Capítulo 8 🌹
Sora tenía a la pequeña JeongMin en brazos, la bebé estaba distraída jugando con sus manitas con el cabello de la joven, ésta tuvo que ser dejada en el suelo de la sala junto a sus juguetes cuando el auto de Jimin se detuvo frente a la casa, Sora nerviosa se colocó frente a la puerta guardando su celular, el dueño del lugar entró y ella no pudo evitar preguntar...
— ¿JiYeon está bien?
— Sí—aquel tono desganado le hizo saber que había más—Está con su madre—cerró la puerta. Al ver a JeongMin en la sala se acercó a ella cargándola.
— ¿Quiere que le prepare algo?
— No, estoy bien, estaré en el cuarto de la bebé—se dirigió a las escaleras dejando a una Sora muy preocupada. La chica quiso seguirlo, pero la voz de su hermano hizo eco en su mente.
"No lo arruines, si ellos tienen problemas, deja que los solucionen"
🌹🌹🌹
Min Sora se encontraba frente a la puerta de la habitación de JeongMin, sabía que allí estaría Jimin con la bebé. Miró la bandeja con algunos bocadillos que había preparado para el hombre, respiró profundo y abrió la puerta encontrando una adorable imagen.
Park Jimin estaba sentado en aquella mecedora con la pequeña en brazos quien dormía en su pecho profundamente haciendo un puchero, su padre estaba con la cabeza inclinada hacia atrás y la boca entreabierta, Sora sonrió dulcemente acercándose a ellos, dejó la bandeja en la mesa de noche recogiendo los juguetes que estaban por el suelo para evitar caídas, tomó la pequeña manta de la niña cubriéndola en brazos de Jimin, allí fue que Sora notó que el chico tenía rastros de haber llorado.
Su nariz estaba roja, tenía las mejillas algo hinchadas y quizás pegajosas por las lágrimas.
"¿Habré hecho mal contándole sobre su esposa? Supongo que no todo es tan color de rosa como creía"
Algunos mechones del chico estaban inclinados hacia atrás también y Sora sintió el impulso de pasar sus dedos por ese cabello. Salió de la habitación dedicándose a limpiar lo que le faltaba, horas después, cuando intentaba mover el sofá se vio acompañada por otra persona quien la ayudó con el peso.
— Gracias—sonrió un poco.
— No hay de qué—Jimin lucía algo somnoliento aún— ¿Tienes mucho por limpiar?
— Estaba barriendo un poco y luego limpiaré los platos, ¿Necesita algo? —ofreció.
— Yo limpiaré los platos.
— No tiene que hacer eso, puedo encargarme...
— Sora—calló mirando sus ojos. La joven se mordió la lengua esperando a que continuara, Jimin no quería ser grosero con ella porque la que menos culpa tenía de todo era esa joven y las niñas, dejó salir un suspiro cansado pasando su mano por su propia melena oscura—Quiero mantener mi mente distraída, deja que lo haga yo, ¿De acuerdo?
Sora supuso que ya había hablado con su esposa y habían discutido, asintió mirándolo alejarse. ¿Por qué una pareja como ellos tendría problemas si tienen una vida jodidamente perfecta? Comenzando por el hecho de tener dinero a montón.
Siguió barriendo la sala y limpiándola, tardó unos minutos dirigiéndose a la cocina para verificar el trabajo del señor Park, éste estaba de brazos cruzados con su cintura apoyada del mesón, Sora no soportaría más incertidumbre, detrás de Jimin estaban los platos limpios.
— ¿Habló con su esposa?
— Sí—contestó—No sé a qué hora volverá con JiYeon así que no te preocupes por preparar la cena, puedes ir a descansar temprano.
Sora notó aquel tono de voz triste. Jimin tenía sus ojos más brillosos de lo normal, ¿Estaba conteniendo las lágrimas?
— Lamento haberles causado problemas.
— Ojalá fuera eso—bufó negando con la cabeza. Miró de pies a cabeza a la chica— ¿Has tenido novio, Sora?
— Sí, fue durante la secundaria, tenía quince años.
— ¿Y por qué terminaron? —ladeó su cabeza metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón.
— Mmm...—apoyó sus brazos en el mesón—Ambos comenzamos a querer cosas diferentes, lo nuestro ya dejaba de ser interesante.
Jimin asintió ante eso último, lo suyo con JeongYeon también había dejado de ser interesante, pero él parecía ser el único en esforzarse porque lo fuera, todo lo hacía por las niñas, pero... ¿Quién se detenía a pensar en él?
— ¿Luego de eso nadie más llegó a tu vida?
— No, señor—negó con la cabeza—Lo siento, es decir, no, Jimin.
El pelinegro respiró profundo mordiendo su labio.
— ¿No has sabido más sobre él?
— No—hubo unos segundos de silencio— ¿Jimin? —éste la miró— ¿Dónde conoció a su esposa?
— En la universidad—sonrió de lado—Estábamos en la facultad de arte y actuación, JeongYeon tenía el sueño de ser una excelente actriz—su mirada estaba perdida en un punto ciego, Sora pudo notar algo de nostalgia en él—Allí se presentó mi oportunidad en una academia de danza, poco a poco crecí dentro de ella hasta ser el director.
— ¿Y JeongYeon no se atrevió a seguir su carrera?
— Resulta que...—se acercó a donde Sora colocándose en esa posición—Ella tuvo algo más allá de una amistad con un compañero de su obra.
Sora levantó sus cejas.
— ¿Qué?
— Hace seis años JeongYeon tuvo un desliz—explicó—De ese "desliz" llegó JiYeon.
— Entonces... ¿JiYeon no....?
— Ella no es mi hija biológica, la presentamos como mía y su acta de nacimiento lo dice, pero no es cierto.
Podría ser extraño, pero Jimin sentía que iba soltando ese peso de sus hombros al confesarse frente a esa joven, Sora lo estaba escuchando sin juzgarlo. ¿Cuándo fue la última vez que eso pasó? No lo recuerda.
— Pero ella es tan parecida a ti—miró con atención ese lindo rostro— ¿La perdonaste? ¿No se supone que estaban juntos?
— No, cuando nos conocimos ella lloraba por el embarazo—suspiró—Estaba tan enamorado de ella que le aseguré todo, vivimos juntos, yo me hice cargo de todo y hasta la fecha amo a esa niña, Sora—y ella lo sabía—JiYeon no sabe sobre esto, es una niña, es mi hija.
"Esta familia no es nada perfecta, tienen tantos problemas..."
— ¿JeongMin...?
— La bebé es mi hija biológica, su madre es JeongYeon y su padre soy yo—aclaró—Su madre la ve como un error—quiso sonreír para burlarse, pero las lágrimas salieron y Jimin cubrió su rostro sollozando. Sora lo miró muy quieta, no sabía que decirle porque lo obvio era que la señora JeongYeon era una cualquiera. ¿Cómo podía hacerle eso a Jimin?
Es cierto, ninguna familia es perfecta pero esa clase de persona le causaba náuseas.
Sora rodeó el mesón colocando su mano sobre el hombro del chico dando un suave apretón, Jimin lloraba con verdadero dolor.
— No hiciste nada malo, Jimin—susurró—Has hecho todo bien.
— No—limpió sus mejillas con la voz rota—Siempre he luchado por mi familia, pero desde hace un año ella me hace sentir que ya no vale la pena luchar y....—sollozó—Ella se llevará a JiYeon, desprecia a JeongMin y me trata como basura—Sora quiso pedirle que no siguiera—Amo a mi familia, Sora, realmente la amaba.
Guardando silencio dejó que se consolara en su hombro, éste la abrazó y ella le permitió llorar lo que necesitara, dio palmaditas a su espalda sintiéndose mal por él.
"No debí decir nada, me siento culpable"
🌹🌹🌹
Sora se dejó caer en su cama algo agotada, eran las ocho de la noche, su espalda dolía un poco y sus párpados se sentían pesados, quiso llamar a YoonGi, pero no quería escucharle decir lo que ya sabía, ¿Por qué ninguno de sus trabajos podía ser normal?
Con un suspiro frustrado y cansado colocó su brazo sobre sus ojos dejando que la mente de Jimin llegara a su mente, se sintió tan mal, tan culpable a pesar de que él aseguraba que no era así.
"Así que JiYeon no es su hija biológica, pero él la adoptó de alguna forma, JeongYeon fue engañada por el padre de esa niña y.... ¿Ahora era ella quien engañaba a Jimin después de todo este tiempo?"
Sora hizo una mueca con los labios, ¿Por qué JeongYeon le haría eso a Jimin después de que éste aceptó ese embarazo a pesar de no ser el responsable? A Sora le pareció irónico que en este caso fuera la mujer quien hiciera esas cosas, siempre todos juzgan al hombre, pero...esto era diferente.
La chica quitó el brazo de sus ojos escuchando algo, se levantó de la cama abriendo la puerta, justo JiYeon entraba a su cuarto más feliz que nunca, Sora salió del suyo acercándose a las escaleras y la discusión abajo no tardó en escucharse.
•••
🌹
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro