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56.

-Por fin.-fruncí el ceño cuando escuche la voz de Kai.

-¿Donde diablos estoy?.

-En un apartamento cerca del barrio francés.-sonrió.-Se que me la estoy jugando ya que salí contigo en brazos lo suficientemente rápido para que no me alcanzasen,bloqueé lis hechizos de seguimiento.

-Eres un idiota.-rodé los ojos.

-Wow,me esperaba que me dieras las gracias por ayudarte a llevar a cabo tu venganza,he trabajado rápido y he conseguido que me digan amablemente dónde está la madre de Klaus.

-Si crees que Klaus no va a a encontrarnos estás completamente equivocado.-mordió su labio.-Estamos conectados,Kai.-me levanté de la cama.-En cuanto Esther se acerque a mi..él lo sentirá,¿vale?.Me localiza cuando estoy en peligro.

-Ya...-suspiró.-Prefiero no decir nada acerca de eso.-alcé la ceja.-Tan solo me da mal rollo.

-Ya que estamos aquí..¿cual es el plan?.

Sonrió antes de pasarme mi arco y algunas flechas con mis iniciales grabadas.

-Ella salta de cuerpo en cuerpo y estas flechas harán que no pueda o al menos que la lleve el tiempo suficiente como para que la frenemos.-asentí levemente con la cabeza.-Tienes que ser rápida y no debes escuchar nada de lo que te diga,amenazara con hacer daño a Klaus,Alaric,Stiles o cualquiera que signifique algo para ti.

-¿Y si nada de esto funciona?.

-Esperemos que lo haga.-entrelazó nuestras manos.-Estaré ahí todo el tiempo,he avisado a Derek y a Lydia,supongo que Alaric y tu hermano...también vendrán.

-Hagamos esto rápido.

(...)

-Andrea Labonair.-susurró cuando me vió aparecer.

Me sorprendió verla en el cuerpo de una adolescente pero no por eso iba a bajar la guardia.

-¿Me echaste de menos?.-Finn se cruzó de brazos.

-No puedo creer que ni después de muerto tengas algún otra ambición aparte de ser el chico de los recados de tu madre.-comenzó a reírse.

-¿Donde está tu escolta?.-miro hacia todos lados.-No veo a Niklaus,ni a Elijah,ni a Stefan,ni a Damon,ni a Marcel,ni a ese hereje,Malachai.-suspiró.-Necesito tomarme un descanso , sin tantos los hombres que tienes detrás que apenas los recuerdo,¿no se te hace duro?.-rascó su nuca.-Ya no solo por los nombres sino por lo incómodo que debe ser tenerlos juntos en un mismo cuarto.

-No seas malo.-lo regañó su madre.

-No se si te ríes por el hecho de que tengo a tantos detrás que no puedo recordar sus nombres o por el hecho de que tú no tienes a nadie dejando a un lado que estás detrás del culo de tu madre,perrito.-su sonrisa se borró.-La Naturaleza me creó así y no puedo hacer nada por evitarlo.

-Terminaras destruyendo a mi familia.-mordí mi labio.

-Esther,no seas hipócrita,eres tú la que está en una continua persecución con tus propios hijos,les maldijiste convirtiéndolos en lo que son y justo cuando han aprendido a vivir con ello e incluso son felices,quieres estropearlo,no soy una experta pero no es una actitud correcta.

-Les libraré de la carga de necesitar la sangre humana para vivir,una nueva vida,la oportunidad de formar su propia familia.

-¿Quién te lo pidió?.-quise saber.-Sabes perfectamente que todo lo que han sufrido es lo que les hace tan fuertes,a tu hijo Klaus le encanta el poder,le encanta llevar La Corona,Elijah no abandonará a su hermano ni su misión de conseguir la redención del mismo,Kol es demasiado feliz haciendo el mal como vampiro,ya probó como brujo y no le gustó.-crucé mis brazos.-Quizá Rebekah lo aceptaría.

-Todos mis hijos cambiarán de cuerpo y serán brujos,de esta manera mantendrán su poder sin tener que ser unos monstruos.

-El único monstruo eres tú.-dije antes de mover mi mano para pegar a Finn a la pared en un rápido movimiento.

-Creía que estábamos teniendo una charla amigable.

-Desde luego.-ladeé la cabeza.-Nunca me cayeron bien las personas que bailan el agua continuamente.

-¿Podemos hablar de cosas verdaderamente serias y dejarnos de tonterías?.

-Habla.-se acercó a mi.

-Necesito que me digas dónde está Klaus,se que todos están juntos por lo tanto si encuentro a uno los encontraré a todos.

-Jamás.

-Bien.-coloco sus dedos en mis sienes y comencé a gritar de dolor,intentaba no pensar en nada ya que lo que ella pretendía era entrar en mi mente para sacarme la información,cuanto la subsistía más sentía que me quedaba sin fuerzas y que mi cuerpo no resistiría mucho más.

-¡Basta!.-gritó una voz.

El dolor cesó y entendí que me había soltado,miré a Klaus y negué con mi cabeza cuando caminó hacia nosotras.

-Vete.-grité.

-No lo haré.-dijo con seriedad.-Es mi madre y no permitiré que pases por esto cuando no tiene nada que ver contigo.

Retrocedí algunos pasos ante sus palabras,¿no tiene nada que ver conmigo que su madre quiera separarnos?.

Tragué duro.

-He dicho que te vayas.-repetí antes de mover mi mano y sacarlo fuera de la cueva,sellé la entrada y bajé la mirada cuando vi como peleaba por entrar.

-Solo podrás salir de aquí si me muero,Esther.-sonreí.-Y no puedo morir así que será interesante.

-Me gustas,más que ninguna otra chica con la que Klaus estuvo anteriormente.-me cogió del pelo y me obligó a agacharme.-Deberías dejar de entrometerte en mi camino.

Un fuerte chillido me obligó a taparme los oídos,sabía que era Lydia intentando romper la barrera,tras varios intentos lo consiguió y en cuanto quisieron pasar,un ejercito de hombres lobo confundidos aparecieron.

-No nos gustan los intrusos.-gritó uno.

-Qué empiece la fiesta.-identifiqué la voz de Kol.

-Es una pena que los hayas arribó hasta aquí.-sonrió de oreja a oreja antes de clavarme una estaca.

-Es una pena que aún siendo tan anciana,seas tan poco sabia.-susurré antes de sacar una de las flechas para clavársela.-No es un adiós,es algo mejor.

Sonreí cuando volvió a su cuerpo y la obligué a beber mi sangre.

-Esto es para que nunca más vuelvas a intentar algo como esto.-rompí su cuello.-Odias a las bestias que tú misma creaste y quieres terminar con ellas,lo siento,Esther.-miré a Klaus,estaba apoyado en la pared en silencio.-Esas bestias como tú las llamas,son mi familia.-abrió los ojos.-Esto,es sangre del hospital y dependerá de ti beberla para vivir como lo que más odias,o no hacerlo y morir de una vez,no te preocupes por Finn,os reuniréis pronto.-me levanté con cuidado,llevé mi mano a mi nariz y fruncí el ceño cuando vi sangre.

-¡Freya,está ocurriéndola algo!.

-Cógela.-sentí como me colocaban en el suelo.

-Ho...Hope.-susurré antes de que todo se tornase negro.

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