Capítulo XXIII.
La oscuridad fue reemplazada por luz al salir el sol, donde una enfermera ingreso a la habitación para chequear el estado actual del Midoriya, encontrando la particular escena de un adolescente abrazando al paciente y lo que parece ser los parientes del pecoso descansando en el sofá.
Sonrío suavemente, pues se detonaba el amor que le tenían al muchacho herido, ya que nadie querría pasar la noche en el hospital en un sofá y camillas incómodas de no ser porque de verdad se preocuparan por alguien.
Suspiro y fue a tomar los signos vitales y los chequeos de rutina, agrandando su sonrisa al ver qué el pecoso progresaba.
—¿Cuando despertara? —Aquella pregunta le hizo saltar del susto, girando rápidamente para observar al muchacho de cicatrices acariciando la cabeza del héroe top tres.
—Me asustó. —Murmuro llevando su mano al corazón.— El se encuentran mejor. Aún no tenemos el tiempo estimado en el que despertara, pero dentro de unas dos horas vendrá un médico a cambiar sus vendajes. —Aviso.
—Gracias señorita. —Agradecio con una sonrisa mientras dirigía su mirada a la ventana.— Dígame, ¿La prensa sigue afuera?
—Lastimosamente si, están acampando fuera de las instalaciones. —Suspiro de frustración, pues gracias a ellos algunas ambulancia tuvieron problemas para salir eh ingresar al edificio.
—Debe ser horrible. —Fruncio su ceño.
—Lo es. Cuídese, ellos tienen la mala costumbre de querer hostigar los pacientes y al personal. —Aviso, saliendo de la habitación a dar el reporte a sus superiores.
Dabi simplemente asintió, soltando un suspiro.
No durmió un carajo por estar pendiente de sus amigos, si es que Keigo tenía pesadillas, Katsuki gritaba entre sueños o Izuku tenía una recaída, pues su preocupación era superior a su cansancio físico y emocional.
Acomodo mejor a Keigo en el sillón, para luego meter su mano en el bolsillo del héroe para sacar su billetera, hurgando un rato para buscar dinero eh ir a comprarles el desayuno.
El no era un ladrón, quizás si le robaba a las infelices antes de asesinarlos pero nunca robaría a sus amigos, total al final le devolvería el dinero al Takami.
Salió de la habitación y fue a la cafetería, comprando dos cafés negros y uno con leche y azúcar para el adolescente, pues ni de chiste le daría de tomar café negro al rubio menor para que anduviera hiperactivo por el hospital.
Viajo de nuevo al piso de sus amigos, encontrando algo que definitivamente lo molesto.
Era un paparazzi con cámara en mano, buscando de un lado a otro con la mirada algo para captar.
Por supuesto, el personal estaba ocupado en su trabajo y el mendigo este tenía pinta de estar visitando a algún paciente.
Todoroki paso de largo con su ceño fruncido, pues el hospital estaba plagado de cámaras y el no quería ir todavía a prisión por andar carbonizado a la chusma en vivo y en directo.
—Disculpe señor. —Oh mierda.— ¿Sabe usted que sucedió del héroe Hawks? Todos lo vimos ingresar con rapidez al hospital y aún no hay noticias sobre el, ¿Podría ayudarme a calmar a su agencia con una pequeña entrevista? —Pregunto con una sonrisa forzada bañada en hipocresía.
—No, muerete. —Tras esa rápida y elaborada respuesta acelero sus pasos, visiblemente enfadado por el descaro del sujeto.
—Porfavor señor, necesito su ayuda. —Intento persuadirlos, siguiéndolo.— Le pagaré 3000 yenes si está dispuesto a ayudarme.
—Hazme un favor y metete tus yenes por el culo. —Gruño, cerca de la habitación.
«Son cerca de las 05:23 AM, y el putito este molestando con una estúpida entrevista, que ganas de partirle el culo para que deje de molestar.»
Pensó, meditando un poco sobre si su gran idea estaba fuera de los límites de arresto.
—Porfavor señor. —Escucho los dientes rechinantes del sujeto.
—Carajo, ya dije que no. —Abrio la puerta de la habitación y la cerro rápidamente, evitando que el acosador pueda observar a sus amigos durmiendo.
Suspiró de frustración, pero rápidamente su ceño fruncido se suavizó al observar como los menores dormían incomodamente en tanto el sofá como la camilla del hospital.
Sonrío y se dirigió de nuevo a su antígüa posición en el sofá, con la cabeza de su amigo descansando en su regazo mientras disfrutaba de su café negro con algunos dulces, dejando de lado el futuro desayuno de los rubios.
Pasado al menos otra media hora despertó el adolescente rubio, fregando uno de sus ojos mientas que soltaba un bostezo.
—Buenos días niño-pato. —Saludo Dabi en un suave susurro.
—Buenos días animal. —Saludo de igual manera acurrucandose más alado del cuerpo de su hermano.
—Levantate ya y desayuna. Hoy no irás a la escuela, necesito que me pases el número de tus directivos para avisarles. —Le ordenó mientras quitaba las migajas que habían caído sobre el rostro del héroe.
—Hazlo tu mismo, en mí mochila está mí celular. Dibuja un moño, ese es mí patrón. —Aviso con somnoliencia.
Dabi hurgo en la mochila del rubio menor, intentando dibujar un moño como le había dicho.
—¿No podrías poner un patrón más sencillo? Ya intenté ocho veces y no me sale. —Gruño, arrojandole el celular al adolescente, quien lo agarro con fastidio y sin ver dibujo su patrón.— ¿Que tanto porno tienes guardado como para que nadie pueda ingresar a este celular? —Se burló mientras ingresaba en contactos, buscando el ansiado número del director.
—Yo no tengo esas cochinadas, niichan es el marrano que tiene porno en su celular. —Gruño de vuelta, sentandose sin ganas al borde de la camilla.
—¿Y tu como mierda sabes eso? —Se envío el contacto a su celular, encontrando un mensaje en el Whatsapp ajeno que lo desconcertó.
.
Ult. Con. ayer 07:48 PM.
Ayer.
¿Donde mierda estás Bakugou Katsuki?
✓✓ 02:37 PM.
Este observo expectante, esperando que el adolescente se quite el sueño mientras fregaba sus ojos.
—Oe Katsuki. —Lo llamo, despertando de igual manera la curiosidad del adolescente por llamarlo por su nombre.— ¿Quien es? —Le arrojó el celular, donde este observo la pantalla, palideciendo notablemente.
—Nadie importante. —Salio del chat y guardó su celular.
Todoroki alzo una ceja, pero no lo presiono para hablar, ya que tarde o temprano hablaría o por las buenas o por las malas.
Touya le extendió su café con leche, calentando lo un poco con su don tal y como le gustaba al adolescente.
Katsuki le agradeció con un suave cabeceó, bebiendo con tranquilidad su desayuno acompañado de un par de dulces picantes que Dabi le había traído.
—Oe KFC, el niño ya se despertó y es hora que lo hagas también. —Dabi pico la mejilla del héroe con una sonrisa, resiviendo un dedo del medio alzado.— Ya pajero, levantate.
—No, mierda. Hoy no pienso ir a trabajar así que no molestes. —Se acurrucó más en los muslos de su amigo, sacándole un suspiro.
El Todoroki sonrío socorronamente, levantándose del sofá. En consecuencia su mejor amigo callo al suelo de espaldas.
—¡Carajo mis alas! —Gruño con dolor mientras veía mal al peli-blanco, quien empezó a reír por las muecas de incomodidad del rubio.— Maldito bastardo.
—Yo también te quiero. —Se sentó de nuevo, levantando el café reservado para el rubio, quien lo acepto a regañadientes.— Ya calenté tu café, ahora bebelo que hay buenas noticias.
El alado se sentó en el sofá junto al joven adulto mayor, quien le dio una media sonrísa.
—Segun una enfermera Izuku mejoro. Dentro de una hora y algo vendrá un médico a cambiarle las vendas, de seguro también le pondrán más sueros y esas cosas. —Aviso mientras ambos veían de reojo como Bakugou sonrío esperanzado.— Lo malo es que aún no sabemos cuando despertara, pero eso es lo de menos.
Ambos rubios asintieron, tomando sincronizadamente sus cafés.
—Tambien deben ir a bañarse. Ambos apestan. —Sonrio con malicia al ver como ambos varones fruncieron su ceño pero no renegaron.
—Tu también, hace dos días no te bañas. —Se lo devolvió Takami.
—Pero yo no apesto, ustedes dos estuvieron sudando como cerdos. —Recordo, sacándoles la lengua.
—Igual, debes bañarte. —Hawks suspiró. Aún no entendía cómo es que el peli-blanco soportaba tanto tiempo sin bañarse, al punto de que por la suciedad su cabello se tornaba negro.
—Mañana sin falta. —Prometio falsamente, pues cruzaba los dedos.
Bakugou negó suavemente, pues era curioso como es que Dabi siempre estaba tan reacio a tener que entrar en contacto con el agua.
—¿Porque no te quieres bañar? —Le pregunto Katsuki, con la palpable curiosidad en su mirada.
—Malas experiencias con el agua. —Se encogió de hombros queriendo evitar contestar preguntas personales.
Todoroki Touya tenía sus razones para detestar bañarse, siendo más de una por más de un evento traumático que tenía tatuada en su memoria al rojo vivo, pero claro, sus rubios nunca debían enterarse de su pasado tan turbio, menos siendo tan fanáticos de aquel héroe corrupto, en especial Takami.
Termino su café y dejo el envase aún lado, pues no podía quemarlo dentro del hospital, ya que activaría la seguridad anti-incendios.
Bakugou sabía leer las expresiones faciales, pues apesar de que el Todoroki tuviera la mayor parte de su piel cicatrizada en un perturbador color morado, podía leer el dolor, la incomodidad, la desesperación y la resignación reflejada en sus zafiros, entristecido de alguna u otra manera el no poder hablar de aquello que tanto perturbaba al mayor del cuarto.
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Buenos días tardes noches gente bonita :'D
Touya todavía tiene muchas heridas abiertas acerca de su pasado debido a los distintos traumas que vivió tanto en su infancia como parte de su adolescencia (se verá aclarado conforme los capítulos vallan avanzando.)
Algunas personas estarán confundidas acerca de la edad de los protas, pues las voy a aclarar aquí; (más vale tarde que nunca)
Touya actualmente tiene 25 años. (En el manga creo que tiene entre 25 y 27)
Keigo actualmente tiene 23 años. (En el manga tiene de igual manera 23, pero el año que viene [cuando Katsuki ingresé a la Yuuei {porque obviamente ingresará}] tendrá 24.)
Izuku actualmente tiene 20 años. (En el manga tiene 15-16.)
Katsuki actualmente tiene 14 años. (En el manga tiene 15-16.)
Lo aclaro para no hayan muchas dudas.
Cuídense mucho.
Laven se las manos.
Tomen awa.
Usen alcohol (y no para tomar.)
Sayonara.🌺
Escrito: 09/07/21 (1343 palabras)
10/07/21 (1706 palabras)
Publicado: 13/07/21
Editado: ¿?
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