Odio la universidad.

¿Por qué?

Es simple, no es lo mio, y no es solo porque no sea lo mio.

Simplemente la detesto, bueno, EH aquí el verdadero motivo.

Tranquilamente hacia mi salón, iba a buena hora, maldigo el momento en el que paso.

Tropecé con un compañero, mis libros, «mi cuaderno» y lapices también cayeron.

Y en ese momento, se que fue a propósito, una chica derramo su malteada sobre el.

Mi mundo se vino abajo.

Se disculpo sarcásticamente lo cual me hizo recluir a la ira, y darle un fuerte golpe en esa nariz tan pequeña.

Me pregunto como podrá respirar en ella, pero ahora ya tendrá una fosa nasal más grande.