Kardia y Sasha salieron sigilosamente de las doce casas para no ser descubiertos, para despues llegar a Rodorio.

Kardia: *Mira alrededor No hay nada abierto a esta hora...

Sasha: Si... ¡Señor Kardia mire! -Señala un árbol de manzanas

Kardia: Uh la la -Sonríe- ¿Que dices niña? ¿Vamos a conseguir las manzanas?

Sasha: ¡Claro!

Ambos se acercan al manzano, que estaba en el patio de una casa con cerca de metal

Sasha: ¿Cómo entraremos?

Kardia: Jaja, mira, pero no le digas a nadie -Con su uña roja rompe la cerca lo suficiente para entrar- Listo, ¡Entra rápido!

Se meten al patio, pero se paralizan al ver a dos Doberman dormidos al pie del árbol

Sasha: Oh oh

Kardia: Tranquila, mientras no se despierten, todo estará bien.

Se acercan sigilosamente y Kardia carga a Sasha en su espalda para que alcanzara las manzanas. En ese momento, Sasha estornudó.

Kardia: ¡Shhh! -Mira a los perros pero no se habían despertado

Sasha: Las tengo -Susurra, pero accidentalmente deja caer una manzana que cae encima de un perro

Los canes se levantan y les empiezan a ladrar

Kardia: ¡A correr! -Huye cargando a Sasha con los perros detrás tratando morderle

Después de huir, ambos se rieron

Sasha: ¡Lo logramos!

Kardia: *Ríe ¡Fue grandioso!

Se sientan en una acera y empiezan a comer las manzanas

Sasha: Oooo que delicia! ¡Amo las manzanas!

Kardia: ¿En serio?

Kardia: *Acaricia el pelo de la niña Creo que ahora me caes mucho mejor

Sasha: Lo mismo digo señor Kardia -Sonríe y sigue comiendo la manzana

Después de terminar, se levantan y Sasha le da la mano a Kardia para devolverse caminando

Kardia: Volvamos a Escorpio antes de que el anciano se dé cuenta de que no estamos allí.

Se ríen y siguen caminando en dirección al santuario.

Continuará...