Capítulo 17
Muchas emociones por un día

La comida estaba servida en la mesa. Ambos estaban en silencio desayunando como si el mundo fuera a acabarse. JungKook sonrió de lado al ver a la chica con las mejillas llenas mientras revisaba su teléfono, sólo tenía una camisa puesta, podía ver parte de su clavícula, él en cambio tenía su torso desnudo. Se habían levantado de la cama debido al hambre, repetir aquel acto fue mejor por la razón de que ambos estaban sobrios.

—Oh—Dae parecía sorprendida por algo.

—¿Qué sucede?

—Hay un artículo en Internet que dice que algunas mujeres durante el embarazo disfrutan más el sexo, parece que algunas de ellas pueden experimentar verdaderos orgasmos—siguió leyendo—También hay parejas que prefieren evitarlo durante el embarazo.

—¿Nueve meses sin sexo?

Dae lo miró entrecerrando sus ojos.

—¿Qué?, ¿Sueles tener una vida sexual activa?

—¿Celosa, noona?

Dae bufó.

—Cuando esté celosa de ti...—parpadeó varias veces dejando incluso de masticar—Espera, ¿Cómo me dijiste?

JungKook sonrió angelicalmente.

—Noona.

—Ya, no me digas así—advirtió—Estoy hablando enserio.

—Claro, noona.

DaeSoo se levantó de la mesa llevándose su plato hacia la sala. JungKook sonrió divertido negando con la cabeza, cuando pasó a su lado la detuvo jalando su camisa.

—¿No quieres comer de la fuente de chocolate?

—No.

—Sé que sí—insistió como un niño pequeño haciendo puchero—Noona—llamó y ella bajó la vista a su rostro—No te enojes conmigo.

—Recuérdame, ¿Por qué estoy aquí?

—Porque en dos días me iré a Osaka.

—Y por eso me invitaste a tu departamento, para comer y follar.

JungKook ladeó su cabeza sin soltarla.

—Lo de follar fue idea tuya—la castaña dejó el plato en la mesa y éste se apresuró a hablar pensando que lo golpearía—Necesitabas calmar ese calor, yo te ayudé y...¿Por qué me ves así?

—Porque te detesto y al mismo tiempo siento un pequeño cariño hacia ti.

—Mira el lado bueno, si yo no hubiera estado... ¿Qué hubieras hecho?

DaeSoo no necesitó pensarlo.

—Masturbarme.

A JungKook le tomó desprevenido aquello.

—¿Sentías pena de decirme sobre tus hormonas y no sientes pena de confesarme eso? —señaló.

—No eres el único que ha tenido una vida sexual activa, pero...—levantó un dedo—Eres el único con quien no usé protección alguna, así que aquí estamos. Me presento, soy Joon DaeSoo, siempre estoy jodiendo todo—sonrió ofreciéndole su mano.

JungKook observó ese gesto, tomó su mano jalando de ella hacia sus piernas. Sonrió más que contento y Dae rodó los ojos, comenzó a llenarla de besos repentinamente causándole gracia.

—No hagas eso—sintió cosquillas en el estómago—Es muy dulce.

—Algo me dice que tu debilidad son los besos así—mantuvo sus brazos en su cintura. La chica encontró muy lindo la forma en que sus ojos brillaban, ¿Por qué la veía como si fuera todo lo bueno en el mundo? —¿En qué estás pensando?

—Estoy confundida sobre algo.

—¿Con qué?

—Si esto fuera sólo sexo...o fuera por simple interés del bebé...no harías esto, no me trataras así—JungKook supo por dónde iba—¿Acaso sientes algo por mí?

"La verdad sí y no sé cómo explicártelo"

—¿Puedo responder cuando tenga una idea clara?

—Así que sientes algo—el chico bajó la mirada y ella levantó su barbilla—Tal vez cuando el bebé nazca esos sentimientos cambien, a veces el nacimiento de un bebé trae problemas.

—Nuestro bebé no traerá problemas.

—Para tu carrera lo hará, NamJoon probablemente me asesine y arroje mi cadáver a la basura—dramatizó.

—No hará eso, en cualquier momento le diré la verdad.

—Eres muy terco.

—Mira quien lo dice—y añadió con una sonrisita—Noona—Dae cubrió su boca con su mano. JungKook atacó con cosquillas regresando las risas al ambiente.

▪︎▪︎▪︎

El teléfono de DaeSoo sonó con el tono de llamada. Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios al ver quién era, ya que JungKook hablaba por teléfono con NamJoon sobre el viaje, cerró la puerta de la habitación respondiendo la llamada.

—Buenos días.

—Buenas tardes—corrigió él—No sabía si esperar más o llamarte, ¿Duermes más que antes?

JiHoon seguía teniendo un efecto pequeño en ella.

—Un poco más. ¿Qué estás haciendo?

—Quería invitarte el almuerzo y luego de eso si quieres podemos ir al parque.

La sonrisa se borró de su rostro. No podía dejar a JungKook para irse con su ex de secundaria, le había dicho al chico que estaría esos tres días con él.

—Lo siento, estos dos días estaré ocupada.

—No te preocupes. Otro día será.

—¿Qué te parece si la próxima vez yo invito el almuerzo?

—Nada de eso, yo quiero invitarlo.

—Eso es muy típico de ti—sonrió un poco—Siempre caballeroso.

—Y tú siempre tan tú.

—Sí, eso me describe. Prometo escribirte luego, ¿De acuerdo?

—Está bien.

▪︎▪︎▪︎

A las seis de la tarde el chico había pedido algunas golosinas al departamento ya que tenía en mente ver algunas películas con Dae. La castaña se encontraba dormida en el sofá y fueron sus sollozos los que atrajeron al chico, dejó el teléfono en la mesa central de la sala tocando el hombro de ella.

—Dae, Dae despierta.

—Déjame—murmuró. No parecía somnolienta, JungKook se agachó arrodillándose en el suelo. DaeSoo se volteó en el sofá sin saber siquiera porque lloraba, una vez más las hormonas del embarazo la volvían vulnerable.

—Oye—dijo con cariño secando sus mejillas. Sólo consiguió que ella comenzara a llorar más—Tranquila.

—No me gusta que me vean así, nunca lloro y estas malditas hormonas me tienen mal—cubrió su rostro con sus manos—Ni siquiera sé porque estoy llorando, perdón.

—No digas eso—lo encontró tierno de su parte—Es normal, todo es parte del embarazo—tomó sus manos acariciándolas—¿Quieres llorar sin razón?, hazlo, tal vez te haga sentir mejor.

—Eres muy lindo, Jeon JungKook—al decirlo volvió a llorar causándole gracia. Entrelazó una de sus manos depositando un beso en ella.

—Y tú eres muy adorable, noona—bromeó. DaeSoo casi sonrió en medio de su llanto, abrazó al chico permitiendo que la consolara, se sentía mucho mejor de esa manera.

Ni ella misma se entendía.