Una noche más , esa horrible llamada llegó, lloraba desconsoladamente mientras presionaba la almohada contra su rostro y soltaba suspiros ahogados, Estaba realmente asustado.

Presionaba sus propias manitas para intentar distraerse , ¿Por qué no colgó? Bueno, ciertamente era por precaución , la persona al otro lado del telefono parecia saber muy bien la ubicación de su casa. Y eso que se había mudado recientemente , lo peor de todo, es que cuando Jimin dejó la casa de sus padres todo empeoró , pues cada noche que salia del trabajo sentia que alguien lo seguia y se formaba un ambiente dónde sus adentros le gritaban que corriera.

Jimin solía presumir su paz pero ahora claramente carecía de ello. Aún recuerda la primera vez que esto comenzo y lo tomo a broma pero después comenzo a herizarle la piel que la persona detrás de él estuviera tan cerca , despues las llamadas comenzaron y tambien le sorprendía que del otro lado del telefono estuviera una persona tan atenta a su vida. Y es que el extraño sabía la escuela a la que iba , los amigos que tenia , el deporte que practicaba , con quien salia , su materia en la que peor le iba , y lo peor de todo la casa dónde vivía solo.

Jimin estaba asustado pero no queria admitirlo, asi que se autoconvencia de que no se trataba de más que una broma estúpida, que las llamadas tarde o temprano desaparecerían, "sólo es cuestión de tiempo"  pero al parecer a cierta persona no le basto con eso, las llamadas comenzaron a ser más frecuentes incluso de madrugada y ya no era una vez al día , eran muchas y tan difíciles de contar que prefería no desgastarse con pensarlo. Incluso había pensado en desconectar su teléfono , después de todo era lo mas sensato, pero un lado turbio en su mente , quería seguir recibiendo aquellos llamados y la maldita curiosidad estaba ahí, saber quién era , por qué lo llamaba , que quería exactamente y por qué lo admiraba , sabía sólo una cosa esa persona, estaba demasiado cerca.

Trataba de controlar su respiración , las clases comenzaron a ser desgastantes , la escuela comenzo a ser su punto frágil pues sentía que todos los observaban , comenzó a desconfiar de sus amigos e incluso de él mismo , se sentía patético porque quiso acudir a sus amigos y ellos sólo se burlaron. 

Los momentos mas emocionantes de su niñez , de su adolescencia se vieron opacados por un maldito loco que quería exactamente cogerlo. Al menos eso decia cada noche cuando lo llamaba, hacia comentarios sobre la ropa que habia utilizado, lo bien que le quedaba y como relucia durante el día. Jimin trataba de tomarlo de la mejor forma pero si un idiota que no conoces te escribe por internet y llama al número de tu habitacion para decirte que te vio durante el dia y que quiere cogerte. No reaccionas muy bien, el problema de Jimin se hizo mas grande cuando en vez de no reaccionar bien, sólo se quedaba leyendo los mensajes sin reaccionar. ¿Era eso enfermo? Definitivamente si, entonces Park Jimin supo que estaba jodido.