7: MOTO
Me desperté con la cabeza como un bombo y una rabia que me ardía por dentro. Mis pensamientos volaron hacia el maldito vecino que toda la noche no dejaba de tocar la guitarra.
No sabía que vecino era, porque vivíamos en un vecindario, pero ya estaba harta. Las noches son para descansar y dormir profundamente no tocar la guitarra y además lo gracioso es que no la sabia tocar. Me gire unas cuantas veces en la cama, porque no sabía que posición coger, si volveré a dormir o eso intentare. Al dar una vuelta le di una patada alguien con mi pie.
- Auch, maldita sea Stacy- grito alguien debajo de la sabana. Rápido cogí la sabana y descubrí el rostro.
- Buenos días, Liam. ¿Qué coño haces aquí?- pregunte de buenas y después a gritos. Muy normal mío, por las mañanas.
- Ayer te quedaste dormida, cuando te estaba acariciando el pelo y creo que yo también me quede dormido...- dijo con una sonrisa torcida. Nos fijamos uno al otro, mire su bello rostro, se que lo odio, odio que me haya dejado con una carta, pero era él. Pero no puedo perder mi orgullo y decir le te quiero.
- Entonces...- que corte por dios. – voy a desayunar, que tengo que ir a la Uni. – le dije y me levante de la cama, el me tiro otra vez en la cama y me beso en la mejilla y se fue para su cuarto.
¿ Es tonto o que le pasa? Pero era tierno...
Me levante de la cama con pereza y me dirige al baño, para hacer mis necesidades. Me deje el pelo por mis hombros me limpie la cara ya que tenía el maquillaje de ayer y estaba horrorosa. Me arregle un poco y salí del baño. Al cerrar la puerta estaba Emma esperando para entrar el baño me fije en ella, se veía cansada, pálida y muy triste. Nos miramos ella con sus labios quería decir algo, pero moví la cabeza como signo "Ahora no, por favor". Tenía que llamar a mi mejor amigo. Lo tenía que hacer.
Me dirigí a mi habitación me puse el horrendo uniforme y cogí mi bolso, baje abajo para hacer el desayuno. Pero antes de hacer el desayuno quería hablar con Edward, así que cogí mi móvil y marque su número.
LLAMADA:
EDWARD: ¿Stacy?
STACY: Vuelve por favor, no me dejes. Te lo suplico.
EDWARD: Stacy en España son las 3 de la mañana, déjame dormir.
Stacy, escúchame bien, me fui porque no quiero verla más, se enamoró de otro rápidamente y pregúntale quien es , te vas a quedar tiesa.
Solo lo vio y se volvió loca. Te prometo que te voy a pagar un vuelo y te vienes de vacaciones. Pero no quiero volver, de verdad. Yo y Emma terminamos definitivamente. LA ODIO.
STACY: Prométeme una cosa
EDWARD: ¿Qué cosa?
STACY: que me vas a pagar el vuelo
Edward: JAJAJA. Claro hermana. Te quiero. I pórtate bien.
Stacy: Te llamo después, te quiero. Eres un maldito desgraciado por dejarme, que quede claro eh.
Edward. Yo también te quiero mejor amiga.
FIN DE LA LLAMADA.
Al acabar de hablar con Edward, deje mi móvil de lado y me dirige a la cocina para preparar el desayuno ya que teníamos turnos y hoy me tocaba a mí. Pero quería hablar con todo de la casa para decirles cosas importantes, normas de casa.
Prepare tortillas y creps para cada uno, les vacié zumo de naranja a casa uno y me senté a esperarlos. No quería desayunar sola.
Comencé a beber mi zumo de naranja y bajaron Mike, Alice y Liam juntos hablando animadamente y después por otra banda salió una Emma fantasma.
- ¿Preparaste esto, Stacy?- pregunto asombrada Alice.
- Si, anda siéntate y come. – le sonreí y todos se sentaron a sus respectivos lugares. Comenzaron a comer y con verlos sabía que les gustaba. Me salían muy bien, porque estuve un verano yendo a clases de cocina porque no sabía ni hacer huevos revueltos.
- ¿Y Edward?- pregunto Mike. Emma levanto la mirada y me miro.
- Sobre eso, os quería contar. – dije.
- Edward, ya no es un miembro de esta casa se fue ayer a España a vivir con sus padres. – dije.- También quería deciros una cosa. – añadí. – Quiero que se apliquen unas normas en esta casa.
- Te escuchamos. – dijeron los hermanos. Me levante y cogí una hoja y un bolígrafo.
- En esta hoja, escribiremos las normas que queréis y si estamos todos de acuerdo las aplicamos si no las tachamos, ¿entendido?- dije y los mire todos.
- No se pueden traer chicos en casa- dijo Liam.
- NO se pueden traer chicas en casa.- dije Yo. Que se cree este. Escribe la primera norma en la hoja.
- Fiestas, solo los fin des de semana- dijo Alice.
- Hermanita, tu no estarás invitada. – se rio a carcajadas Mike.
- Que gracioso eres, Mike.
- No se puede ir con ropa interior en casa.- dijo Emma. Todas la miramos.
- Sabéis que, no hay normas en esta casa, Stacy. Cada uno que haga lo que quiera. Pero lo más importante es la comida. ¿Quién la va a comprar? – dijo Liam
- Los viernes, todos vamos a comprar. – dijo Alice y sonrió.
- Perfecto. – dijimos todos. Nos levantamos todos y nos dirigimos todos a la Universidad, menos Alice que Liam hoy la lleva a linstituto.
- Hey Liam, el vecino del lado llévalo, es del curso de Alice – le dije y cogí mi bolso.
- ¿Quién es ese?- pregunto.
- Alice, te lo explica.- Sali corriendo y pille Mike.
- Mike, ¿me puedes llevar? , es que no tengo ganas de conducir. – le pedi con cara de perrito abandonado.
- Anda ven.
- Toma el casco.- me dijo, lo tome y me lo puse. Me subí a la moto y me agarre a la espalda de Mike con fuerza, la verdad es que tenía ganas de sentir la adrenalina por mi cuerpo, pero también tenía miedo de caerme y abrirme la cabeza.
- Tranquila...- me susurro. El arranco la moto y de un tirón subió la velocidad, no podía ver ni los árboles.
Por suerte había un semáforo que paro, ¡gracias a dios! Y pude respirar como dios manda. Una moto se puso a nuestro lado y nos miró. Se quitó el casco y era James.
- Eh Mike, ¿Una carrera, hasta la uni?- pregunto con una sonrisa traviesa.
- No, lo hagas por favor- le pedí, con el no.
- Vamos,¿ y que gano yo?- pregunto Mike, sudando de lo que dije.
- Si gano, me das 200 dólares, si ganas tú te doy el doble. – dijo James. Lo voy a matar.
- Si no lo haces te daré 500 dólares Mike. – Intente compre a Mike, por no hacerlo pero mala idea... No acepto. Porque el semáforo se puso verde y Mike subió la velocidad a máxima. Al aferrarme mas a el, tenia como un mal presentimiento. No se que me pasaba el corazón me latia mas fuerte de costumbre. Maldije por dentro a James y Mike. Me maldije a mi por subir esta moto y morir. Porque tenía el presentimiento de que hoy va ser mi último día en la tierra.
Poco después me encontré tirada y dolor por todo el cuerpo y solo veía negro. Negro.
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