Capítulo 11: Matala
Todos estábamos en la sala, hoy nos habían dado el día libre, Kei estaba sentada a lado de Changbin, justo frente a mí. Hyunjin se sentaba en el suelo frente a ella, ella trenzaba su cabello,ya que este lo tenía lo suficientemente largo para ello. Teníamos que ir a un show en unos días donde probablemente nos harían preguntas personales y estábamos preparándonos para ello, no podíamos dar respuestas que puedan mancharnos pero tampoco mentirle a nuestros fans, era la cuestión de siempre, limitarnos para no mostrar algo de más.
—Háblanos de ti Kei —dice Han con voz de locutor y ella alza la vista hasta el.
—¿Que quieren saber? —pregunta sorprendiéndome, pensé que huiría o se cerraría a ello.
—El chico de la plaza es tu novio ¿Verdad? —pregunta Minho sin rodeo alguno y Hyunjin pone los ojos en blanco.
—No es su novio —bufa y Kei estira un poco su cabello, llevando la cabeza de Hyunjin hacia atrás, él se queja y los chicos ríen.
—Calla, me lo pregunto a mí –reprende —pero si, tiene razón, no es mi novio —Murmura y yo frunzo el ceño, estaba seguro de que si lo era.
Es decir, pensándolo nunca los había visto en un intercambio físico que se viera romántico, pero la forma que el tenia para referirse a ella me había dado la idea, hasta donde entendía, ellos estaban viviendo juntos antes de estar aquí y Hyunjin, quien lo había negado recientemente, el primer día lo había nombrado como "su estúpido novio", me reprendí por sentirme algo relajado al saber que no estaban juntos, aun así mis pensamientos me traicionaban imaginándolos en una relación moderna de "no títulos".
—Volvamos a las preguntas —aclaré mi garganta y los chicos me miraron, sentíla mirada de Minho pero lo ignoré.
—Bien líder, preguntas interesantes —Sonrió Minho con una mueca que dejaba en claro que algo tramaba.
—Me gusta me gusta —aplaudió Changbin.
—A mi no me gusta —objetó Seungmin.
—Empecemos por ti, así tu sufrimiento acaba rápido —dijo Minho mirándolo con los ojos entrecerrados—¿tu tipo ideal?
—Paso —dijo mirándome —No responderé eso ni en una entrevista, en definitiva mucho menos en una entrevista.
—Debes de hacerlo —lo picó Changbin —¿Te gusto yo? —le bromeó achicando los ojos hacia él.
—Ew, diré que alguien que ame los perritos —se defendió y los chicos se burlaron de Changbin. Reíal verlo con su mano izquierda sostener su pecho y sus labios abiertos imitandoun grito en silencio.
—¿Y tu Hyunjin? —sonrió Minho, Kei se detuvo de peinar para mirarlo.
—A Hyunjin le gusta Félix, ya lo hablamos —se burló ahora Seungmin y los chicos rieron.
Era una broma constante entre ellos, si bien sabíamos que Minho se moría de amor por Han, cosa que negaba y nadie lo decía en voz alta, al resto por supuesto que les encantaba jugar con los ships que nuestras propias fans se encargaban de crear.
Hyunjin era bromista y bruto al jugar sin embargo con In y con Félix era sobreprotector y cuidadoso, hasta cariñoso se podría decir y claro, los fans y los fotógrafos habían captados miles de fotos donde el contacto físico con Félix era excesivo, entre abrazos y halagos, hasta donde sabia no pasaba nada más que una amistad hermosa.
—¿Ustedes tienen algo? —preguntó Kei mirando intercaladamente a Hyunjin y a Félix, los chicos rieron aun más.
—Eh... —empezó a decir Félix y Hyunjin giró a mirar a Kei.
—Claro que no —soltó aire por la nariz como si quisiera reír.
Los chicos siguieron haciendo preguntas hasta que cayó la noche, era un ir y venir de bromas entre ellos, Kei aportaba cada que podía y oírla soltar carcajadas escandalosas parecía acelerar mi corazón y a la vez darme paz. Realmente disfrutaba el hecho de que por fin ella conviva con nosotros y eso le haga feliz a Hyunjin, podía ver en sus ojos su emoción por tenerla de vuelta.
—Hey —Changbin llamó a Kei —¿Seguimos la partida del otro día en mi cuarto?
Los chicos no tardaron en hacer sonidos para molestarlos, yo fruncí el ceño casi al mismo tiempo que Hyunjin
—Ya es tarde —objeté viendo la hora en el reloj de la pared, parte de la rutina de todos los días, era que los chicos duerman temprano para poder rendir bien al día siguiente, nuestro día era extremadamente cansador por los ensayos y el momento de crear las canciones, necesitaba que estén concentrados y descansados.
—Solo será un rato líder —suplicóhaciéndome ojitos y miró a Hyunjin como si le pidiera permiso por Kei.
—Entraré al cuarto cada 5 minutos, lejos de mi hermana, Changbin —los chicos rieron sin embargo Hyunjin lo había dicho con total seriedad.
Algo que había observado desde el comienzo era que a pesar de sus peleas que ya por suerte eran mucho menos frecuentes, el era extremadamente celoso por ella, tal como lo era con Félix, no quería que se pasen con abrazos o bromas.
...
—Y bien, hablemos un poco del líder —dijo el reportero, los chicos asintieron como si estuvieran de acuerdo.
Sentía mi cuerpo sudar y suplicaba mentalmente que el maquillaje que llevaba no se corra con él y revele el sonrojo que sentía arder en ms mejillas. Estábamos los 8 sentados en un sofá y dos sillas, Kei nos había acompañado según ella para divertirse con nuestras respuestas, ella se encontraba sentada en una de las primeras filas de los escalones que pertenecían para el público que viniera, hoy estaba atestado de fans gritando, lo cual me daba un poco de ánimo pero no mejoraba la ansiedad que me daba al saber que todo lo que saliera de mi boca quedaría grabado de por vida en la trampa mortal llamada internet. Era el drama de la fama, un paso en falso y la carrera de años temblaría.
—Dime Bang Chan, ¿Cuales son tus pasatiempos?
—Bang Chan no tiene pasatiempos —bromeóMinho y los chicos asintieron nuevamente.
—Ya está muy mayor para hacer cosas —añadió Seungmin en burla, ¿Había quedado más que claro que amaban molestarme por ser el mayor del grupo?
—Cuidarnos le consume tiempo —añadió ahora Han poniendo una sonrisa tierna
—Es cierto
—¿No juegas o ves televisión? —preguntó el reportero ya que algunos de los chicos habían dado esas respuestas, ellos negaron en sincronía. Reí al verlos tan tranquilos ante la cámara, no me molestaba en absoluto que ellos hablaran, disfrutaba verlos tan cómodos.
Los mire con orgullo viéndolos tan seguros, si de mi dependería, apagaría mi luz con tal de verlos brillar aun mas a ellos, quería verlos triunfar aun más que yo, que sus nombres se conozcan tanto como ellos habían soñado y que lo tengan mucho más fácil que yo, si tan solo pudiera darles todo en bandeja se los daría porque ellos lo merecían.
—Al líder no le gusta ver televisión —aclaró IN, la boca se me seco al oírlo, giré el rostro disimuladamente hasta ver la intensa mirada de Kei, me entrecerró los ojos como si me hubiera descubierto.
En parte era cierto, nunca veía la televisión con los chicos, porque bueno... Cuando eso no me llamaba la atención.
—Solo escribo, la música es mi mayor pasatiempo —aclaré y el reportero asintió, la mujer a su lado me miró y tomó el micrófono como si preguntar le emocionara.
—Creo que tus fans quieren saber esto ¿Cuál es tu tipo de chica ideal? —me rasqué la mano nervioso, habíamos repasado estas preguntas, aun así era una pregunta trampa. Los gritos de las fans atestaron el lugar.
—Realmente no tengo un tipo —sonreí con timidez.
—Alguna característica —insistió el reportero apoyando a su compañera.
—Bien —hice una pausa pensándolo —que sea ordenada, que cocine rico, que le guste la música, que sea sincera y divertida —trate de dar características "normales" no quería limitar a nadie a ser alguien con tal de "gustarle" a un idol
No necesitaba ni quería que cambien algo de como son por lo que a mí me gustara o no. Ellos tienen que ser libres como ellos quieran ser y alguien las amaría así.
—Ahí lo tienen Chicas.
La entrevista siguió normal entre bromas de los chicos y más preguntas hasta que por fin dio por terminada.
—Bien, pequeño paseo para dejar a los niños en la guardería, Hyunjin, Félix y Changbin irán en la empresa para grabar, Minho iras a la casa de tus padres, ya avise a los jefes, y el resto conmigo en la casa —ordené y ellos asintieron, Minho se encargaría de llevar a los chicos a cada lugar para el resto poder ir a descansar.
Llegamos a la casa con IN, Kei y Han cantando a todo pulmón en la parte trasera del auto, reí al escucharlos rapear con Han, o mejor dicho, a Han rapear y a Kei y a In haciendo algún sonido con sus bocas, según ellos lo hacían igual a Han.
—Lespondré cinta —refunfuñó Seungmin cruzando sus brazos y yo reí.
—Seungmin ¿Por qué no te caigo bien? —lo molesta Kei con voz aguda mientras acerca su rostro al asiento delantero donde se encontraba él.
—No me caes mal, solo eres muy gritona, te prefiero en tus primeros 15 días cuando apenas hablabas —bufó, iba a intervenir pero Kei habló nuevamente.
—No te preocupes, con el tiempo me querrás, soy fácil de querer —dijo sonriendo y volvió a su lugar para seguir cantando con los chicos hasta que por fin llegamos y se callaron.
—Iré a dormir, estoy muerto —bostezó Jeongin despidiéndose mientras estiraba sus brazos y yo asentí.
—Yo leeré en mi cuarto, no griten que ya me quedan pocas páginas—pidió Seungmin y yo hice un sonido con los labios para que sepa que lo oí. Han solo desapareció con el celular en la mano.
Dejé la llave de auto en la pequeña mesa frente a la puerta principal, los chicos se retiraron y Kei se perdió de mi vista, quizás seguiría los pasos de IN y se pondría a dormir. Saque el celular para entrar en redes en busca de novedades o comentarios sobre la entrevista de hoy.
No pasó mucho cuando oí el grito de Kei no muy lejos, en segundos corrió hacia mí y su cuerpo chocó contra el mio haciéndome retroceder.
—Kei —dije sin aliento, era bastante fuerte para ser de apariencia frágil.
Ella volvió a abrazarse a mí, esta situación no se sentía tan incómoda como la primera vez, dudando envolví mi brazos en ella, mi mano fue a su cabeza, volví a sentir sus manos agarrar mi remera con fuerza y suspiró.
—Odio aquí —murmuró contra mi pecho.
—¿Aquí?
— Aquí me gusta, la casa no —aclaró y yo reí.
— ¿Cucaracha? —Ella asintió —suéltame para quitarla.
— ¿Quitarla? —Ella levantó el rostro, se veía asustada y confundida, estaba tan cerca de mí, llevé mi mano a su rostro y aparté su cabello, era tan suave como lo había imaginado—mátala.
—No voy a matarla, no te hace nada —dejé mi mano en el costado de su rostro, mi pulgar casi podía alcanzar su mejilla sonrojada naturalmente, sus ojos estaban claros pero profundos, eran hipnotizantes.
—Claro que me hace, es asquerosa y es gigante, mátala o tendré que mudarme —Su piel también era suave, me desconcentraba su olor, su cabello, su voz, ella en conjunto parecía tener algún efecto que descolocaba mis sentidos de alguna manera.
—Ella te tiene más miedo —mi vista bajo a sus labios ¿Eran así de rosados o estaba maquillada? Veía como se movían, vaya que eran lindos y carnosos.
—Ni siquiera me escuchas —bufó y volví a mirar sus ojos.
—No sé qué paso —fruncí el ceño y quité mi mano de su rostro, trate de retroceder pero ella seguía pegada a mí.
—Mátala por favor.
—Kei.
—Si la quitas volverá a entrar —hizo un puchero y yo suspiré.
—Suéltame para ir por ella —pedí, una parte de mi no quería ¿que demonios pasaba conmigo?
—Realmente no quiero soltarte —Susurra como si leyera mi mente y yo trato de no sonreír.
No entiendo lo que estoy sintiendo, pero definitivamente tampoco quería que me suelte, se sentía bien, era tan relajante tenerla así, como si encajara conmigo.
—La cucaracha puede huir a tu cuarto —casi rio al ver su rostro horrorizarse, me soltó como si la hubiera electrocutado
—Si no veo el Cadáver voy a mudarme Christopher —chilló mientras se alejaba hasta subir al espaldero del sofá
Caminé hacia la cocina y empecé a buscarla, moví algunas cosas pero no la veía, siquiera parecía estar aquí.
—Vi que en la casa de alado empezaron una mudanza, capaz la pobrecita se pasó —expliqué en alto para que ella me escuche, nuestra casa era bastante limpia para tener una plaga de ellas.
—Christopher, Christopher —empezó a gritar por lo que tuve que volver, casi corro, ella estaba por caer del espaldero, apuntaba hacia el sofá contrario. Suspire y caminé hasta allí, ni bien me acerqué la cucaracha salió y aproveche para pisarla
—¿Murió?
—Sí, espero que te pese en la consciencia —me burlé y ella hizo un sonido con los labios.
—Es asquerosa.
—Pobrecita —seguí bromeando y ella negó.
— Pobrecita yo, ella me atacó —bufó indignada y solté una carcajada.
—Estoy casi seguro que la atacaste tu —sonreí y ella abrió la boca ofendida, empecé a reír de su rostro y ella al final se rió siguiéndome.
....
— ¿Que tal tu noche con Changbin ayer? —pregunté cuando ella se sentó en el sofá. Ya había oscurecido, los demás ya habían llegado, a excepción de Minho que dormiría en su casa. Hoy si veríamos películas y en mis planes estaba no car dormido hasta el final.
—Solo fue un rato, y bien, le gane la mayoría de las partidas —sonrió orgullosa.
—Yo también se jugar —murmuré dela nada y ella giró a mirarme.
—¿Me retas?
—Cuando quieras —giré a mirar la televisión, pude verla sonreír de reojo.
—Los chicos dijeron que no te gusta ver tele —dijo y yo fruncí los labios. Sabía que tocaría este tema en algún momento
La verdad es que antes de Kei no me interesaba ver la tele, para nada, simplemente parecía una pérdida de tiempo, ni siquiera encontraba películas series que me llamen la atención y de por sí ya me encontraba muy cansado para verla, pero me gustaba estar así ahora, con ella. Al final del día solo quería que llegue este momento para relajarme.
Iba a hablar, probablemente dar una excusa barata y nada creíble de no ser por su celular que empezó a vibrar.
—Un minuto —pidió al ver el nombre en la pantalla y se alejó, podía oírla murmurar sin embargo no sabía de que hablaba. Pasaron los minutos hasta que por fin volvió, presione los labios esperando que diga algo.
—Nuestra cita se tendrá que posponer nuevamente —habla algo molesta, yo solo pensé en la palabra cita
— ¿Por qué?
—Yo... debo salir, pero si quieres ver algo hazlo, estás en tu casa —bromeó antes de caminar hacia el pasillo que daba hacia los cuartos. Me levante a seguirla, le di una rápida mirada el reloj, era tarde.
— ¿Por qué? —pregunté al momento que ella cerró la puerta de su cuarto, Fruncí el ceño y esperé unos minutos, no sabía qué hacer ¿Ella entraría a dormir ahora?
Ella abrió la puerta y Mierda... se veía tan bien, tenía algo rojo ajustado en la parte de arriba y encima una campera de cuero negro, sus pantalones también eran negros y llevaba botas, cargaba una pequeña mochila que pasaba desapercibida. Por un segundo olvide que hacíamos, hasta que ella me pasó por un lado despertándome.
—¿A dónde vas? —pregunté siguiéndola nuevamente.
—No necesito niñera Christopher —Habló y yo la ignoré.
—¿Donde?Es tarde —ella tomó las llaves y abrió la puerta principal. Me entregó lasllaves rápidamente y siguió su camino.
Una moto con el mismo chico de siempre estaba estacionada enfrente, volvía a tener el cigarrillo entre los dedos mientras reposaba cómodamente sobre la moto, fruncí el ceño cuando cruzamos miradas, el parecía tan relajado, sabiendo que Kei se encaminaba a él.
—Kei, no —tomé su mano deteniéndola, ya habíamos salido de la casa, podía ver al chico mirándonos con desinterés, ella giró a mirarme, sus ojos se habían vuelto oscuros, mis pies descalzos parecían congelarse contra la vereda y mis vellos se erizaron. Mi plan no era detenerla, ssolo quería entender lo que sucedía.
—No soy una niña, suéltame —su voz había salido más dura, ¿Qué demonios pasaba?
—Lo sé, mierda pero...
—Tengo que irme, buenas noches —se soltó de mi y dio unos pasos hasta que la alcancé y la volví a agarrar de la mano, ni siquiera lograba entender este arrebato mio, sentir su pequeña mano envuelta en la mia parecía un tacto tan conocido por mi cuerpo, como si lo hiciéramos todo el tiempo.
—¿Dormirás afuera? —Pregunté, ella solo suspiró —solo, avísale a Hyunjin ¿Si? —pedí y ella asintió, odie soltar su mano, sentir como se deslizaba de la mia hasta cortar nuestro contacto.
—Bien
No podía ignorar lo raro que se sentía verla subir a la moto con él, el me hizo un saludo con las manos antes de arrancar e irse con ella. Volví a sentir raro el estomago y en definitiva me sentía frustrado
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