Delineo las cejas de Adrien con mi dedo índice mientras lo veo dormir plácidamente fue un día largo, tuve que fingir ante Abby que estaba bien, que le había surgido un problema a Albert y tuve que prácticamente huir cuando Gabrielle llegó, soy sincera y es que no podía sostenerle la mirada, me sentía culpable por haber visto a su esposo besándose con su amante ¡Ay Albert! ¿En qué lío me has metido?, sin contar en que definitivamente me sentía muy decepcionada de él. ¿En qué momento? ¿Por qué? Si él mejor que nadie sabe lo que ha hecho Gabrielle por él.

Me encuentro en el jardín siento el aire fresco en mi rostro, disfruto de la tranquilidad de tener a mi bebé en los brazos y pregunto... ¿Por qué la vida no puede ser así de fácil? Solo tener una vida normal, con mi esposo, mis hijos ¿En qué momento todo se volvió hacia nuestras familias para que guardemos tantos secretos?

Mi bebé suspira y veo que la pantalla de mi celular se enciende indicándome una videollamada de Duncan, faltan pocos días para que venga por nosotros, lo extraño a montones, no solo yo, también Adrien, y deseo con todas mis fuerzas decirle ya que tenemos bebé en camino.

—¿Hola? —responde el guapo ojiverde que tengo frente a mi a través del celular.
—¡Hola! ¿Cómo estás? —lo veo recostado en la cama y se ve pálido; sonríe.
—no muy bien, hoy he tenido vómitos y mareos.
—¿Qué comiste? —pregunto angustiada
—La verdad es que no encuentro que me pudo haber hecho daño, llevaba días con nauseas, pero, no lo sé sinceramente.
—¿Ya fuiste al doctor? —asiente
—si, me dio algunas pastillas, pero aún no han hecho efecto.
—Pobre de ti, quisiera estar allá, para cuidarte. ¿Cómo le has hecho?
—Y yo quisiera que estuvieras acá, me haces mucha falta, también mi pequeño que veo que está dormido; Meghan ha estado al pendiente de mi —se me quieren salir los ojos del coraje —¿Qué hicieron hoy? —y cuento hasta tres para que no note que no me agrada el hecho de que su compañera de trabajo esté cuidándolo.
—Fuimos al acuario junto a Terrence. —veo que hace una mueca de desagrado.
—¿Se divirtieron?
—No te imaginas cuanto —hablo sarcásticamente.
—No suenas muy convencida...
—Duncan... tengo que contarte algo, y no sé por dónde empezar —lo veo entrecerrar los ojos. —es algo muy delicado y espero que no te enojes.
—¿Sabes que si le dices a alguien que no se enoje probablemente lo haga? ¡Me estás asustando Lany! ¿Tiene algo que ver con mi hermano?
—Si —muerdo mis labios y veo como se levanta de la cama y se lleva la mano a la cabeza.
—Encontramos a Albert besando a Bridgitte en el acuario —muerdo mis labios, me parece escuchar un suspiro de alivio y luego pone cara de que no lo puede creer.
—¿Qué? —dice casi en un grito. —Espera ¿Escuché bien? ¿Albert y Bridgitte besándose? ¿Estás segura? —asiento
—¿Si que creías? —niega
—nada yo... ¿Qué sucedió? —le platico con lujo de detalle todo lo que pasó, me dice que el también hubiese actuado de la misma manera que Terrence ya que la forma en la que actuó a Albert no fue la correcta sugiere que hablemos cuando llegue a Londres con su hermano menor lo cual acepto y platicamos por mucho tiempo en cómo le ha ido, en que ha encontrado una casa para nosotros y que le emociona el hecho de saber que pronto estaremos juntos.

Me muestra el itinerario de viaje y sé que pronto podré decirle que será papá, que seremos una familia de cuatro, me pide ver a Adrien y se queda embelesado viéndolo dormir como si estuviésemos juntos, se despide de mí; y el jardín sequeda en silencio después de colgar.

Busco la manera de levantarme para llevar a mi bebé hasta mi recámara cuando mi hermano aparece cerca de nosotros, en cuanto ve inmediatamente mis intenciones corre a ayudarme y lo llevamos hasta su cuna; mis papás han ido a Rye junto a Louis mientras que Chloe está en el cuarto de televisión con Elliot viendo una película, suponemos que son novios o algo por el estilo porque últimamente se la pasan juntos; tomo los monitores para escuchar por si se despierta mi bebé y ambos bajamos hasta la cocina.

—¿Qué quieres de cenar? —le pregunto mientras busco en el refrigerador y la despensa que podría cocinar; lo siento acercarse a mí y veo como toma algunos ingredientes, lo observo confundida porque comienza a tomar utensilios de cocina. —¿cocinas? —pregunto, él gira hacia mi y se ríe levantando los hombros.
—si, me imagino que esto no lo hacía antes, aprendí ya sabes... después del accidente, no soy muy bueno —guiña el ojo —pero no quiero que cocines tú, déjame por esta noche ser el anfitrión. —sonrío y asiento
—Nunca te metiste a la cocina más que solo una vez... hiciste mi pasta favorita la noche en que —me sonrojo —tú sabes.
—¿Adrien entrando al chat? —se ríe
—si
—¿Cómo le dirás a mi hermano que será papá? Me imagino que tienes planeado algo especial, digo si te has esperado es porque quieres hacerlo de una manera inolvidable
—He pensado algunas formas como la clásica de alguna ropita de bebé o zapatitos. —sigue en lo suyo y yo tomo el celular tecleando

"Ideas para decirle a alguien que será papá"

Veo centenares de ideas a través de internet, cuando noto que un plato de comida queda frente a mí, levanto los ojos y encuentro unos hermosos ojos azules observándome.
—Come, ese pequeño tiene que crecer sano y fuerte como su tío. —sonrío pero en cuanto mi mirada se vuelve a poner en el plato de comida y el olor llega a mi nariz, de inmediato sé que este bebé de pronto no se está portando muy bien, me levanto de inmediato y corro hacia el baño donde doy arcadas sin realmente vomitar, solo siento que mi cabeza da vueltas y escucho como tocan la puerta.
—¿Puedo pasar?
—Tranquilo yo salgo...
—Está bien.

Me levanto de la taza del baño y me veo en el espejo, lavo mi cara y enjuago mi boca de cualquier manera, mis manos van a mi vientre.

—Eres muy mal portado. —abro la puerta y Terrence de inmediato me sonríe, no estoy muy segura de comer pero me dice que haga el intento, lo mucho o poco que pueda comer será de beneficio; así que sigo su consejo y a pesar de que hace unos minutos todo me daba vueltas, ahora de hecho agradezco la comida; toma mi celular.
—¡Esta es la manera correcta Lan!
—¿Cómo? —observo una fotografía donde se ve una caja con la leyenda "Fabrica de bebés" en la entrada de una puerta, antes de llegar se ven un tipo de huellas de cigüeña con lo que parece ser pintura blanca.
—¡Es genial Chad! —sonrío

Buscamos ambos algunas proveedores donde pueda mandar a hacer la caja,decidimos añadirle globos y varias de las cosas que irán adentro.

—Lei, Chad —dice Chloe desde la entrada de la cocina.
—¿Si? —digo observando a mi hermana y a su amigo en la puerta de la cocina, es muy guapo, tiene la piel apiñonada, cabello rizado y chocolatado.
—Estaré allá afuera con Elliot, ya se va.
—Claro.
—Adios Leilany, Adiós Chad, Buenas noches —nos dice a ambos y los dos se dan la media vuelta.
—Lan
—¿Si? —digo mientras sigo entretenida en las imágenes del celular.
—¿no viste un poco despeinado a Elliot? —levanto la mirada.
—¿Cómo? Uhm supongo... estaban acostados viendo una película
—No de esa manera —lo veo morderse el labio inferior —¿Cuántos años tiene Chloe?
—Quince —sigo en lo mío.
—¿Y él?
—No lo sé ¿Celoso con tu hermanita? —se ríe
—No... es solo que... —Chloe entra de nuevo a la cocina y busca un vaso en los muebles, ambos la observamos con detenimiento; le noto una blusa de cuello de tortuga que no llevaba cuando subió y de nuevo veo hacia Chad que la sigue inspeccionando con la mirada.
—¿Traías esa blusa hace rato? —pregunto y ella me observa sonrojándose
—Yo... no, es que... me ensucie con el refresco y me cambié —entrecierro los ojos.
—¿Segura?
—Si... —está a punto de darse la vuelta para ir hacia la puerta.
—¿Qué es eso que tienes en el cuello Chloe? —pregunta Terrence.
—¿El cuello de mi camisa? —dice de manera renuente y noto de lo que habla Terrence.
—Chloe... no somos tus papás, somos tus hermanos mayores, puedes confiar en nosotros. —hace ojitos de niña angelical y regañada —digo con suavidad
—No es nada.
—¿Segura? —rueda los ojos y se sienta.
—¡yo muchas veces los vi besuquearse en el cuarto de televisión —nos señala —cuando eran novios! —abro mis ojos y él tose riéndose. —tranquilos nada que no debiera ver... ¡Estoy en esa edad de experimentar! —demonios... tiene apenas quinceaños, no me imagino cuando mi hijo llegue y me diga algo como esto no estoy preparada para ello.
—¿Elliot y tú son...? —muerde sus labios mientras niega.
—Entiendo...
—Chloe, no soy quien para decirte que si debes y puedes hacer con la persona que tú desees, solo pide que te respeten, me refiero a que siempre tú tendrás la última palabra, no permitas que te convenzan de hacer algo que tú no quieras, si esa persona es tu novio, tu amigo, lo que sea, siempre debe de respetar cuando tú digas hasta aquí llegué. —dice Chad de manera muy madura.
—¿Y tú Lei? —me mira con sus ojos avellanas a la expectativa
—Hazlo cuando estés enamorada, experimenta lo que quieras antes de, no hay prisa para que pase algo más, si no es que ya sucedió.
—¡No! —dice casi en un grito —aún no, solo fueron unos besos subidos de tono y—lleva las manos a su cuello.
—La persona que sea tu primera vez la llevarás por el resto de tu vida, ámalo, que te ame, que sepas que pase lo que pase él te apoyará en lo que suceda porque por más que se cuiden existen los riesgos de algún accidente un ejemplo de esos está allá arriba dormido —ella se ríe y asiente. —y no me refiero precisamente a un bebé a si tenerlo o no ustedes decidirán, pero al final... que él esté ahí para todas las consecuencias que conlleva si algo no pasa como debería.
—¿No se sienten decepcionados de mi? —pregunta angustiada.
—Si tú estás segura de lo que estás haciendo, nosotros no tenemos nada que ver con esas decisiones; solo te estamos aconsejando.
—¿Estabas enamorada Leilany? —pregunta
—Muy enamorada...
—¿Y tú Chad? —él solo me observa
—Yo no recuerdo mi primera vez
—dichoso tuviste dos primeras veces ¿Cierto? —Terrence se sonroja y tose—¿Recuerdas tu segunda primera vez? Me refiero a después del accidente.
—si —dice como no queriendo revelar más.
—¿Estabas enamorado? —me observa y baja su mirada.
—si... —y no sé porque me hace sentir como un hueco en mi corazón, porque siemprequise ser ese recuerdo para el resto de su vida y en ninguna de las dos ocasiones lo fui. —pero nadie será más importante que la madre de un hijo.
—¿Podemos guardar este secreto? —pregunta la menor de los tres de manera angustiada.
—No seríamos Berry si no lo hiciéramos —le guiño un ojo mientras Terrence la abraza y le deja un beso en la frente.

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¡Bonito martes preciosas!

*Los síntomas de Duncan 

*Meghan cuidando a ojiverde

*La idea de Lany para decirle que va a ser papá

*La plática de los hermanos Berry

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¡Mil gracias por el apoyo! Espero leerles prontito.

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