Trece alias Hirooki Anakuro nunca espero que su primera clase fuese a ir tan mal.

Primero; habían separado a todos sus estudiantes por quién sabe que lugares, ¿Estarán bien? ¿Se los abran llevado? ¿Estarán asalvo? Quizás se encuentren todos juntos, ¿Podrán defenderse? Aún eran niños, con suerte y sabían lo que había tres pasos más allá de sus quirk.

Segundo; Su propio quirk la dejo fuera de combate, ya no puede moverse, pues podía sentir como hasta el propio aire le provocaba un dolor del demonio al entrar en contacto con sus músculos expuestos.

Tercero; ¡No había una mierda de señal! Las alarmas no sonaron en ningún momento, lo que quería decir que alguno tenía un capricho de distorsión de señales, incluso se atrevería a decir que tenían un psíquico de su lado, lo cual era extremadamente aterrador.

Cuarto; Eraser-sempai estaba LITERALMENTE rompiéndose en pedazos por proteger a sus alumnos, pero lastimosamente ni ella y mucho menos el sabrían en donde fueron a tirar a los niños, quien sabe... Quizás ya estaban tirados en alguna sanja... Dios no la oiga.

Cuarto; Algo medianamente bueno es que dos alumnos pudieron evitar ser teletransportados a quién sabe que lugares, por lo tanto, la vida le daba aún que sea media sonrisa. Iida Tenya y Uraraka Ochako ¡Nunca antes pensó que podría agradecerle tanto a la suerte! Y de paso al mini-ingenium por su rápida reacción.

Y quinto; AMBOS NIÑOS fueron por ayuda. El capricho de Iida le permitía tener dos motores en sus pantorrillas, haciéndolo veloz mientras Uraraka podía quitarle la gravedad a la materia, por lo tanto, no era necesario juntar dos más dos para saber el resultado.

—Espero que no se tarden tanto. —Murmuro la mujer herida después de tremenda humillación que le metió el ser brumoso.

Mientras tanto, la zona de aguacero era el único lugar donde la suerte había literalmente abandonado a los tres temblorosos niños llenos de inseguridades.

—Carajo... —Murmuro un peli-negro de sonrisa triangular, ocultándose en un tejado mientras un par de villanos pasaban casualmente por el pavimento.

—¿¡Donde estan los niños!? ¡Se supone que mandarían al menos tres mocosos a este lugar! —Se quejo, logrando que Sero Hanta aguantará la respiración del miedo.

En esta zona su quirk era prácticamente inútil, debido a que la lluvia artificial evitaba que sus cintas pudieran pegarse a las paredes o farolas, para intentar aún que sea huir del lugar, por lo tanto debía ir cual lagartija, pegado a los tejados con la cabeza abajo para evitar llamar la atención de los villanos.

—¡Oigan! —Llamo un villano al otro lado de la cuadra, atrayendo la atención de los dos sujetos que se encontraban prácticamente debajo del edificio donde se estaba ocultando.

—¿¡Que mierda quieres!? —Le respondió el primer villano, su tono de voz era más agresivo que el segundo villano.

—¡Ah tres cuadras de aquí encontraron aun niño sumiso! —El entusiasmo en la voz del lejano desconocido no hacía más que producirle náuseas al peli-negro.

—¿¡Porque deberíamos centrarnos en solo uno!? ¡Hay que buscar a los dos restantes! —Le grito de vuelta, mientras los pasos iban alejándose de apoco.

—¡¡Mizu planea crucificarlo en la plaza central de este lugar!!! —Allí su mundo se detuvo.

¿¡Planeaban crucificar aún compañero!? ¿¡Porque ellos se divertían tanto lastimando a unos niños!? ¡¡Niños!! ¡Por el amor de Dios!

Sin poder evitarlo, Sero empezó a llorar del terror, agradeciendo que el sonido incesante de la lluvia cubriera por completo sus sollozos.

—¿¡Crucifixión!? —El segundo villano, que parecía ser un tanto más tranquilo que el primero se notó casi tan alterado como el.— ¡Eso es inhumano! Apenas es un niño, Kurogiri-san dijo que simplemente debíamos golpearlos un poco y luego dejarlos ir con la cola entre las patas, ¡No asesinarlos! —Recrimino.

—¡Al diablo con el imbécil de Kurogiri! —El primer villano empezó a reírse como desquiciado.— ¡Somos villanos! ¿¡Que te hace creer que somos gente de bien!? ¡Si me ordenarán asesinar aún estupido bebé lo haría con los ojos cerrados! ¡¡¡JAJAJAJA!!! —Empezo a reír, provocando que aún más terror recorriera el inexperto cuerpo del adolescente.

Sin saberlo, una peli-negra estaba escondida en el mismo edificio que Hanta, sollozando de la angustia por imaginarse a su compañero como alfiletero.

Sin mediar acciones, Yaoyorozu se lanzó de un segundo piso, aterrizando sobre el primero villano (el sádico) noqueandolo con el aterrizaje forzoso.

De su mano, una extensa barra de hierro fue creada, dándole fuertemente en la nuca del segundo villano (el medianamente pacífico) sacandolo de combate.

—¡Son unos desgraciados! —Grito con verdadero dolor grabado en su voz, agradeciendo a la lluvia por cubrir sus lágrimas.

—Diablos señorita. —El villano que se encontraba alejado empezó a alterarse, debido a que de simples movimientos sus supuestos compañeros quedaron noqueados.

—¡Aghhh! —Sin perder más tiempo, empezó a trotar en dirección del villano que estaba alejado, agradeciendo su buen físico, pues al poco tiempo pudo noquearlo.

Jadeos incesantes empezaron a salir de sus pálidos labios, pues apesar de estar poco tiempo bajo la lluvia, está era extremadamente fría, similar a una verdadera lluvia en otoño.

—¡Yaoyorozu-san! —Llamo esperanzado el peli-negro, agradeciendo el buen oído de la vice-presidenta.

—¡Sero-kun! —El alivio que sintió la joven heredera de los Yaoyorozu fue abrumador, pues no estaba sola en esto.

Yaoyorozu se acercó a su compañero, cargando dos curiosas granadas en sus muñecas, identificando las de inmediato.

—¿E-esas son las gr-granadas de Bakugou-kun? —Murmuro, sintiendo como sus entrañas empezaban a revolverse del nerviosismo.

—Si. —Susurro débilmente.— Las encontré a varios edificios de aquí. Están completamente cargadas, pero no sé dónde está Bakugou-san.

Un rápido “click” en sus cabezas los lleno de pavor, imaginando el peor de los escenarios.

—Debemos ayudar a Bakugou-kun. —Sero observo con ojos decididos a la vice-presidenta, sabiendo que con el quirk de la misma podría hacer algo medianamente útil.

—Estoy en eso. —Murmuro, desabrochando una de las granadas que tenía en sus brazos, entregándosela a su compañero.— El primer día de entrenamiento con All Might-sensei Bakugou-san dijo que estás tenían la potencia necesaria para derriban un edificio. —Las obsidianas de Momo brillaron apesar del tétrico escenario en el cual se encontraban.— Probemos si es verdad.

Mientras tanto, en la zona contraria (incendio) los niños por fin pudieron escapar de aquel horrible lugar, llendo inmediatamente a la zona de naufragio para darle aún que sea algo de beber a su compañera reptiliana.

—Vamos Tsuyu-chan, Tokoyami-kun. Ya falta poco. —Murmuro Hagakure, sintiendo algo de alivio por a ver llegado por fin al dichoso cuerpo de agua artificial.

Tokoyami iba a su propio ritmo, pero sin ser dejado atrás, pues con una pierna literalmente atravesada por un hierro y un brazo roto no podía hacer mucho para apoyar a sus compañeras.

Una vez por fin estuvieron a la orilla (bastante alejada de la vista de cualquier ser que quisiera dañarles) pudieron sumergir la mitad del cuerpo de la ranita en el agua, mientras que la niña invisible intentaba arrojarle algo de agua por el cuerpo de su compañera.

—V-vamos Tsuyu-chan. —Sollozo, con miedo de que su compañera no despertara.

Fumikage se quitó sus zapatos y metió sus pies en el agua, sintiendo un refrescante alivio por dejar atrás el abrazador calor de las llamas, aprovechando para limpiar la herida de su muslo.

Dark Shadow se asomo, ayudando a la niña invisible a mojar la cabellera de la peli-verde, con bastante cuidado de no lastimarla.

—Lo siento. —Se disculpo Tokoyami, soltando un sollozo ahogado mientras observaba a su compañera desmayada.

Por su culpa no pudo cuidarla como era debido, pues los villanos sin mucho esfuerzo pudieron hacerle aún lado y hacerle que cosas sabrá Dios a la niña de rostro inexpresivo.

Dark Shadow, apesar de ser un quirk también lloró. Lloró por no serle útil a su anfitrión, lloró por qué por culpa de su inutilidad la chica-rana pagaba las consecuencias, lloró porque podía sentir la enredadera de negatividad de su mejor amigo crecer en su interior, queriendo desaparecer para siempre.

Los tres niños juntos lloraban en el agua, porque por la culpa de ellos, por culpa de su inexperiencia, por culpa de su poca fuerza, por culpa de su mala suerte no pudieron proteger a una de las niñas más bonitas del curso.

Al otro lado del lago artificial se encontraban el grupo ajeno de niños que no tenían la menor idea de lo que pasaba aún par de metros de ellos, estando en camino a la salida, aprovechando que los villanos (a su parecer) aún estaban inconcientes, intentaban cruzar lo más rápido posible, pues no sabrían en que momento podrían despertar y atacarlos.

—¿Cómo es que son tan rápidos? —Se quejo Kyouka, pues apesar de no tener el mejor estado físico entre sus compañeros, se encontraba al menos dos metros por detrás de ellos, ¡Incluso Sato recupero algo de conciencia y nadaba mejor que ella!

—¡Vamos Jirou-chan! —Animo Ashido.

Aquella niña de piel “anormal” parecía estar en su elemento, pues nadaba tal cual profesional, como si hubiese nacido para competir con personas con quirk's acuáticos.

Shoji duplicó sus brazos, utilizándolo tanto por arriba como por debajo del agua.

—Faltan al menos unos cuatro a seis kilómetros. —Aviso Mezo, casi ahogando a sus compañeros por la noticia.

—¿¡Saben que!? —Murmuro aterrada la peli-morada, pues no creía que su delgado cuerpo pudiera resistir todo eso.— Mejor me regreso a la orilla para intentar dar la vuelta por el otro lado. —Estaba por darse vuelta y nadar de nuevo a la orilla, pero un extraño toque en su piel la detuvo.— ¡Sueltame Shoji! —Gruño.

Mezo le observo confundido, volteando a ver a su compañera.

—No te eh tocado. —Murmuro, pues se encontraban al menos a tres metros de distancia, debido a que el era quien guiaba.

Kirishima tomo una gran bocanada de aire y sumergió su cabeza para observar el panorama, pero rápidamente se arrepintió.

—¡Son algas! —Chillo alarmado el falso peli-rojo.

—¿Eh? Pero no puede... —No pudo terminar de hablar, debido a que su pierna fue jalada a la profundidad.

—¡Jirou-san! —El grito colectivo no hizo más que alterarse entre todos, pues la segunda en desaparecer fue Mina.

—Oh mierda. —Luego les siguió Kirishima.

Koda Koji, Sato Rikido y Shoji Mezo se alarmaron de inmediato.

El peli-plata dio una gran bocanada de aire, sumergiendo su cuerpo completo bajo el agua, intentando ir detrás de sus compañeros que eran jalados a lo profundo por unas extrañas algas que fácilmente se podían confundir con el agua.

No pudo resistir mucho tiempo, pues al poco rato tuvo que subir por oxígeno... No tenía la resistencia necesaria para salvar a sus amigos.

Mientras tanto en la zona de ruinas, los niños rubios y bi-color eran guiados por un peli-morado, evitando a toda costa la pelea.

Todoroki estaba en su límite, pues al utilizar tanto hielo de golpe fue como un puñetazo de realidad para su cuerpo.

Dependía de la particularidad de su padre.

Así que estaba cojeando, siendo ayudado por su compañero igualmente herido, subiendo las escaleras lo más silenciosamente posible, pies aprovechaban que la mayoría de villanos se estaban entreteniendo por quién sabe que cosas del centro de la plaza.

Subieron hasta la mitad, donde por fin pudieron observar el horrible panorama.

Los villanos estaban observando como masacraban a su maestro.

El estómago de los niños concientes se revolvió, sintiendo como sus entrañas se contraían de la incomodidad.

—Aizawa-sensei. —Murmuro cohibido el rayito del curo.

Denki veía como el deterioro carcomia la mayor parte del uniforme de su maestro, dejando que el músculo estuviera al aire, horrorizado aún más al inexperimentado niño.

Mashirao y Hitoshi estaban igual, pues Kaminari cargaba a Aoyama y Ojiro a Mineta.

—Llevemos a los inconcientes arriba, después bajemos a ayudar a Aizawa-sensei. —Murmuro, dispuesto a sacrificarse por su maestro.

—Cada vez estás peor. —Hitoshi volteo a ver a su compañero del rayito, quien apesar de estar agotado estaba con aquella expresión de determinación innegable.— Asi que te acompaño.

—¿¡Acaso están locos!? —Ojiro renegó, con verdadera incredulidad.

—Por supuesto. —Contesto Kaminari.— Somos héroes, ¿No?

«—Cometer locuras en pleno servicio es parte del trabajo de un héroe.— Recordó como el pecoso Midoriya le citaba algunas anécdotas de sus guardias.»

Ojiro estaba dispuesto a noquear a sus compañeros para evitar que fueran a ser un sacrificio humano en pleno curso de supervivencia, así que al parecer alguien escucho sus plegarias.

—¡¡¡ENTRADA DINÁMICAAAA!!! —El grito de el héroe top tres interrumpió casi toda actividad, pues ingreso rompiendo uno de los cristales del techo.

Los villanos veían incrédulos como el rubio héroe rotaba cubierto por sus alas, mandando plumas a diestra y siniestra, dejando inconcientes a la mitad en un abrir y cerrar de ojos, mientras que con la otra mitad de sus plumas buscaba a los niños para llevarlos a la entrada del edificio.

Hawks envío plumas por cada cúpula que encontraba, incluso a la zona de incendio para asegurar, de paso dejando inconciente a los villanos que se encontraban.

El podía hacer todo eso mientras aquella mirada juzgadora recaía en quien sería el líder de la liga.

Shigaraki tuvo un fuerte escalofrío, pues la mirada dorada del héroe era nada más que de un depredador observando a su presa apunto de ser devorada.

El halcón desendio sobre los cuerpos inconcientes de los villanos, mandando sus plumas sobre el herido maestro, quien simplemente pudo agradecerle con un suave cabeceó antes de quedar inconciente por sus heridas.

Las plumas no tardaron en traer a más de la mitad de los niños, quienes gritaban y lloraban el nombre de Hawks por los aires, siendo cargados por su quirk.

Pero lo lograba encontrar a su hijo.

Mando más plumas por toda la edificación, con su ceño fruncido.

—Se supone que no deberías estar aquí. —Murmuro el joven villano, observando con desprecio al joven alado mientras se rascaba incesante su cuello.

—Y tu deberías estarte pudriéndo en la cárcel por estar molestando a unos niños. —Escupio con recelo, pero no pudo hacer mucho.

Empezó a avanzar, con bastante desagrado.

Una de sus plumas encontró al niño rubio crucificado, con un mar de villanos inconcientes y otros dos niños más, junto a un edificio derrumbado cerca del lugar.

Sus pasos quedaron estáticos, tanteando que su hijo rubio siguiera vivo.

Nunca antes tuvo tanto miedo.

Con una burbujeante ira cristalizó sus ojos, convirtiendo dos de sus plumas en espadas.

—¿Porque lo hicieron? —Murmuro, con la mirada pérdida.

De inmediato cargo al niño con sus plumas, intentando ser lo más delicado posible mientras que de igual manera cargo a otros dos niños en la zona de aguacero.

Apesar de no estar presente físicamente con el niño de mirada escarlata, sus plumas lo acariciaban eh intentaban limpiar la sangre del rostro del muchacho.

Sintió sus costillas magulladas, sus piernas rotas, uno de sus brazos atravesados por lo que parecía ser algo oscuro (supuso que se esfumaria en la luz) además de un hierro atravesando su vientre.

—Nomu. —Ordeno de inmediato, pues con el héroe paralizado no abría mejor momento para atacar que ahora.

El monstruo se arrojo sobre el héroe, pero este en respuesta sin remordimiento le cortó la cabeza.

Ya estaba familiarizado con las matanzas, esto no era y nunca será la gran cosa.

Los villanos principales temblaron, ya que la sed de sangre del héroe era helada.

Era como si en cualquier movimiento pudieran morir con una pluma atravezando les la cabeza.

El héroe simplemente se dio la vuelta, después de todo ya se ha la desacido de una de las mierdas que más le estaban fastidiando... Pero la lucha nunca sería tan sencilla.

Un sonido grotesco lo atrajo a la realidad, volteando de forma instintiva.

La imagen era horrible.

Observo como desde la cabeza el monstruo regeneraba su cuerpo, iniciando con la columna, seguido de los nervios, músculos y vasos sanguíneos, todo con aquel sonido viscoso y tronador de sus huesos reacomodando se en su lugar.

—Bien. —Un rugido de la bestia fue su respuesta.— ¡¡Bailemos maldita porquería!!

Ambos seres se lanzaron el uno contra el otro, siendo la escena más cruda que nunca antes unos simples niños pudieron presenciar.

El ser llamado Nomu fue cercenado, desmembrado, despellejado y decapitado de tantas formas en tan poco tiempo que era increíble su pronta regeneración.

—¡¡¡AHHHHH!!! —Grito el héroe, bañado en cólera decapitando por sexta vez al animal, pero está vez no dio tiempo a regenerarse, pies sus plumas se incrustaron en su expuesto cerebro, acabando al parecer con el monstruo.

—¡¡¡NOS VAMOS A MORIR MALDITA SEAA!!! ¡¡¡CAMALEÓN BAJA LA ESTÚPIDA VELOCIDAD!!! —Un extraño y desgarrador grito se escuchó a las afueras del domo, seguido de incesantes disparos.

—¡¡¡ALLÁ TE VAMOS DADDY!!! —Los disparos y una motocicleta empezó a hacer eco por casi todo el lugar.

Todos quedaron extrañados por el inquietante silencio, para luego justo uno de los cristales que componían la estructura de la USJ fuera roto por un robot (de quién sabe dónde) seguido de una Yamaha a toda velocidad.

Sobre ella estaban quien parecía ser una mujer con una máscara en el volante, además de un hombre de cara cubierta. Ambos vestidos completamente de negro.

La motocicleta al aterrizar derrapó al menos unos cinco metros, dejando la huella del neumático y pequeños trozos de caucho por todo su camino.

Después otro cristal fue roto, de allí surgió un pedazo de metal fundido y un curioso conejo verdoso con expresión nada amigable.

—¿¡¿¡DONDE ESTAN MIS POLLUELOS!?!? —Rugio, tan alto que fue imposible para todo el campo no ser escuchado.

Todo se detuvo, pues los cuatro sanguinarios personajes juntos daban una mala corazonada al líder.

—¡¡¡JURO QUE NUNCA MAS TE DEJO CONDUCIR!!! —Le grito el hombro de la motocicleta, prácticamente tirándose al suelo, besando el piso con desesperación.

La mujer bajo con elegancia, acomodando las correas que componían su traje de vigilante.

—No aguantas nada. —Musillo, para luego sacar dos cuchilloS militares.— Bailemos malnacidos.

—Esto está mal. —Murmuro Shigaraki, observando como los pocos villanos que quedaban en pie o apenas despertaban caían como moscas por la muchacha, quien daba en puntos no vitales, solo para que después fueran elevados en el aire y dejados inconcientes por los pocos golpes que daba el vigilante vestido de negro.

—¡¡¡DIGANLE A DADDY QUE MANDO SALUDOS!!! —Grito la mujer, cubriéndose de la sangre de sus enemigos, al parecer era una especie de potenciador, pues se hacía cada vez más rápida, al punto que llegaba a casi desaparecer de su vista.

—Kurogiri... —El jefe no tuvo que decir casi nada, pues al parecer su única puerta de escape fue arrastrada contra su voluntad por el conejo verde, quien hacía mímica, como si estuviera atrayendo al villano con una cuerda

—Oe Blueflame. —Llamo el héroe diurno, con la mirada pérdida en el Domo de aguacero.— Rostiza el cerebro de esta porquería. —Señalo el resto del Nomu.

—¿Porque debería? —De un par de golpes dejo inconciente a unos pocos villanos que su mejor amigo atraía hacia el con su telekinesis.

—Esa mierda se regenera, así que friele lo que le queda de cerebro para evitar posibles problemas. —Aclaro, mientras unos tres niños salían volando del domo, siendo uno en especial un rubio mojado.

Aquel niño fue acercándose de apoco, llamando la atención del trío problemático.

—Ese es... —La mujer hizo un signo de cubrirse la boca, al parecer el aroma de la sangre había echo que se diera cuenta de inmediato.

El pecoso regalo una mirada espeluznante al villano, quien se hallaba congelado en su sitio, pues todos sus secuaces callerón como insectos.

No tenía a Kurogiri para que lo sacará de esto, pues el pecoso con un chasquido de dedos lo dejo inconciente, pues torció su cuello de forma en que los huesos hicieron un horrible eco por casi todo el lugar.

Incluso los niños estaban callados.

—Lo asesinare. —Declaro la única mujer del grupo, desapareciendo de la vista de casi todos.

—¡No espera...! —Izuku tuvo que coger al villano con su quirk, moviéndolo como una marioneta por el aire al mismo tiempo que la muchacha hacía acto de presencia, con un cuchillo que estaba a la altura del cráneo del villano.

—¡Déjame matarlo! —Toga intento saltar en dirección de Shigaraki, pero este se mantenía en una posición fetal sobre el aire.

Midoriya dejo caer el cuerpo de Kurogiri, poniéndole de inmediato unas esposas anti-quirk para evitar que se saliera con las suyas.

Himiko empezó a hacer berrinche, hasta que finalmente el cuerpo del adolescente rubio llego a los brazos de Hawks.

Se veía extremadamente herido.

Hawks tenía sus ojos cristalizados, pues si no fuera por el suave respiro que daba el niño creería que estaba muerto.

Acaricio el cabello mojado del rubí, sentándose en el suelo con el cuerpo del niño entre brazos.

Dabi estará paralizado, sintiendo como los recuerdos de sus hermanitos lo golpeaban uno tras otro.

Quiso acercarse a su hijo, pero la distintiva cabellera de un rayito y un bi-color llamaron su atención.

Denki estaba bajando las escaleras con ayuda de Shouto.

El pánico empezó a hacerse presente en su cuerpo, retrocediendo instintivamente al ver los ojitos hetero-cromáticos del niño.

Aquel niño de mirada fría no era su niño de invierno.

—Shou-shou... —Susurro dolido.

No podía acercarse a Keigo, sus piernas se lo impedían.

Ahora se acercaba su pequeño hermanito cogeando y con dolor, nunca antes quiso desaparecer tanto como ahora.

~🌺~🌺~🌺~🌺~🌺~

Buenos días/tardes/noches gente bonita :'D
Reconozco que el capítulo quedó flojo, no lo voy a negar.

Honestamente primero pensé en dejar libre a Shigaraki, pero luego se me ocurrieron ideas más retorcidas... Alguien va a sufrir mucho en algún futuro :v

¡¡AL DIABLO LOS MAESTROOOOS!! ¡¡¡LA FAMILIA DE AVES PUEDE CON TODO CARAJO!!!

Lo siento, la emoción xD

Ya veremos en el siguiente capítulo el anhelado encuentro de Dabi con Shouto, el de Katsuki con Izuku y la debilidad de todo héroe... Ya se lo imaginan •3•

Antes de irme les quiero dejar algo de spam, ya que acabo de publicar una nueva historia UwU

Les invito a leerla. :>
Contiene puro Yaoi y Yuri :v

Cuídense mucho.
Laven se las manos.
Tomen awa.
Usen alcohol (y no para tomar.)
Sayonara.🌺

Escrito: 30/09/21 (1791 palabras.)
06/10/21 (3710 palabras.)
Publicado: 06/10/21
Editado: ¿?