Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

11

Día siguiente

Permanecía observando mi reflejo en aquel gran espejo de mi habitación mientras recordaba todos los años que viví de la misma manera sin una salida o sin poder hacer algo al respecto. Aún seguía preguntándome desde la noche anterior...

¿Por qué yo merecía sufrir esto?

¿Acaso había sido una mala persona en algún momento?

Esperar una respuesta para esas dudas era algo estúpido porque obviamente nadie sería capaz de responderme y esto me llevaba a reprocharme a mi misma porque no lo detuve antes de que fuera peor y me consumiera como lo está haciendo ahora.

Decidí ignorar todos los pensamientos que estaban nublando mi mente y con el mayor cuidado comencé a cambiar el vendaje de mi mano para después ir al hospital y así encontrarme con la única persona que podía alegrar mis días. Como pude abrí el frasco de pomada de cerezas para untar un poco en los pequeños cortes provocando que el molesto dolor comenzara nuevamente, luego de eso simplemente tomé vendas nuevas para enrrollarlas nuevamente en esa zona calmando un poco la hinchazón.

Al terminar de arreglarme y desechar el vendaje antiguo tomé mi abrigo y mi bolso para después salir de la habitación y luego de casa. Hoy por fin Jungkook volvería a Seúl y aunque aún está destrozado por lo sucedido con su padre pasaríamos el día juntos, él necesitaba todo mi apoyo y amor y por supuesto yo estaba más que a su disposición. Verdaderamente todas las amenazas que HanSeok me había hecho respecto a alejarme de Jungkook me daban exactamente igual, nunca sería capaz de no volver a ver al trigueño porque el amor que siento por él no estoy dispuesta a dejarlo ir.

Con pasos rápidos caminé hasta mi auto para después adentrarme en este en el lugar del conductor y así comenzar a conducir en dirección al hospital donde seguramente estaba mi mejor amiga esperando mi llegada. Sinceramente el hecho de que SoHyun siempre esté esperándome como ya se había vuelto una costumbre entre nosotras era lo mejor de cada mañana sin embargo hoy no era un buen momento, ella notaría mi mano lastimada y entonces se disgustaría.

(...) (...)

Estacioné el auto en el aparcamiento del hospital y con cuidado de no lastimarme nuevamente tomé mi bolso para después salir y adentrarme en el lugar. Con ayuda de mi abrigo logré cubrir mi mano vendada evitando que las demás personas a mi alrededor descubrieran el daño, no era momento de darle paso a los comentarios y críticas de las personas, era mejor pasar desapercibido.

—¡Doctora Yaeri! —rápidamente me giré en mi lugar encontrándome con la silueta de MinHee— ¿Cómo está? —hace una reverencia.

—Estoy bien MinHee, muchas gracias. —sonríe— ¿SoHyun está en su oficina?

—La Doctora SoHyun está en una cirugía, saldrá en media hora. —asiento levemente con una sonrisa para después alejarme con las intenciones de dirigirme a mi oficina— Espere Doctora... —vuelvo mi mirada hacia ella— Hay una mujer esperándola en su consulta. —la miro extrañada— No quiso decirme su nombre solo me dijo que esperaría a Kim Yaeri en su oficina.

—Está bien MinHee no te preocupes yo me encargaré. —sonríe levemente— Te veré más tarde.

Hace una reverencia para después alejarse. Sin querer crear una escena confusa en mi mente tomé el ascensor en dirección al piso de las oficinas y así ver de quien se trataba. Una vez las puertas de este se abrieron caminé con pasos rápidos hasta mi consulta para después entrar encontrándome con la silueta de una mujer cabellos rubios mientras permanecía analizando algunos adornos sobre los estantes.

—Buenos días. —capté su atención haciendo que voltee a verme— Soy la Doctora Yaeri, lamento haberla hecho esperar.

—No se preocupe. —sonrío para después indicarle que tomé asiento— Soy Park MinJiwo. —asiento aún sin seguridad de conocerla— Estoy aquí porque tenemos un asunto en común Doctora.

—¿Asunto en común? —sonrío confundida— Lo siento señorita MinJiwo pero en realidad yo no la conozco.

—¿Jungkook no te habló de mi? —inmediatamente una ola de confusión me invadió por completo después de sus palabras, sinceramente no me gustaba el camino que está conversación estaba tomando— Soy su ex novia.

—Ha, yo... —habló entrecortadamente.

En solo segundos recordé la confesión de Jungkook relacionada con esa mujer y todo el daño que le hizo, podía ver en su rostro la molestia y la superioridad que sentía por mi pero lo que aún no entendía es porqué regresó.

—Te diré que no estoy aquí para una conversación amistosa. —inmediatamente salgo des mis pensamientos al escuchar su voz nuevamente— Seré clara, quiero que te alejes de Jungkook, ¿entendiste? —la miro con seriedad— Volví por él y tu estorbas en mi camino, espero que seas inteligente y me obedezcas.

Sin pensarlo dos veces se levanta de su asiento aún manteniendo su mirada amenazante sobre mi. Debía admitir que tenía demasiado valor como para exigirme tal cosa en mi propio hospital y aunque no pretendía ser una persona grosera no la dejaría humillarme de esa manera, era suficiente todo lo que tenía que sufrir con HanSeok.

—¡¿Acaso no escuchaste Yaeri?!

—¡Usted es la que tiene que escuchar! —me mira con molestia— ¿Crees que Jungkook me permitirá alejarme de él? —sonrío sarcástica— Te equivocas, tu lastimaste mucho su alma, ¡lo traicionaste y lo encerraste en este lugar aún sabiendo que él estaba perfectamente de su estado mental solo por dinero! —en solo segundos sus menos se vuelven dos puños— Yo no soy como tú así que no estás en posición de exigirme que me alejé de él, ¿te quedó claro?

—No sabes con quien te estás metiendo niña. —coloca sus manos sobre la mesa para acercarse un poco más— Cuando deseo algo lo consigo y créeme que Jungkook no será la excepción.

—Jungkook te odia más que a nada. —se cruza de brazos— Y no voy a alejarme de él porque lo amo pero claro... —sonrío— Tu no sabes lo que es eso, ¿o me equivoco? —ante mis palabras ni siquiera es capaz de protestar— Ahora sal de mi oficina y no vuelvas.

Recibí una última mirada amenazante por su parte para después verla salir cerrando la puerta con algo de brusquedad tras su último paso. Una vez me encontraba sola respiré profundamente mientras analizaba detenidamente lo que acababa de ocurrir y todas las amenazas que había recibido por esa mujer. Sinceramente nada de lo que me había dicho me haría cambiar en lo absoluto respecto a Jungkook, el amor que sentía por él era demasiado fuerte como para dejarlo ir simplemente por el regreso de una mujer de su pasado.

Salí nuevamente de mis pensamientos al escuchar dos leves toques sobre la puerta y después de pronunciar un 'Adelante' inmediatamente la silueta de la castaña se hizo presente ante mi manteniendo una hermosa sonrisa que fue desapareciendo al ver mi mirada de desesperación.

—¿Yaeri está todo bien? —niego y rápidamente me acerco a ella para abrazarla— ¿Qué sucede?, ¡por dios dime!

—La ex novia de Jungkook estuvo aquí. —al escuchar mis palabras sus ojos intentaron abandonar sus órbitas— Me exigió que me alejara de él y me amenazó. —sentí como dos leves lagrimas recorrieron mi mejilla— No puedo hacer eso SoHyun, yo lo amo demasiado.

—Claro que no harás nada Yaeri. —sostiene mis hombros haciéndome verla a los ojos— Jungkook te ama más que a nada y ella ya no tiene ninguna significación para él, ¿de acuerdo? —asiento no muy convencida— Ustedes dos merecen ser felices y eso no lo destruirá esa bruja.

—Supongo que tienes razón. —sonrío mientras limpio mis lágrimas— Gracias por apoyarme.

Una hermosa sonrisa se delinea en sus labios para después embolverme en sus brazos regalándome esa sensación maravillosa que siempre me hacía superar todo, este era uno de esos momentos en los que ambas éramos sola una.
Lentamente nos alejamos un poco percatándome de su actitud la cual había cambiado gradualmente a seriedad e incomodidad dándome a entender que no había tardado mucho en darse cuenta respecto a lo que intenté ocultarle.

—¿Qué es esto Yaeri? —toma mi mano lastimada entre las suyas— ¿Qué te hizo ese desgraciado?

—No, yo solo me caí sobre la mesa de cristal del salón. —sonrío intentando que mi excusa sea lo suficientemente creíble— Fue un accidente pero estoy bien.

—¿Por qué mientes? —bajo la mirada y ella vuelve a abrazarme— Yaeri por favor para con esto, ya no soporto más verte sufrir así. —me aferro más a ella— ¡Tienes que hacer algo!

—No puedo hacerlo así sin más SoHyun, necesito tiempo. —niega ante mis palabras— Créeme que lo único que deseo es alejarme de él pero...

Antes de poder decir alguna otra cosa a mi favor un fuerte mareo me invadió por completo provocando que mi vista comenzara a nublarse y haciéndome perder el equilibrio. Inmediatamente la castaña detuvo mi caída sosteniendo mi cintura con fuerza mientras me analizaba detenidamente con preocupación.

—¡¿Yaeri qué te sucede?! —con el mayor cuidado me hace tomar asiento en el sofá— ¿Estás bien? —asiento levemente— Vamos a mi consulta, te revisaré.

—No no, yo estoy bien. —sostengo su mano entes de que logre alejarse— Solo fue un mareo.

Estaba a punto de protestar cuando sus palabras fueron interrumpidas por el sonido de mi celular, rápidamente la castaña se acercó hasta mi bolso para tomarlo y contestar dándome a entender que se trataba de Jungkook.

—Jungkook... —la miro entre mis posibilidades avisando que no le cuente algo de lo sucedido— Si estoy con ella... ¿Puedes subir?... Yaeri no se encuentra bien... —y por supuesto mis intentos eran ignorados— Estamos en su oficina... Bien, esperaremos aquí.

Luego de sus últimas palabras finaliza la llamada volviendo a dejar mi celular en su lugar y así regresar a mi lado para después revisar mi pulso, para el alivio de ambas todo estaba bien, seguramente solo era una bajada de tensión y pronto todo estaría de vuelta a la normalidad.

Luego de unos minutos dos leves toques se hicieron escuchar sobre la puerta captando la atención de ambas. Luego de pronunciar un 'adelante' esta se abrió dejando a nuestra vista la figura de aquel chico trigueño manteniendo la mayor preocupación en su mirada.

—Amor. —en solo segundo se acerca a mi para después besarme y envolverme en sus brazos haciéndome inundarme en su perfecto aroma— ¿Estás bien?, ¿qué sucedió?

—Prácticamente se desmayó. —mira a la castaña ante su respuesta— Necesito revisarla pero me lo impide.

—No es necesario, estoy bien. —sonrío— No he desayunado y por eso me sentí débil.

Ambos asienten no muy convencidos por mi respuesta sin embargo intento mantener toda la confianza en lo que acababa de decir. Debo confesar que nunca en la vida me había sucedido este tipo de situaciones, no era una mujer de desmayos por falta de alimentos pero no era momento de seguir preocupando a ninguno de mis acompañantes aunque si mantenía cierta preocupación.

—¿Yaeri por qué tu mano está vendada? —un leve escalofrío recorrió mi cuerpo al escuchar su pregunta—¿Qué sucedió?

Inmediatamente miré a SoHyun buscando en ella algún tipo de refugio que pudiese librarme de su pregunta y dar una respuesta clara. Sabía que a pesar de no estar de acuerdo con mi decisión de ocultar todo lo que vivía con HanSeok siempre podía contar con su apoyo para estas situaciones.

—Lo siento Jungkook. —el trigueño dirige si mirada a ella— Yaeri me ayudaba con algunas cosas de mi oficina pero un jarrón se resbaló callendo al suelo y ella cortó su manos con algunos vidrios— sonríe levemente— Fue un accidente.

—Está bien. —me mira nuevamente— ¿Te gustaría acompañarme a desayunar. — sonrío y asiento— SoHyun, ¿puedes acompañarnos?

—Me encantaría pero tengo una cirugía en una hora. —asiente levemente— Será en otra ocasión. —vuelve su mirada a mi— Si tienes algún otro problema solo llámame, ¿de acuerdo?

—Estaré bien si estoy con Jungkook. —recibo un beso en mi mejilla por parte del trigueño— No te preocupes amiga.

—Confiaré en eso solo porque es Jungkook. —me abraza mientras escuchamos una pequeña risita perteneciente al mencionado— Los veré más tarde, ¿está bien?

Después de recibir una aceptación por parte de ambos sale de la habitación dejándonos a solas. Con el mayor cuidado las manos de mi acompañante rodearon mi cintura haciéndome tomar asiento sobre él para después mirarme a los ojos y besar mis labios con pasión y a la vez necesidad despertando en mi esa sensación de emoción y nervios con su tacto sobre mi.

—¿Por qué me mientes Yaeri? —lentamente me alejo para poder mirarlo a los ojos— No dañaste tu mano con ningún jarrón, ¿verdad? —trago en seco— Te conozco bien como para creer esa tontería.

—Yo solo...

—Dime ¿que tengo que hacer para que te alejes de ese infeliz y estés a mi lado? —bajo la mirada— Haré lo que me pidas mi amor pero solo ven conmigo.

—Jungkook, HanSeok sabe sobre nuestras relación. —al escuchar mis palabras sus ojos intentan salirse de su órbita— Le pedí que nos separemos pero solo se negó como un loco y me obligó a alejarme de ti. —inmediatamente sus manos se vuelven un puño— Pero créeme cuando te digo que te amo y que nada me hará alejarme de ti, ¿si? —lentamente dejo un corto beso sobre sus labios— Solo necesito tiempo para poder separarme de él.

—Adoro cuando dices que me amas. —toma mi mentón en su mano acercando un poco más mi rostro y así besar mis labios, luego de unos segundos nos separamos por la necesidad del oxígeno— ¿Nos vamos ahora? —asiento— Excelente.

Ambos retomamos nuestra postura nuevamente para después yo tomar mi bolso y salir de la habitación seguida por el trigueño. Con el mayor cuidado de no ser vistos por alguien del personal tomamos la salida en dirección al patio trasero del hospital donde permanecía el auto de Jungkook, inmediatamente nos adentramos en este dando inicio a nuestro camino.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro