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Capítulo XXV.

La noche paso, siendo el único testigo aquel muchacho de cabello rizado.

Keigo se había quedado dormido en el regazo de Touya, al igual que Touya se había quedado dormido abrazando a Keigo.

Ambos estaban agotados después de ser el soporte emocional del otro, debido a que realmente se necesita mucha fuerza para no levantarse y hacer hablar al otro sobre a quien asesinar por provocarles las lágrimas.

El sol salió, siendo el primero en despertar un curioso Katsuki, quien sentía en su espalda unas suaves caricias.

—Cinco minutos más. —Murmuro con somnoliencia mientras se aferraba al cuerpo de su hermano mayor.

—Pero ya salió el sol Kacchan. —Escucho aquel suave susurro que le desvaneció el sueño.

—¿¡Niichan!?

El chillido del adolescente despertó a ambos jóvenes adultos que dormían en el sofá.

Touya se levantó rápidamente prendiendo fuego ambos brazos, tirando en el proceso a Keigo, quien en medio de su somnoliencia fulminó lo mejor que pudo al Todoroki, que olímpicamente ignoro la cara de borracho mal levatado que tenía.

—¡Niichan despertó! —Chillo con verdadera euforia, aferrado al pecoso, sintiendo dos pesos extras sobre ambos.

—¡¡Izukuuu!!~ —Chillaron ambos mayores, quienes sin duda se arrojaron sobre los apenas concientes menores.

—¡Ya mierdas no respiro! —Chillo con su garganta rasposa.

Apesar de que recién había despertado estaba bastante contento de observar como es que sus amigos y hermanito pasaban juntos la noche a su lado, esperando con paciencia a qué despertase.

—¡Enfermera! ¡Enfermera no respiro! —Grito de nuevo, pero sin importar las cosas que gritase los empalagosos de sus amigos no se movieron ni un centímetro.

Resignado, simplemente escucho los balbuceos y algún que otro sollozo colectivo con una media sonrisa, bastante aliviado de poder por fin contestar a cada marranada que dijeran.

—¡Por jesucristo! ¡Ni se te ocurra volver a tomar misiones suicidas como esas! —Takami lo golpeó en la cabeza con el mango de una de sus plumas. Obviamente no era un golpe fuerte, era uno suave, casi como una caricia.

—¿¡Eh!? ¡Pero es a mí quien pagan no a ti! —Hizo un mohín, volteando su mirada.

—¿¡Eso que tiene que ver!? ¡Ah mí no me pagan pero ando cuidándome en todo momento! —Touya le siguió con la regañadera, bastante aliviado de que el desgraciado por fin despertara.

—¿No deberían de llamar a la enfermera? Aún siento que no puedo respirar. —Suspiro rendido, ya que discutir con ellos era una batalla pérdida.

—Voy~ —Keigo salió casi volando, pues aún debían darle la noticia de quienes fueron sus amigos invasores de casa.

Por unos minutos permanecieron abrazados, pues realmente se habían extrañado mutuamente.

El medico llego y con algo de bastante (demasiado) esfuerzo debido a que Keigo prácticamente voló entre los pasillos del hospital para llegar de forma rápida a la habitación, en cuento al pobre doctor tuvo que seguirlo a pie.

Después de lo que pareció unas dos horas había terminado el chequeo, debido a que por fin podría preguntarle al paciente sobre sus molestias y dolores para poder ejecutar en el futuro algún tratamiento.

—Bien. —Hablo el hombre mayor (médico) a los cuatro varones en la habitación.— Primero que nada, me alegra saber que Midoriya-kun por fin despertó, pero por ahora debes guardar reposo al menos dos semanas mientras esperamos que tus heridas cicatricen. —Aviso con una suave sonrisa, que desapareció tan pronto como llego.— Pero las cicatrices quedarán como prueba de que debe ser más cuidadoso. Estuve revisando su historial Joven Midoriya, y no es de mí agrado enterarme que mí paciente estuvo ingresando por envenenamiento, huesos rotos, quemaduras de segundo y tercer grado, tendones lesionados y una curiosa hipertensión. —Midoriya se tenso, se supone que estaba tomando bien sus medicamentos contra la presión alta.

Takami y Todoroki observaron expectantes al pecoso, pues nunca había mencionado que tuviera alguna enfermedad base.

—Si... La hipertensión lo heredé de mí padre, mientras que mí madre padecía de diabetes. —Murmuro como un niño chiquito que acababa de ser regañado.

—Esta bien. —Suspiro. Este muchacho era todo un caso.— Lo que tengo planeado hasta ahora es darte una nueva receta de medicamentos para tu hipertensión, esperar a que tus heridas sanen y someterte a fisioterapia. Eso ayudará a la movilidad de tu cuerpo dormido y relajada un poco más tus músculos tensos por la rigidez. —Empezo a escribir en su planilla mientras era observado por los cuatro varones, quienes parecían pegados como chicle al pecoso.

Siguieron hablando sobre posibles tratamientos para que el joven adulto verdoso pudiera recuperarse completamente, lo que le llevaría a estar encerrado en el hospital otras dos semanas. Después los posibles candidatos sugeridos por el doctor para la fisioterapia y las mejores marcas de medicamentos para ayudarlo.

Keigo escuchaba todo atentamente, pues si a su amigo le faltaba el dinero para alguna cita médica o tratamiento sería el primero en derrochar billetes.

Ser héroe profesional y estar en el top 3 daba una generosa cantidad de yenes, pues al ser quien más casos de personas desaparecidas, atracos de bancos detenidos y ladrones que actualmente se encontraban tras las rejas había ayudado a resolver o directamente lo resolvía solo.

Algunos lo llamaban “la mano derecha de Endeavor” pues algunas veces (más de la cuenta) se lo encontró dentro de la agencia del héroe número 2 charlando casualmente con el, ¡Incluso solían salir a comer juntos! Así que no por nada era el acosador número uno del héroe número dos.

Después de bastante rato el doctor se retiró, dejando que la familia disfuncional pudiera charlar amenamente tal y como lo hacían antes.

—¿¡Cómo que invadieron mí casa!? —Fue el primer grito que se escuchó en la habitación.

—Nuestra casa. —Lo “corrigio” el Todoroki.

—¿¡Que acaso ya nadie puede darse una siestecita de una semana sin que vallan a instalarse sin permiso!? ¡Carajo! —Mas maldiciones salieron de la boca del paciente.— ¿¡Ahora debo mantenerlos a todos!? De Kacchan no me quejo ni quejarse nunca. —Aclaro antes de que el adolescente pudiera darle vuelta a sus palabras.— ¡Pero ustedes son unas asquerosas sanguijuelas!

—¡Ah mí no me hables así jovencito! ¿¡Sabes lo preocupado que estaba todo este tiempo!? —Medio grito el héroe alado como toda una madre histérica.— Tampoco es como si fuera un mantenido. —Hizo un puchero, sacándole la lengua al pecoso.

—Ah mí no me vean como un aprovechado, que estuve pagando las facturas de la casa, de día cuide bien de Lady y hacia los que-haceres. —Dabi de cruzo de brazos con su ceño fruncido.

—¿Entonces quiere decir que mí casa sigue sin ser desmantelada por la mafia y mis álbumes de fotos de Kacchan-bebé siguen en su sitio? —Sonrio esperanzado, pues su divina colección de fotos de Katsuki dando sus primeros pasos, aprendiendo a leer, escribiendo por primera vez su nombre al igual que todos los dibujitos que alguna vez le regaló su “casi-hijo” seguía intacta, con eso ya estaba feliz.

—¿¡Cómo que coleccionas mis fotos de bebé!? ¡Maldito descarado! —Lo maldijo con todo el cariño que un cactus podría darle a su manera.— ¡Ni se te ocurra publicarlas que juro que te quemó tu santuario con la tanga rosa de All Might! —Amenazo con su sonrisa depredadora en los labios.

—¿¡Eh!? ¿¡Ahora me tu me amenazas a mí, pequeña pulga!? ¡Espera no más que recupere la movilidad de mis piernas y verás como pateo tu trasero! —Le siguió el juego con su sonrisa hambrienta por acción, ya que estar toda una semana escuchando sus conversaciones sin poder contestar había sido algo bastante frustrante para una persona que podía llegar a ser parlanchina cuando quería.

—Primero levantate de la cama, después si se quieren matar háganlo fuera del hospital. —Les aviso Takami con una suave sonrisa. Sin lugar a dudas había extrañado las barbaridades de su mejor amigo.

El resto del día paso sin más problemas, pues la familia de varones se la pasaron riendo entre ellos, disfrutando de sus momentos de felicidad.

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Buenos días/tardes/noches gente bonita :'D
Izuku despertó el día de su cumpleaños xd
No su cumpleaños tal cual en el Fic, más bien el día en el que estoy subiendo este capítulo es su cumpleaños.

Hoy muestro hermoso brócoli está de fiesta UwU

Yo calculo que dentro de un par de capítulos ya veremos al kacchan en la Yuuei. Últimamente tengo una lluvia de ideas, todavía faltan 5 meses más para que se hagan los exámenes de admisión, así que en esos 5 meses puede pasar de todo en la familia... Solo que no sé si será de vuestro agrado :'v

Se que esto parece relleno, pero recuerden que yo no escribo nada sin que tenga una verdadera razón, así que los siguientes cap's aparte de tener la típica comedia mediocre de siempre abra cosas interesantes. :>

Cuídense mucho.
Laven se las manos.
Tomen awa.
Usen alcohol (y no para tomar.)
Sayonara.🌺

Escrito: 13/07/21 (427 palabras.)
14/07/21 (1280 palabras.)
15/07/21 (1499 palabras.)
Publicado: 15/07/21
Editado: ¿?

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