VI
Minho es un tanto distraído, bueno en realidad es bastante distraído, pero hay algo en Minho que compensa ese defectos, el no es un idiota, sabe que si se equivoca debe pedir disculpas no importa si no quiere o esta muy afectado por el acontecimiento, él pedirá disculpas porque sabe que es lo correcto así que en estos momentos esta siendo un no idiota y esta caminando hacia la casa de Jisung, sus manos jugando con la orilla de su playera mientras piensa en la gravedad de las cosas, imaginando lo mal que esta la situación y el porque de estos daños, Minho esta viendo las cosas como un inversionista ve a una empresa en bancarrota, buscando el porque pero él sabe que su amistad con Jisung no es una inversión y definitivamente no tiene que verla desde ese frío lado. Levanta la vista slo para darse cuenta que esta a pocas casas de distancia y puede sentir su corazón acelerándose y sus manos sudando y lo odia, ese otro gran defecto sobre sus manos sudando cada vez que esta nervioso o estresado, detesta como sus manos se sientes pegajosas y húmedas, es tan asqueroso, Lia se lo ha dejado ver algunas veces como cuando conoció a sus padres y ella intento darle apoyo tomándolo de la mano para tranquilizarlo, esa fue la primera vez que ella le dijo lo asqueroso y horrible que era eso. Como si él no lo supiese ya.
La puerta estaba a escasos centímetros de él y sabía que no había vuelta atrás, sabía que debía tocar porque además de que Jisung se merece una disculpa Minho también alcanzó a verlo mientras el rizado lo espiaba desde la ventana así que esto debe ser ahora. La puerta retumba bajo su mano y es abierto segundos después, Jisung lo recibe en pijama, una linda pijama de aguacates que definitivamente Minho adora al momento.
— No preguntes — el rizado se hace a un lado y Minho sólo amplia más su sonrisa.
— En realidad iba a decir que es muy linda.
— Sé que es linda, por eso la compre pero la gente no suele tener la misma opinion.
— Son sólo aguacates ¿que tan malo puede ser? — Jisung se encoge de hombros.
Ambos ya se encuentran sentados en el sillón de la sala y Minho sabe que sus manos siguen sudando, Jisung le sonrie pero no dice nada.
— Lo lamento, en verdad sé que no debí sólo mirarte como si fueras un bicho raro, debí haber dicho algo y lamento eso.
— Hey tranquilo, esta bien — la mano de Jisung toma su mojada mano y Minho sólo espera que el haga una mueca de asco y la retire pero eso no sucede — yo lamento haber dicho eso en primer lugar, no era ni el momento ni el lugar en serio perdón — ambos se miran esperando a que el otro siga algo y Minho sabe que él será el primero en hablar porque esa duda lo ha estado consumiendo las últimas horas y debe preguntar o explotara.
— Pero... — muerde su labio y sus manos siguen sudando y nu entiende como es que Jisung aún tiene su mano agarrada con tanta fiereza — Es... Lo que dijiste ¿es cierto?
— Umm bueno — Jisung desvía la mirada y es ese momento en el que Minho lo nota.
El pie del rizado se mueve arriba y abajo demasiadas veces y es un poco desesperante para Minho pero entiende que esa es su forma de descargar los nervios y le permite que siga moviendo su pie porque en realidad él tiene ningún derecho a juzgarlo mientras su mano es como un pan remojado en agua Jisung aún juega con su mano a sabiendas de que esta pegajosa.
— Si — al fin las palabras salen pero no es suficiente para el castaño.
— Si ¿que?
— Si... Si ummn si me gustas — Jisung al fin suelta su mano y es casi imperceptible el movimiento pero Minho puede jurar que se recorrió otro par de centímetros lejos de él — pero no tienes que preocuparte de nada yo... No haré nada raro y esta bien puedes no hablarme o lo que quieras ¿si? Sólo no quiero que pienses que soy algún tipo de gay psicópata porque soy algo raro pero no es para tanto y...
— Jisung — el castaño pone su mano en la rodilla de la inquieta pierna de Jisung — respira, no pienso nada de eso tranquilo.
— Gracias.
— No hay nada que agradecer — ambos sonríen.
El resto de la tarde la pasan juntos y es liviano e increíble y Minho ama la sensación tan parecida a este en casa que siente mientras ríe con Jisung sobre algo que le esta contando o como es tan normal la forma en la que en rizado se sonroja y cubre su rostro y él prácticamente se sube en sus piernas para quitarle las manos de la cara. Se siente tan fácil para Minho que incluso siente algo parecido a un vacío cuando se despide del rizado en la puerta. Mientras camina a casa una sonrisa se forma en su rostro mientras recuerda la tarde.
Y no sabe que es lo que siente en el estómago y el pecho pero lo deja pasar no intentando averiguarlo porque tiene miedo de la respuesta, de tal vez darse cuenta que Jisung no es el único afectado en todo esto.
2/10
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