Todoroki Touya cargo a Bakugou Katsuki, acercándose a una de las sillas cerca de la puerta, depositando al pequeño cuerpo sobre su regazo.

Katsuki no protesto, simplemente se acurruco en el pecho del peli-blanco tal y como lo hacía cuando tenía un ataque de pánico junto a su hermano mayor.

Bakugou Katsuki simplemente quería sentirse protegido, así que se dejó consentir en aquel extraño abrazo con el mejor amigo de su hermano, esperando ambos junto a la puerta alguna noticia del pecoso.

Después de lo que pareció una eternidad una enfermera se acercó con una tablilla en manos.

—¿Familiares de Midoriya Izuku? —Katsuki se levantó rápidamente, seguido de Dabi para acercarse a la enfermera.—¿Son ustedes?

—Asi es, soy su pareja y el es su hermano. —Mintio descaradamente para que le dieran la información.

La enfermera asintio, viendo se visiblemente incómoda por las cicatrices del peli-blanco.

—Les seré honesta; no creemos que sobreviva la noche.

Un enorme balde de agua fría imaginario callo sobre ambos varones, quienes pudieron sentir el incremento de aquel nudo en sus gargantas.

—Midoriya-san es fuerte, existe una posibilidad del 35% de que se recupere. Pero perderá parte de la sensibilidad corporal por aquella explosión. —Katsuki dejo de escuchar a partir de allí, pues Dabi era quien se encargaba de hablar con la enfermera sin soltarlo en ningún momento, cosa que agradecía.

Simplemente quedó allí, como aún títere a quien le cortaron las cuerdas, viajando vagamente por los pocos buenos recuerdos que tenía fuera de la casa de sus padres.

—Niichan. —Murmuro.

Dabi lo observo, los brillantes rubíes del niño se iban apagando cada vez más, al punto que lo asustó demasiado ver el rostro sereno del adolescente.

—Cree... ¿Que podamos verlo? —Murmuro, resiviendo un suave asentimienro por parte de la enfermera.

—En unos minutos lo trasladan de emergencias a la sala de terapia intensiva. —Aseguro.— Estará inconciente, si sobrevive la noche despertara en unos días.

—Gracias señorita. —Una leve inclinación fue todo lo que pudo resivir por parte del joven adulto, mientras estos se dirigían de nuevo a sus asientos.

En silencio volvió a sentarse, subiendo al niño en su regazo, recostando la cabeza del cenizo sobre su pecho.

Saco su celular con su mano libre, ingresando al chat de su otro mejor amigo.

KFC.🐣🍗✨
En línea.

Hoy.

Oe.
10:27 AM ✓✓

Estamos en el hospital.
10:27 AM ✓✓

Necesitamos apoyo.
10:27 AM ✓✓

¿Que sucede?
✓✓ 10:28 AM

¿Ingresaste de nuevo por una sobredosis?
✓✓ 10:28 AM

ಠ_ಠ
✓✓ 10:28 AM

Keigo...
10:28 AM ✓✓

Esto es serio.
10:28 AM ✓✓

Izuku está internado.
10:29 AM ✓✓

Estuvieron casi toda la madrugada en una cirugía.
10:29 AM ✓✓

Patito y yo llegamos hace unos minutos.
10:29 AM ✓✓

Se que tienes tu trabajo de héroe, se que es importante...
10:29 AM ✓✓

Pero no estaría escribiendo esto si no fuera porque realmente necesitamos apoyo, me incluyo en esto.
10:30 AM ✓✓

El niño está mal, y yo no sé qué carajo hacer.
10:30 AM ✓✓

Nunca pensé escribir está mierda, pero te necesitamos.
10:30 AM ✓✓

¿En qué hospital están?
✓✓10:32 AM 

Acabas de mandar tu ubicación.
10:33 AM ✓✓

Llego en media hora.
✓✓ 10:34 AM

Dabi suspiró, sabía que estaba haciendo mal sacando al rubio mayor de su trabajo de héroe, pero era eso o colapsar junto al adolescente que traía en brazos.

Quería saber que es lo que tanto se encontraba pensando como para mantener su expresión tan serena, tan apagada... Tan muerta.

—Niichan... —Sollozo el niño de nueve años, encerrado en el armario de su mejor amigo.

Eran las 03:37 AM, muy de madrugada, y el acababa de tener una pesadilla, por lo tanto se había encerrado para que su hermano mayor no lo viera llorar.

En cambio del pecoso rodaba en la cama, buscando al infante que se supone debería de estar durmiendo a su lado.

—¿Kacchan? —Lo llamo en un suave susurro, abriendo sus pesados párpados.

Katsuki cubrió su boca con ambas manos mientras el río de lágrimas viajaba por sus mejillas. Apoyo su espalda contra la fría madera, dejándose caer hasta el suelo.

Midoriya en cambio se sentó en la cama, fregando sus ojos mientras observaba todo a su alrededor, buscando rastros del rubí.

—¿¡Kacchan!? —Lo llamo estando más lucido que antes.

El pecoso rápidamente se levantó, moviendo de un lado a otro su cabeza, empezando a desesperarse.

—Niichan... —Murmuro entrecortadamente, bajando sus pequeñas manos a su abdomen, arañando su aperlada piel, dejando un pequeño camino escarlata.

Izuku rebuscó entre la habitación, escuchando los suaves susurros provenir de su armario.

Prendió algo de fuego a su lado, controlando lo mejor posible la pequeña llama para que no se saliera de control.

Abrió temblorosamente las puertas, encontrando al infante temblando y sollozando en el interior, sus dedos manchados levemente por una sustancia carmesí, además de sus ojitos irritados por votar tantas lágrimas.

La pequeña flama se apagó en el aire mientras que el pecoso se agachaba a la altura del niño, quien al estar tan ensimismado no notaba realmente que alguien estaba frente suyo.

—Kacchan... —Lo llamo suavemente, intentando que regresará en sí.

En cambio lo que resivio fue una mirada tan cargada de temor que no pudo evitar que le doliera el corazón. El pequeño niño que estuvo cuidando desde que era un bebé lo estaba viendo como si fuese un villano apunto de lastimarlo, y eso le dolía.

Dolía tener que ver a aquel pequeño solecito explosivo temblando, abrazándose así mismo mientras se arañaba la piel, con sus ojitos brillantes de miedo y no de aquella contagiosa alegría de la cuál estaba tan acostumbrado.

—Niichan... —Murmuro, intentando enfocar su vista debido a la oscuridad.

—Vamos Kacchan, hablemos afuera. —Le extendió la mano, que con algo de duda fue tomada.

¿Lo regañaría por despertarlo? Era muy tarde, ¿O quizás muy temprano? No lo sabía, solo sabía que había tenido una pesadilla muy violenta y tenía miedo.

Izuku jalo al infante a su pecho, caminando ambos hacía el balcón, donde el Midoriya abrió las puertas, siendo ambos golpeados por la briza de la madrugada.

El adolescente de catorce años recostó su espalda contra la pared, deslizándose hasta el suelo. Palmeó sus muslos, dejando que el niño se sentará sobre ellos, apoyando su cabeza sobre su pecho en un intento de relajarlo con sus latidos.

Después de un rato donde el cenizo estuvo llorando sobre su pijama por fin pudo hablar correctamente sin trabarse demasiado, agradeciendo silenciosamente el hombro de su hermano mayor.

—Esta-ba ence-rrado en un lu-gar pe-queño. —Murmuró cerca del oído del adolescente.— To-do es-taba dema-siado oscu-ro, escu-chaba a la bru-ja gri-tarme so-bre al-go pe-ro no en-tendía so-bre que... —Abrazo más fuerte el cuerpo del adolescente.— Te-nía tan-to mie-do, po-día sen-tir un ar-dor feo... No me gusta-ba.

Midoriya escuchaba todo atentamente, frunciendo su ceño, pues estaba dispuesto a apostar su quirk a qué aquello era más un maldito recuerdo que una simple pesadilla.

—¿Recuerdas algo más? —Pregunto suavemente.

—No estabas para salvarme.

Aquello sin dudas logro cristalizar sus esmeraldas y oprimir su pecho. El niño prácticamente le estaba narrando una experiencia traumática que el no pudo evitar que pasara, y tenía razón al querer echarle la culpa, pues desde que se mudaron a aquella enorme y solitaria casa sin su padre todo era demasiado diferente.

—Lo siento Katsuki... Prometo hacer todo lo que esté a mí alcance para que no suceda de nuevo. —Murmuro, observando como el niño cerraba sus ojos de apoco.

—Solo quiero tenerte conmigo... N-no quiero undirme.

Regreso a la realidad, sintiendo como los latidos del desnudista se aceleraban.

Levantó suavemente su cabeza, encontrando los zafiros desesperados del peli-blanco, quien movía sus ojos de un lado a otro, hasta que lo vio.

Takami Keigo llegó corriendo a su lado, intentando controlar mejor su respiración.

Sus alas estaban más pequeñas de lo normal por su trabajo de héroe. Tenía puesto su disfraz mientras que las gotas de sudor bajaban por su frente.

—Llegue... —Susurro entre jadeos, encorvado sobre sus rodillas.

—Llegaste más rápido de lo que espere. —Murmuro Touya, extendiendo la mano a su amigo.

El Takami no dudo en cogerla, sentadose aún lado de su mejor amigo, de paso usando lo que le quedaban de alas para cubrir al adolescente.

Bakugou observo algo confundido la presencia de Keigo, pues no esperaba que el héroe top 3 saliera volando tan rápido de su trabajo.

—¿Porque...? —Murmuro lo más bajo posible, atrayendo solo la mirada zafiro del Todoroki.

Touya rodeo el cuello de Hawks con su brazo libre, atrayendo de igual manera su cuerpo al suyo como apoyo.

—Porque a la familia no se le abandona. —Le devolvió el susurro, está vez siendo igualmente escuchado por el rubio mayor.

Solo esas palabras bastaron para que el adolescente se aferraba de igual manera a Takami, pues ya conocía su lugar, y ese era con su verdadera familia.

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Buenos días/tardes /noches gente bonita :'D
En este capítulo ya se puede ver el desarrollo de Katsuki, Touya y Keigo, pues los tres ya se consideran familia.

Touya es como el hermano mayor (de nuevo xd) que se asegura que los polluelos estén bien cuidados de una manera un tanto retorcida por su humor sádico, pero cuando la situación lo amerita es responsable como adulto pero igual de frágil que un niño.

Keigo en cambio ya no duda en querer hacer de lado a la comisión de seguridad pública de héroes con tal de poder ir y serciorarse personalmente del estado de su ahora familia.

Ahora Katsuki ya es un poco más abierto con los extraños amigos de su hermano, pues con anterioridad no dejaba que ninguno de los dos se le acerque mucho, ahora ya hasta les acepta el abrazo de consuelo.

Si eso no es evolución no se lo que es :')

Díganme, ¿Que les parece? ¿Todo les parece muy forzado u va fluido? Realmente quiero hacer bien está historia.

Se que Katsuki es un personaje complejo, por eso intento escribirlo mejor posible. Algunos encontrarán reacios a qué se preocupe y sea demasiado abierto, pero recuerden que es un universo alterno, prácticamente Izuku lo crió desde que era masomenos un bebé y se estuvo haciendo cargo de el porque... Bueno, ya se verá más adelante, a está historia todavía le queda mucho desarrollo (y eso que todavía apenasempezamos con el primero y segundo capítulo del anime) así que tranquilos, aún queda la familia disfuncional está para mucho.

Cuídense mucho.
Laven se las manos.
Tomen awa.
Usen alcohol (y no para tomar.)
Sayonara.🌺

Escrito: 02/07/21 (1298 alabras)
03/07/21 (1805 palabras)
Publicado: 10/07/21
Editado: ¿?