Bang Chan

Aun seguía aturdido por todo lo que había pasado, su aroma seguía impregnado en mi piel, en mi ropa, en mi mente incluida mientras deseaba estar presenciándolas con mi nariz enterrada en su cuello.
Estaba seguro que Minho estaba escuchando mis pensamientos culpables pero no podia hacer nada al respecto, Kei simplemente me derretía.

—Vamos ya admite que te gusta Han —dijo la chica dueña de mis pensamientos, giré para mirar que pasaba, Minho estaba tenso mientras Kei mantenía su postura relajada con los brazos cruzados.

—No me gusta Han —el trató de defenderse y Changbin me miró divertido, he aquí el fundador del Minsung esperando tal suceso.

No era muy lejano a la realidad, Minho estaba tan perdido por Han como yo por Kei, era completamente posesivo con él y en definitiva el único a quien dejaba acercarse tanto, Han era quien lo regañaba y mimaba sin embargo Minho no se había confesado, la empresa vivía alejándolos en cada video o salida y eso enfurecía a Minho pero sabía que no podía hacer nada en contra.

—Kei —la llamé y ella blanqueó los ojos.

—Vamos, no pudes respirar tranquilo sin tocarlo —se burló y Minho frunció los labios.

—Porque me siento cómodo con el contacto fisico, no con el especificamente, hasta contigo —murmuró mientras se acercaba a ella.

Kei no retrocedió y Minho fue a ella, una de sus manos fue a su cintura y la otra sostuvo el menton de Kei, levantándolo para que ella lo mire.

—¿Ves? —murmuró, sentí todo mi cuerpo tensarse, y a Changbin me miraba con la boca entre abierta.

—Minho alejate —advertí pero no me escuchó.

—No te creo —lo retó kei y no se si hasta acercó su rostro al de el o si solo fueron mis celos consumiendome generando imaginación , pero me levante hasta caminar hacia ellos.

—Estoy comodo Kei —susurró, llegué hasta el y sin tanto fuerza lo empujé alejándolo de Kei, el frunció el ceño.

—Lejos Minho —dije, los dientes me iban a estallar de la presión, oi la risa de Changbin de fondo.

—¿Sabes porque estabas comodo? —habló Kei a mis espaldas y giré a mirarla con reproche.

—Basta.

—iluminame —rió Minho y achicó sus ojos retándola.

—Porque no sientes nada por mi, trata de ponerte en la misma posicion con Han y estoy segura que te dara un paro.

—tsh claro que no —Dijo y al instante como si cayera del cielo, entró Han a la sala, ella sonrió con esa misma sonrisita que no traería nada bueno, Changbin tambien y Minho palideció.

—Hey —saluda Han.

—Kei vamonos —gruñí acercandome pero ella alzó una mano deteniéndome.

—Dejala lider, esto se ha vuelto interesante —dijo Changbin.

—No.

—Han hago un experimento con Minho, me ha dicho que el contacto lo hace sentir comodo, acercate a el.

—Claro —Han imitó a un patito y empezó a avanzar hasta Minho, el retrocedió.

—Honey detente —pidió pero Han ya lo habia alcanzado.

Minho se congeló mirandolo, Han no detuvo su acercamiento hasta hacer rozar sus narices, se alejó solo unos centimetros y lo miró, Minho tardó en reaccionar, recien salió del transe cuando Kei volvió a hablar.

—¿Estas bien? —bromeó ella y el la miró de reojo, su rostro se había vuelto rojo, no parecía siquiera respirar, me recordó a mi, dias atrás, tratando de contener todo lo que Kei me hacia sentir.

—Vamonos cizañera —giré hasta tomar a Kei de las piernas y alzarla sobre mis hombros.

—¡Cristopher! Bajame —pidió y yo empecé a caminar a la salida, Changbin rió —¡Termina el chisme por mi!

Caminé con ella encima hasta mi cuarto, ni bien la bajé se cruzó de brazos e hizo un puchero, acomode con mi mano su cabello.

—¿Pero porque? Si se gustan ¿porque no estar juntos? —deje mi mano acariciando su mejilla.

—Porque no es tu drama, dejalos ir a su paso, metiche —golpeé con mi dedo su frente y ella bufó.

—bien —seguía con el ceño fruncido, sentí el cuello arder y antes de pensarlo mas me hinque a besarla. Aun no me acostumbraba a hacerlo asi, ella sonrio apenas me separé.

—Vemos una película esta noche ¿Verdad? —yo sonreí y traté de desviar el tema. Me aterraba totalmente tener que estar a solas con ella cuando los chicos estaban en la casa.

—Hannah vendra a cenar mañana —ella caminó hasta mi cama y se tiró ahí, yo me quedé como tonto mirándola.

—Genial, amo tu olor ¿Te lo dije? —ella cerró los ojos y yo la contemple, era tan hermosa, su cabello rosado esparcido en las sabanas oscuras y sus pies colgando.

—creo que si —bromeé, me lo había dicho mil veces, y amaba que me lo recordase.

Ella se recostó sobre sus codos y me miró

—¿Tenemos sexo? —preguntó achicando los ojos hacía mi dirección, sentí mi garganta cerrarse.

—¿Que?

—Ven —ella sonrió de forma juguetona y yo retrocedí.

—No tendremos sexo. —chille en un susurro

—¿Porque no? —ella frunció el ceño.

—Porque estan todos, tu hermano podría llegar en cualquier minuto si es que no ha llegado ya y anda buscándote por ahi —me crucé de brazos y ella bajó la vista a ellos por lo que rapidamente los descruce, ya no usaría camisillas frente a ella.

—Sera rapido —sonrió como si fuera una niña y me guiñó un ojo, yo reí. Sus ojos oscuros se achicaban como si yo fuese su presa.

—No —ella hizo un puchero —No, no, no.

Ella se levantó y caminó hasta mi, retrocedí antes de que me toque, ella parecía avanzar como un leoncito asechando.

—No —rei y ella avanzó —No, Kei —reí cuando me alcanzó y trató de besarme.

—Se silencioso —ella trató de no reír mientras buscaba mi cuello.

—No no —reí cuando me besó el cuello causandome cosquillas.

Tomé sus brazos y los envolví en ella hasta abrazarla, mi mente había olvidado por un segundo su insinuación y me concentre en ella jugando conmigo.

—No —repetí riendo y besé su nariz, esto se sentía tan irreal, tan perfecto. Con ella en mis brazos, sus ojos me miraban como nunca pensé que alguien lo haría, como si fuera la puta cosa más hermosa del mundo y yo solo podía derretirme porque ella era demasiado para mi.

—Dale déjame —Trató de besarme nuevamente y yo reí. —Tener cosquillas es de débiles —levantó su mentón retándome.

—Veamos si te gusta a ti —fui a su cuello en un intento de darle besitos y ella me cerró el paso —¿No que de débiles? —volví a probar y ella rio, vi de reojo la piel de su brazo completamente erizada.

—Eres un pesado —alejó su cuerpo del mío hasta donde mis brazos le permitían.

—Tu eres una pequeña insinuadora —acaricié su nariz con la mía.

—Seré silenciosa —susurró y yo volví a reír.

—No me gusta que los seas —susurré y ella me besó en respuesta.

Solté sus brazos para sujetar su cintura, sus manos fueron a mi cuello acercandome mas, sus labios devoraban los mios con necesidad, caminé hasta encontrar la pared y presionarla, un gemido quedó atrapado en mis labios y no necesite mas para prenderme.

No había pasado ni un hora desde que lo hicimos en la pieza de Hyunjin y aquí estaba nuevamente, deseándola como si fuera la primera vez, no me cansaría de ella, de su cuerpo, de escucharla gemir o besarla.

—Chan —la puerta se abrió de golpe y yo me separé de Kei.

—Ay mierda, ¿Iban a hacer cositas ahora? —Han cubrió su boca y Kei bufó.

—No —dije al mismo tiempo que Kei dijo que si .

Sentí el cuerpo entero caliente, mi respiración era erratica, la miré con reproche, su cabello era un desastre y al igual que yo tenia las mejillas rosadas, pero dudo que de pena.

—Oh Dios, lo siento —iba a volver sobre sus pasos pero la detuve.

—Nono dime, nosotros ya terminábamos.

—No somos tan rapidos —bromeó Kei, sabia por su tono de voz que estaba molesta, me acerqué mas a ella y tape su boca.

—Esta drogada —la excusé y Han rió.

—Queria avisarte que Minho y Jeongin van a ensayar —Yo asentí y el tras darnos una mirada divertida se retiró.

—¿Seguimos? —ella bajó mi mano de su boca y sonríe achicando los ojos y yo rió.

—No trancaste la puerta —ella abrió la boca ofendida.

—Tu me trajiste —me apuntó con su dedo indice.

—Yo te traje inocentemente y tu me atacaste —rebati y ella entrecerró los ojos.

—No eres inocente —ronroneo hasta acercarse al punto de que su nariz acariciaba mi mejilla —ire a ensayar con ellos ¿Vamos?

—Me quedaré a ordenar y debo hacer un live —Ella asintió, se acercó hasta darme un casto beso  y se fue.

Yo hice todo lo que había dicho, había tardado mas de lo que esperaba, mire el reloj de la pared y por un segundo extrañé la voz de Kei. Sonreí mientras caminaba hasta la sala de ensayo ¿Algo mejor que vivir en la misma casa que la chica que te gusta?

La extraño y sas, solo debo cruzar el pasillo.

Entré a la sala de ensayo encontrandome con Hyunjin y Kei bailando, Minho y IN estaba sentados en frente mirandolo, su cuerpo, su cabello, sus movimientos eran tan exactos y perfectos.

Me detuve solo un segundo a mirar a Minho, el también la miraba con admiración, suspiré tranquilo al saber que no estaba enojado con ella por su pequeño encuentro. Volví la vista a la sensual chica que aparentemente se había apoderado de mi mente.

Ellos bailaban una de las nuevas coreografías que aun no sacábamos, la grabaríamos en quizas dos meses y se publicaría en 5.

Ni bien terminaron a bailar los chicos aplaudieron, incluyendome.

—Kei es una idol totalmente —dice IN emocionado —se aprendió 2 coreografías, incluyéndo la nueva.

—Vaya —sonrei orgulloso, si bien me había tardado, un día era nada para 2 coreografías.

—No es para tanto, aun me pierdo en varias partes —ella le sonrió —y probablemente mañana solo recuerde una.

—Incluyendo tu nueva musica —Minho levantó las cejas y yo sentí el rostro arder, esa musica no esperaba que ella vea.

Era mas idea de Hyunjin, es decir, si. Ambos hicimos la musica pero todo se habia vuelto en sobremanera mas sensual por los pasos que el había añadido.

—¿Te muestro? —sonrió Kei.

—No —dije rapidamente y Hyunjin frunció el ceño.

—¿Porque? Mira, baila conmigo —Dijo Hyujin mirandola y ella hizo una mueca.

—sera raro, ¿Cristopher, bailamos?

—¡Si! —Chillo In y Kei se acercó a mi hasta estirarme al centro, Kei trajo unas cadenas de escenografia, que se suponia que iba a usar en el videoclip.

—sera muy obvio —le susurré y ella sonrió.

—¿Que mas da? —vi la sonrisa puesta en Han y en Minho.

Empezamos a bailar, me equivoqué dos veces por verla, su cuerpo, Dios... ¿estaba pagando un castigo o recibiendo un premio? Trataba de no pensar en la letra, en cada vez que nuestro cuerpos se tocaban, en un paso me puse detras de ella y mi mano fue a su cuello presionándolo porque era parte de la coreografía y sentí el cuerpo arder.

Quería subirla a mi hombro como un cavernícola y encerrarla en cualquier lugar conmigo.

Terminó la musica y los chicos aplaudieron, miré a Hyunjin esperando su reacción.

—Queda prohibido bailar con mi hermana  esta musica —dice con dramatismo fingido y ella ríe.

Tras hablar un rato con ellos sali de ahi, ya no podía ver a Kei.

Entré a bañarme tratando de bajar la calentura, todo es culpa de ella, podia ser menos sexy, o menos apetecible, Dios... sonaba cómo a un acosador...

Salí al pasillo encontrandome con Kei, ella sonrió al verme parecía querer hablarme pero giré el rostro sobre mis hombros y miré el pasillo vacio.

Apresuré mis pasos sin pensarlo mucho hasta tomar sus brazos y arrastrarla a mi cuarto.

Ni bien entramos la presioné contra la puerta y la tranqué.

—Sera la ultima vez que hagamos esto con los chicos en la casa, la ultima —digo y ella sonríe.

—No te creo.

—La ultima —no le di tiempo de discutirme, solo me abalance para besarla y meter mis manos bajo su ropa en busca de calmar mis necesidad de ella.