Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

14. Cariño

Por Ema Charles.

Cuando terminamos de cenar, hablamos un poco de todo. Y hablo enserio, escuche desde la vida en la universidad de Liam, hasta las aventuras de los pequeños James por parte de Teo. Me gusto lo cómoda que me sentí con la familia de Asher, una vez los nervios se disolvieron y solo disfruté de la buena compañía. Vaya que ellos lo eran, una compañía simplemente perfecta.

Entre las tantas cosas que descubrí de los James, esta también el hecho de que Teo trabaja en una empresa de venta de autos donde le va muy bien, también que Liam organizo un festival a principios de este año en la ciudad donde estudió, que fue todo un éxito. No me dio muchos detalles porque Asher lo interrumpía en cada oportunidad.

Pasadas las 8 mi teléfono vibro con un mensaje de Lara, donde me avisaba que ya había terminado sus clases y que recién llegaba a su casa. Lo que me hizo recordar que no le había avisado a mamá que me quedaría hasta talvez las 9. Aun quería estar aquí un rato más.

—Vuelvo en un minuto—. Me disculpé

—¿Necesitas compañía cariño?

—Solo llamare a mi mamá...— Esto lo dije en respuesta a Asher. —Retomemos nuestra conversación cuando vuelva Señor T.

—Claro señorita—. Le di una sonrisa a Teo antes de voltearme a mi cuñado falso, e hice el saludo extraño que recién me había enseñado en su dirección.

Para cuando mire a Asher sonreí, deje un beso en su mejilla y me aleje antes de que insistiera en seguirme. Escuche a lo lejos la conversación que surgía, pero yo ya estaba en la sala, cerca de la puerta marcando el número de mi mamá.

Quién no tardó ni un minuto en responder. Una punzada de culpa me invadió, debió estar muy preocupada todo este tiempo.

—¿Hola? ¿Cariño estás bien? ¿Quieres que te recoja ya?

Sonreí.

Amo a mi mamá, demasiado.

Pero debe relajarse un poco.

—Estoy bien... Y me la estoy pasando de maravilla. Es emocionante lo rápido que me hicieron sentir en casa.

—Bueno cariño. Me alegro que sea así ¿Paso por ti a las 9?

—Me parece perfecto. Te amo.

—También te amo. Nos vemos luego.

Colgué el teléfono. Y estaba por dirigirme de nuevo con el resto. Aun quería que Teo me mostrara fotos de los hermanos James Payne de pequeños, incluso dijo que me daría más tarta para llevar a casa, y con lo alucinante que ese hombre cocina pude haberme comido todo yo sola.

O bueno, esa era la idea en mi mente hasta que alguien me tomo del brazo, cubrió mi boca suavemente para que no gritara, y me hizo retroceder hasta terminar en un armario bastante angosto, detrás de las escaleras.

—¡¿Qué diablos?!—. Asher encendió una tenue luz amarilla, justo después de cerrar la puerta.

No iluminaba casi nada. Más allá de que el lugar era pequeño, oscuro, y además tenía a un chico muy cerca de mí.

—Habla bajo—. Pidió, incluso con los ojos parecía rogarlo.

—¿Me vas a besar apasionadamente aquí o qué? —. Sonreí de lado, y él puso los ojos en blanco. —Porque justo ahora no me opondría.

Tengo problemas lo admito, pero es que leo mucho.

—Necesitas ayuda, porque creo que estás bastante loca... Si quieres te llevo al psiquiátrico.

—Sí, sí. Y yo fui quién llamo a mi novia falsa con un "Hola cariño, ¿Puedes venir a cenar... como en una hora?"—. Me burle de él, tratando de imitar su voz, y escuche como resoplaba.

—Puedo explicar eso—. Murmura

—Te escucho—. Me cruzó de brazos y le doy toda mi atención.

—Pues mi hermano llegó ayer, sin previo aviso. Esta tomado un receso por terminar su segundo periodo en la universidad, para ya sabes, ir al tercero y último de este año... Y siempre vuelve con las mismas preguntas, las mismas presiones... creo que me he mareado un poco, quizás perdí un poco el control... y enredé las cosas.

—¿Enredaste las cosas? No te entiendo Asher—. Estoy confundida.

—Talvez le dije que tenía novia... Y lo más cercano a eso eres tú.

Solté una carcajada de desquiciada por impulso de la impresión.

Talvez le dijo a su hermano mayor que tiene novia. Qué más da.

Lo que pasa es que la susodicha novia soy yo.

Asher me sorprendió al acercarse y poner su mano en mi boca, cortando la risa y ganando mi atención. Bueno, lo que realmente llamo mi atención fue su mano fría, y a pesar de eso un tacto tan suave.

Me entraron ganas de que esa mano acariciara mi rostro, me perdiera en su ternura, y cuando caí a conciencia de ese pensamiento busque su rostro. Necesitaba centrarme.

No parecía preocupado.

Tampoco nervioso, o paranoico como yo ante la situación.

Retire su mano suavemente, o no lograría poner mente a la situación. Lo recorrí con la mirada hasta detenerme una vez más en sus ojos color aceituna. Trataba de descifrar algo en rostro. Esa línea en su boca que más allá de "No me importa" no rebelaba mucho.

Eso me frustraba un poco, quería saber más de Asher. Al menos sobrepasar los límites que le impone al resto de las personas.

Y eso lo sé, es mucho pedir.

—¿De qué presiones hablas?

—Son estupideces sin sentido—. Sus ojos se perdieron, buscaban lo que sea que no fuera yo.

—Anda dime—. Por un segundo quise alcanzar su cara y obligarlo a mirarme. Pero yo no tenía ningún derecho sobre él.

—Tengo problemas para relacionarme. No es que no quiera, simplemente no puedo... Y cuando se falla por tanto tiempo terminas por asumir que ya no va a resultar... Tengo a Eliot, a Liam y a mi papá... sin ellos no hay nada más, y supongo que mi hermano tiene miedo a que me sienta muy solo por mi cuenta... Es un idiota lo sé... pero es que siento que es un idiota que podría tener razón.

Guardo silencio y mucho me da ganas de soltar el aliento que he tratado de contener. Las pausas agitadas, eran una clara señal que le estaba costando un poco hablar del tema. Eso me hizo sentir como si me apuñalaran un corazón un par de veces.

Entonces, al ver un poquito a Asher James algo frágil frente a mí, entendí que la soledad no siempre es la belleza de la que siempre nos hablan. También es el agujero donde trepamos, y de cada vez la luz de la salida parece más imposible de alcanzar.

—Liam no es un idiota... solo un buen hermano

Le sonreí de lado, tenía una mirada triste que nunca había visto antes.

—También suele ser un idiota a veces, no lo halagues o se le sube a la cabeza—. La tensión bajo con su comentario, incluso le dedique una sonrisa burlona.

—Algo me dice que también se te subiría a la cabeza cualquier cumplido.

Por un milisegundo una sonrisa trato de salir a flote en los labios de James. Pero se ahogó en el intento.

—No me gustan los cumplidos, son cosas falsas.

—Seguro has recibido hasta aburrirte, y es por eso que lo dices—. Me muevo un poco porque ya la posición es bastante incomoda.

—No realmente...

Si a Asher James no recibe cumplidos regularmente, que nos espera a los mortales.

—Sabes... eres el chico más extraño que conozco—. Recibo que blanqueo los ojos y luego esconde otra sonrisa que si logro ver. —Pero también eres un espectáculo que vale la pena presenciar.

Sus ojos me ven, el joven quedo pasmado tratando de saber que quise decir. Entonces añado algo para que no me vea como un insecto extraño.

—También estas bastante bueno.

—Por Dios cállate Ema—. Sonrió, ¡AL FIN SONRIO CARAJO! Sin esconderlo en lo más mínimo.

No creí estar viva para este gran momento histórico. Esto es mucho.

Al menos para mí.

También para él.

—¿Abrazo de novios falsos? —. Susurré con una enorme sonrisa.

—Si eso quieres.

—Se que quieres hacerlo. No te hagas el difícil cariño.

—¿Qué has dicho? —. Lo atraje hacia mí antes de que me obligara a responder.

Y una vez en mis brazos se sintió un poco frágil. Fácil de romper, no sé qué pensaba antes de este chico antes, pero está claro que estaba lejos de ser la verdad.

Respiraba lento y tenía perdido su rostro en mi hombro. Apretó mi cintura y su olor me invadió. Asher James tenía una esencia única. Algo demasiado especial como para ser ignorado.

—¿Estas bien con esto Ema? Sé que no habíamos acordado nada, y no quiero hacerte sentí incómoda o que creas que me debes algo...— Lo presioné aún más fuerte.

—Solo cállate cariño.

—¿Cariño?

—Tú lo has dicho primero, creo que ahora también tendrás que escucharlo un poco—. Le recrimine, pero realmente me gusto escuchar esas palabras de su boca.

Estaba hablando de más y talvez eso podría resultarle molesto a Asher.

No quiero eso.

No quiero... Que me odie

Vaya que las cosas han cambiado. Antes podía vivir con que este chico pasar por completo de mí, ahora de idea de parecerle desagradable no me gusta.

—¿Sigue todo entonces? —. Se apartó un poco de mi cuerpo, y se mostraba ilusionado.

Suspiré.

Acaba de decidir que me quiere en su vida. Y hasta en ese detalle, con sus ojos verdes llenos de brillo, una sonrisa sincera de esas que nunca muestra, y esas 3 palabras ha sido único.

Ser parte de la vida de "Asher James" suena como... malditamente bien.

—Claro que sí.

—Entonces será así...

Y para cómo se me quedo viendo, en aquel cuarto hundido en la oscuridad, había olvidado que existía el resto del mundo.

—¡CUUUÑAAADAAA!

—¡Carajo! —. Pegué la cabeza en el techo del pequeño armario cuando escuché afuera a Liam gritar. —Papá está preguntando por ti, pero le diré que se besuquean en el armario.

—Este idiota—. Escupió hablando entre dientes Asher. Volvió a ser el mismo de golpe.

Y no pude evitar reír, también ponerme roja muy, muy roja.

Reía porque esto era emocionante.

Reía porque no quería estar en otro lugar.

Reía porque Asher también lo hacía.

Reía porque me parecía peligroso lo mucho que nos estábamos acercando.

Y dejé de reír porque...

—Vamos cariño—. Extendió su mano.

Aún se siente extraño.

—Dime que no le has dicho "Cariño" a nadie más o tendré que golpearte—. Me quedé viendo su mano y solo la tomé después de escuchar su respuesta.

—Eres la primera... Eres la primera en muchas cosas Ema.

Así salimos del armario, extrañamente felices.

Un poco más cercanos que la última vez.

Un poco más nosotros.

Creando una nueva historia.

Porque no éramos como cualquier historia, somos algo especial, jamás creado.

Supongo que Asher tenía razón.

(...)

—Creo que ahora si me voy—. Dije al dirigirme a Teo y Liam. —Me la he pasado muy bien.

—Entonces vuelve...— dijo Teo y le dedique una sonrisa.

Liam también me dio un corto abrazo. Susurro un "Eres la cuñada que siempre quise", y algo más que talvez nunca le mencioné a Asher."Cuida a mi hermano, talvez es lo más increíble que tengo en mi vida".

—Lo haré Liam... Y dime si quieres que tomemos un café alguna vez los tres.

—Lo haré.

—¡Asher! ¡Acompaña a Ema! —. Gritó Teo.

—No se preocupe... Mi mamá viene por mí.

Les si un último abrazo a todos. Un poco más largo a Asher, quién me susurró un "Gracias" antes de que me fuera.

Lo que me hizo marcharme con una gran sonrisa.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro