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Capítulo XI.

Las clases terminaron, los alumnos hablaban entre ellos y los infantes correteaban entre ellos o con sus padres para ir a la casa después de un largo día, pero ese no era el caso de nuestro prota.

Bakugou Katsuki caminaba a su propio ritmo, regalándole miradas nada amistosas a cualquiera que se quisiera acercar a su persona para intentar entablar una conversación.

El ya sabía que tipo de amistad quería, una donde pudiera estar en el mismo rango de "igual" como al parecer su hermano mayor estaba con el héroe de top cinco y el que parecía ser un vigilante. En cambio lo que sus compañeros querían de el solo era colgarse de su "fama" como el siguiente aspirante a héroe en la academia Yuuei. Las personas eran cinicas, si para ser famosos debían atosigar aún adolescente se notaba que lo harían sin dudar.

Suspiró mientras sentía como el pequeño animal que tenía guardado en su volcillo se empezaba a mover, así que no le quedó de otra más que acelerar el paso para encontrarse con el pecoso, que siempre fiel estaba fuera de su escuela vestido como civil.

Tenía puesto un par de botas estilo militar verde oscuro, pantalones camuflados con una camiseta negra que tenía escrito "puto el que me moleste" en letras blancas, acompañado de una mano enseñando el dedo del medio y una chaqueta negra obviamente abierta, para que la gente no le hablara.

Contuvo la sonrisa que estaba por aparecer en sus labios, así que se apresuró en acercarse.

El pecoso estaba por abrazarlo, pero rápidamente puso su mano sobre su pecho, empujándolo suavemente.

—¿Que sucede? ¿Un mal día? —Pregunto con una ceja alzada.

—No... —De su volcillo se asomó una curiosa cabeza puntiaguda.— Es solo que traigo compañía.

—Oh por Dios... —Abrio los ojos sorprendido, observando al pajarito.— Un polluelo de seda... ¿De donde lo sacaste? ¿Te lo vendió ilegalmente alguien del colegio? ¿Debo investigar de nuevo sobre el narcotráfico de animales? ¿Está bien alimentado? ¿Estuviste con el pequeño todo el día en tu pecho? ¿Puedo cargarlo? —No faltaba su bombardeo de preguntas.

—Vamonos a entrenar, y más te vale que lo cuides bien animal. —Ignoro olímpicamente las preguntas de su hermano mayor.

Cogió con cuidado al pollito y lo puso sobre las manos del pecoso, quien lo resivio con una enorme sonrisa mientras caminaban en dirección de la playa de Dogobah.

—¡Por supuesto! ¿Por quien me tomas? —Acaricio la cabecita del ave con cariño.

—... Niichan... Ahogaste a tu pez dorado a los quince, tengo pruebas y cero dudas de que no eres de fiar. —Fruncio su ceño recordando a "Dorothy."

—... Ok, está bien justificado. —Decallo un poco sus ánimos.— ¡Pero un pez dorado no es lo mismo que un pollo! —Aseguro con sus ánimos renovados.

—Por supuesto que no son lo mismo, mí polluelo es mejor que cualquier otro animal. —Infló su pecho de orgullo.

—¿Ya le pusiste nombre? ¿No deberíamos llevarlo en una veterinaria? —Divago un poco.

—Mas tarde lo llevamos, ¡Y se llamará lord of killer blasts! —Aseguro con sus rubíes bañados en fuego.

—¿No te parece muy largo el nombre de "señor de las explociones asesinas"? —Coloco al pollito sobre su cabeza, donde al parecer empezó a hacer su nidito.

—¿Entonces como quieres que lo llame? Lord of killer blasts es un nombre fantástico. Te falta cultura. —Gruño cruzándose de brazos.

—¿Fifi? —La mirada asesina de su hermanito menor le saco una carcajada.

Así siguieron su camino hasta llevar a la playa, que más bien tenía toda la pinta de ser un basurero.

—¿Seguro que es seguro? No quiero contraer tétano por andar haciéndote caso en tus locas ideas. —Un escalofrío recorrió su espalda, pues al estar acostumbrado aún ambiente esterilizado aquel lugar sería lo más cercando aún infierno de lo que cualquiera creería.

—¡Por supuesto! O sino no habría pedido el permiso para entrenarte. —Levanto su pulgar mientras que de su mochila amarilla sacaba un pantalón olgado negro.— Ve a quitarte la ropa detrás de algún electrodoméstico alto, el lugar está clausurado hasta que quede limpio, así que todo tuyo campeón. —Le arrojó la prenda mientras sentía como el pollito picoteaba su cabeza.— ¡Ayayayai!

—¡Picotealo más fuerte lord of killer blasts! —Dejo aún lado su mochila y se fue a cambiar sin pudor.

—¡Que su nombre es Lucky! —Chillo.

¡Lord of killer blasts! —Se cambio rápidamente y se quitó la camisa, dejando ver una camiseta pegada al cuerpo de cuello alto sin mangas color negro.

Salió de su escondite y empezó a hacer estiramientos, disfrutando de los chillidos del peli-verde de fondo.

—Bien, ya que estamos. —Cogió al pollito.— Primero que nada veamos cuál es tu rango más amplio a la hora de hacer una explosión.

—Bien... —Murmuro y sintió como el sudor de sus brazos viajaba hasta la planta de su mano.

¡¡BOOM!!

El resultado fue el esperado, ya que dos refrigeradores se convirtieron en chatarra.

—¡Fiiu! —Silbó.— Ese es un excelente comienzo. —Se acercó al adolescente escondiendo el pollito en su chaqueta para no asustarlo con todo el barullo.

—¿Ahora? —Demando.

—Tranquilo Pomerania. —Se burló al ver cómo el ceño fruncido del menor se hacía más notorio.— Primero que nada, si vas a batallar contra alguien con un don de agua o fuego; estas muerto. —Su rostro se torno serio.— De ser necesario evitar pelear con personas que tengan caprichos elementales primarios. Lo segundo... —Se acercó y alzo el brazo del adolescente, extendiendo hasta la punta de sus dedos.— Tus brazos son débiles. —Acaricio la muñeca, haciendo rotar suavemente la mano temblorosa del rubio.— Aún no son capaces de soportar la carga de una explosión tan grande como la que acabas de hacer. —El adolescente observo sus brazos temblorosos, preocupado.— La rutina de ejercicios que te había dado el año pasado... —Masajeo los hombros con una mano sin dejar de masajear la muñeca.— Fueron para que empieces a desarrollar músculos resistentes, no entrene tu Quirk porque de hacerlo la carga terminaría con mínimo un hueso roto. —Flexiono el codo desde arriba hacia abajo.— Tus tendones están tensos, si intentas otra explosión como esa tu hombro terminará dislocado y tu brazo inservible, lo último que se necesita en medio de un combate es que una extremidad sea inservible, eso independientemente de cualquier miembro. —Se encogió de hombros y soltó el brazo del adolescente que seguía temblando.

Bakugou escuchaba todo atento bastante consternado, se supone que su don era el más poderoso de todo el colegio, pero básicamente su hermano acaba de agarrar eso y pasárselo por la raja con su explicación.

El pecoso se colocó enfrente del adolescente, con su sería expresión mantenida.

—Intenta dar una patada. —El rubio obedeció, pero rápidamente fue neutralizado en una llave bastante bien elaborada. En cuestión de nada el ya estaba tirado en la acolchonada arena blanca.— Esto ocurre cuando un oponente predecible y sin entrenamiento previo; lo neutralizas. Lo mismo nosotros hacemos con los villanos que pelean cuerpo a cuerpo, pero si son villanos experimentados en el área del "cuerpo a cuerpo" es mejor utilizar equipos de apoyo para hacer los trabajos más sencillos. —Le extendió la mano, ayudando al cenizo a levantarse.— Intentaré pulir tu desempeño en las peleas a corta distancia, también le ruego al cielo que Yuuei allá dejado de centrarse solamente en las peculiaridades y se hayan centrado en estarlos preparando para pelear con oponentes a puño limpio. —De su volcillo saco un cuchillo de caza¹ y uno militar².— Estás bellezas las aprenderás a utilizar y neutralizar. —Los luceros de Katsuki brillaron al observar el cuchillo con mando verde bosque, tal y como el cabello de su hermano. Extendió su mano como niño chiquito curioso, pero rápidamente el pecoso las alejo.— Ni creas que te dejare usarlas así sin más, menos tocarlas. —Ambos varones fruncieron sus ceños en desacuerdo.— Seguirás usando los cuchillos sin filo, cuando tengas edad te dejare usarlos. —Aseguro.

—¿Y cuando será eso? —Gruño.

—Cuando yo lo vea necesario. —Guardo los cuchillos en sus fundas.— Ahora analicemos tus piernas. Ah ver, estira la pierna en mí dirección. —El adolescente alzo la pierna, siendo rápidamente cogido del tobillo por el mayor.— Las palmas de tus pies deben ser firmes a la hora de pisar el suelo. —El pecoso golpeó su talón fuertemente contra la arena.— Si pisas mal perderás el equilibrio y abrirás una brecha de oportunidades para que tu enemigo te ataque. —Masajeo por arriba del tobillo hasta la rodilla.— Tus pantorrillas deben ser más sólidas, al momento del correr y cargar civiles en algún accidente necesitarás tener todos tus músculos firmes, tanto en los brazos como en las piernas para correr y cargar. —Subio su mano hasta el muslo del adolescente.— Si alguien tiene un cuchillo o un Quirk que tenga que ver con objetos filosos evita que te den en los muslos. —Extendio su pulgar eh hizo presión en la zona.— Si un objeto filoso se clava aquí; te vuelves inútil para la operación. —Aseguro por la experiencia.— Cuando flexionas las piernas, —Solto la pierna eh hizo una sentadilla.— Re-diriges tus patadas, —Hizo una patada de hacha lo suficientemente fuerte como para dejar un pequeño hueco en la arena, sorprendiendo al rubí.— Los músculos se tensan especialmente en los muslos, así que te aseguro que no es lindo intentar caminar con algo clavado en los muslos.

—¿Porque debo alejarme de caprichos elementales primarios? —Quizo sacarse la duda.

—Empecemos con aire. —Se puso en cuclillas en la arena, seguido del niño quien observo curioso como dibujaba un remolino.— Cuando estás peleando con alguien con un capricho de aire lo más seguro es que mande ráfagas para intentar mantenerte lejos, ya que al ser un elemento capaz de luchar a larga y media distancia querrá mantenerte alejado por ser un luchador nulo de cuerpo a cuerpo. —Dibujo dos muñequitos, uno con lo que parecía ser un erizo enojado en cabeza y el otro calvo.— Si el viento está suficientemente comprimido puede terminar en balas de aire, aléjate de ellos. —Dibujo una linea recta en medio de los muñecos, simbolizando una bala viajando.— También, si tiene un control mediano o directamente bueno, podrá re-dirigir tus explociones, así que en lugar de ser dirigidas al sujeto serán dirigidas a ti, te puede dañar feo, evita eso. —Dibujo a la altura de las cabezas una explosión re-dirigida al muñeco con cabeza de erizo.— Si es capas de darle cierta forma al aire como de cuchillas podrá hacerte sangrar, si el sujeto te daña, pierdes mucha sangre o directamente una extremidad te lleva a la muerte. Evita eso.

El adolescente trago forzadamente mientras veía como su hermano dibujaba una línea curva sobre el cuello del muñeco con cabello de erizo, simbolizando su posible decapitación.

—Sigamos. —Dijo después de observar el rostro consternado del menor.— Alguien con capricho de tierra. —Debajo de los muñecos recién dibujados, intento hacer una roca.— Un capricho de tierra; dependiendo del tipo de control que tenga... —Dibujo de nuevo los mismos sujetos, mientras una especie de pared los separaba.— Puede ser igual de letal. —Al muro le salieron picos, debajo de los pies del chico con cabello puntiagudo igual salieron picos.— Evita pelear con ellos en lugares donde allá naturaleza, si dependen directamente de la arena debajo de los pies estarán en problemas, preferiblemente que sean peleas bajo techo. —Lineas curvas rodearon al muñeco puntiagudo.— También pueden asfixiarte hasta la muerte si les das la oportunidad, evita eso. —Dibujo una equis en los ojos del muñeco rematado.

Katsuki nunca antes había pensando en las posibles cosas que podrían suceder al pelear con personas con esos caprichos, tragando saliva de nuevo de forma forzada.

—Cómo que andas viendo mucho 1000 maneras de morir, ¿Oh no? —Se burló el rubio.

—Ja-ja muy gracioso. —Rio sarcásticamente.— No veo eso, esto es solo usando la imaginación en un rango pequeño.

Midoriya tenía buen ojo, vio temblar al niño.

—Sigamos. Solo quedan los capricho de agua y fuego, los más peligrosos. —Suspiro dibujando una gota de agua aún costado de los muñecos que sirvieron como ejemplo del aire.— Los de agua. —Utilizo su telekinesis y atrajo su mochila amarilla, de dónde sacó una botella de agua y virtio un poco en la palma de su hermanito.— Intenta usar tu don en la palma mojada.

El obedeció, calculando una explosión pequeña, mezclando algo de su sudor con el agua, teniendo por resultado una explosión más pequeña de lo esperado.

—Tu sudor es espeso para realizar tus explosiones, el agua limpia y te deja sin tus "armas." Trabajemos en eso. —Dibujo al muñeco con cabello caído, como si estuviera mojado.— Puede ocurrir lo mismo que alguien con un capricho de aire, pero ellos estarán limitados a la cantidad de agua que pueden generar ya sea de su cuerpo, el aire o en lo que sea que lo traigan. Evita pelear con ellos en lugares donde hayan riachuelos, fuentes, ríos y lagos, cualquier fuente de agua será tu enemigo si hay un villano con ese capricho. Evita eso —Una ralla tacho al muñeco "mojado" como si fuera una guadaña.

El rubí llevo su mano al estómago, casi sintiendo el corte imaginario.

—Personas con capricho de fuego son los más peligrosos, evitalos a toda costa. —Dibujo una flama debajo de los muñecos de agua.— Ellos pueden activar tu don contra tu voluntad. —Dibujo fuego alrededor del muñeco con cabello puntiagudo.— Pueden lograr que te hagas quemaduras por tu propio don, tu sudor es parecido a la nitroglicerina, no queremos descubrir si es igual de inflamable que ella. Evita eso. Tomemos de ejemplo a Dabi. —El peli-rubio alzo una ceja.— Creas o no Blueflame Dabi tiene una tremenda reputación en el bajo mundo, no por nada es un vigilante del cual los criminales se cuidan. —Hizo un intento de dibujo de Dabi.— Su quirk es llamas del purgatorio, el máximo nivel que alcanzan sus llamas es de 3500°C —El cenizo abrió la boca, incrédulo.— Mis llamas... —Prendio fuego su propia mano.— Por ahora en su máxima capacidad alcanza entre 3300°C y 3400°C, Dabi en cambio tiene esa temperatura de forma natural gracias a su propio entrenamiento. —Sonrio mientras apagaba su capricho y extendía su mano, acariciando el cabello del menor.

Bakugou observo al peli-verde, el sol se estaba poniendo en su espalda y olas se escuchaban de fondo.

—Te aviso que te queda un tremendo tramo para seguir, así que te entrenaré personalmente para que patees traseros con nosotros en algún futuro. —Dio un pequeño masaje.— Una vez un hombre me dijo que los caminos difíciles son los mejores para recorrer, y créeme cuando digo que el tuyo será el doble de duro que el mío, por lo tanto... —Atajo al adolescente a su pecho, logrando que ambos caigan al suelo de forma brusca sin lastimarse.— No dudes que tu hermano mayor estará siempre cuidando tu espalda para que nada malo te suceda.

Los ojos de Bakugou Katsuki se cristalizaron, el ya vivió cosas difíciles, mucho dolor, y sabe mas que nadie que en algún futuro tendrá que enfrentar peores cosas. Eso no podría ser para menos, pero saber que su hermano mayor estará apoyándolo en todo momento como desde que era un bebé, sin dudas le tocaba el corazón.

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Buenos días/tardes/noches gente bonita :'D
Hija de mil, no saben cómo disfrute escribiendo esto, no se si lo hice bien, pero esas son mis razones de porque según mí sana opinión Katsuki sería débil ante caprichos elementales primarios.

No soy experta analizadora de caprichos, les aviso, por eso no es que el análisis parece tan flojo.

Alta data les tiré sobre el niño cabeza de erizo :v

De cierta forma ya extrañaba al Izuku que disfruta de analizar caprichos, debilidades y fortalezas, lo seguiremos viendo en el futuro, ustedes tranquilos.

Cuchillo militar

No sé si escribo bien al personaje de Katsuki ya que es "complejo" y el personaje de Izuku es "simple."

Cuídense mucho.
Laven se las manos.
Tomen awa.
Usen alcohol (y no para tomar.)
Sayonara.🌺

Escrito: 26/06/21
Publicado: ¿?
Editado: ¿?

PD: Quiero decir que casi se me salio el corazón cuando vi que se había borrado parte de este capítulo.
Desde las 430 palabras en adelante perdí el cap, pero luego recordé que había copiado el capítulo entero, así que estoy feliz :')
Wattpad está vez no pudo conmigo :v

Nota escrita: 27/06/21

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