La Bruja Blanca
Lucy estaba recostada sobre la mesa de piedra sin nada que hacer excepto mirar su poción curativa, hasta que escuchó un ruido y decidió ir a ver qué era. Al llegar a la entrada vio a Caspian junto a Peter encabezando a lo que quedó de las tropas.
—¿Qué pasó?.—Preguntó Lu, algo desilusionada.–¿Y las demás tropas?
—Que te diga Caspian.—Dijo Peter con enojo.
—¡Peter!.—Regaño Susan.
—¿Caspian?.—Pregunto el moreno.—Tu fuiste el que no quiso que nos fuéramos cuando aún había tiempo.
–¡Todo fue gracias a ti, si hubieras acatado el plan los soldados aún estarían vivos!.—Protestó el rubio.
—¡Y si nos hubiésemos quedado cómo yo sugerí, lo estarían seguramente!.—Protesto Caspian.—Desearia que ustedes jamás hubiesen aparecido.
—¡Caspian!.—Dijo Jess.
—¿Estás diciendo que quieres que nos vayamos?.—Preguntó Peter.
—Me gustaría sin duda.—Dijo Caspian.
—Pues tu hermana fue la que nos llamó para salvarle la vida, que ella decida, si nos quedamos o no.—Dijo Peter y los dos hermanos mayores miraron hacia la princesa que se encontraba con su profesor tomada de su brazo, suspiró cansada de la situación y decidió acercarse a los muchachos.
—Peter no hagas esto.—Protestó Susan, justo antes de que Jessica se acercara a ambos chicos.
—Lo único que diré.—Empezó la rubia.—Es que estoy decepcionada de ambos, Caspian si hubieses llegado a la reja desde un principio como se acordó, tal vez las cosas no hubiesen salido mal.—Dijo Jess a su hermano, y luego se dirigió a Peter.—Y Peter, todo buen Rey siempre escucha las opciones de los demás, y si hubiese decidido quedarse, las tropas tal vez seguirían aquí. Por nuestra culpa han muerto no solo personas inocentes, si no también nobles guerreros que depositaron toda su confianza en nosotros creyendo que recuperaremos Narnia y ellos vivirían para contarlo.¿Y así dicen Rey, y Príncipe de una nación?.—Dijo Jessica molesta con ambos, y sin nada más que decirle a Nadie entró al lugar pasando en medio de ellos.
—Al menos uno de los dos si sabe lo que dice y lo que hace.—Dijo Peter y se dispuso a entrar también.
—¡¿Sabe lo qué hace!?. ¡Claro!, ¡Al menos yo no fui el traidor que abandonó Narnia.—Protesto Caspian, haciendo que Peter se diera vuelta de nuevo hacia él.
—¡A mí no me hables de traicion.—Dijo Peter acercándose a Caspian.—¡Porque tú eres un usurpador al igual que Miras!.—Dijo Peter y Caspian lo empujó para seguir a su hermana.—¡Tu, el, tu padre!, ¡Narnia estaría mejor sin todos ustedes.—Al decir eso, Caspian desenvaino su espada al mismo tiempo que Peter.
—¡Alto!.—Gritó Edmund, los dos muchachos giraron hacia él, y vieron que un minotauro traía algo, cuando Edmund lo ayudó a bajar lo que traía, vieron que era Trumpkin.
Mientras Lucy corría hacia ellos, Caspian decidió entrar detrás de su hermana seguido de su profesor y el enano Nikari. Lucy al llegar a ellos se arrodilló al lado de Trumpink abriendo su poción curativa y le dió una gota a Trumpink, el cual despertó enseguida, algo aturdido.
—¿Porqué me miran todos?.—Preguntó Trumpink incorporándose, Lucy le sonrió.—Gracias querida Amiguita.—Le dijo Trumpink haciendo que Lucy sonreirá más.
Luego de que todo estaba bien, Susan se dispuso a entrar igualmente al refugio, no sin antes darle un pequeño empujón a propósito a su hermano.
....
Caspian entró al túnel luego de su hermana y se dirigió hacia donde estaban los dibujos de los reyes, un par de segundos después Caspian pudo sentir una presencia, se dió la vuelta y vio a nikabrik parado a su lado de él.
–¿Aún te alegra de que tú hermana haya usado el cuerno muchacho?.–Le preguntó.–Tus Reyes y Reinas fallaron, has perdido la mitad de tu ejército y los otros pronto lo seguirán.
–¿Qué quieres?, ¿Felicitaciones?.–Le preguntó Caspian irritado.
–¿Quieres la sangre de Miraz?, Yo también, ¿Quieres su trono?, Lo conseguiré para ti.–Le dijo el enano y empezó a caminar hacia la mesa de piedra.–Usaste un poder antiguo y fallo, pero puedes llamar a un poder mayor, un poder que mantuvo a Aslan fuera de Narnia durante más de cien años.
Se escucharon ruidos y Caspian desenvainó su espada.
–¿Quién está ahí? .–Preguntó el muchacho.
–Yo soy el hambre y también la sed.–Dijo un hombre lobo.–puedo ayunar durante cien años sin morir, puedo beber un río de sangre sin reventar.–Caspian miró a Nikabrik quien asintió.–¡Muéstrame… a tus enemigos!.–Gritó el hombre lobo quitándose la capucha que tenía, y sobresaltando un poco a Caspian, el cual alzó su espada hacia él.
–Lo que odias nosostros también, nadie odia mejor que nosotros.–Dijo una arpía.
–¿Garantizan, asesinar, a Miraz?.–Preguntó Caspian.
–Y más.–Dijo la arpía mientras hacía una reverencia.–¡Dibujemos el círculo!.
La arpía empezó a recitar unas palabras en una lengua antigua, mientras el hombre lobo hacia un círculo alrededor de Caspian con su uña. La arpía sacó una lanza de hielo de su túnica y la clavó en el suelo formando una pared de hielo en donde apareció la bruja blanca.
–¡Alto, esto no es lo que quería!.–Dijo Caspian retrocediendo, pero el hombre lobo le sostuvo e hizo que levantara la mano.
–La sangre de Adán me liberara, y le serviré mí Rey.–Dijo Jadis.
La arpía tomó una cuchilla y le hizo un corte en la mano a Caspian. Jadis besó una de sus manos y la sacó del hielo acercándose al Príncipe, que dejó de poner resistencia.
–¡ALTO!.–Gritó Peter, apareciendo de repente en la habitación junto Edmund, Susan y Lucy.
Edmund dió un salto sobre una roca y le clavó su espada en la cabeza al licántropo, Peter asesino a la arpía tirándola contra una roca y Lucy puso su cuchillo en la garganta de Nikabrik, pero este le dobló el brazo y tomó su cuchillo para luego tirarla al piso, y cuando estuvo apunto de matarla, Trumpink lo atravesó.
Peter empujó lejos a Caspian de la Bruja y la apuntó con su espada.
–Peter querido, te eche de menos.–Le dijo Jadis.–Ven, con solo una gota basta. No lo lograrás solo y lo sabes.
Peter empezó a bajar su espada, pero justo a tiempo, otro atravesó el hielo rompiéndolo y dejando ver a Edmund con su espada en alto.
–Ya sé, lo tenías controlado.–Le dijo Ed a Peter.
–¡Caspian!.–Nuevamente Jess, apareció angustiada gritando el nombre de su hermano y al ver que estaba bien fue a abrazarlo
–¡¿Porqué ahora se te da por asustarme?!.–Pregunto su hermana algo enfadada con él, luego de soltarse de su abrazo.
–Lo siento.–Le dijo Caspian.
Peter y Caspian miraron hacia atrás, para ver a una Susan muy decepcionada, que después de verlos de esa manera, se fue por donde vino.
…
Mientras tanto en el castillo Telmarino, el anunciante decía cuántos Reínos le ofrecían sus tropas a Los Miraz, ya que él estaba siendo coronado el nuevo Rey, y luego salió a un balcón a saludar a su pueblo con su esposa.
…
De regreso en el refugio, se encontraba Caspian sentado viendo a lo lejos, cuando escuchó pasos detrás de él, se giró, y pudo ver a su profesor caminar hacia él y sentándose a su lado.
–¿Por qué nunca… nos habló sobre la muerte de nuestro padre?.–Le preguntó Caspian.
–Mi Madre fue una enana de las montañas azules, tal vez por eso escogí decirles algunas cosas y otras no.–Inicio el profesor.–Desde que nacieron, me esforcé por qué tú fueras un mejor gobernante de los que te antecedieron, y porque tú hermana no terminará asesinadote por el trono, igual que Miraz con tu padre.
–Al morir mi padre, prometí que cuidaría de Jess que sería un buen ejemplo para ella, los decepcione, a ella, a mi padre, a todos.–Se dijo Caspian.
–No seas duro contigo mismo, todos cometemos errores, lo importante, es aprender de ellos.–Le dijo su profesor, y Caspian se quedó pensando en esa frase.
Jessica recorría el refugio pensando en algo que le tenía la cabeza llena de ideas y suposiciones, y no necesariamente lo que pasó con el ataque en el castillo, y lo que recientemente pasó con su hermano, si no lo importante que se estaba volviendo uno de los cuatro Reyes para ella, no porque los otros tres no le agradará si no que… el Gran Rey Peter, se estaba convirtiendo en una amenaza para su buen juicio.
Ella pasaba junto a la mesa de piedra, justo cuando lo escuchaba hablar con su hermanita en dicho lugar, ambos miraban la imagen de Aslan mientras Jess se estaba acercando sigilosamente mientras los escuchaba.
–Tienes suerte.–Le dijo Peter a su hermanita.
–¿Por qué?.–Le preguntó Lucy.
–Porque pudiste verlo, desearía que me hubiera dado alguna prueba.
–Tal vez la prueba se la debamos ver a nosotros.–Le dijo Lucy.
–A veces no pareces una niña de once años Lu.–Le dijo Peter con cariño.
–Pues a veces.–Dojo Jess, llamando la atención de ambos.–las hermanas menores pueden ser más maduras que los hermanos mayores.
–Es cierto.–Dijo Peter sonriéndole.
–¿Podría, hablar contigo, a solas?.–Le preguntó Jess a Peter, y él asintió.
–Los dejaré solos.–Dijo Lucy con una pequeña sonrisa.
Peter se puso de pie y se acercó a ella.
–Entiendo que sientas… que no soy lo que esparabas, al conocer al Rey Peter, ya sabes… el magnífico.–Dijo Peter.
–Así es, uno mando por lo que dijo mi hermano, esperábamos a alguien más maduro majestad.–Dijo Jess.
–Oye, cuando te dirijas a mí, puedes decirme solo Peter. –Dijo él queriendo decirle eso desde hace tiempo.
–Lo se, pero asi me enseñaron a llamar a los nobles y a los miembros de la realeza a si que, es difícil hacerlo de otro modo cuando ya lo has hecho toda tu vida.–Dojo Jess sonriendo un poco.
–Entonces princesa Jessica.–Dijo Peter haciendo reír a la princesa.–Quiero disculparme por mi comportamiento últimamente.
–Sé que jamás me sacaré de la cabeza, las miradas de súplica que llevaban esa noche los Narnianos.–Confeso Jess.
–Hay muchas cosas que no se olvidan de la guerra.–Dijo Peter.
–Sobre todo el haber perdido a medio batallón que confiaba en ti.–Dijo Jess.
–Así es, y gracias a eso se que he hecho mal, pero también sé que todo lo que hago, lo hago porque creo que es lo correcto, aunque a veces me equivoqué, sé que eso no justifica el prácticamente haberle declarado la guerra a tu hermano, y que siempre te ponga de por medio en nuestra discusión, lo siento.–Dijo Peter honestamente.
–Pues, esa disculpa no es solo para mí.–Dijo Jess refiriéndose también a Caspian y Susan.
–Eso también lo sé.–Dijo Peter mirando un segundo el suelo.
–Mi padre nos dijo una vez, que siempre queda algo bueno, después de una guerra, algo por vivir, ¿No es así?.
–Así es.–Dijo Peter, era un buen momento para cualquier cosa pudiera pasar algo así como un beso, lo cual a juzgar por Peter que se acercaba a ella, yo diría que era lo que estaba a punto de pasar, pero ahora tal vez nunca lo sabremos ya que…
–¡Pet! .–Llegó Edmund sin previo aviso, y los interrumpió bruscamente a lo que ellos enseguida se separaron.
–Ammm…–Dijo Edmund algo incómodo sabiendo que había interrumpido algo importante.
–¿Qué pasa Edmund?.–Dijo Peter rápidamente.
–Si, tienen que venir a ver esto.–Dijo Edmund apuntando hacia detrás suyo.
Edmund los llevó afuera, donde vieron al ejército Telmarino, eran demasiados y además traían máquinas de guerra, catapultas, entre otras cosas…
…
–Tazas y Timbales.–Dijo Trumpink.–Ese es tu nuevo plan, mandar a una niña al bosque sola.
Estaban algunos Narnianos reunidos en la mesa de piedra para trazar el nuevo plan.
–Solo eso nos queda.–Dijo Peter.
–Además no irá sola.–Dijo Susan.–Yo iré con ella.
–¿No ha muerto suficiente gente en esta guerra?.–Le preguntó el enano a Lucy.
–Nikabrik también era mi amigo.–Intervino Buscatrufas.–Pero perdió la fé, la Reina Lucy no, y yo tampoco.
–Por Aslan.–Dijo Reepicheep.
–Por Aslan.–Repitió un oso.
–Y por todos nosotros.–Dijo Jess.
–Entonces voy con ellas.–Dijo Trumpink.
–No, te necesitan aqui.–Le dijo Lucy poniendo una mano en su hombro.
–Tenemos que distraerlos hasta que las chicas estén de vuelta.–Dijo Peter.
–Si me permiten.–Dijo Caspian levantándose.–Miraz tal vez sea un tirano, pero como Rey tiene que apegarse a las condiciones de su pueblo. Y existe una en particular, que nos hará ganar tiempo.
Caspian empezó a contarles el plan, a lo que todos estuvieron de acuerdo menos Jess, pero Peter la hizo cambiar de opinión diciéndole que era un buen plan y que no pasaría nada.
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