
★﹕capítulo 15
Cada vez más las cosas se ponían difíciles, incluso, una noche Minho llegó a casa con un balazo en la pierna, ese mismo día Jisung sintió su alma se iba de su cuerpo. Después de extraerle la bala y estar en recuperación casi un mes Jisung tenía bastante temor de que algo que sucediera, los enemigos del alfa eran más constantes en atacar e incluso robar, Minho estaba más que enfadado y se dio cuenta que había alguien detrás.
Los meses pasaron y colocó más refuerzos, pero no eran suficientes, incluso secuestraron a uno de los alfas de Minho y lo encontraron tirado en uno de los barrios del alfa con una nota.
"Estas tan jodido. Este es tu destino"
No hubo temor contra su vida sino por la vida de su familia, lo que le hicieron a uno de sus hombres no se iba a quedar de esa manera, por ello buscó por mar y tierra a los responsables hasta realizarse un tiroteo en donde fallecieron demasiados del bando contrario, solo que con la diferencia de que el que ahora recibió un balazo fue Seungmin y ahí es cuando Chan sintió lo peor.
El médico diagnosticó que no hubo peligro alguno pero necesitaba también varios días de reposo, Chan jamás se despegó de él y estuvo hasta cuando amanecía hasta que anochecía. Seungmin se dio cuenta que aunque hiciera cualquier otra cosa el alfa jamás quitaría su dedo del renglón, y en cuanto esté le volvió a mencionar tener algo se dio por vencido, no podía seguir ocultando algo que tarde o temprano saldría a flote y después de recibir aquel balazo supo que si algún momento esté negocio le quitaba la vida por lo menos sabría que fue feliz con Namjoon, su alfa destinado.
Había aceptado ser su omega.
Los robos y los atentados siguieron constantemente, ya ni siquiera podía dormir por estar muy al pendiente de su familia por el temor de que alguien llegara de sorpresa. Con armas largas velaban y estaban muy atentos en cualquier cosa que hacían.
Jeongin lloraba pidiendo calor de su padre pero Jisung buscaba alguna manera de que se tranquilizara, no podía interrumpir a su alfa y menos ahora que las cosas no iban por un buen rumbo. No sabía que hacer o como animar al alfa solo le daba su tiempo. Lo que alertó aún más a Minho fue la última nota que recibo de amenaza, ya no iban solo por él sino por su omega y su cachorro diciendo que serían los próximos en morir, ya no era sano que siguieran aquí, así que, decidió llevárselos a otro estado por lo que solamente duraron un año.
Muy al principio de ese año todo se sentía tranquilo e incluso se había confiando muchísimo, desde celebrando el primer cumpleaños de Jeongin con toda su manada. Se sentía tan feliz al ver a su cachorro crecer, y cuando dio sus primeras palabras y pasitos sintió un calor enorme en su corazón que no podía creer que estaba viviendo esto. Escuchar la pequeña voz de su hijo llamándolo se desmoronó, lo abrazó con mucha fuerza y con los ojos apunto de llorar le dijo que lo amaba con toda su alma, abrazando también a su omega besando de él.
—Estoy tan enamorando, te amo Jisung, gracias por hacer de mi infierno un paraíso.
—Eso te lo debo de decir a ti, porque fuiste tú quien me salvo— besa sus labios—, gracias.
Y cuando Jeongin caminaba caminaba por primera vez de paso lento a rápido porque estaba apunto de caerse lo atrapó justo a tiempo mientras los tres reían. Él quería que esa tranquilidad se quedara para siempre pero no fue así, no sabe con exactitud cómo es que dieron con él que atacaron sin piedad, cómo pudo protegió a sus familia mientras pedía por radio que viniera su manada lo más rápido posible, en cuanto su cartel llegó haciéndose una lluvia de balas él se unió, Jisung no quería pero tenía que hacerlo. Jeongin lloraba desconsoladamente algo que el omega no podía calmar temiendo que algún contrario los encontrara que les hiciera algo, cosa que no pasó.
—No puedo seguir poniéndolos en riesgo de esta manera.
Todos los presentes estaban escuchando, Jisung lo miró extraño.
—¿A que te refieres con eso?
—Tendrán que irse del país en lo que yo me encargo de terminar esto.
—No, yo no quiero irme. Alfa, quiero estar contigo.
—Mientras tú y mi hijo sigan aquí conmigo tienen el riesgo de que les suceda algo, y yo no me lo perdonaría. Son mi familia, mi vida entera— Suspira cambiando su postura una más seria—. Hyunjin, necesito lo más pronto posible un pasaporte para Jisung y que viaje a Inglaterra, consigue un buen lugar para que mi hijo y él estén bien.
—Claro señor.
—Pueden retirarse.
Todos se marchan dejando a Jisung y a Minho solos, este se dirige a las escaleras para irse directamente a la habitación pero Jisung lo detiene.
—¿Me estás abandonando?— preguntó a dolorido tomando firmemente a Jeongin, sus lágrimas cayeron sin aviso.
—¿De qué hablas?— se regresa para mirarlo pero sabe que fue un error porque sintió un dolor en su corazón verlo de esa manera.
—Yo no me quiero a ningún lugar, quiero quedarme contigo, se supone que demos juntos para siempre porque eres mi alfa.
Lo toma de las mejillas.
—Entiende que están en peligro pueden hacerles daño.
—Yo podría pedirle ayuda a Seungmin de que me enseñe a usar un arma, además, no importa si muero con tal de salvarte la vida y la de Jeongin pero quiero quedarme.
—No, Jisung, no. La decisión está tomada.
—Minho, por favor, no me abandones.
—Escúchame bien, ¿sí?— como puede toma su mano derecha y se la coloca en su pecho donde está directamente el corazón—, te prometo con mi corazón que iré a buscarte a Inglaterra después de todo esto y te daré una vida de tranquilidad y amor, solo espérame y estaré contigo.
—¿Seguro?
—Lo estoy haciendo con mi corazón.
Esa misma noche lo único que quería era sentir a Minho y no despegarse de él en ningún momento. En cuanto Jeongin se durmió corrió a la habitación para pedirle que hicieran el amor algo que Minho no le negó.
Beso sus labios como si el mundo se acabara, recorrió cualquier rincón de su boca sin perder ningún rastro, mordiendo y chupando de él haciendo sonreír al alfa. La ropa en cuestión de segundos se fue desapareciendo estando ya completamente desnudos, Minho besaba desde su cuello hasta su vientre haciéndolo sentir tan amado, cada vez que sus dedos rozaban la piel del omega sentía un cosquilleo y eso le encantaba. No esperaba más tiempo y comenzó a penetrarlo haciendo las embestidas un poco lentas deleitándose con los gemidos de su amante.
—El amor de mi vida— murmuro besando su cuello—, el omega más hermoso de todo el mundo, mi vida entera, mi felicidad, mi paz, mi vitamina.
—Te amo, te amo.
Jamás se detuvo y tampoco detuvo los besos en su rostro y en su cuello, bastaron unos cuántas embestidas más para que Minho expulsara toda su esencia dentro de él sin ninguna protección creando un nudo, y para calmar las ganas de marcarlo lo beso hasta que sus labios le dolieran. Así siguieron todo la madrugada siendo uno solo, haciendo el amor hasta que Jisung no pudiera más y cayera dormido en el pecho de Minho, cuidado de su sueño acariciando su cabello dejando un pequeño beso sobre su frente. Le ardía en el alma tener que separarse de él pero sabía muy bien que era lo mejor, y por primera vez le pidió con todo su corazón a la madre luna que le diera la oportunidad de terminar con esto y estar vivo para poder formalizar ahora si su relación y poder marcarlo, ver también a su hijo crecer y estar en muchas etapas de su vida. Que le diera una segunda oportunidad para poder ser feliz, tener una vida de verdad.
—Te prometo con mi corazón que iré a buscarte a Inglaterra después de todo esto y te daré una vida de tranquilidad y amor, solo espérame y estaré contigo.
Recordó aquellas palabras de Minho y no pudo evitar soltarse a llorar, lo extrañaba tanto que sentía su alma quemarse. Algo que lo tenía aún más frustrado es que llevaba tres semanas sin saber nada de él, era la primera vez que podía llorar a solas desde que llegó a Londres porque en cuanto piso ese apartamento su nuevo vecino lo recibió muy amablemente, un simpático alfa llamado Prem que es originario de Tailandia que tuvo que quedarse en Londres por cuestiones de estudio, o eso es lo que le contó. Ese chico le ayudó mucho junto a otro alfa llamado Boun que también es de su misma nacionalidad e incluso es su pareja sentimental, ambos logran que Jisung no se sintiera solo y siempre estuvieron junto a él y su cachorro.
Boun era muy juguetón y estaba mega encantado con Jeongin así que cada vez que la pareja iba a visitar al omega, este le llevaba ya sea un dulce o un juguete para poder estrenarlo con el bebé, tanto que una vez lograron romper el jarrón de las flores por tanto jugar.
En su dolor, Jisung lloro todo lo que pudo y pidiéndole a la madre luna por el bienestar de Minho, tenía muchísimo miedo de que algo le pudiera suceder. Al día siguiente aquellas náuseas se hicieron presentes pero ahora iba empeorando, cuando estaba apunto de tomar bocado salió corriendo al baño dejando a Boun y a Prem confundidos y preocupados.
—¿Sung, estás bien?— pregunta Prem al notar al omega regresando al comedor, este aleja su plato de comida y solo bebe el jugo de naranja.
—No quiero ni siquiera ver esa comida.
—Que extraño, es tu favorita— ahora fue turno de hablar de Boun mientras le daba su comida a Jeongin.
—De casualidad no...
—¿Y si te haces una prueba de embarazo?
Jisung dejó el vaso sobre la mesa mirándolos a ambos con una expresión de sorpresa, ¿preñado otra vez? no lo cree e incluso lo niega.
Y mientras los dos alfas están comiéndose las uñas y entrando en desesperación a que ya salga del baño, Jisung esta anonadado por lo que acaba de ver. En cuanto sale esta pálido y temblando.
—¿¡QUÉ PASÓ!?— preguntan ambos.
Les extiende la prueba y los dos lo observan.
La prueba marcó positivo.
Tenía un bebé de Minho dentro de él.
♡♡
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro