Después de que Chad me diera un ultimátum y yo notara que comenzaba a sentir algo más por Duncan quise alejarme un poco de ambos, pero la verdad es que ninguno me la ponía fácil, Chad viviendo bajo el mismo techo y siendo tan lindo como siempre y Duncan fingiendo ser mi novio. 

Y es que soy sincera, comenzaba a dudar mucho acerca de lo que sentía por Chad, y no porque no lo amara porque lo hacía con cada poro de mi cuerpo, pero si yo nunca me atrevía a dar el siguiente paso con él, a decirle a papá lo que realmente sucedía simplemente no podría hacer mucho, a veces sentía que lo mejor era conformarme y solo decidir que lo mejor es que si era alejarnos para siempre, conocer otras personas y quizá el solo sería mi primer amor, antes de conocer al correcto, al verdadero, pero también sentía que solo lo quería a él en mi vida. 

Siento una respiración a mi lado derecho y volteo de inmediato encontrándome con los ojos esmeraldas más impresionantes de todo el mundo y me da un ligero beso en los labios que estoy segura que no iba dirigido ahí cuando abre los ojos después de sentir la suavidad de mi boca, mucho menos cuando otra persona que se pone frente a mí me hace adivinar que definitivamente Duncan no se atrevería a besarme frente a Chad. 

—¡Carajo! —dice Chad mientras nos observa —no la beses frente a mi Duncan —trata de fingir asco mientras sé que muere de coraje. 
—Lo siento Lany, te vi entretenida y el beso iba dirigido a la mejilla. —dice sentándose a mi lado mientras esperamos que nos sirvan el desayuno en el club. 
—Tranquilo, no pasa nada. 

Chad solo se queda sentado frente a nosotros como si nos estuviera examinando a ambos, yo solo trato de fingir desinterés en ambos mientras me pongo en contacto con Daniel, después de que llegué de Chicago nos hemos seguido enviando mensajes y tratamos de ponernos al corriente con nuestras respectivas vidas cada que podemos. 

D: ¡Te extraño pelirroja! 
L: yo también a ti. 
D: Chicago no es lo mismo sin ti. 
L: Malevolo cucarachón ¿Se nos puso sentimental? 
D: Sabes que si... mis papás te extrañan. 
L: ¡Estoy segura que no, después de lo que hice por ti! 
D: no, de verdad lo hacen, valoran mucho la última platica que tuviste con ellos... ¡Gracias amiga! ojalá tu pronto también te animes a tenerla con tu papá. 
L:No lo sé, es difícil. 
D: sabes que si te corren de tu casa, con gusto te recibimos aquí, hay espacio en mi cama. 
L: Suena tentador... 

Puedo sentir la mirada de Duncan sobre la plática que estoy teniendo pero cuando volteo él solo finge voltear hacía otro lado. 

—¿Con quién hablas? —pregunta Chad. 
—Con Daniel... —los ojos azules de Chad hacen una ligera mueca divertida mientras observa a Duncan que se mueve incómodo después de escuchar el nombre, mi hermano levanta la mirada. 
—Ahí vienen tus suegros, me retiro, iré con Brandon —Se levanta apenas y saluda a los padres de Duncan, siempre evitaba estar junto a nosotros cuando los Dunne estaban con nosotros porque estoy segura que para él no era fácil como Duncan y yo teníamos que fingir ser una pareja de enamorados. 
—¿Todo bien con Chad? —pregunta George. 
—Si... 
—Parecía molesto. 
—¡No! —respondemos al unísono Duncan y yo. 
—Seguramente para él es difícil ver como su mejor amigo es el novio de su hermana —responde Abby tranquilamente. 
—Puede ser. 

Desayunar con los Dunne es como estar en familia, me agrada mucho la presencia de Abby, aunque con George después de lo que sucedió con Bridgitte me cuesta mucho trabajo estar cerca de él, pero es el padre de Duncan y tengo que convivir con él y sobre todo es con el que más tengo que dejarle en claro que si hay algo entre su hijo y yo. 

—¿Sigues hablando con Daniel? —pregunta Duncan en un susurro. 
—Si... ¿Por? 
—¿Sigue habiendo mucha confianza entre ustedes no? 
—¿Cómo? 
—Solo... quizá siento un poco de celos... no quiero ser el —hace una mueca con su boca —novio posesivo porque sabes que no, pero... ese chico, sabes... sé lo especial que ha sido para ti. —tomo la mano de Duncan. 
—Nunca sientas celos de Daniel, créeme cuando te digo que lo de él y yo ya pasó. 

Puedo sentir que los padres de Duncan se levantan después de haber terminado de desayunar y dicen que se irán a cambiar para ir a la piscina a tomar un poco de sol, quiero levantarme detrás de ellos pero el rubio no me lo permite toma mi mano y solo me observa. 

Acerca su frente junto a la mía y lo escucho suspirar tiene sus ojos cerrados y abre y cierra la boca como si quisiera encontrar las palabras correctas para decirme algo. 

—Lany... yo te quiero mucho, no tienes idea de lo difícil que es para mí solo fingir que hay algo entre nosotros, porque yo no lo finjo, realmente lo siento. sé que le he prometido a tu hermano infinidad de veces que no haré nada que tú no quieras, o que aceptaré si tú al final decides que solo es un juego y solo eso... pero... toda mi vida has rondado en mi corazón y sé que dijiste que lo podría intentar y eso estoy haciendo —suspira —solo dime que tengo una oportunidad si quiera. —abre sus ojos y yo los observo. 
—Duncan te quiero, de verdad lo hago... es solo que hay cosas tan complicadas en mi vida que... aunque pareciera que no me pueden llegar a afectar lo está haciendo. 
—Lo de tu mamá supongo. 
—Digamos que si, es algo familiar. —él se aleja un poco de mi y se acomoda en su silla, observándome como si quisiera descifrarme. 
—¿Te gusto? 
—Si... 
—¿Me quieres? 
—Obvio si —respondo y sonríe de manera victoriosa. 

Se levanta del asiento y toma mi mano, para salir de esa manera del restaurante del club, no lo suelto, confieso que incluso siento que estoy tomando una buena decisión, lo mejor es dejar ir al ojiazul y solo quizá si darme esa oportunidad con Duncan. conocer otras personas me repito en mi cabeza, nunca he creído que un clavo saque otro clavo, pero quizá si llega el clavo correcto eso pueda suceder; Se detiene en seco y se queda callado solo observándome.

—Sabes que... al demonio tu hermano con la promesa que le di de que no te besaría. —su mano izquierda va hacia mi espalda para acercarme más a su cuerpo mientras que su mano derecha llega a mi quijada para acercar mi rostro al de él, puedo sentir sus ojos viéndome con cariño, incluso hasta deseo y como después de querer descifrarme con la mirada sus ojos van hacia mis labios y su lengua lame de una manera deliciosa su labio inferior que provoca que yo muerda mis labios, lo siguiente que siento es sus labios sobre los míos, y como mis pies parecen ponerse de acuerdo con lo que está sucediendo porque me levanto en puntitas para tener un mejor acceso al beso. 

Besar a Duncan siempre me ha parecido algo de otro nivel, no diga que con Chad no me sienta de esta manera, porque es obvio que si, es el hombre al que amo desde que tengo uso de razón pero con Duncan es tan diferente como si mis labios y los suyos estuvieran destinados a unirse, me siento bien en ellos, me siento bien con él... 

Leilany... deberías de conocer otras personas... dejar ir a Chad, cerrar ese ciclo vicioso que tienen y que cada vez es peor y mucho más dañino, él te dio un ultimátum eso significa que se está dando por vencido y quizá a la mejor es el momento correcto para hacerlo tú igual. 

Duncan se separa de mi buscando aire, pero no se lo permito, ahora es mi mano derecha la que busca la manera de enredarse en su rubia cabellera y atraerlo a mí para seguir con el beso que comenzó, su lengua se adentra a mi boca con ese sabor a cítrico del jugo de naranja que acaba de tomar, muerdo delicadamente su labio y abro mis ojos para encontrarme con el chico más perfecto frente a mis ojos, no necesito esconderme de nadie me repito, no es tu hermano, es alguien que te quiere, es el chico perfecto para poder olvidar ese amor imposible, ese amor tóxico y dañino que por más que se han tratado de alejar cada vez es más doloroso, y alguno de los dos terminará con el corazón más roto que el otro... alguno de los dos tendrá que elegir que le ha tocado perder, y es mejor tener el control sobre ello, antes de que sea más tarde, antes de que duela todavía más de lo que siempre ha dolido, ¡Tengo una ventaja en este juego! y es que por lo menos sé... que puedo vivir sin él, pero me he obligado a no querer hacerlo. 

—Duncan 
—Lany... 
—Claro que tienes oportunidad... —él me ve de una manera como si fuera gracias a mi que la tierra gira y yo me recargo en su pecho y puedo escuchar su corazón latir rápidamente. 

Chad, es lo mejor... no creo ser tan fuerte ni tan valiente para dar el siguiente paso... porque siempre querré que papá se sienta orgulloso de mi. 

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¿Quién habrá asesinado a la mamá de Chad y Leilany?

¿Leilany tendrá el valor de elegir a Chad por encima de todos?

¿O será que termine enamorada de Duncan?
¡Necesito que me digan sus teorías! ¿Qué piensan que sucederá?

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