Antes de perder la visibilidad pudo ver como la energía rojiza se retorcía de manera errática regresando a su lugar de origen con lo que simplemente cerró los ojos, por ahora sabe que todo ya terminó y aunque él ya no pueda hacer nada, al menos ha conseguido retener nuevamente al zorro de las nueve colas, lamentablemente dentro de su hija, pero al menos Sayuri seguirá viva, sólo espera que no lo culpe por la situación en la que la dejó.

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Al disiparse la luz cegadora saltando al costado de la hija del Hokage se acerca Neji rápidamente para revisarla, la genin había quedado envuelta dentro del área de la luz y ahora se encontraba boca abajo en el suelo.. Al notar que simplemente parece estar desmayada la voltea notando en el vientre como lentamente se desvanece un sello circular. Un poco más adelante se encuentra el cuerpo inerte del que hasta unos instantes atrás había sido el líder de la villa. A pesar de la luz que impedía la visibilidad su byakugan logró captar lo que ocurría, como la energía del nueve colas cambiaba de contenedor.

Sin Madara y con la pelea terminada sujeta la máscara que llevaba en el rostro y la deja a un lado sintiendo por primera vez en muchos años la brisa del viento sobre su rostro y dejando que el cabello que llevaba oculto se libere cayendo solamente hasta encima de sus hombros. Con tristeza observa el estado de la villa, el cráter y los muertos que lograron al menos no ser desintegrados por la explosión. Pesadamente se pone de pie cargando en sus brazos a Sayuri, quien sabe cuanto tiempo demore para que despierte o el estado en que se encuentre cuando logre hacerlo, sabe que incluso sin el Kyuubi la reacción de esa niña iba a ser poco favorable, pero ahora no tiene idea de que tan manejable le sea la situación.

-Kumori-san- llama un maltrecho y agotado Udon que llega al lugar hasta que su expresión de sorpresa no puede ocultarse cuando posa la vista sobre el rostro del ANBU -¿Neji...?- murmura sorprendido armando en su mente una posible respuesta de lo que estaba observando -¿Qué debemos de hacer ahora?- pregunta luego de observar el cuerpo del sexto Hokage en el suelo.

Neji lo observa con curiosidad sin responder nada, en realidad él no se encontraba con el menor ánimo de dar órdenes, el hecho de no haber participado de la batalla hacia que se sintiera frustrado. El joven médico ninja se acerca un poco más y se pone en frente de él.

-Sakura-san se encontraba al frente de Naruto cuando ocurrió la gran explosión- explica bajando un poco la mirada -Eres uno de los pocos jonin que queda con vida, y el único con capacidad de tomar decisiones.

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-Shikamaru- llama una mujer de cabellos rubios entrando a la habitación oscura en la que se encontraba meditando el ninja de Konoha -Llegó un mensaje...- añade seria observando la oscuridad, al lugar donde sabe se encuentra.

-¿De qué se trata?- pregunta poniéndose de pie y acercándose a la luz proveniente de la puerta.

-Es mejor que lo leas tú... Gaara ya lo hizo, pero...- responde Temari desviando la vista, cosa que preocupa al shinobi que se dirige hacia las oficinas del hermano de la rubia.

Un mensaje corto, de unas cuantas líneas, en realidad no había necesidad de más, no hacía falta la participación de un genio para poder asumir el estado en el que debía de encontrarse Konoha en esos momentos. El Kazekage había preparado ya un contingente de ninjas y médicos dispuestos a partir de inmediato, simplemente esperando a ver cual era la posición que el único ninja de Konoha residente en Suna tomaría.

'El Kyuubi está libre nuevamente y atacando Konoha, al parecer Naruto eliminó a los otros cinco y perdió por completo el control. Trataré de sellar nuevamente al Bijuu, pero los estragos que causará en Konoha serán muy similares o incluso peores que en la última ocasión. Sé que las condiciones actuales de Suna no son las mejores, pero espero que puedan brindar algo de ayuda a los que logren sobrevivir a esta tragedia.

Shikamaru, ya debes de haber tenido en tu mente esto así que dudo que te sorprenda demasiado, pero en su momento con Madara rondando no podía hablarlo con nadie. Kiba está oculto cerca de la región del país del rayo y Neji ha estado trabajando conmigo encubierto como un ANBU, espero puedas reunirte con ellos...'

-Para estos momentos no creo que haya mucho que hacer referente al Kyuubi- comenta Shikamaru cerrando el mensaje y dejándolo sobre el escritorio del Kage -Pero los que sobrevivieron podrían ser atacados por alguna de las villas enemigas.

-Entonces supongo que te integrarás a la misión- interviene el Kazekage cerrando los ojos por unos momentos y luego dirigiendo la mirada hacia la ventana detrás de él.

-Tú no destruiste nada Gaara...- interrumpe Temari, preocupada adivinando los pensamientos de su hermano.

-Lo sé Temari, pero...

-Es mejor que me reúna con el grupo, hay que tratar de ayudar a los que estén vivos y confirmar si el Kyuubi se encuentra activo o no- interviene Shikamaru dirigiéndose hacia la puerta de la oficina.

-Yo también voy- aclara Temari acercándose a Shikamaru -Conozco bien la zona y vamos a tener que dividirnos en varios grupos cuando lleguemos- añade observando a su hermano por unos momentos, sabe que va a estar bien, hace mucho que aprendió a vivir con lo que había sido a pesar que en ocasiones los recuerdos de lo que fue y pudo ser lo atormentaban.

Gaara asiente con la cabeza, no sólo porque su hermana tiene un buen punto sino que no hubiera servido de mucho negarse, de cualquier forma ella iba a acompañar a Shikamaru. El mismo deseaba poder ir, pero como Kazekage su lugar estaba en la villa, lo único que podía hacer era exactamente lo que estaba haciendo, mandar lo antes posible toda la ayuda que fuera necesaria.

-Hay algo más- dice Gaara antes de que los ninjas abandonen la habitación -Ya que estás dirigiéndote a Konoha deberías llevarlo- agrega extendiendo un pequeño sobre -Debe de haberlo enviado aquí para asegurarse que en algún momento pudiera ser entregado.

Shikamaru se acerca con curiosidad y recibe el sobre, está cerrado y al leer el nombre para el que está dirigido deja escapar una pequeña sonrisa triste -Supongo que no tuvo tiempo de despedirse de Sayuri.

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Posándose sobre una roca el halcón mensajero de Konoha se queda observando el cuerpo de un hombre de cabello castaño desordenado tendido en el suelo boca arriba mientras descansa plácidamente junto a un gran perro blanco que ya tiene la vista posada en la recién llegada ave. Entreabriendo el ojo el hombre se sienta lentamente al notar el ave y extiende su brazo, provocando que esta abra nuevamente las alas para planear hasta él.

Liberando el pergamino de la pata del halcón prosigue a abrirlo, luego sobrepone otro pergamino, este un poco más viejo, que llevaba con él y usando su propia sangre hace que aparezca otro pergamino. Lentamente lee el contenido del mensaje y a cada palabra sus manos empiezan a sujetarlo fuertemente hasta empezar a romperlo de los bordes.

Al terminar arruga el mensaje en uno de sus muños y le dirige una mirada a su visible consternado compañero, que aunque no ha leído el mensaje ha sentido la actitud. Rápidamente se pone de pie -Akamaru... regresamos a Konoha, esperemos que todavía tengamos a donde regresar.

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Katt sale lentamente del hospital, hablar con Neji, aunque sea un poco, le ha servido. El muchacho ha aceptado ayudarla con su problema, otra cosa que la libra de muchas presiones. Tsunade la mandó a descansar y con lo agotada que se encuentra no puso ningún pero en contra de eso, mentalmente se encuentra muy estresada no sabe que es lo que le está ocurriendo y peor aún está viendo cosas que se supone van a ocurrirle, cosas que no desea siquiera pensar en ellas "Supongo que fue un poco tonto pensar que iba a vivir tranquila y feliz con Kakashi... al final de cuentas esto es una villa ninja, yo soy una ninja..." piensa avanzando por las calles de Konoha hacia su casa, las calles que extrañamente se le hacen vacías y ajenas en esos momentos, su cabeza tiene demasiado acumulado, demasiadas dudas y preguntas que no pueden ser respondidas por alguien y donde lamentablemente ella parece ser la única que sabe algo de lo que ha visto "Aunque... supongo que no puede ser tan malo, en especial ahora que Neji va a ayudarme un poco" se dice a si misma tratando de sacar el lado positivo "Además ¿qué tan malo puede ser ese futuro?" sabe que era una batalla, pero siempre hay batallas, esa obviamente no era una común, pero no tiene razones para pensar en algo catastrófico.

Tratando de buscar formas de animarse continúa su camino a casa, pero una sensación desagradable la acompaña en el camino, no sabe la razón, pero siente como su pecho se comprime un poco y sus manos tiemblan levemente. Katt recuerda una vez que tuvo algo similar, hace varios años cuando le avisaron sobre el incidente que tuvieron sus padres, pero ahora nadie la ha dicho nada así que lo atribuye a lo preocupada que se encuentra con la situación que está teniendo que afrontar sola.

Antes de desaparecer de la página dejen review (O de pasar al siguiente capítulo si es que hay más), ya saben, este es el final de la vida de la Katt más vieja, como ella ya ha movido algunas cosas la Katt normal no tiene porque llegar a ese futuro (De por si, al menos está comprometida con Kakashi xD) ¿Opiniones? ¿Qué les parecieron los seis que andaban peleando y de paso Kushina y Minato? ¿Qué tal la gente conocida? ¿Me odian por sólo dejar a un par vivos? xD

No quedó exactamente como me hubiera gustado tantos combates se me hacían difíciles de contar en especial porque no quería ser demasiado específica con nada, para poder tener mayor flexibilidad en caso Kishimoto haga algo que me agrada y quiera adaptarlo. No me encuentro muy satisfecha, hay algo que simplemente me molesta de lo que he escrito, por un lado mi beta quería que especificara mucho más, pero la idea no me gustaba del todo, las peleas grandes a veces son mejor cuando uno puede crear una idea de lo que ocurre usando la base de lo que ve, mas que simplemente recibir por completo la idea del autor.

Ahora si, de aquí en adelante la mayor de las Katt no volverá a salir, ya anda muerta xDDD así que un problema menos que provoque confusiones XDD. La Katt normal no tiene idea de nada de lo que ocurrió en este capítulo (Por suerte para su salud mental)

Comenten, que de paso sus criticas me ayudan para cuando escriba la parte "grande" de la línea de tiempo de la Katt que conocen, así si ven alguna cosa que debo de mejorar o algo que les gustó mucho me lo dicen para ver que cosas no debo de olvidar luego y cuales debo de revisar para ver como ponerlas mejor (Claro, lo que escriba luego no va a ser igual, pero las pautas siempre sirven)

Suismo o mal manejo de alguna de mis dos pequeñas creaciones (Bueno, tres Orion también es mío xD) no es que se les haya visto tanto, pero cada cosa que digan sirve ^^

Conteo de vivos (Esto es más sencillo) Neji, Kiba y Shikamaru (De los 12 jóvenes de Konoha) dos de ellos estaban dados por muertos y el otro andaba en Suna. Es el final de una guerra bastante fea llevada hasta el extremo por Madara, igual que Konoha el resto de villas incluso las enemigas deben de andar muy similar (¿Quién faltó en Suna ;o;?)

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