- Estúpidos idiotas- pensé, dirigiéndome donde se hospedaba mi hermano pequeño.

Toque dos veces la puerta y entre, él estaba en la cama tapado con una gran manta, me dirigí hacia él y me senté junto el a la cama.

- Kevin.- lo intente despertar, llamando su nombre.- ¿Te encuentras bien?- le pregunte. El asintió pero le toque la frente y estaba ardiendo.

- Estoy bien, solo es fiebre- me dijo.

- Voy a ir a comprarte algo de medicamento ¿sí?- me levante.- Vendré pronto.- le bese la frente.

Me dirigí a mi habitación corriendo y me puse una sudadera- que era de Liam- unos pantalones pitillo negros y unas converse blancas, cogí mi bolso y baje.

Al abrir la puerta de la casa, Emma estaba en el coche aun así que me acerque.

- Oye Emma.- la llame y ella bajo la ventanilla del coche.- Me llevas a la Farmacia, mi hermano esta ardiendo. Ella automáticamente me abrió la puerta del otro asiento.

- ¿Dónde estabas?- le pregunte, estaba bien vestida para una cena elegante, llevaba un vestido hasta las rodillas de color negro y accesorios de plata.

- Un chico me invito a una cena.- me dijo y sonrió. – Se llama James, es el vecino del lado.

El vecino del lado, James. ¿Ha dejado Edward por James?

- ¿Cómo te la pasaste? – le pregunte misteriosamente.

- Muy bien la verdad, es muy divertido.- dijo ella conduciendo a la farmacia más cercana.

- ¿Te gusta?- le pregunte, hoy interrogo a Emma.

- Un poco- admitió. Ella paro el coche porque estábamos a la entrada de la farmacia, baje y entre.

Había poca gente y no sabía que comprar para que le baje la fiebre, mire por todos lados y me fije que había alguien que conocía. Era Sofía Méndez, me escondí para ver que estaba pidiendo.

- Si te da positivo, estas embarazada- dijo la vendedora- si te da negativo no lo estas. – continuo.

¡Oh la la! Sofía Méndez comprando un test de embarazo.

Salí de mi escondite tranquilamente y me dirigí donde estaba Sofía, ella me miro y lo escondió rápido.

- ¿Qué haces aquí?- me pregunto.

- ¿No puedo venir a comprar?- le pregunte con otra pregunta

- Si, claro. – y se marchó.

- Buenas noches, mi hermano tiene mucha fiebre y quería algo para que se le baje-le pedí. Era una mujer de 35 años por allí, tiene el pelo castaño, ojos verdes era muy linda.

- Si, mira dale este jarabe- me enseño – Mañana estaré bien, pero si no lo está y no le ha bajado nada- continuo.- llévalo al médico.

- De acuerdo- le dije. - ¿Cuánto es? – le pregunte.

- 6 dólares. – dijo ella, le di el dinero y me dirigí al coche de Emma.

Salí y vi que Sofía estaba parada junto a un coche negro, no me importaba mucho la verdad a si que entre rápido en el coche y nos dirigimos a casa.

- ¿El día que me dijiste que cortaste con Edward por otro chico era James?- le pregunte. James no podía ser, porque no lo conocía ¿ o si?

- La verdad es que no- dijo ella y bajo la música del coche que puso creo cuando me fui a comprar el jarabe.

- ¿Entonces quién?- le pregunte.- ¿Es algún chico de la casa?

Me miro con eso ojos y asintió. Liam no puede ser.

- ¿Mike?

Ella asintió.

- Pero él no se fija en ti, amiga- le dije- ¿cómo te pudo gustar?

- Me gusto, el día que venimos a casa. – dijo ella- Es verdad ni me mira, pero que quieres que haga, no sentía nada más por Edward solo cariño no amor.

- Tranquila...- le toque el hombre y la bese a la mejilla. Aparco el coche y entramos a la casa juntos.

Los chicos, Kevin y Alice estaban mirando alguna película, al entrar se fijaron en nosotras. Bueno más en Emma, que estaba muy guapa, pero me fije que Mike ni se inmuto en ver a Emma.

- ¿Dónde estabas Emma?- pregunto Alice. Me dirigí al sofá, Kevin estaba al medio de Liam y Mike.

- En una cena.- dijo Emma y se dirigió a su habitación creo a cambiarse.

- Déjame sentarme. – y tire a Liam al suelo. Pero no lo conseguí me atrajo hasta el y me sentó a su regazo, no quería insultarle solo quería que mi hermano se ponga bien.

- Kevin, ten bebe esto- le tendí el jarabe. Me quite la sudadera – que era de Liam.- que llevaba y me quede solo con la camisa "Hollister" que le robe a Liam y me acomode en el regazo de Liam, puse mi cabeza en su pecho. Me acariciaba el pelo.

- Te ves sexy con mi ropa.- me susurro en la oreja y me la mordió.

- Estúpido. – y mis pestañas se cerraron inmediato.

**

Me levante gracias al despertador, lo apague y me dirigí al baño para ducharme, suerte que no había nadie en el. 

Pensé como me levante en la cama, si ayer estaba en el sofá. Deje de comerme la cabeza.

Entre tranquilamente y me duche, salí y con una sola toalla y allí estaba Mike, esperando solo con un pantalón de chándal. Sin camisa. Estaba más bueno que el pan.

- Bonitas piernas- sonrió seductoramente. Y me sonroje, estaba casi desnuda. No le dije nada y me dirigí a mi habitación a vestirme con el uniforme de la Universidad. Me planche el pelo, así que estaba muy liso. Y baje a comer.

Todos estaban allí, sentados menos Mike que estaba creo detrás mío con el pelo mojado porque sentía jotitas en las escaleras.

- Existen toallas y un secador. – le dije.

- No lo tenía presente, pero gracias cuñada. – me sonrió. IDIOTA.

- ¡Que no soy tu cuñada!- exclame. Todos lo que estaban en la mesa nos miraron.

Me senté en la mesa y me serví mi jugo y unas tostadas, vi que Kevin tenía mejor cara.

- ¿te quedas solo en casa?- pregunte, no sabía dónde dejar a Kevin, tenía que ir a la Universidad, pero no sé porque tenía el mismo uniforme que Alice.

- Tranquila Stacy, yo y Mike lo apuntamos en el mismo instituto que Alice. – dijo Liam, comiendo.

- ¿De verdad?- pregunte.

- Si- dijo Mike. – estaba muy contenta de que hicieron eso.

- Muchas gracias- les agradecí de todo corazón. Nos levantamos todos y nos dirigimos a las coches, no quería conducir a sí que me iba con Emma.

- ¿Emma, me llevas?- le pregunte.

- Voy con James, si quieres ven. – dijo ella.

- No, no. – dije. Vi que Liam llevaba a Mike, Kevin y Alice pero no quería pedirle.

- Vamos Stacy ven.- grito Mike. Lo pensé y subí al 4x4 de Liam, al lado de Kevin y Alice.

- Parecemos una familia- dijo Alice. Liam le sonrió desde el retrovisor.

- Es que lo somos- dijo Liam con una sonrisa de cara a cara. Me sentí muy bien, estando con todos.

Dejaron a los niños al Instituto y nosotros nos dirigimos a la Universidad.

- Nos cambiaron de clases- dijo Mike.

- ¿Y qué pasa con eso?- le pregunte, no entendía nada.

- Que ahora vamos a la tuya.

Maldita sea- maldije.

Me miraron y entendí que maldije en voz alta.

- ¿Lo dije en voz alta? – pregunte. Y se rieron de mi.

- Me temo que si.- dijo Liam. Aparcaron en el respectiva plaza de aparcamiento y salimos.

La gente puso sus miradas en nosotros. Nos dirigimos para adentro yo estaba el medio y Liam y Mike estaban a mi lado.

- ¿Por qué nos miran?- les pregunte en susurro.