Yaeri

Desperté lentamente al sentir unas suaves caricias, las cuales pude reconocer, recorrer todo mi cuerpo con delicadeza. Lentamente abrí mis ojos encontrándome con esa mirada angelical que me analizaba detenidamente.

-Buenos días mi Luna. -sonríe para después dejar un corto beso en mis labios- ¿Dormiste bien? -asiento con una sonrisa- Es un alivio, tenía miedo de lastimarte.

-Nunca vas a lastimarme Jungkook. -sonríe- Te amo...

-Yo te amo más...

En un ágil movimiento tomé lugar sobre su cuerpo para comenzar mis besos esta vez en la zona de su cuello. Debo admitir que extrañaba sentir su piel y en este instante en el que podía hacerlo no pedía nada más.
Con delicadeza comenzamos a deshacernos de nuestras prendas, eran claros nuestros deseos el uno por el otro así que...

'¿Por qué no satisfacer esos deseos?'

Nuevamente nuestros besos volvieron esta vez con mayor intensidad, cada movimiento de nuestros labios se volvía más salvaje con el paso de los segundos lo cual era demasiado exitante para ambos...

'Sinceramente necesitaba sentirlo dentro de mi'

-Yaeri, ¿crees que ya estás lista? -sonrío y asiento- No quiero lastimarte.

-Tú no me lastimas Jungkook... solo hagámoslo.

Solo esas palabras bastaron para continuar, definitivamente debía admitir que estaba disfrutando cada movimiento sobre él, sentir todo su cuerpo bien perfeccionado bajo el mío me hacían enloquecer aún más.
Su mirada deseosa sobre mi acción de llevar el control no me podían hacer sentir más orgullosa, ambos amábamos todo del otro.
La mayor exitación llegó a nosotros una vez llegamos juntos al punto máximo, ante esta acción sus manos apretaron fuertemente mi cintura haciéndome dar un pequeño gemido.

Las emociones que sentía con Jungkook en cada instante no se comparaba con nada en este mundo, solo él sabía como hacerme feliz y a pesar de saber las consecuencias que traería mi desaparición, estaría dispuesta a hacerlo nuevamente.

(...) (...)

Después de ducharnos y alistarnos para el día, Jungkook y yo bajamos hasta el jardín donde nos esperaban EunWoo y SoHyun para desayunar. Para ser sincera algo estaba llamando mucho mi atención y era la estrecha relación entre ambos...

'¿Acaso estaba pasando algo más que solo una amistad?'

Decidí no sacar conclusiones apresuradas y esperar la confesión de mi mejor amiga, sabía que si algo sucedería sería la primera en saberlo, pero si la respuesta era un si a mis dudas no podría estar más feliz.

-Buenos días. -hablamos a la vez mi acompañante y yo.

-Buenos días. -responden juntos y yo abrazo a mi amiga.

-Bien, comencemos. -Jungkook y yo tomamos asiento seguido por el castaño mientras toma lugar junto a mí amiga- Tengo mucha hambre.

-¿Yae te encuentras bien? -mi mirada se dirige a la castaña- ¿No te duele algo?

-Estoy bien SoHyun. -miro a Jungkook y el solo sonríe- Estoy bien si los tengo a ustedes aquí.

Unas hermosas sonrisas se dibujaron en nuestra mesa alegrando aún más nuestra mañana haciéndome sentir más completa de lo que ya lo era. Estábamos a punto de comenzar nuestro desayuno cuando una llamada llegó al celular de SoHyun, luego de pedir una disculpa cortés contesta la llamada...

-Hola... ¿Si no te preocupes ella está aquí? -me mira- ¿Por qué estás tan agitado? -su mirada confusa pasó a ser de espanto provocando la preocupaciónen mi, lentamente finaliza la llamada- Está bien, adiós.

-¿Qué sucede SoHyun? -instantáneamente me dispongo a preguntar- ¿Quién te ha llamado?

-¿SoHyun? -la voz de EunWoo la hace reaccionar.

-HanSeok fue en tu búsqueda a casa de tus padres... Comenzó a pelear con Taehyung pero Jisoo intento detenerlos y tuvo un accidente. -ante sus palabras mis ojos intentan salirse de su órbita- Está en riesgo de perder a su bebé.

Al escuchar esas últimas palabras mi mente se invadió con los pensamientos de que ahora Jisoo estaba pasando por la misma situación que yo y para colmo todo era mi culpa. Podía sentir el dolor de mi familia causado por mis acciones, preferí mi felicidad por encima de los demás y estas eran las consecuencias.

Inmediatamente dos lágrimas recorrieron mi rostro para después caer sobre mis piernas, sentí las manos de Jungkook tomar mi rostro y así traerme a la realidad, al instante me dispuse a levantarme para después correr en dirección a la habitación y comenzar a preparar mis maletas. Por supuesto después de esto regresaría a Seúl y así enfrentar todo.

-Yaeri mi amor...

Sentí la voz de Jungkook entra seguidamente después de mi, para este punto mis ojos ya estaban completamente inundados por las lágrimas, los nervios se habían apoderado de mi y la culpa aún más.

-¡Yaeri cálmate! -los brazos de Jungkook sostuvieron mis hombros para después aprgarme a su cuerpo, inmediatamente lo abracé permitiéndome así llorar con todas mis fuerzas- Puedes llorar amor.

-¡Esto es mi culpa Jungkook, si mi hermano y Jisoo pierden su bebé por mi causa no me lo perdonaré nunca!

-No es tu culpa Yaeri... -me hace mirarlo- Nada de esto es tu culpa, solo eres una víctima más. -lentamente besa mis labios- Volveremos a Seúl juntos y está vez no te dejaré en sus manos.

(...) (...)

Después de media hora salimos camino a Seúl. Debía admitir que mi corazón estaba completamente al máximo, tenía miedo de que mi hermano y Jisoo sufrieran lo mismo que sufrimos Jungkook y yo y si era así, nunca podría volver a mirarlos, todo era por mi causa y no podía sentirme más infeliz...

Las horas pasaron como siglos aumentado mi desesperación, para este punto aún no sabíamos nada relacionado con el estado de Jisoo y mi sobrino. Solo podía rogarle a Dios porque lo peor no sucediera.

(...)

Salí de mis pensamientos abarrotados de torturas hacia mi propia persona cuando el auto fue estacionado en el aparcamiento del hospital, inmediatamente todos salimos para luego continuar nuestro camino en dirección a la zona de cirugías donde se encontraba mi familia... para ser sinceros no sabía como mirarlos a la cara después de todo el daño que causé.

El viaje en ascensor hasta el piso correspondiente fue más rápido de lo que creí. Una vez las puertas de este se abrieron la silueta entristecida de mi hermano se hizo presente ante mi mientras mantenía esa mirada que nunca he podido descifrar.
Ni siquiera supe que decir o hacer, simplemente me acerqué con la intenciones de posicionarme de rodillas para suplicar su perdón, sin embargo inmediatamente me detuvo para después embolverme en sus brazos permitiéndose así mismo llorar, al instante yo correspondo haciendo que nuestras lágrimas se hagan presentes.

-Perdóname Tae... -me aferro más a su cuerpo- ¡Esto es mi culpa, por favor perdóname!

-No tengo que perdonarte nada pequeñita. -se aleja un poco para limpiar mis lágrimas y besar mi mejilla- Solo prométeme algo, ¿está bien? -asiento rápidamente- Pase lo que pase, no vas a volver a sus manos, ¿por favor?

-Lo prometo. -ante mis palabras recibo un fuerte abrazo.

'Lo prometo'
Si así es, después de todo lo sucedido y ahora la situación por la que estábamos pasando, todo gracias a mi cobardía y a mi poca capacidad de enfrentar mi dolor, decidí que ya era el momento de papar.
No me permitiría sufrir más, no le daría esa desgracia a mi familia y sobre todo a Jungkook, ya habíamos pasado por mucho y era el momento de ser feliz.

Una vez mi hermano recibió mi respuesta a su petición me ofreció paso a encontrarme con mis padres quienes mostraban en sus miradas un profundo dolor, a pesar de que Taehyung me había conceduido su perdón seguía sintiéndome culpable por todo el dolor que les causé.
Al ver mi posición estática los brazos de mi madre me envolvieron con delicadeza, inmediatamente me aferré a ella para después sentir el calor paternal a nuestro alrededor.
Poco después SoHyun solo abrazó a mi hermano dándole seguridad de que todo estaría bien, Jungkook y EunWoo realizaron la misma acción de dejarle claro todo su apoyo, luego solo quedó esperar.

Mientras todos esperábamos entre la ansiedad y la tristeza las puertas del salón donde se encontraba Jisoo fueron abiertas dejando ante nuestra vista la silueta de uno de los cirujanos de nuestro hospital JungSilk, inmediatamente todos nos acercamos a su encuentro con las esperanzas de obtener una respuesta que calmara estas ansias y trajera la felicidad.

-Director Kim, doctor Taehyung... -mira a mi padre y luego a mi hermano- La señorita Jisoo está fuera de peligro. -ante sus palabras un profundo alivio se sintió en el ambiente permitiéndonos respirar- Sin embargo necesitará mucho reposo durante un largo período de tiempo.

-¿Qué sucedió con mi bebé? -ante la pregunta de mi hermano los nervios volvieron a apoderarse de nuestros cuerpos.

-La señorita Jisoo perdió mucha sangre y líquidos, sin embargo... -nos regala una sonrisa- Él nacimiento del bebé fue exitoso. ¡Felicidades por su primer hijo doctor Taehyung!

Ante las palabras del doctor JungSilk la alegría volvió a rebozar entre nosotros. Inmediatamente mis padres envolvieron a mi hermano entre sus brazos dándole la oportunidad de festejar entre lágrimas. SoHyun y EunWoo se abrazaron aliviando la carga de la ansiedad, mientras que yo solo pide lanzarme a los brazos de Jungkook dejando caer algunas lágrimas.
Me alegraba, me alegraba mucho el hecho de no haber perdido al bebé, por un momento me imaginé ver a mi hermano y a su esposa sufrir lo mismo que habíamos sufrido Jungkook y yo, sin embargo, no fui así.

Habían lágrimas, ¡Si! ,pero eran lágrimas de felicidad, lágrimas que si debían ser derramadas. En este momento no podía estar más plena. Ver esas hermosas sonrisas que celebraban la llegada de un nuevo miembro a la familia era un sueño hecho realidad.

-¿Cuando puedo ver a mi esposa doctor?

-Por ahora es necesario que la señorita Jisoo descanse, fue un proceso difícil y necesita espacio. -todos asentimos, al ser gran parte de nuestra familia profesionales dedicados a la salud entendíamos la situación y dejarla descansar era la mejor opción- Sin embargo en unos momentos podrán ver al bebé.

Una nueva emoción se alojó en el corazón de todos los presentes, solo esperábamos el momento en el que podríamos ver a ese pequeñito que tanto estábamos esperando. Amaba ver esa felicidad en el rostro de mi hermano...

'Anelaba sentirme asi'

(...) (...)

Después de unas horas el nuevo integrante de nuestra familia fue presentado ante nosotros y todas las revistas existentes en Seúl como el pequeño Kim JiTae. Ante la complejidad en el parto de Jisoo la noticia del nacimiento de mi sobrino se hizo pública y por supuesto era algo con lo que estábamos acostumbrados a lidiar.
Luego de permanecer unos momentos más con mi hermanos Jungkook y yo nos retiramos del hospital hacia su casa. Para ser sinceros prefería quedarme acompañado a mi hermano pero el prefirió quedarse con su bebé y su esposa por lo cual no insistí. EunWoo se ofreció gentilmente a acompañar a mi amiga y ella por supuesto aceptó, aliviándome de cualquier preocupación.
Por el momento era hora de descansar, había sido un día de muchas emociones y era momento de respirar y disfrutar de la felicidad.

-Mi hermosa Luna. -sentí la manos de Jungkook rodear mi cintura apegándome con fuerza a su cuerpo una vez salí del cuarto de baño. -Me encanta sentir tu olor. -sonrío una vez deja un corto beso en mi cuello- Te amo Yaeri.

-Yo también te amo mi Saturno. -me volteo hacia él encontrándome con esa hermosa sonrisa angelical- Te amaré por siempre.

-Yae yo... -baja la mirada avergonzado- Quiero que nuevamente intentemos tener un bebé. -lo miro confundida- Quiero formar una familia contigo amor y ser felices.

-Yo también quiero formar una familia contigo Jungkook. -ante mis palabras sus manos rodean mi cintura para después elevarme- ¡Te amo mucho mi Saturno!

-Esta vez yo te protegeré. -asiento con una sonrisa- No estarás tu sola Yaeri, no pienso dejar que nada te lastime.

(...)

SoHyun

Luego de unos minutos el auto del castaño se estacionó frente a mi departamento, inmediatamente levanté mi rostro y así poder mirarlo con detenimiento mientras me sonríe. Sinceramente quería definir cada detalle de su rostro solo para sentirlo cerca esta noche.

-Fue un día confuso. -se dispone a hablar cosa que agradecí mucho- Pero gracias a Dios todo terminó bien.

-Así es, fue mucho dolor para nosotros.

Un silencio algo incómodo se hizo presente entre nosotros, próximamente nuestras miradas conectaron y solo la disposición de ambos debía llegar para que nuestros labios se unieran en un profundo y necesitado beso cosa que inevitablemente sucedió.
Las manos de EunWoo se apoderaron de mi rostro con total posesión haciendo nuestro beso más intenso y exitante.

'¿Qué se supone que estaba sintiendo ahora?'

No lo sabía pero lo estaba disfrutando demasiado y quería mucho más. Lentamente me alejé un poco si romper el contacto de nuestras respiraciones y así poder mirarlo con claridad, permitiéndome decir una gran locura...

-¿Entramos?

-Tardaste mucho en decirlo.

Ante sus palabras de aceptación ambos salimos con desesperación del auto. Rápidamente entramos en el departamento y sin pensarlo nuestros labios volvieron a unirse con la misma intensidad de hace un instante. Sentir sus manos apretar todo mi cuerpo contra el suyo me hacían dar leves gemidos, sinceramente no podía creer como es que estaba sintiendo tantas cosas en un solo momento.

Con cuidado nos recostamos sobre el sofá múltiple color carmín en el centro del salón. Lentamente comenzó lo que sería un camino de besos húmedos por todo mi abdomen para después llegar a mi zona íntima provocando que me alejara un poco por la sensaciones exitantes que esto me provocaba.

-Quiero hacerte mía SoHyun.

-Entonces hazlo porque yo también lo quiero.

Con precisión me acerqué a él para luego encargarme de quitar todas nuestras prendas y quedar completamente expuestos uno a otro. No pude evitar dar un fuerte gemido una vez se adentró en mi. Al comienzo sus embestidas fueron pasíficas y delicadas, sin embargo estos movimientos aumentaron su intensidad lo cual no me molestaba en lo absoluto.

No sabía que estaba sintiendo en este momento pero si sabía que era algo especial. EunWoo había despertado muchas cosas en mi que nadie jamás había logrado y eso me encantaba, solo pedía esta ve tener el valor necesario para afrontar lo que sea que signifique esto.

-SoHyun... -sentí su voz en un gemido haciendo que nuestra acción se volviera más exitante- Te deso demasiado.

Con unos minutos más el punto máximo llegó a nuestros cuerpos haciéndonos dar un fuerte gemido de satisfacción en ambos. Para ser sinceros nunca había creído que algo así pasaría y en todos los sentidos, jamás estaría arrepentida de esto.
Lentamente me dispuse a admirar la silueta del castaño que había quedado justo a mi lado. Me avergonzaba en parte verlo analizar todo mi cuerpo mientras dejaba unas deliciosas caricias sobre mi abdomen.

Por dentro sentía la necesidad de preguntarle que había significado esto para él, sin embargo tenía pánico de ilusionarme y quebrar mi alma otra vez, por lo que simplemente decidí callar y disfrutar el momento.

(...)

HanSeok

Lancé la última botella de Soju que tenía en mi poder contra la pared que contenía el retrato de Yaeri. En los últimos momentos me había enterado del nacimiento de otro integrante de esa familia y no podía sentirme más repugnado, lo único bueno de esta situación es que al menos no tendría que pagar ninguna muerte.
Sabía perfectamente que esa zorra había regresado a la ciudad por lo que tenía planeado algo perfecto para tenerla de vuelta. Ella y todos los demás pagarían toda la humillación...

'Ella solo podía ser mía'

Ella aún debía sufrir lo suficiente como para entender que solo yo puedo ser el hombre en su vida.