- Voy a dormir un rato - dice mi papá subiendo las escaleras.

Yo decido ir a la cocina a prepararme algo, escucho que Chad viene detrás de mí pero únicamente lo ignoro, abro el refrigerador y comienzo a buscar un poco de fruta. Mientras que Chad toma un poco de agua, estoy segura que tiene algo que decir pero está buscando las palabras correctas para hacerlo.

Me siento en la barra, lo hago con una finalidad, si tiene algo que decir que sea en un sitio neutro... así que espero paciente.

- ¿Hasta dónde vas a llevar este juego? - pregunta

- ¿Qué juego? - digo fingiendo inocencia

- Brandon y tú.

- No es un juego - hago una sonrisa de lado - ¡Me gusta!, además tú tienes a Lara, ¿Crees que no me di cuenta que estaban a punto de tener algo ahí adentro?

- No sucedió

- ¡Pero ha sucedido! Así que... ¿Para qué sufrimos? Sabemos que esto no nos va a llevar a ninguna parte.

Chad va hacia la puerta, voltea hacia el pasillo para ver si no hay nadie, me pide que me acerque y voy hacia él, elige este lugar porque tiene la vista perfecta en caso de que a papá se le ocurra bajar sorpresivamente.

- ¡Sólo pídemelo! - susurra

- ¿Qué?

- Qué no la vuelva a tocar en mi vida y te juro que no lo hago.

Mis manos se acomodan en su pecho, me encanta provocarlo, él me toma con sus brazos para acercarme más a él; y dejarme a escasos milímetros de sus labios

- Pídeme que no la vuelva a tocar... - vuelve a decir haciendo que su aliento llegue a mí.

- No lo sé. - digo intentando alejarme de él, pero es prácticamente imposible

- ¿Por qué? - pregunta tomándome con más fuerza

- Porque no quiero que la vuelvas a tocar... muero de celos que lo hagas, de saber que ella tiene lo que yo nunca, pero también sé que no puedo luchar contra esto... ¡Carajo! No es fácil, ¿No lo entiendes?

- La que no lo entiende eres tú Lan, porque desde hace años te lo he repetido hasta el cansancio, ¿Quieres luchar por esto? ¡Lo hacemos! No pierdo nada en ir a decirle a todos lo que siento por ti... mientras no te pierda a ti, no me importa todo lo demás, te extrañé como un estúpido todo este tiempo, me pediste que conociera más gente y eso es lo que estoy haciendo, ¿Quieres que la deje? Lo hago, pero no tienes el valor de enfrentar esto, lo que tenemos... - nos señala con su dedo - y para colmo ya involucraste a Brandon, debiste de haberlo pensado antes de besarlo.

- Estaba muerta del coraje de saber que Lara y tú... - digo con frustración

- Debiste de haberlo pensado...

- ¿Osea que ahora es mi culpa? - pregunto elevando mi ceja

- ¡No! Pero... no tiene caso que peleemos ¿Quieres que la deje?

- No la dejes... solo... no la toques... ¡por favor!

Me quedo en sus brazos deseando que haga algo más, pero me suelta y solo me observa, como si quisiera decir algo pero no se atreve. ¡Vamos! ¡Dilo Chad Berry! Digo en mis adentros.

- Sabes que no te puedo negar absolutamente nada. Lo sabes y te aprovechas de eso, pero está bien, no vuelvo a tener nada que ver con ella, y solo... solo procura no romperle el corazón a Brandon, porque a pesar de todo, lo quiero, es parte de la familia, mientras estés con él estaré con Lara, es un trato justo, así que tú decides cuanto tiempo quieres que esto dure con ella.

- Ok

Me vuelve a tomar entre sus brazos, y besa mi frente, toma mi mano conozco esta rutina, la hemos seguido por decenas de ocasiones; me lleva hasta mi habitación, en cuanto entramos, cierra la puerta y me aprisiona entre sus brazos y la pared, puedo ver sus ojos azules grisaceos fijos en mis labios, está tan cerca de mí que puedo sentir su respiración, mis labios buscan los suyos inmediatamente, y me fundo con él en un beso, lo quiero, lo quiero tanto que odio todo lo que gira a nuestro alrededor, odio tener que fingir, tener que mentir, odio que nadie sepa que somos adoptados por que para mí sería mucho más fácil, podría decirle a todos... ¡Saben qué! Chad es el hombre que amo, pero sería todo un escándalo, en caso de que decidiera en algún momento dar ese paso, tendríamos que dar poco a poco todos los secretos de la familia, y no sé qué tan dispuesta esté a esto. Antes de que yo me fuera habíamos planeado contarle todo a mamá, creíamos que por su forma de pensar nos apoyaría, pero nunca tuvimos el valor... o yo... yo nunca lo he tenido; disfruto de sus labios y de su cuerpo bien torneado, pega mi cuerpo al suyo y puedo sentir que no está dispuesto a solo un beso, le ruego en mi mente que no se le ocurra tocarme de otra manera porque no podría detenerme, se aleja de mí y se muerde los labios.

- ¿Quieres ver una película? - pregunta

- ¡Si! - respondo de inmediato; sintiendo alivio.

Es mejor detenernos en ese momento a que suceda algo más, me acomodo inmediatamente en la cama y él prende el televisor y comienza a buscar algo en la plataforma para poder ver, se acomoda junto a mí, y me acurruco en su pecho, siento que su mano juguetea con mi cabello y con mi brazo.

Esa recamara y la suya, eran los únicos lugares donde podríamos ser realmente nosotros, donde éramos un par de enamorados y no los hermanos Berry.

- Te eché mucho de menos Lan.

- Yo también a ti Chad, pero me parecía lo más prudente.

- Debemos de buscar un momento para tener el valor, y luchar por esto. Esto es lo que quiero, sin tener que esperar solo a estar en tu recamara o en la mía, quiero sacarte a cenar, a pasear, Quiero tener una relación normal contigo; demostrarte frente a todos lo mucho que amo a Leilany Berry.

- Muero porque lo hagas, pero sabes que papá ahora no está para este tipo de cosas. Ni siquiera ha tenido el valor para decirnos que fue lo que sucedió exactamente con la muerte de mi mamá. Sólo lo que escuchamos y creo que no está consciente de que estamos enterados porque ni siquiera lo ha mencionado.

- ¿Crees que de verdad no haya sido un accidente? Me refiero a... ¿De verdad crees que mi mamá haya tenido algún enemigo como para que quisieran deshacerse de ella?

- De mi mamá, no creo sinceramente... ¿Pero y si papá?

- ¿Tú crees?

- Bueno... podría ser, sabemos que muchos de sus clientes no son tan buenas personas...

- Pero si fuera así... ¿No crees que nos cuidaría demasiado? Me refiero a guardaespaldas y esas cosas.

- Buen punto, pero creo que él podría tener más enemigos que ella

Tomo mi celular por que escucho que vibra, veo mensajes de Brandon y de Albert. Abro el de este último.

A: ¿Pudiste investigar algo?
L: Nada... tuve un pequeño problema al hacerlo...
A: ¿Su nombre comienza con B?
L: ¡Qué rápido corren los chismes! Pero no... otro, ¿Tú investigaste algo?
A: Nada, lo alcancé hasta la cafetería pero se portó como si no hubiera pasado nada.
L: Mañana la buscaré entonces para ver si vamos al centro comercial o algo, no creo que me cuente, ¿Crees que sea algo reciente?
A: No lo sé, me refiero a... sé que mi papá no es una blanca palomita, que tiene mucha cola que le pisen, pero... odio tener que admitir que está sucediendo esto. ¿Ella tiene novio?
L: ¡No! Por eso me sorprendió todo esto.
A: Mmmmm se me ocurre una idea
L:¿Cuál?
A: ¿Qué crees que diría si la invito a salir?
L: ¿Para qué?
A: Para alejarla de papá, y quizá poder indagar un poco más, no lo sé, estoy divagando quizá
L: ¡No sé! No suena tan descabellado, quizá no para que la hagas tu novia, pero a la mejor si como para poder tener un poco más de control sobre el asunto... me impresiona, me refiero a... no creería de no ser porque la vi que ella se metiera con un tipo casado.
A: Pues... ya ves, la gente no siempre es del todo sincera.
L: Tienes toda la razón.
A: Siempre he creído que todos tenemos un secreto inconfesable, ese al que no le diríamos absolutamente a nadie.
L: ¿Tienes uno?
A: ¡Si! ¿Y tú?
L: ¡Si!
A: ¿Por qué razón dirías tu secreto?
L: Si dependiera la vida o la muerte de alguien más, o ya no pudiera con él, que sintiera que voy a explotar por guardarlo.
A: ¡Pues... encontremos esa razón para que lo suelte!
L: Tranquilo...
A: ¿Qué haces?
L: Veo una película con Chad.
A: Salúdamelo.
L: ¡No inventes hace menos de una hora estabas con él!
A: ¡Lo extraño!

Mi celular recibe un mensaje de Bridgitte, Chad decide detener la película, y acomodarse en mi hombro, se da cuenta que no puedo prestar atención a lo que estábamos haciendo.

- ¿Con quién platicas tanto? - pregunta
- Con Albert.
- ¿De?
- No sé si pueda contarte, es algo acerca de algo que vimos en el club.
- ¿De?
- Bridgitte; por eso fui a los vestidores en ese momento, porque la iba siguiendo.

Ruedo mis ojos tratando de no recordar lo que llega a mi mente, pero a la vez agradezco, gracias a ello está junto a mí, como deseaba que estuviéramos así desde que llegue a Londres nuevamente; solo esperaba que como siempre, él fuera el valiente en esta relación.

Abro la conversación con Bridgitte.
Bri: Te busqué en el club.
L: Estaba jugando tenis con Albert, me pareció verte de lejos.
Bri: no, no fui para aquel lado.
L: por cierto... creo que le gustas a Albert... me pidió tu número de teléfono.
Bri: oh... yo prefiero que no.
L: ¿Por qué? Si es guapísimo.
Bri: No sé, tú sabes que con los Dunne prefiero mantenerme alejada.

¿Ahora si?... no parecías querer mantenerte muy lejos del Señor Dunne hace rato decía dentro de mí.

L: ¡Salgamos en parejas! Duncan y Cassandra, Lara y Chad, Brandon y yo... y tú con Albert... ¡Dale!

- ¿Albert con Bridgitte? - pregunta curioso Chad

- Shhhh...

Veo que Bridgitte está escribiendo.

Bri: No, no lo creo prudente.
L: ¿Por qué?
Bri: Leilany tengo que contarte algo

- ¡Bien lo va a confesar!

- ¿Qué? - pregunta Chad entre susurros

- Albert y yo descubrimos a Bridgitte y a su papá besándose detrás de las canchas de tenis, por favor no vayas a decir nada.

- ¡Oh! Entiendo.

- ¿Qué? ¿Así como así? ¿No te sorprende?

- ¡Si! pero, tú sabes todo mundo habla sobre las múltiples infidelidades de su papá hacia su mamá.

- ¡Pero es Bridgitte!

- ¿Y?

- ¡Es mi mejor amiga y no me había dicho absolutamente nada!

- ¡Tú no le has dicho nada acerca de nosotros! Así que... están empatadas

- ¡Pero tú sabes porque no se lo he dicho! No es fácil

- No creo que tampoco sea fácil decir... oye soy la amante del papá de los mejores amigos de tu hermano, ¿Estás de acuerdo que todos nos ven como una gran familia? ¿Qué nuestros padres y los suyos son inseparables? No somos los únicos que tenemos cosas que perder contando nuestros secretos, toda la gente allá afuera tiene una vida y un secreto que no le puede gritar a toda la gente.

- Tienes razón.

Mi celular comienza a vibrar, es una llamada de Bridgitte

- ¡Contesta y ponla en altavoz! - yo obedezco

- ¡Hola Bridgitte!

- ¿Qué haces?

- Veo una película con Chad

- ¡Oh! Necesito decirte algo... ¿No escucha verdad?

- ¡No! De hecho está en el baño.

Chad sonríe y comienza a besar mi cuello, lo hace intencionalmente para que yo falle mientras hablo por teléfono.

- ¿Qué pasó, dime? - digo con voz entrecortada por los movimientos de Chad

- Hubiera preferido decírtelo en persona, pero siento que no puedo más, que voy a explotar y necesito decírselo a alguien.

- ¿Qué es? Me asustas.

- Creo que estoy embarazada - Chad levanta inmediatamente su cabeza, yo no puedo cerrar mi boca del asombro. - ¿Me puedes acompañar mañana a un laboratorio? Ya me hice la casera y salió positivo.

- ¡No crees estar embarazada! Lo estás... esas pruebas nunca dan un falso positivo.

- ¡Sólo...! ¿Puedes acompañarme para reconfirmar?

- Ahm, pero sabes que Chad me tendría que llevar.

- ¡Si! no importa, solo necesito a alguien a mi lado.

- ¡Está bien! Nos vemos mañana, paso por ti a las seis de la mañana

- ¡Gracias amiga!

- ¡De nada!

Cuelgo, los dos nos quedamos acostados en la cama observando el techo.

- ¿Se lo dirás a Albert?

- ¡No! Y tú tampoco...

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¿Quién habrá asesinado a la mamá de Chad y Leilany?

¿Bridgitte enfrentará a George Dunne y le dirá que será padre?

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