Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

6

Bajé los escalones con pasos rápidos para así caminar en dirección a la salida. Tomé el pómulo de la puerta en mis manos y lentamente abrí para luego salir. Desde anoche no me he encontrado con HanSeok y sinceramente no me importaba en lo absoluto.

Caminé hasta mi auto para luego comenzar a conducir en dirección a casa de mis padres.
Estaba tan emocionada por verlos nuevamente, necesitaba sentir un abrazo de mi madre y el confort que solo ella podía darme, era la persona que más amaba en este mundo y aunque solo la adoraba nunca había sido capaz de contarle por todo lo que estaba pasando, sería un disgusto para ella y para mi padre así que solo decidí callarme.

(...)

Estacioné mi auto en el lugar correspondiente y me adentré en casa llenándome de ese aroma familiar y amoroso que siempre había idolatrado. Rápidamente frente a mi se hizo presente la silueta de aquella mujer que amaba seguida de mi padre, quienes sin pensarlo se aferraron a mi para envolverme en sus brazos.

—Hola mi princesa.

—Hola papá. —sonrío y beso su mejilla— ¿Cómo están?

—Muy bien querida. —sonríe mientras acaricia mi cabello— Yaeri mi niña espéramos en el salón hay una sorpresa para ti.

—Está bien mamá. —dejo un beso en la mejilla de ambos para luego alejarme— ¡Los amo!

Lancé un beso a ambos para continuar mi camino en dirección al salón. Una vez ahí mi atención fue captada por la silueta de un chico cabellos oscuros que no tardé en reconocer, ni siquiera  pude evitar reír mientras las lágrimas recorrían mis mejillas, por inercia rápidamente me acerqué a él para abrazarlo.

—Hola hermanita. —me abraza.

—Hola Tae... —besa mi mejilla— No puedo creer que estés aquí. —me alejo un poco mientras limpio mis lágrimas— ¿Cuándo llegaste?

—Bueno, sabes como es Jisoo... —sonrío— Hará un último evento de moda antes del nacimiento de nuestro hijo y además quiere dar a luz en Seúl... así que estaremos aquí por un buen tiempo.

—¿En serio? —asiente con una sonrisa— ¡Que alegría hermano!... ¡Te necesito mucho!

—Yo también pequeña.

—¿A caso no recibiré un abrazo yo también? —me giro en mi lugar encontrándome con la silueta de mi cuñada mientras sostenía su enorme vientre, sonrío para después acercarme a ella y abrazarla— Hola Yaeri.

—Hola Jisoo. —beso su mejilla para luego besar su vientre— ¿Cómo está mi hermoso sobrino?

—Bien, aunque cansa mucho a mamá. —sonríe.

—Te compadezco. —río— No debe ser fácil carga un bebé de Kim Taehyung.

—Oye te he escuchado. —me mira amenazante y ambas reímos— Eso fue muy cruel Yaeri.

—¡Ya están todos aquí!

Nuestros padres volvieron a nuestro encuentro y todos  tomamos asiento. Sinceramente estar con mi familia me hacía olvidarme de todos mis problemas, era una felicidad que deseaba y que estaba segura que pronto encontraría y aunque me costara haría lo posible porque tenía un nuevo motivo para intentarlo.

(...)

El resto del día quedó completamente en familia, intentábamos decidir el nombre para bebé pero todas las propuestas de Taehyung eran algo extrañas y no logramos seleccionar ninguno apropiado por lo cual fingió estar enojado por tres minutos.
Luego de almorzar en el jardín trasero Jisoo había ido a descansar ya que el viaje había sido muy agotador y pronto daría a luz así que necesitaba mucho reposo, mis padres también habían entrado en casa y solo quedábamos mi hermano y yo tomando un poco de aire. A pesar de intentar evitar tener alguna conversación con él relacionada con HanSeok, sabía que de alguna forma u otra buscaría alguna ocasión, sin embargo a él no podía ocultarle nada.

—¿Cómo se ha comportado HanSeok en todos estos meses? —se acerca a mi para después hacerme colocar mi cabeza sobre su hombro— Y no intentes mentirme, se cuando lo haces.

—No voy a mentirte Tae, no puedo hacerlo. —sonríe— Cada día todo ha ido a peor... —suspira agobiado— Nada ha cambiado y sigo sintiéndome como basura.

—No, no, espera. —se aleja un poco para mirarme— No te permitiré volver a decir eso Yaeri, tu eres mucho mejor que él, eres perfecta y valiosa... no pienses que eres menos nunca más, ¿te quedó claro?

—Si. —sonrío.

—Deberías dejar que me encargue de ese imbécil. —coloca un mechón de mi cabello tras mi oreja— Podemos denunciarlo y todo esto terminaría de una vez.

—Sabes perfectamente que aunque haga millones de denuncias no sucedería nada. —suspira obvio— Su padre tiene a toda la seguridad de Seúl a sus pies, sería inútil.

—Me duele no poder hacer nada Yae... —me acerco para abrazarlo al ver su mirada de tristeza, Taehyung y yo siempre hemos sido muy unidos y el dolor de uno era compartido con el otro— Te amo tanto hermanita y no soporto verte así. —sin darnos cuenta las lágrimas ya se habían apoderado de ambos— Perdóname por no ser un gran hermano.

—No digas eso Tae, eres el mejor hermano, ¿de acuerdo? —asiente al regalarle una sonrisa— Olvidémonos de eso porque hay algo más que quiero contarte. —rápidamente una mirada de curiosidad se posó sobre mi— Bueno el punto es que... existe una nueva persona que está alegrando mi vida.

—Espera un segundo. — sonríe— ¿Te refieres a un chico? —asiento y ambos reimos— ¡No lo puedo creer!, ¡¿En serio mi hermana menor está enamorada?!

—Habla bajo Taehyung, papá y mamá aún no están al tanto de nada. —asiente poniendo su manos sobre sus labios— Pero si, si estoy enamorada y es una excelente persona.

—¿Estás completamente segura de que esta vez es la persona correcta? — asiento con una sonrisa ingenua— Estoy muy feliz por ti pequeña. —me envuelve en sus brazos para luego besar mi mejilla— Ahora cuéntame exactamente como conociste a esa persona y quien es...

(...)

Jungkook

Llevaba al rededor de quince minutos escuchado a Jeon EunWoo mientras me regañaba por haber desaparecido el día anterior, sinceramente me causaba cierta gracia pues supongo que tal vez se había olvidado que era su primo y no un niño pero aún así me divertía ver su mirada de molestia.

—¿Acaso te ríes Jungkook? — niego intentando no reir— No te compartes así, estaba preocupado.

—¿Ya terminaste tus regaños? —asiente— No tienes de que preocuparte, solo estaba con Yaeri y a partir de ahora pasaré mucho tiempo con ella.

—¿Es en serio? —asiento con una sonrisa ingenua— ¿Pero y el maldito cretino de su esposo?, recuerda que Lee HanSeok es hijo del máximo jefe de Seguridad de Seúl.

—No me importa EunWoo. —lo miro con seguridad— A partir de ahora voy a luchar por ella y pronto estaremos juntos sin ningún inconveniente.

Definitivamente estaba dispuesto a luchar por ella, por el amor que estába creciendo en mi y que solo le pertenecía a Yaeri, a mi preciosa Luna, mis 145 Lunas. Sabía que sería difícil pero no pensaba alejarme, ella era mi mayor motivación y solo podía pensar en un gran futuro a su lado.

—Puedes contar conmigo Kook. —sonrío y asiento— Por cierto, llegaron nuestras invitaciones para el próximo desfile de la diseñadora Kim Jisoo, todos los personajes famosos y empresarios del país estarán ahí y adivina...

—¿Qué sucede? —lo miro con curiosidad.

—Kim Jisoo es la esposa del famoso cirujano plástico Kim Taehyung, hermano de la Doctora Psicóloga Kim Yaeri. —rápidamente mis ojos se abrieron como platos, no podía creer lo que estaba escuchando, claramente ella estaría ahí y por supuesto ahora también yo— Así que supongo que si asistirás a ese desfile.

—Por supuesto. —sonrío— No perderé la oportunidad de estar cerca de ella... ¿Cuándo es el evento?

—En dos días.

Asiento y luego de que el castaño me entregue  mi invitación sale de mi oficina no sin antes dejar los documentos para un nuevo negocio.
Por más que intentaba continuar con mi trabajo no podía dejar de pensar en Yaeri y que pronto volvería a verla, la necesidad que tenía por abrazarla me consumía cada segundo que pasaba sin ella, la última vez que la tuve en mis brazos no pude decirle lo que estoy sintiendo y no dejaré que eso vuelva a suceder, a partir de ahora solo seríamos ella, y nuestros sentimientos.

Yaeri

Abrí lentamente la puerta y con pasos suaves me adentré en casa, tal vez la surte seguía  acompañándome y HanSeok aún no había llegado así podría descansar y mañana iría a trabajar como es debido.
Había pasado un excelente día con mi familia cosa que no sucedía hace mucho tiempo y sinceramente lo extrañaba, pasar tiempo con Taehyung me había quitado un poco de peso de encima, era mi mayor confidente al igual que SoHyun, tenerlo a mi lado me ayudaría a soportar todo y luchar por mi Jungkook, mi Saturno... No dejaba de repetirme su nombre, me encantaba escucharlo al menos solo para mi.

—¡Hola querida! —me giré en mi lugar encontrándome con la silueta de ese infeliz mientras se acercaba a mi para abrazarme— Llegaste amor, ¿donde estabas?

—Estaba en casa de mi familia. —suspiro— Mi hermano Taehyung y Jisoo están aquí y...

—Oh si, pude notarlo. —me interrumpe — Nuestras invitaciones llegaron, me alegro que estén aquí, pronto tendrán su bebé, ¿no es cierto? —asiento— Es una alegría... ¿Sabes amor? —lo miro con una ceja arqueada, me repugnaba escucharlo llamarme 'amor' —Nosotros también deberíamos pensar en tener un hijo.

—Ya hemos hablado de esto, no quiero tener hijos por ahora. —me alejo con intenciones de subir a mi habitación pero me detiene sujetando mi mano con brusquedad— HanSeok suéltame.

—No puedes escapar todo el tiempo de mi Yaeri. —me mira amenazante mientras aumenta la presión sobre mi brazo— Por más que intentes revelarte no me alejarás de ti ¡Qué te quede claro!

—¡Suéltame HanSeok! —a pesar del dolor me suelto de su agarre dejando un fuerte ardor en mi muñeca— ¡Ya basta!... ¡Podrás retenerme en esta casa pero nunca!... ¡Entiende!, ¡nunca voy a amarte y tampoco te daré un hijo!

—¡Yaeri cierra la boca! — me mira amenazante mientras coloca sus manos en un puño— ¡Estás sobrepasando los límites!

—¡Tal vez no puedo hacer nada para salir de este maldito infierno...! — ni siquiera pude reaccionar cuando tomé fuerzas para alejarlo de mi— ¡Pero nunca voy a amarte!, ¡me das asco!

Sentí las consecuencias de mis palabras cuando estampó su mano derecha sobre mi rostro haciéndome caer golpeando mi cabeza con uno de los escalones. El dolor retumbó en todo mi cuerpo mientras mis lágrimas caían nublando mi visión, pude notar como pequeñas gotas de sangre cayeron sobre el suelo sin embargo no me arrepentí de lo que dije. Nunca amaría a ese malnacido, yo ya amaba a alguien y a pesar de no poder gritárselo a la cara como deseaba esa persona ya estaba en mi corazón y no pensaba dejarle salir.

Como pude retomé mi postura para luego volver a mirarlo, dejándole claro con mi mirada todo el odio que siento por él y que nada podrá cambiarlo. Unos segundos bastaron para decir todo y luego de eso seguir mi camino en dirección hacia mi habitación, mi cabeza dolía como hace mucho tiempo no lo hacía por lo que dí leves masajes sobre esta intentando calmar el pesar.
Dicen que podemos acostumbrarnos a vivir según nuestra condición pero en lo personal para mi se equivocan, nunca me acostumbraría a este dolor, necesitaba sentir amor y lo merecía.

(...)

Dos días después

Por fin había llegado el día en que se realizaría el desfile de Jisoo antes del nacimiento de mi pequeño sobrino y verdaderamente la emoción rondaba en todo el país. Personas importantes estarían presentes en el evento ya que después de este la famosa diseñadora y dueña de la marca 'Look Kim' estaría ausente por unos meses hasta tener a su bebé.
Debía darme prisa y así terminar de arreglarme, usaría un vestido perteneciente a la actual línea que presentaría en su desfile, ella misma lo había diseñado para mi y por supuesto era más que hermoso por su tela color negro iluminado, con un delineado de árbol primaveral y algo de encaje con algunas perlas. Di una última mirada a mi reflejo para después salir de mi habitación y caminar en dirección a la salida.

Para mí disgusto sería acompañada por HanSeok como es debido aunque me sintiera como basura, me costaba incluso hasta respirar cómodamente a su lado pero no podía hacer nada más, seguía siendo su esposa y tenía que estar a su lado, por supuesto era una felicidad para él, solo necesitaba mostrarle una perfecta imagen a todos y fingir que éramos la pareja perfecta.

—¡Hola cariño! —besa mi mejilla para luego ayudarme a entrar en el auto— Démonos prisa, debemos llegar antes para apoyar a mi cuñada.

—Solo conduce.

—No seas así amor. —ruedo los ojos mientras él conduce con una sonrisa repugnante en su rostro— Te ves muy hermosa amor.

Ignoré por completo sus alagos que desde hace mucho tiempo ya no provocaban nada en mi y solo me concentré en mirar el camino lo cual era mucho mejor que mantener algún tipo de contacto con él. Deseaba que nada mal sucediera este día aunque me costara mi felicidad, Taehyung y Jisoo merecían tener el mejor momento en conmemoración al nacimiento de su hijo y no permitiría que nada lo dañara... a pesar de ser tan débil para defenderme a mi misma haría lo posible por ver a mi familia feliz.

(...)

Sin darme cuenta el auto se detuvo indicándome que ya estábamos en el lugar donde sería el evento. En solo segundos se aferraron a nuestro auto periodista y fotógrafos lo cual alimentaba mucho más el ego de ese maldito infeliz, todos imaginándose el matrimonio perfecto cegados por la realidad que solo pocas personas conocían. Lentamente ambos bajamos para después caminar por la alfombra roja en dirección al lienzo donde son tomadas las fotos de todos los dos invitados.

Estaba claro que no me quedaba más remedio que sonreír como estaba acostumbrada, las manos de HanSeok rodearon mi cintura apegándome más a él mostrando la cara que querían todas esas personas frente a nosotros. Suspiré profundamente para guardar las lágrimas que deseaba derramar para aliviar mi alma, hacía esto solamente por mi familia y su bienestar aunque por dentro solo quisiera escapar.

—Te ves demasiado provocativa con ese vestido Yaeri. —habla en un susuro sobre mi oído haciéndo un poco de presión en mi cintura— Todos te miran y eso me molesta.

—HanSeok por favor, me haces daño.

—Hablaremos de esto después... —sonríe— No eres una cualquiera para ese vestido tan llamativo.

Un nudo se formó en mi garganta intentando que el dolor no se reflejara en mi mirada e intenté sonreír otra vez, solo esperaba que alguien llegara y aliviará todo este sufrimiento que estaba sintiendo.

Jungkook

Bajé lentamente del auto seguido de EunWoo mientras todos los periodistas y fotógrafos se acercaban a nuestra llegada así que simplemente sonreí aunque mi mente se mantenía en encontrar a Yaeri. Miré en todas direcciones intentando encontrar esa mirada angelical hasta que finalmente lo conseguí pero...

¿Por qué él estaba abrazándola?

Sentí mi cuerpo estremecerse por completo cuando sus ojos se encontraron con los míos dándome a entender que estaba sufriendo, su mirada me hacía entender que no  deseaba estar en ese lugar pero que no podía hacer nada al respecto. Mi alma dolía simplemente de solo verla ser infeliz y lo único que pasaba por mi cabeza era correr a sus brazos, abrazarla y decirle que todo estaría más que bien.

¡Pero no podía hacerlo!
Solo me quedaba resignarme y admirarla desde lejos esta noche.

¡Maldición Jungkook!

—¿Qué sucede Jungkook? —volví a la realidad al escuchar la voz del castaño, rápidamente procedí a miralo— ¿La has visto? —asiento y señalo en su dirección— Diablos.

—Entremos... —asiente— Quiero estar lo más cerca de ella posible.

Continuamos saludando hacia las cámaras mientras caminábamos dentro del lugar, todo estaba delicadamente diseñado y se veía más elegante de lo común. Caminamos unos pocos metros hasta llegar a nuestros lugares correspondientes que para mi suerte estaban ubicados frente a los asientos dedicados a la familia Kim y ahí estaba mi Yaeri, mi hermosa Luna, mis 145 Lunas.

Su mirada se posó nuevamente sobre mi y sin dudar yo sonreí intentando no llorar por verla de esa manera, quería mostrarle que todo estaba bien y que esta noche estaría solo para ella por si necesitaba alejarse de este mundo. Si mis 145 Lunas estaba dispuesta a correr esta noche yo iría tras ella...

Un Saturno nunca se alejaría de sus Lunas porque son parte de él.





Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro