Capítulo 23
Inmadurez

JiSoo había servido algo de té para los señores Joon, no le incomodaba tenerlos allí, no era primera vez que las visitaban, el problema era que Jeon JungKook estuviera escondido en la habitación como si hiciera travesuras o algo parecido. Sentía que ocultaba a un criminal, eso era lo que la ponía nerviosa. Por otro lado, DaeSoo sentía parte de esa incomodidad.

—¿Por qué vinieron?

—Porque somos tus padres, ¿Qué pregunta es esa? —la señora Joon se mostró ofendida.

—Tu madre quería venir para decirte que quiere ir al chequeo contigo.

—Pero ya tuve mi chequeo—mintió.

—Claro que no, recuerdo perfectamente la fecha que me dijiste, esta vez sí o sí estaré presente.

—Mamá, la cosa es...

—¿Cuándo conoceremos al padre del bebé? —su padre seguía insistiendo con eso. JiSoo se encontraba en el otro sillón en total silencio, su corazón latía rápidamente.

—Bueno, es que...

—No nos digas que está de viaje, un hombre no puede dejar a una mujer embarazada tanto tiempo sola—la forma en que la miraba le hizo poner nerviosa—Mejor dinos, ¿Quién es el padre del bebé?

Cuando JiSoo pensó en decir algo y Dae abrió la boca para defenderse, Jeon JungKook apareció de la habitación interviniendo. La castaña se levantó acercándose a él asesinándolo con la mirada, le había dicho que sus padres no podían conocerlo, el pelinegro hizo una reverencia.

—Señor Joon, señora Joon—saludó formalmente.

—¿Qué es esto? —el padre de la chica estaba confuso. Acomodó sus lentes mirando mejor al muchacho.

—¡Oh! —su madre fue la primera en reconocerlo—Eres el actor Jeon JungKook, han hablado mucho de ti en las noticias.

Ahora sería imposible mentirle.

—Lo siento, estuve escuchando la conversación, yo soy...

—Un amigo, sí—Dae apretó su brazo advirtiéndole con los ojos—Un amigo que ya se va—lo empujó con suavidad, aunque él se rehusó a moverse.

—Espera, ¿Él es el padre de tu bebé, DaeSoo?

—Claro que no, papá.

JiSoo quería gritar en el cojín que tenía al lado. Era demasiada presión para ella.

—No habíamos tenido el honor de conocernos ya que recién llego de viaje—notó el rostro asombrado de la pareja—Lamento haber dejado a DaeSoo sola, estaré más presente en su vida a partir de ahora.

—¿Eres el...padre? —al parecer la mujer no terminaba de asimilarlo.

—¿Esto no traerá problemas a tu carrera?

—JungKook debe irse, sí—Dae jaló de su mano obligándolo a caminar a la puerta. En el pasillo no dudó en golpear su brazo—¿Qué demonios pensabas haciendo eso? —susurró casi histérica.

—Tarde o temprano iban a enterarse.

—Te dije que no quería que te conocieran.

—Oh, ¿Entonces siempre ibas a esconderme?

—Aclaremos algo, todo lo que estamos haciendo es por el bebé, una vez que él nazca nuestra relación seguirá sólo por él.

A JungKook le dolió y le molestó.

—¿Estás diciéndome que nos besamos y que hicimos lo que hicimos en mi departamento sólo por el bebé? —bufó acariciando su frente—Eso es ridículo, DaeSoo.

—Ridículo es que me hayas desobedecido cuando te dije que no quería que mis padres te conocieran.

—Estás exagerando.

—Tú y yo no somos nada, mis padres son un poco anticuados, consideran que si estoy embarazada debería casarme con el padre de este bebé...

—Casémonos.

—¡¿Por qué no me escuchas?! Deja de ilusionarte, te permití estar aquí porque has demostrado ser atento y responsable, no tenemos nada. Que seas el padre de este bebé no significa que estaré contigo—JungKook la miró seriamente—No me gustas como pareja, ¿Entiendes eso?, debemos establecer límites desde ahora.

—Dime que lo sucedido en mi departamento hace tres meses sólo fue por el bebé—avanzó a ella—No puedes porque eso suena estúpido—había perdido la paciencia—Lamentablemente me gustas y mucho, que digas eso me lastima por completo, tranquila, estableceremos límites entonces.

—Tú solo te enamoraste, nunca te dije que te enamoraras de mí.

—Sí, JungKook siempre tiene la culpa, ¿No?, también es mi culpa este bebé, ¿Verdad?, después de todo si no hubiera sido por mí él ni siquiera existiría.

—Estás siendo inmaduro.

—Tú eres la inmadura. La vida te ofrece muchas cosas e insistes en ir sola, cuando necesites ayuda...

—No necesito ayuda—repitió lo que odiaba escuchar. El avance que habían tenido se estaba perdiendo—Puedo hacerlo sola.

—Si no querías ayuda culpa al destino por habernos encontrado de nuevo—negó con la cabeza—Iré a mi departamento, escríbeme para venir a buscarte e ir al chequeo.

Pero Dae era muy impulsiva.

—Iré sola.

—No, iremos juntos—su tono de voz por primera vez fue serio hacia ella y sus ojos no demostraban ternura alguna, más bien era...dolor—Si no me envías el mensaje llamaré a JiSoo. Es mi hijo y tengo derecho a estar allí.

DaeSoo contuvo las lágrimas de impotencia viéndolo irse. Parpadeó varias veces respirando profundo para calmarse, en su vientre sintió al bebé moverse con inquietud. En el ascensor en cambio, JungKook apartó molesto la lágrima silenciosa de su mejilla, se colocó el cubre bocas acomodando su gorra.

"¡¿Por qué no me escuchas?! Deja de ilusionarte, te permití estar aquí porque has demostrado ser atento y responsable, no tenemos nada. Que seas el padre de este bebé no significa que estaré contigo. No me gustas como pareja, ¿Entiendes eso?, debemos establecer límites desde ahora"

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Su teléfono empezó a sonar en la cama cuando terminaba de vestirse, su cabello negro se encontraba húmedo por la ducha de hace minutos. Tomó asiento respondiendo.

—¿Hola?

—Eres la segunda persona que llamo que parece estar de mal humor.

—Ah, hyung—acarició su frente un poco cansado. No había dormido mucho desde que regresó a Seúl—Lo siento, he tenido una mañana pesada.

—¿Tuviste un viaje pesado?

—No, es...otra cosa.

—¿Quieres que te llame en otro momento?

—No, está bien—intentó mejorar su estado sin conseguirlo mucho— ¿Cómo te fue en el campamento?

En esos tres meses habían estado conversando por mensajes o llamadas. JiHoon había regresado al trabajo luego de que sus vacaciones terminaran por lo cual de nuevo estaba muy ocupado.

—Fue entretenido, no me quejo

—Me habías dicho que tu "amiga" te animó a ir, ¿No?

—Sí. Hablé con ella hace poco, estoy pensando en ir a verla cuando no tenga guardia o quizás pase unos minutos.

—¿Estás en el trabajo?

—No, estoy en la casa. Mañana tengo guardia—cambió el tema—¿Cómo estás con tu "amiga"? No tocamos el tema por estos tres meses.

—Tuvimos una discusión—sonó decaído de nuevo—Ella no siente lo mismo que yo.

—Lo siento mucho, JungKook.

—Sí, yo también—miró al suelo—Siento que fui inmaduro, quizás me enamoré muy rápido, no lo sé.

—Esa excusa no existe, si te enamoras en realidad es porque esa persona te hace sentir como ninguna otra—indicó. JungKook hizo un puchero sintiendo las tontas ganas de llorar—Las cosas pasan por algo, quizás ella lo dijo al estar molesta...

—Pues debió controlarse, siento un terrible dolor en el pecho y jamás me he sentido así—llevó su mano allí—Me gusta demasiado esta mujer, hyung, ella...es fuerte, es encantadora, es...única, pero sus palabras fueron crueles.

"Tú solo te enamoraste, nunca te dije que te enamoraras de mí"

—¿Quieres que nos veamos para conversar mejor de esto? —su teléfono vibró en su oreja. DaeSoo le había enviado un mensaje.

—Te escribiré más tarde para vernos, debo salir.

—Está bien. No te tortures, ¿Sí?, a veces cuando nos enojamos decimos las cosas sin pensar en el efecto.

Aun así, se sentía dolido por la castaña.

Estaré muy pendiente de los comentarios que muchas veces se disfrazan de constructivos siendo realmente destructivos. Si quieren una historia donde los protagonistas sean perfectos lo siento, este no es el lugar.

Intento hacer realista lo más que puedo las actitudes y pensamientos de los personajes. Usemos la cabeza un poco.