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Capítulo 14: Sabotajes y marionetas

Katt despertó con el sonido de un pergamino apareciendo en su habitación. Con resignación se alistó temprano para evitarse un roce innecesario con Kurenai y con suerte poder aprovechar para hablar con Kami y Panza sobre el acuerdo al que había llegado la noche anterior con Shikamaru y Kiba.

En el camino al lugar citado ve al equipo de Ebisu reunido, al parecer también iban a ir de misión y el jonin estaba informando los detalles. Eso dejaba descartada la posibilidad de que se sabotearan entre ellos y mucho menos al equipo de Kakashi, aunque también le permitía a Katt hablar con su equipo para que no los tomara por sorpresa.

Unos veinte minutos antes de la hora los dos genin llegan juntos al lugar citado y parecen un poco curiosos al ver a la pelirroja esperando.

-¿Les agrada Kurenai como sensei?- pregunta ella, consiguiendo que ambos intercambien miradas.

-A mi me parece buena sensei- contesta Kami tras pensarlo un poco mientras Panza asiente.

-¿No prefieren a Kakashi?- pregunta Katt un poco preocupada.

-Kakashi sensei también es buen sensei- responde Kami nuevamente.

-A mi me dan igual- interviene Panza -Aunque al menos con Kakashi sensei si me quedaba dormido no pasaba nada.

-Y me puede ver con su Sharingan- agrega Kami sonriente al recordar la habilidad del jonin.

-¿Entonces, me ayudan a recuperar a Kakashi como jonin?- cuestiona ella con una gran sonrisa en el rostro, haciendo que los dos niños se miren entre ellos un poco extrañados -Miren, hay otro grupo que quiere a Kurenai y nos vamos a ayudar para hacer los cambios- explica con un poco más de detalle bajo la mirada atenta de sus dos compañeros -¿Quieren ayudar? De paso les puede servir para practicar un poco.

-Bueno- asienten ambos, algo confundidos; al parecer no entienden la razón por la que Katt no quiere a Kurenai como jonin, pero al ser algo fuera de la rutina de siempre les atrae.

-Entonces, ya saben. Ahora tenemos que ver cómo hacemos para que no vayamos de misión el mismo día que Kiba y Shikamaru- comenta Katt, aunque deja de hablar al ver a una muchacha como de su edad acercarse. Es una kunoichi con la bandana de Konoha sobre la frente, de cabello violeta oscuro recogido de forma muy desordenada y vestida con un sobretodo beige.

-Hola- saluda la muchacha al acercarse, mirando fijamente a la pelirroja -¿Eres nueva? Nunca te había visto antes.

-Sí, llegué hace unos meses- responde Katt tranquilamente.

-Ya me parecía raro no reconocer quién eras, sobre todo con el color de cabello que tienes- comenta señalando la larga cabellera pelirroja, tomando una postura relajada. Tras unos instantes observa bien a Katt y a los dos genins que la acompañan -Soy Anko.

-Hola... yo soy Katt- responde un poco confundida. No esperaba que se presentara y menos de una forma tan informal, algo bastante distinto al resto de personas que había conocido en Konoha.

-Acabo de volver de una misión. ¿Parece que tú estás por ir a una no?- pregunta Anko mirando a Kami y Panza.

-Sí, aunque estamos esperando a...- Katt iba a decir que estaban esperando a Kurenai, pero Anko la interrumpe.

-Genins. Siempre hay uno que llega tarde en cada grupo- suelta con algo de fastidio para luego volver a observar a la pelirroja con atención -Tal vez cuando regreses y no estés ocupada con los genin podemos ir a tomar algo- ofrece de forma amistosa -No hay mucho que hacer en Konoha aparte de las misiones y entrenar, te vas a dar cuenta de eso en poco tiempo, si es que no lo has hecho ya.

-Sí, claro- asiente Katt sonriendo ligeramente y tratando de no reírse "Creo que está asumiendo que soy jonin y Kami y Panza mis genin"

-Bueno, nos estamos viendo- se despide, mencionándole, mientras se aleja, del lugar donde suele ir a tomar un poco cuando no está en misión para que la busque ahí cuando regrese.

Cuando la kunoichi desaparece de su rango de visión, los tres genin comienzan a reír un poco.

-¡Hey! Eso no es gracioso. Estoy harta que me confundan con chunin o jonin- se queja Katt sonriendo, era mejor tomarlo con humor -Lo peor es que necesito como seis meses más para ver si me libro de esta situación.

Kurenai hace su aparición a la hora exacta de la reunión. Sin perder el tiempo informa sobre la misión de rango C que les ha sido asignada. En la frontera del país del río con el país del viento dos pueblos fronterizos están atravesando por lo que parece ser un problema territorial, o asunto similar, que se conversará entre las autoridades locales. La misión consiste en brindar seguridad para las negociaciones y además asegurarse que todas las disputas relacionadas al tema queden zanjadas al momento en que se firme el tratado.

-Es muy importante que este tema se resuelva, de no ser así en unos meses podría transformarse en un conflicto mayor- especifica la jonin seriamente -El viaje hasta la frontera son dos días y el tratado debe de negociarse dentro de unos tres o cuatro.

"Mala misión, esta cosa es delicada, no se presta a sabotajes" piensa Katt tras escuchar a Kurenai.

-¿Sucede algo?- pregunta la jonin al notar pensativa a la otra kunoichi.

-No- responde Katt a la vez que una idea viene a su mente -Acabas de decir que es una misión C, pero también dijiste que es una misión con dos partes en conflicto y ya que asumo que una parte nos contrató...

-Sí, es muy probable que la otra haya contratado ninjas también- asiente Kurenai al ver a qué punto estaba yendo Katt -Pero el país del viento es aliado nuestro y a pesar de que en esta ocasión sea el país del río el que nos contrató, no se espera ningún tipo de hostilidad. Sólo vamos para vigilar así como los ninjas de Suna probablemente lo hagan.

-¿Suna?- repite Katt un poco extrañada, según recuerda ellos fueron una de las dos aldeas que atacó Konoha un mes antes de que ella llegara.

Kurenai deja escapar un ligero suspiro y explica que Suna, al estar ubicada dentro del país del viento, son la opción más lógica para ser contratados por uno de los pueblos en conflicto. Al notar la expresión preocupada de Katt le asegura que a pesar de los recientes problemas la alianza con ellos está restablecida. Tras esto les da un tiempo para que se preparen.

"Estos países son chicos" piensa Katt mientras alista sus cosas para la misión y los días que tomará "Por lo que vi en los mapas todos se pueden recorrer bastante rápido, eso debe ser un problema cuando persiguen prófugos, cruzan la frontera y listo. Ya quisiera que fuera así de donde vengo"

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En el pueblo fronterizo del país del río, el grupo es recibido por el alcalde. El hombre parece muy aliviado de tenerlos presentes, al parecer los shinobi de Suna habían llegado el día anterior y estaban más informados sobre la situación. Ante esto Kurenai pide que se le explique en detalle la misión, sobretodo la raíz del conflicto que no se encontraba especificada en el informe que se le entregó. De inmediato el alcalde los lleva a la frontera, donde ven la línea divisoria de ambos pueblos y un árbol creciendo a la mitad.

"¿Se están peleando por un árbol?" se pregunta Katt tratando de contener la risa.

-¿El árbol?- cuestiona incrédula Kurenai, parece que necesita oírlo para poder creerlo.

-Se que se ve un poco ridículo, pero... es nuestro. Tenemos papeles que confirman que lo es- asegura el alcalde.

-Sepárense, revisen y conozcan el pueblo. Asegúrense que no haya nada que pueda evitar la firma del tratado... por el árbol- indica la jonin tratando de sonar lo más seria posible por respeto al alcalde -Yo iré con usted para que me explique cómo será todo.

Al separarse de su equipo, y sin nadie cerca, Katt se permite reír ante la situación.

"Y yo que pensé que no podía intentar sabotear esta misión. Es una ridiculez, sólo debo asegurarme que se complete, como dijo Shikamaru. Aunque va a ser difícil hacerlo sola" medita sobre la situación. No llegó a terminar de hablar con Kami y Panza.

Frente a ella, en dirección contraria, camina un muchacho vestido de negro con pintura morada decorando su rostro. Al cruzar miradas este le sonríe.

-¡Hola!- saluda el muchacho -No esperaba verte por acá.

-Eres el chico que estaba ayudando a Kakashi hace un par de meses- dice ella al reconocerlo -Estabas con el pelirrojo y la rubia.

-Qué bueno que me recuerdas- comenta manteniendo la sonrisa, tratando de ignorar el que lo llamara 'chico' -Creo que no tuvimos la suerte de presentarnos, mi nombre es Kankurou.

-Katt- dice ella, mientras dirige su mirada a la bandana, o mejor dicho gorro, en donde lleva el símbolo de Suna.

-Que nombre tan exótico- comenta al escucharla.

-Bueno, mi nombre es Katherine, pero me gusta que me digan Katt. Tu sabes, más corto y rápido de decir.

-Aún así. Katherine también es exótico- insiste.

-No de donde vengo- asegura ella sonriendo.

-¿No eres de Konoha? Porque hasta donde veo tienes la bandana y estás con un equipo de Konoha- pregunta Kankurou con interés.

-Soy ninja de Konoha, pero no nací, ni me críe en Konoha. En realidad sólo llevo unos meses ahí- explica Katt con toda naturalidad, nadie la ha dicho que su pasado sea secreto.

-Eso suena interesante- comenta él -¿No quieres venir a comer algo y hablar un poco? Cuidar un manzano no es muy divertido- agrega, dejando claro que se encuentra presente ahí para la firma del tratado.

Katt lo piensa un momento y luego acepta, el árbol no iba a ir a ningún lado. Además después de dos días acampando una comida decente no era para rechazar. El muchacho de Suna la lleva al pueblo que se encuentra al lado del país del viento, y ahí la invita a una casa donde parece se está hospedando.

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-Entonces eres de otro mundo- dice Kankurou con la mirada fija en la pelirroja mientras terminaban de comer -Eso es bastante interesante.

Ambos shinobi se encontraban en una pequeña casa que funcionaba como posada y que en esos momentos sólo estaba atendiendo a los enviados de Suna, que eran un grupo de cuatro con Kankurou a la cabeza de tres genin. El muchacho de Suna era bastante agradable y había estado escuchando con atención a Katt mientras le contaba su historia sin ningún tipo de interrupción a pesar de lo irreal o extraño de la situación.

-Pero hay algo que no comprendo bien- agrega dejando de lado los palillos con los que había estado comiendo -¿cómo es que te graduaste como genin en tan poco tiempo? Por lo que me has comentado no hay ninjas como nosotros en tu mundo.

-Desde que me acuerdo estudié artes marciales- responde ella tras unos segundos. No era algo que realmente se hubiera puesto a pensar -Debo haber empezado a los tres años, así que tengo como dieciocho años entrenando. Aunque los últimos cuatro bajé un poco el entrenamiento, estaba más ocupada estudiando otras cosas.

-Ya, eso explicaría que fueras buena con taijutsu y armas, pero para graduarse se necesita un mínimo de genjutsu y ninjutsu- explica él tranquilamente antes de dibujar una sonrisa en el rostro -A menos que en Konoha los requisitos sean menores de lo que pensaba.

-Me demoré como un mes en graduarme- comenta, riendo ligeramente ante el último comentario -Muchos de los temas teóricos e incluso prácticos los conocía por mis estudios, lo nuevo para mí fue lo relacionado al chakra- explica. Por la edad de los alumnos la academia ninja no sólo impartía habilidades propiamente ninjas, sino que también funcionaba como una escuela -De donde vengo eso es un tema relacionado a la espiritualidad y estado mental. No para influir el entorno con técnicas.

-Pero aún eres genin- puntualiza él -Supongo que no pasaste el examen chunin, ¿Konoha ya tuvo el suyo no?- pregunta, asumiendo que ella había participado en el evento.

-Sí, no pasé el examen. Aunque mejor, no creo estar a la altura aún- responde ella con total honestidad antes de soltar un suspiro -Claro que si hubiera aprobado me libraba de que me sigan confundiendo con chunin o jonin y tenga que explicar que soy genin.

-¿Y quienes pasaron?- pregunta con curiosidad Kankurou.

-Solo dos. Hyuuga Neji e Inuzuka Kiba.

-Me alegro por ellos- comenta luego de unos instantes -¿Y los otros genin del grupo de ellos?

-Lo hicieron bien, pero Tsunade aún no los dejo volverse chunin- explica ella recordando el día en que se les dio los resultados -¿Los conoces?- pregunta ella con curiosidad.

-Sí ¿Sabes sobre el ataque de Suna a Konoha?- cuestiona él y continúa cuando ella asiente -Los conocí en ese examen y luego fui parte del grupo que los apoyó con el asunto del supuesto secuestro del Uchiha- explica con total tranquilidad -Tenemos una buena relación.

-Entonces... ¿Te llevas bien con Kiba y Shikamaru?- cuestiona ella con mucho interés y una pequeña sonrisa.

-Sí. ¿Por qué preguntas?- responde visiblemente curioso.

-Es que...- susurra Katt, dudando por unos momentos -Digamos que los tres tenemos un problema con nuestros jonin- se anima a hablar. El muchacho le trasmitía suficiente confianza.

-¿Con sus jonin?- repite, ahora mucho más curioso.

-Sep- asiente ella sonriente -Queremos cambiar de jonin, pero para eso las misiones no deben de ir tan bien. O al menos eso cree Shikamaru.

-¿Están planeando sabotear misiones?- pregunta luego de reírse abiertamente.

-No lo digas en voz alta- susurra Katt apresurándose a taparle la boca con su mano -No quiero que Kurenai se entere.

Katt explica la situación en la que se encuentra junto con Kiba y Shikamaru. Sobre como los dos muchachos quieren deshacerse de Ebisu y ella de Kurenai para recuperar a Kakashi y el plan que propuso Shikamaru. El shinobi de Suna se ve muy divertido con la explicación.

-No pensé que fueras del estilo saboteador- comenta él con una sonrisa bien marcada, visiblemente divertido -¿Quieres algo de ayuda?

-¿De verdad?- pregunta ella un poco sorprendida. No esperaba que él se fuera a ofrecer.

-Es divertido, y me serviría para entrenar un poco a mis genin - contesta de inmediato -Entonces, para sabotear esta misión...

-Pero...- interviene Katt un tanto preocupada.

-Sí, ya sé: la misión debe salir bien al final- dice Kankurou con una sonrisa en el rostro.

El ninja de Suna llama a sus tres genin, unos niños que se ven un poco menores que Kami y Panza. Les indica que traigan un hombre del pueblo que se encuentra en el país del río sin que nadie los note y con especial cuidado de no acercarse a la jonin de Konoha. Con sus órdenes, los genin se retiran de inmediato.

Durante la espera, Kankurou le explica a Katt que también van a necesitar el documento que se debe firmar, que en esos momentos ya debe de estar preparado, pero que de eso se encargarán ellos dos. La pelirroja aguarda con curiosidad, el muchacho parece tener algo bien preparado en la cabeza, aunque no lo está revelando aún.

Los genins regresan con un hombre inconsciente que apesta a licor, posiblemente un borracho que no les dio ningún trabajo para secuestrar. Kankurou asiente satisfecho y le explica a Katt que necesita que ella distraiga a su jonin por unos momentos mientras él va por el documento. La kunoichi duda por unos instantes, pero tras meditarlo se da cuenta que sí puede distraer a Kurenai.

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La pelirroja regresa al pueblo del país del río y busca a la jonin mientras que Kankurou se separa de ella, sólo necesita un minuto para tomar el documento. Es de noche por lo que no hay gente en las calles y muy pocas viviendas parecen tener algún tipo de iluminación. Logra dar con Kurenai cuando esta parece estar regresando a una casa de buen tamaño que funciona como lugar de reuniones; es ahí donde se hablará sobre el tratado a firmar.

-Kurenai- llama Katt acercándose rápidamente, confiando en que el otro shinobi se moverá rápido.

-¿Algún problema?- pregunta seriamente la jonin.

-No, pero quería hablar contigo, tenía una duda- explica ella sonriente "Espero que no me mate..." piensa unos segundos bajo la atenta mirada de la otra mujer -Es sobre Asuma- indica, consiguiendo que la mirada de Kurenai se torne ligeramente agresiva.

-¿Qué sucede con Asuma?- cuestiona la jonin.

-Como a veces te veo con él, asumo que eres su amiga y quería saber si tenías idea si tiene novia o algo similar- comenta Katt muy alegre aunque alerta por si Kurenai se enoja demasiado.

-Ni se te ocurra acercarte a él- responde Kurenai visiblemente molesta acercándose a Katt.

-¿No? ¿Por qué no?- pregunta retrocediendo un poco.

-Asuma merece algo mejor que tú, así que ni te le acerques- replica Kurenai. Está bastante molesta y cerca de Katt.

- Oh. ¿Eres su novia o algo?- cuestiona la pelirroja con un tono inocente.

-¡Sí!- responde la jonin elevando la voz, pero casi de inmediato retoma la compostura, mostrándose un poco sorprendida por lo que había dicho.

-¿Si? No lo sabía, asumo que entonces lo dejaré en paz- comenta Katt mientras se aleja un poco -Bueno, seguiré vigilando- agrega, dejando a Kurenai pensativa "Más le vale a Kankurou haber acabado ya, que luego de esto Kurenai me va a sacar la cabeza"

Katt se reúne con Kankurou en la casa en la que él se está quedando. Cuando entra ve que el muchacho está modificando el documento y se preocupa un poco por unos instantes, pero luego recuerda que el conflicto es un árbol. El joven se sorprende un poco cuando ve que tiene a la pelirroja casi a su costado, al parecer estaba demasiado entretenido con el documento como para notar cuando llegó. Tras comentarle lo aliviado de su regreso, pues parecía que la otra kunoichi pensaba matarla, le explica que no puede hacer una falsificación perfecta con el tiempo que tiene, pero que al tratarse de algo tan insignificante su jonin posiblemente insista en que la firma se lleva a acabo de cualquier manera.

-Este documento confirma que el 70% de la producción del árbol corresponde al país del río, simplemente estoy haciendo que sea al revés- explica con tranquilidad -El perder el documento ya es malo, pero cuando noten esto va a ser peor. Pero no te preocupes, no van a poder echarles la culpa a ustedes, ya que el ladrón fue alguien del pueblo- comenta Kankurou mirando al hombre que tiene inconsciente.

-¿Para eso lo trajiste?- Lo mira Katt bastante interesada -¿Y cómo vas a hacer que se vea real? Ese tipo no puede ni caminar-

-Ya verás, de eso me encargo yo - responde. acabando de 'arreglar' el documento -Por ahora regresa a vigilar como si nada ocurriera.

La pelirroja cruza la frontera y comienza a caminar por el pueblo del país del río notando de inmediato que ya se habían dado cuenta de la ausencia del documento. Cuando llega al edificio principal, el resto de su equipo ya está presente. Kurenai mantenía el semblante serio mientras el alcalde parecía no saber qué hacer. La jonin ordena a sus genins que busquen el documento y lo encuentren como sea antes de la hora de la firma. Katt asiente sin decir una palabra y los tres genin comienzan a buscar.

Cerca de una hora después de iniciada la búsqueda y de recorrer las calles, Katt reconoce al hombre que los genin de Kankurou habían raptado, caminando erráticamente por el pueblo, con el documento en una mano y una botella de alcohol en la otra. Cuando se acerca, el hombre se desploma al piso como una muñeca de trapo y no le queda otra opción que llevarlo casi a rastras hasta donde Kurenai.

La jonin se alivia al ver el documento, pero se sorprende de que el ladrón haya sido un habitante de la aldea, aunque el olor a alcohol es tan fuerte que asume que el hombre no tenía idea de lo que estaba haciendo. Pero cuando el alcalde puntualiza que el contenido del documento ha sido modificado, explicándole las cifras, Kurenai se tensa un poco. Tras hablar con el alcalde logra convencerlo que lo mejor era cerrar el asunto y volver a llevar una relación amistosa con sus vecinos. Katt está segura de que Kurenai sospecha que hubo algo más, pero la raíz del conflicto era tan ridícula que simplemente decidió dejar las cosas como estaban.

Al día siguiente la firma se lleva a cabo sin problemas entre ambos pueblos. Los shinobi de Suna se ven especialmente alegres, pero Kurenai no entabla ningún acercamiento con ellos. Cuando todo termina es Katt la que se acerca a Kankurou, en unas horas regresará a Konoha y él posiblemente a Suna.

-Te vez muy divertido- comenta Katt colocándose al lado del muchacho.

-Un poco, estas cosas alegran la vida- explica con una sonrisa. Luego observa a la pelirroja a los ojos -Pero creo que ya tienes que volver a Konoha y yo a Suna.

-Sí...- asiente en voz baja "Quizás quiera ayudarnos"

-Ojala nos estemos viendo pronto, guapa- agrega como despedida y se comienza a alejar muy despacio.

-¡Espera!

-¿Si?- pregunta él volteándose lentamente con una notoria sonrisa en el rostro.

-¿No quieres venir a Konoha?, nos puedes ayudar un poco.

-No lo sé- responde ante la invitación, pero su rostro mantiene la sonrisa -¿Dónde me quedaría?- cuestiona con un falso tono inocente.

-Si quieres en mi casa, aunque te vas al sillón- contesta Katt riéndose un poco.

-El sillón no me incomoda, además molestar ninjas de Konoha suena divertido- comenta Kankurou acercándose nuevamente -Más si la compañía es buena.

-¿Vienes entonces?

-Sí, pero antes tengo que llevar a los genin de regreso y dar mi informe- explica él mientras busca algo en uno de sus bolsillo -Luego de eso podría ir a Konoha- añade y luego extiende un pequeño reloj de arena.

-¿Y eso?- pregunta, viendo cómo toca ligeramente unas inscripciones muy pequeñas en los bordes del objeto.

-Como te dije tengo unas cosas que hacer en Suna. Cuando la arena termine de caer estaré llegando a Konoha- explica entregándole el objeto -Hasta entonces- se despide, dejando a Katt observando el pequeño reloj.

El equipo de Konoha comienza el regreso, con Katt aliviada de que el inconveniente de la misión parece ser lo que está ocupando la mente de la jonin y no la pequeña conversación que tuvieron. Los dos días de camino transcurren tranquilos, pero el grupo se mantiene más silencioso de lo usual: la misión se realizó, pero perder el documento fue un error.

Al llegar a Konoha, Kurenai se dirige a la oficina de la Hokage para dar su informe y los tres genins se retiran a sus casas. Pero antes de que Katt llegara a su departamento, escucha a Panza llamarla junto con Kami, al parecer un shinobi les avisó que debían de acercarse a hablar con Tsunade. La pelirroja se preocupa un poco, no llevaba en Konoha ni diez minutos.

En la oficina de la Hokage, ve a Kurenai con un semblante serio, a Shizune un tanto nerviosa y a Tsunade visiblemente molesta.

-Alguno de ustedes tal vez me pueda explicar... ¿¡Cómo diablos se perdió el documento!?- grita Tsunade a la vez que golpea fuertemente su escritorio.

-Cálmese Tsunade-sama- pide Shizune preocupada, sosteniendo unos documentos antes de que cayeran al suelo a causa del movimiento del mueble.

El cuerpo de Kurenai se tensa un poco al escuchar el grito, Panza se oculta detrás de Katt y Kami se hace invisible. La pelirroja está bastante sorprendida, no esperaba que Tsunade se fuera a molestar tanto, pero sabe que ella no es la responsable directa de la misión por lo que no se preocupa demasiado.

-El documento lo tenía guardado el alcalde y lo robó uno de los pobladores...- explica Katt al ver que nadie responde y que Tsunade parecía estar esperando una respuesta que no fuera de parte de Kurenai con la cual ya debía de haber hablado.

-¿Y por qué no estaban con el documento?- cuestiona de inmediato.

-Estábamos vigilando que nadie del otro pueblo hiciera algo o incluso los ninja de Suna...

-Al menos el tratado se firmó- masculla Tsunade intentando calmarse un poco.

-Tsunade-sama, la misión la hicieron bien a pesar de lo ocurrido, además estaban vigilando donde debían. El hombre que robó los documentos era del pueblo y parece que sólo lo hizo por estar borracho...- interviene Shizune tratando de apaciguar la situación.

-Sí, sí- suelta Tsunade en un tono de pocos amigos -Ya pueden retirarse- añade cortante y con un movimiento de la mano señalando la puerta.

Fuera de la oficina de la quinta, Kurenai respira aliviada, quizás esperaba una llamada de atención más fuerte, y se retira sin decir ninguna palabra. Kami y Panza se ven preocupados e incluso asustados.

-Tsunade-sama estaba molesta- comenta Panza triste.

-Muy molesta- agrega Kami con la mirada baja.

-Eso es cierto, pero no es para que se espanten así- comenta ella sonriéndoles y tratando de olvidar a Tsunade -Vayan a descansar, tuvimos una misión larga.

Cuando los dos genins se retiran, Katt decide que lo mejor es hablar de lo ocurrido en la misión con Shikamaru y Kiba. Como sólo conoce la casa del segundo se dirige ahí con la esperanza de que hayan regresado "Pobres Kami y Panza, les da miedo que los regañen, aunque es lógico son niños aún; a mi sinceramente me da igual, aunque debo admitir que Tsunade da un poco de miedo. Este plan de sabotaje va a ser difícil, tampoco quiero que Kami y Panza sufran" medita ella hasta llegar a la casa de los Inuzuka.

Una joven un poco menor que ella es la que atiende la puerta, tiene el cabello y ojos marrones y las distintivas marcas rojas del clan sobre sus mejillas. Si bien se le reconoce como parte de los Inuzuka sus facciones son mucho más delicadas que las de Kiba o su madre.

-Hola ¿Por casualidad estará Kiba?- pregunta Katt sonriendo, por algún motivo la casa le parece muy agradable y se oyen muchos ladridos desde el interior.

-Kiba regresó de su misión pero no está en casa, creo que se fue con uno de sus compañeros de equipo- explica la muchacha con una expresión de preocupación -¿Hay algún problema con él?

-¿Problema? No, no, sólo quería hablar con él- le responde de inmediato "No, aún no se ha metido en problemas. Pero en unos días quién sabe" agrega en su mente "Debe de haberse reunido con Shikamaru posiblemente"

-Qué bueno- dice aliviada -Pensé que se había metido en algún problema y la Hokage te había mandado a buscarlo- explica la joven ya con una expresión mucho más tranquila.

Katt se despide de la muchacha y decide tratar de buscar a los muchachos en el lugar donde se reunieron anteriormente. Luego de atravesar la densa vegetación de la ruta, logra dar con el claro. Divisa a Kiba en compañía de Akamaru y Shikamaru sentados alrededor de una fogata recién encendida.

-Qué bueno que viniste, pensé que iba a tener que ir a buscarte- comenta Kiba a la vez que Akamaru ladra como si opinara igual.

-Por si te dicen algo pasé por tu casa antes de venir acá. Me dijeron que te fuiste con alguien de tu equipo, asumí que vendrían para acá- explica ella acomodándose junto a ellos -¿Cómo les fue?

-Horrible, no pudimos retrasar ni adelantar la misión- se queja de inmediato Kiba, Ebisu era demasiado recto en los tiempos.

-En mi misión me encontré con Kankurou, creo que lo conocen- explica ella viendo la expresión de fastidio de Kiba -Aceptó ayudarnos de paso que saboteó mi misión- añade con una sonrisa.

-¿Kankurou?- repita Kiba sorprendido al escuchar el nombre del shinobi de la arena -¿Va a venir a Konoha?

-Sí, pero en un par de días, tenía cosas pendientes que terminar y devolver sus genins a Suna- contesta ella.

-¿También se volvió chunin?- cuestiona Kiba. Como las aldeas realizaron exámenes por separado los resultados no son tan conocidos.

-Sí. Su hermano y su hermana también.

-Qué problemático- interviene Shikamaru al escuchar sobre la hermana del shinobi de la arena -Esa mujer ya es chunin...

Katt les explica lo ocurrido en la misión. Ambos muchachos se ven notoriamente preocupados al escuchar cómo sucedió todo; era obvio que Kurenai debía saber que algo extraño ocurrió ahí y no ahondó en averiguar sólo por lo ridícula de la situación. Cuando cuenta que los llamaron donde la Hokage, Kiba se ve notablemente espantado y a la vez preocupado por su antigua sensei, era la jonin encargada y su responsabilidad.

-Ahora hay que ver para que le pase algo similar a Ebisu- comenta Shikamaru con seriedad -Aunque de ser posible que el error sólo quede en conocimiento del equipo y no de los clientes.

-Lo malo es que si nosotros seguimos yendo de misión el mismo día, Kankurou solo va a poder sabotear a uno y además aún queda el equipo de Kakashi- dice Katt sin muchos ánimos.

Luego de esto los tres shinobi se retiran.

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Dejando a tras el lugar de reunión, Katt regresa a las calles de Konoha. Ya es de noche y muchos negocios comienzan a llenarse con sus clientes habituales, la mayoría pequeños establecimientos de comida. Pero la pelirroja aun no está hambrienta y decide ir al departamento de Kakashi, llevaba más de una semana sin saber nada de él.

Toca varias veces la puerta y espera. No está segura si aún no había regresado de su misión, si le habían entregado otra mientras ella estuvo fuera o sencillamente estaba dormido. Cuando estaba a punto de rendirse a irse siente la puerta abrirse.

-Katt...- saluda Kakashi. Su expresión más adormilada que de costumbre, el cabello más revuelto de lo usual y la ausencia de la bandana, dejan ver que debía de haber estado durmiendo.

Al verlo ella lo abraza efusivamente, si bien no había estado pensando directamente en el jonin todo el tiempo, él era su motivación para haberse unido a Kiba y Shikamaru. Kakashi la deja entrar y luego de cerrar la puerta se sientan en el sillón.

-¿Acabas de volver de misión?- pregunta al verlo visiblemente cansado y no sencillamente adormecido por acabar de despertarse.

-No, regrese hace ayer en la noche- responde él antes de cerrar su ojo y al parecer quedarse dormido.

-¿Kakashi?- llama ella acercándose más a él -¿Te dormiste?- agrega en un tono un poco más alto, pero sin ningún resultado. Podía gritarle, seguramente se despertaría con eso, pero se le notaba muy cansado.

"Esto es injusto" se dice a sí misma observándolo en silencio "No lo veo por días y cuando al fin estoy con él se queda dormido" piensa con mucha frustración. Sabe que está cansado, pero también sabe que en cualquier momento se les volverá a asignar una misión y no se verán nuevamente por días "Y posiblemente cuando nos volvamos a ver va a seguir cansado por la última misión que haga"

Unos choques ligeros y repetitivos en la ventana llaman su atención. Al acercarse ve a un insecto conocido tratando de salir y a Shino esperando en el techo de un edificio cercano "Ahora hasta me sigue fuera de mi casa" piensa un tanto perturbada, pero igualmente abre la ventana dejando salir al insecto. Cuando el insecto llega con su dueño, este se retira inmediatamente.

Regresa con Kakashi, que sigue dormido y se acomoda a su costado. Por cerca de una hora guarda la esperanza de que el jonin se despertaría, pero luego lo medita mejor y comprende que Kakashi iba a seguir durmiendo por un buen rato más. Sin nada que hacer su estómago comienza a reclamarle alimento y decide retirarse.

"Qué situación más incómoda. Tengo que recuperarlo como jonin o nuestra relación no va a llegar a ningún sitio" piensa mientras busca un lugar dónde comer "Veré si Anko está en Konoha, al menos es alguien con quien hablar y parecía agradable, algo extraña, pero quién no lo es por aquí y me serviría la compañía"

Katt encuentra el lugar que Anko le había comentado. Al ingresar se encuentra con un ambiente tranquilo y agradable a pesar de lo concurrido del establecimiento. El pedido que más se ve en las mesas de los clientes es té o sake acompañado por unos dulces redondos insertados en un palillo. En una mesa al fondo del local divisa la desordenada cabellera de la kunoichi que estaba buscando.

-¿Recién llegas de tu misión?- da como saludo Anko al ver a la pelirroja -Tsunade si que está haciendo trabajar a los genin- añade a la vez que le hace una seña para que se siente.

-¿A qué saben esos dulces?- pregunta Katt viendo el plato de la mujer y la cantidad de palillos acumulados al costado.

-¿No has comido dangos nunca?- cuestiona ruidosamente con una mezcla de sorpresa y espanto -Me dijiste que no eras de acá, pero no haber comido dangos nunca... que horrible.

-Asumo que eso quiere decir que son buenos- replica la pelirroja sonriendo un poco -Aunque no tengo idea qué sean- añade observando con curiosidad las pequeñas esferas que Anko parece comer en mucha cantidad.

-Estás peor de lo que pensé- comenta Anko antes de comenzar a explicarle qué son los dangos y las muchas variedades que hay.

Ambas mujeres conversan por un par de horas. Anko parece igual de desenvuelta que Katt, sino es que más. La pelirroja termina contándole de dónde vino y con esto revelando que no es jonin sino genin.

-¿No eres Jonin?- suelta Anko riéndose con una gran carcajada y golpeando la mesa con la palma de su mano.

-No... Ya te dije, vengo de un sitio donde no hay ninjas y no llevo ni tres meses en Konoha- explica nuevamente, notando algunas miradas curiosas sobre ellas luego de la llamativa carcajada de su acompañante.

-Bueno, todos pasamos por los malos ratos de ser genin, con suerte en el próximo examen te haces chunin. Por cierto, ¿participaste en el último examen?- pregunta ya más tranquila.

-Sí, gané- responde y Anko la observa con mucha curiosidad -Tsunade hizo una final entre cuatro personas- explica recordando el evento -Dos se dejaron inconscientes mutuamente y me encargué de la otra. Honestamente cualquiera de los otros dos me hubiera podido ganar.

-Sí... Había escuchado algo de eso. Debí de haberle hecho más caso a Ibiki cuando me lo contó- comenta Anko luego de pensarlo unos segundos.

Katt no tiene idea quién sea la persona que mencionó, pero no pregunta, Konoha está llena de gente que no conoce. Continúan conversando hasta que son cerca de las once de la noche.

Luego de despedirse de Anko, regresa a su edificio, pero al llegar ve un poster bastante grande, con la cara de Guy sonriente, pegado en la entrada. Katt siente un pequeño escalofrío y entra velozmente no quiere quedarse a ver la imagen. Cuando llega a su puerta ve con espanto que hay otro poster con la misma imagen ahí.

-¿Quién diablos puso esto acá?- cuestiona fastidiada -Ni sé por qué pregunto quién fue. Es un poco obvio.

Sin cuidado arranca el poster de su puerta y tras pensarlo unos segundos decida bajar y hacer lo mismo con el de la entrada. En el momento en que lo está despagando llega su vecino poco amistoso del piso de abajo, el cual le dedica una mirada poco amistosa antes de pasar junto a ella sin decirle una palabra. "Ese tipo da un poco de miedo. Me da curiosidad cómo se hizo todas esas cicatrices en la cara, la mayoría de shinobis que he visto no están en ese estado. Aunque debo admitir que ese sobretodo negro le queda perfecto con la actitud que tiene"

x x

El sonido de un pergamino la despierta muy temprano en la mañana, tiene misión nuevamente. Se alista velozmente y pasa por el departamento de Kakashi primero, con la esperanza de verlo, pero nadie atiende la puerta. Posiblemente el jonin había vuelto a salir de misión o se encontraba profundamente dormido "Esta relación va mal... Bueno, no es que en algún momento haya estado bien..." piensa desanimada, no puede quedarse más tiempo ahí, tiene que ir a su lugar de reunión.

Kiba y Shikamaru también tienen misión, puede ver a los chunin recibiendo las indicaciones de Ebisu. Eso significa que se auto-sabotean o sencillamente no hacen nada.

Kurenai llega a la hora citada y explica al equipo la misión de rango D que se les ha asignado. La jonin da las indicaciones rápidamente y aunque trata de mantenerse serena puede notarse cierto fastidio mientras habla: no es sólo una misión D, sino también dentro de Konoha. Lo más probable es que se tratara de alguna reprimenda por parte de Tsunade.

A pesar de tratarse de una labor sencilla, Kurenai se mantiene mucho más atenta y cuidadosa, no desea otro incidente. Cuando terminan de cerciorarse de haber realizado la misión como había sido encargada, cada uno se retira a sus casas y la kunoichi de ojos rojos va directamente a informarle a la Hokage los resultados.

Katt regresa a su casa rápido. A la mitad de la misión notó que la arena del reloj que le entregó Kankurou ya había terminado de caer, eso quería decir que el muchacho debía de estar en Konoha. Al llegar a su edificio ve al shinobi de Suna.

-Pensaba que te habías olvidado que venía- comenta él al verla. Se encuentra sentado en la puerta de su edificio.

-¿Cómo crees que me iba a olvidar? Tan mala memoria no tengo, estaba en misión- responde ella sonriéndole, al parecer llevaba un rato esperándola.

-¿Kiba y Shikamaru?- cuestiona él mientras sigue a la pelirroja al interior del edificio.

-Fueron de misión el mismo día que yo. Acabo de llegar así que no se si hayan regresado- explica ella abriendo la puerta de su departamento -Pasa, que si mi odioso vecino aparece...

-¿Problemas con los vecinos?- pregunta Kankurou riéndose un poco, pero su mirada se posa en el interior del departamento.

-No, el tiene un problema conmigo- puntualiza ella cerrando la puerta - No tengo la más mínima idea por qué. Aunque recién lo empecé a ver luego del examen chunin, los meses anteriores ni lo había visto.

-Debe de haber estado en alguna misión larga- comenta caminando por la pequeña sala y observando un poco la sencilla decoración con la que le entregaron el departamento a Katt -¿Y Han logrado algún avance o sólo el pequeño sabotaje que yo hice?

-Sólo el tuyo. Y lo malo es que Kurenai está más cuidadosa ahora.

-Entonces tendremos que centrarnos en el equipo de Kiba y el de... ¿Kakashi no?- explica con tranquilidad aún con la mirada estudiando sus alrededores.

-Sep. ¿Seguro que no te metes en problemas haciendo esto?- cuestiona ella ligeramente preocupada -No eres de Konoha y estarías saboteando misiones.

-¡Bah! No me meto en más problemas de los que ustedes se podrían meter- contesta alegremente antes de posar su mirada sobre ella -Además, una sonrisa de agradecimiento tuya hace que valga la pena correr todos esos riesgos.

Habilité la opción para que puedan dejar sin estar logeados (para los que son muy flojos o los que no tienen cuenta en fanfiction o los que prefieren pasar anónimos). Eso sí, si alguien se "emociona" demasiado, como veo en otros fics y empieza a soltar insultos veré para borrar el review xD

Opinen, lo comentarios son siempre bienvenidos.

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