Capítulo 18

Narrador: Klaus Midgar

El salón de eventos se despliega ante los ojos de los recién entrantes Cid e Iris como una magnífica sala de baile sacada de un sueño junto con paredes adornadas con tapices de seda con cuadros de escenas de batallas mágicas y paisajes, ilustraciones a personajes emblemáticos de la historia del reino de Midgar o estilos abstractos, todos hechos por mano de los pocos artistas famosos del reino, por supuesto este despliegue de la vanidad lujosa que Midgar podía ofrecer a los ojos de los visitantes era escaso en comparación con el reino de Oriana, el lugar considerado el seno y cuna de las artes y la música.

En el centro, un gran escenario se podía observar, una mesa con los distintos platillos de distintos reinos, estados de países e imperios para satisfacer el sabor familiar de la tierra de los visitantes.... Sin mencionar que la joven Luna solicitó que todo el menú presente fuera hecho por manos del personal de Mitsugoshi Company.

"Esta joven elfa me hace dudar sobre la cantidad de talento personal que siempre ha tenido en mi reino pero que jamás fue descubierto", pensaba Klaus.

Sin embargo, aquel despliegue de diversos manjares y suculencias no estaba siendo tocado por los nobles presentes en el gran salón ya que se encontraban conversando animadamente, sus ropas finas y coloridas contrastan con el entorno sobrio y elegante, ideal para aflojar los ánimos.

El tema más apremiante para cualquiera era el joven Cid Kageno, el cual fue anunciado como un caballero mágico al nivel de los "héroes".

Desde los albores de la historia, la Iglesia ha sido un faro de luz en un mundo oscuro, una entidad antigua cuyos ecos resuenan a través de los siglos. Sus riquezas eran inmensurables, su poder militar indiscutible, y su voz era la portadora de las "enseñanzas divinas". Estas enseñanzas hablaban de la diosa "Beatrix", una entidad celestial que otorgó su bendición a tres jóvenes: una elfa, una humana y una teriántropos. Estos jóvenes se convirtieron en los campeones de la humanidad, luchando contra Diábolos, la mayor amenaza para el mundo.

A lo largo de su historia, la Iglesia nunca buscó dominar el mundo. En cambio, esparció su palabra como semillas en el viento, apoyó a los países en tiempos de necesidad y medió en guerras para mantener la paz. Sus logros eran tan vastos como las estrellas en el cielo, y sus acciones siempre nobles.

Pero la imagen resplandeciente que la Iglesia proyectaba no era solo para los plebeyos, diversos nobles a lo largo del mundo también adoraban su religión y nunca dudaban de su palabra. La Iglesia no solo tenía la confianza de la gente y vastos recursos, sino que también contaba con sus propias organizaciones armadas. Los Templarios, un grupo selecto de caballeros mágicos, eran adoctrinados en las artes militares elaboradas por la Iglesia y se les enseñaba a seguir sus paradigmas y conductas.

Por fin, cuando la Iglesia anunció al mundo el nombramiento de un nuevo "héroe", no solo significaba que reconocía el poder del joven, sino que también proyectaba una imagen de esperanza.

Por eso, muchos nobles estaban interesados ​​en conocerlo. A pesar del anuncio mundial de la Iglesia y del recién nombrado Alto Obispo de Lindwurm de que acogerían al joven en el futuro, muchos veían esto como una oportunidad para establecer conexiones con él. Con aquel poder en su cuerpo, tenía un gran futuro esperándolo, y ahora más aun siendo que se comprometió con mi hija, la primera princesa de Midgar, una de las mayores potencias del mundo.

En un rincón discreto, Cid Kageno se encuentra apoyado contra una columna, observando la escena con desinterés mientras comía mientras la joven Luna le iba trayendo distintos platos, ya algunos metros podían ver a mi hija, Iris, desviando la atención de Cid que otros nobles casi lo han apuntado deliberadamente con ofertas de negocios exclusivas y de establecer conexiones con él. Por supuesto, siendo Iris quien los estaba bloqueando no se atreverían a proponerle a la misma prometida alguna de sus hijas como "segunda" esposa.

Cid Kageno, aunque dispuesto a participar en las formalidades, no pudo evitar ser atraído por la exhibición de habilidades culinarias. Los chefs de Mitsugoshi han superado sus propias expectativas, presentando platos que son verdaderas obras de arte. Pequeñas esculturas comestibles que representan escenas de batallas famosas, postres que parecen joyas preciosas, y platos principales que combinan ingredientes de mundos distantes, todo servido con una precisión y atención al detalle que incluso Cid no pudo superar y cayó víctima de la tentación, a tal punto que punto que seguramente convenció a mi hija de cubrirle las espaldas para que él pudiera comer....con solo mirar su rostro disfrutando los distintos platillos servidos por la joven luna me lo dice todo

Sin embargo, lo más curioso de estos nobles que estaban siendo bloqueados eran sus identidades.

El conde Mono, que tenía un puesto prominente en el tribunal de justicia... afiliado a la facción Fenrir del culto y miembro de las 13 espadas Nocturnas junto a otros tales como el barón Graham y el conde Kuzaya, miembros de las 13 espadas y parte de la misma facción.

Otro era el Duque D'Aquaican, líder de la facción de los nobles y uno de los nobles de mayor edad y antigüedad, junto a su hija Eliza, quien era la vicepresidenta del consejo de estudiantes en la academia en la que mi hija Alexia y el joven Cid asistían, ella y su padre estaban intentando rodear a la multitud frente a Iris para llegar a Cid Kageno, pero justo cuando el logro pasara desapercibido de ella, Luna saltó a la defensa y empezó a hablar con él, seguramente esperaba presentarle a su hija. Sin embargo, no pudo evadirla, de hecho, ningún noble en todo Midgar se atrevería a despreciar una conversación con esa joven, en pocos años Mitsugoshi se había convertido en una de las empresas líderes en todo Midgar, sin embargo, esta empresa en especial, tenía un ritmo de crecimiento anormal, sacando nuevos productos constantemente, induciendo de manera exitosa líneas de moda para plebeyos y nobles, incluso se ha estado rumoreando que sacarán una línea de armamentos experimental en estas últimas semanas, a lo que ya tengo el ojo puesto en ello, este y tantos motivos volvían a Luna en una mujer demasiado influyente.

El ambiente está demasiado cargado de expectativas, seguramente cada noble de la facción de los nobles está calculando cómo este nuevo compromiso influirá en el equilibrio de poder. Pero por ahora, la música comienza a sonar, invitando a las parejas a disfrutar del momento presente, dejando las intrigas para otro día, sin embargo, el plan se había logrado realizar, se había olvidado por completo que esta reunión era para fortalecer las conexiones o presumir de los participantes de sus naciones el nacimiento del "héroe de Midgar" estaba acaparando toda la atención.

A lo lejos, podía verlos también atentos a lo que hacía Cid Kageno, uno de los representantes de más alto nivel de la iglesia en Midgar, de cabello oscuro que llegaba hasta sus hombros, bastante atípico para la moda masculina en Midgar en cortes de cabello Petos, vestido con su túnica papal de arzobispo junto a un joven templario de cabello largo y ojos afilados.

-Mi rey-dijo alguien a mi espalda.

De cabello rubio y puntiagudo, vestido con una armadura mágica que potencia todos los atributos físicos en el cuerpo, era el jefe de mi guardia personal y viejo amigo de la infancia, Toshinori.

-¿Sucede algo?-

-Esta reunión-dijo él, -Casi todos los nobles del reino son sospechosos o ya confirmados por nosotros que están relacionados con el culto y la iglesia-

Aquello no me tomaba por sorpresa, en estas semanas desde que anunció en la conferencia sobre el compromiso no eran pocos los nobles que intentaban persuadirme sobre que debería permitirle a la iglesia su reclutamiento, otros intentaron bajarlo del poder, alegando sobre una relación amorosa que tuvo con Alexia, mi hija menor.

Ciertamente aquel punto era plausible, dado que el carácter del joven Kageno era desconocido, además de los puntos negativos que Iris había cometido anteriormente, no sería extraño que guardara algún tipo de rencor contra ella o la familia real, sin mencionar que según me informaron, fue el quien rompió la relación con mi hija menor.

Sin embargo, existe una diferencia crucial entre ambas hijas mías, una diferencia que dicta el motivo por el cual Iris es la sucesora formal al trono. Iris, con su espíritu indomable, es la encarnación de un verdadero gobernante. Su valentía y determinación son inquebrantables, enfrentando adversidades sin un ápice de duda. Su mayor arma es el gran carisma que acompaña a su habilidad como espadachín mágico, un imán que atrae a su bando a distintas personas entre los nobles y caballeros.

Por otro lado, Alexia, la estratega, es sin duda mucho más inteligente que Iris. Es calculadora y sabe desenvolverse entre los nobles con gran pericia. Es una maestra en tramar complots para lograr que los demás hagan lo que ella quiera. Sin embargo, su camino al trono estaría lleno de obstáculos, ya que carece del carisma de Iris, ese carisma que mantiene la confianza de los demás en ella.

Solo espero que el tiempo que Alexia ha pasado aislada de nosotros la hagan recapacitar todo esto y no haga nada extremo...

Narrador: Neutro

El tiempo pasaba rápidamente entre nobles comiendo, algunas parejas bailando al son de la música, otros pocos conversaban entre ellos, hablando de temas de ocio o sobre algún comercio que pudieran realizar aliados, sin embargo, a lo lejos, en uno de los extremos del salón se podía ver a 2 figuras que desde hacía tiempo estaban mirando al joven Cid Kageno.

Uno era un hombre alto, de cabello estilo Bob, con unas lentes oscuros, piel blanca y un traje adornado, característico de un Alto Obispo.

Otro parecía un acompañante de la iglesia, de una altura mucho menor a la de un adulto, de cabello largo y una mirada afilada no característica de un miembro del clero.

-¿En serio no puedes detectar nada Petos?-

-En absoluto Fenrir-sama- respondió Petos.

Observando al joven desde hacía un buen tiempo se encontraban el 5° Asiento de los Rounds, Fenrir, y junto a él, recién nombrado 10° Asiendo de los Rounds, Petos.

-Si no puede confiar en mi análisis, ¿podría recomendarle que lo intente usted mismo? -

-No tengo aptitudes de sensor-respondió Fenrir, -Lo más que puedo medir es su aptitud física-le respondió.

-¿Qué conclusión ha obtenido sobre ello?

-Ciertamente impresionante-le dijo sin filtrar nada, -Su postura, forma de caminar, todo me indica que se ha desarrollado al máximo para luchar en la vanguardia-concluyo antes de volver a hablar de manera breve -Lo que sí es extraño es que alguien no sea medible-

-Coincidió-respondió Petos, -No importa cuánto intente medir su nivel de mana o evaluar su circuito mágico, su mana fluye de una manera extraña-

-Explicar-

-Cuando un sensor intenta analizar a otra persona, debe infiltrar su mana en el cuerpo de la otra persona, para ello uno debe colar su mana entre el que va siendo filtrado naturalmente del cuerpo de la persona en cuestión, entiende esta parte, ¿Cierto ? -

-Es lo más básico que se debe hacer para medir a tu enemigo-respondió Fenrir, -Incluso tengo algunas técnicas que hacen lo mismo, pero con otros efectos-

-Ciertamente, para introducir nuestra mana en el cuerpo del objetivo debemos colarnos por el flujo natural del mana de la persona e insertarnos en su cuerpo, luego pasa a ser lo que los sensores podemos hacer específicamente, sincronizamos nuestros sentidos con el mana que se introduce pero sin soltar esta "conexión" de modo que podemos medir el cuerpo de la otra persona al permitir que el mana invasor se esparza por el cuerpo, sin embargo, en este caso el flujo de Cid Kageno no se filtra de manera natural, sigue un patrón muy estricto de movimiento al filtrarse de su cuerpo, por lo que no puedo colar mi mana en él, ya que si presiono demasiado él podría detectar algo extraño-dijo tras una larga explicación, -Bien podría ser natural para un anormal de su nivel, o puede estar haciéndolo a propósito...lo cual sería de temer-

-Ciertamente, si su nivel es tal que puede controlar incluso el flujo de su mana que se filtra de su cuerpo, debe de tener un dominio del mana extraordinario-

-No sería extraño que sea más fuerte que usted, Fenrir-sama.

Tras unos segundos de pensarlo tenazmente Fenrir respondió -Me gustaría comprobarlo- dijo

En aquel momento Fenrir quiso poner a prueba al chico, y estando a punto de soltar su intención asesina hacia él para medir su reacción una sensación, sin embargo, desde su espalda alguien había hablado.

-Deberías cuidar tus acciones, Fenrir-

Eso fue sorprendente tanto para Fenrir como para Petos, un sensor consumido.

La tensión en el aire era palpable, como una cuerda de violín tensada al extremo, lista para que al menor estímulo se desatara una batalla. Fenrir, con su vasta experiencia forjada en innumerables batallas, no necesitó más que una mirada para concluir que el elfa frente a él no era una broma.

Su simple presencia al aparecerse así podría ser similar a una espada desenvainada en un salón de paz; Bien podría haberlos matado hace unos segundos sin dejar testigos que pudieran contar la historia.

Petos, por su parte, intentaba medirla, una costumbre arraigada en cualquier usuario de mana con habilidades de sensor. Pero su intento era como tratar de capturar humo con las manos; no había nada que medir, nada que sentir. Era como si ella saliera una sombra, algo visible pero no medible.

A su vez Fenrir detectaba otras cosas en ella, usando los mismos parámetros que usaba en cualquier usuario de mana podría determinar si habían cruzado o no el límite de lo que el cuerpo físico les permitía, lo que le permitiría entender la experiencia, fortaleza mental y capacidad física máxima de la persona en cuestión.

Finalmente, en solo 1 segundo de verla comprendió que esta mujer ya estaba en el límite o más allá de lo que su cuerpo podría manejar de manera ordinaria "Es peligroso".

Fue entonces que con cautela le preguntó: ¿Necesitas algo de mí?

La elfa, cuya sonrisa inquietante no había cambiado, le respondió -determiné que era hora de presentarme ante el mítico Diablo de Midgar- dijo, inclinándose levemente en forma de saludo, una reverencia que contenía más amenazas que cortesías.

-Esa mirada que tienes ciertamente expresa lo que sientes - replicó Fenrir, su tono era un desafío.

-Naturalmente- respondió ella con una compostura que desmentía la tensión del momento -Siendo ambos Rounds, lo extraño es que no los haya matado- dijo, y con esas palabras, soltó su intención asesina hacia ambos.

Éste fue el detonante para comenzar la batalla.

La propia existencia del culto era desconocida para los civiles, conocida por pocos nobles, que se hallan visto afectados por el culto directamente o que se relacionan con ellos de algún modo, sin embargo, que una elfa extraña llegaría de la nada y supiera no solo de la existencia del culto, sino de los Rounds, además de saber que ambos pertenecían a estos...le hizo entender al instante que debía silenciarla de inmediato.

Fenrir, instintivamente, envió su mano hacia la empuñadura de su arma, pero recordó, con una mezcla de frustración y alivio, que, en este tipo de eventos, siendo acompañante de un alto obispo en calidad de obispo menor, no podía portar armas por lo que no la había traído.

-No planeo empezar una pelea en este lugar- informó, su voz era un hilo de hierro, tratando de contrarrestar la presión con su propia intención asesina.

Petos, completamente descolocado mentalmente, pensó con desesperación: "¡No puedo sentir ningún rastro de mano en ella!"

A diferencia de Petos, que estaba sucumbiendo mentalmente ante la presión, Fenrir preguntó con cautela: -¿Quién eres?-

-Alfa - respondió la elfa, su nombre era una declaración, una afirmación de poder - Parte de las "Sombras" -.

Un vacío de silencio se extiende entre los tres, un silencio que era un abismo de significados y posibilidades.

"Las 7 Sombras", pensó Fenrir, intentando recordar lo que sabía sobre ellas. Shadow Garden había aparecido de la nada y comenzó a eliminar a todos los efectivos del culto que operaban en Midgar. Y ahora, uno de sus líderes estaba frente a él, una revelación que era tanto una amenaza como una oportunidad.

Había perdido una gran cantidad de efectivos por culto a esta organización, sin embargo, de entre sus peores pérdidas estaban la de diversos "niños nombrados", seres que superaban a los "primeros hijos", y contaban con habilidades de élite, incluso los más hábiles podrían rivalizar con la propia Iris Midgar, una de las más fuertes de la "esfera pública".

La existencia de las 7 sombras provenía de un sobreviviente al asalto que se realizó en Lindwurm, uno de los guardias del interior del templo que logro fingirse muerto con una técnica mágica pudo escuchar esa información.

"Venom", aquel que había elegido como una futura figura pública que se enfrentaría a Oliver, uno de los 3 héroes fue derrotado por uno de estos Sombras en un solo ataque.

Esa fue una fachada, puesto que Venom no era realmente así de fuerte, sin embargo, era uno de los más fuertes de la facción del fallecido 11° Asiento de los Rounds, Nelson.

Si hubiera tanta diferencia entre una de las 7 sombras y los niños nombrados, bien podrían estar en el mismo espectro que los Rounds.

Eso estimulaba el deseo de luchar de Fenrir, pero al observar a esta elfa, intuía que una lucha con ella le podría costar un brazo o pierna, si es que llegaba a lograr la victoria.

Petos interrumpió sus pensamientos:

-Shadow Garden- dijo que su voz era un eco de reconocimiento.

-Es bueno que nos reconozca -dijo ella, su tono era de satisfacción.

"Para atreverse a aparecer en público y revelarse ante mí... Significa que no me teme, incluso sabiendo mi antiguo título", pensó Fenrir, su mente trabajando a toda velocidad.

-Si aparece ante nosotros - comenzó a hablar Petos, su voz era un intento de ocultar su perturbación interior - Es que deseamos algo de nosotros, ¿no es así? -preguntó.

-Naturalmente -dijo la elfa rubia, su voz era tranquila, pero cada palabra estaba cargada de intención-. Me gustaría que se detengan en sus intentos de acercar a Cid Kageno a la iglesia.

La revelación fue un golpe sorpresivo para ambos. El nacimiento de un ser a la altura de los "3 héroes" había sido un rumor que Fenrir había dudado en creer. Pero ahora, con la confirmación de la elfa, las piezas comenzaban a encajar en un rompecabezas que era más grande y más peligroso de lo que había imaginado.

Fenrir, cuya mente siempre estaba en movimiento, como un depredador acechando a su presa, reflexionó sobre las implicaciones de las palabras del elfa. "Si Shadow Garden también está interesado en Cid Kageno, entonces debe haber algo más en él de lo que nuestros informes han revelado", pensó, recordando lo que sabía del joven.

Según toda la información recabada, el joven era el segundo hijo de los Kageno, y casualmente el territorio de los Kageno era donde comenzaron las fortalezas del culto empezando a ser reducidas y los bandidos afiliados habían desaparecido, aquello había sembrado una semilla de sospecha en Fenrir. "¿Podría ser este joven un agente de Shadow Garden?" se preguntaba, sin embargo, esta elfa perteneciente le ordenaba que no se le acercara, lo cual indicaba algunas teorías.

En primera instancia, podía descartar que el joven fuera agente de Shadow Garden, ya que, de serlo, Alfa, parte de las sombras, jamás habría aparecido para indicarle/ordenarle que se le alejaría, sino que habrían alentado el acercamiento del joven a la iglesia, sea antes o después de estos eventos, buscando sacar mayor información de las operaciones del culto con el cómo espía.

En segundo lugar, se podía deducir que al menos las 7 sombras podrían haber estado al tanto del potencial que este joven ocultaba, esperando alguna oportunidad para ponerse en contacto con él, lo cual no sería extraño ya que sus operaciones comenzaron en el mismo territorio que su familia.

Y finalmente, se podía deducir que, si el joven no tenía relación con Shadow Garden, era Claire, la hermana mayor, una destacada caballero mágico reconocida por su talento sobresaliente.... para estándares públicos, quien estuviera conectada de algún modo a Shadow Garden.

Si cotejaba el nivel actual de la joven con la lista creada por el culto solo podía asignarla en nivel de "Elite", lo cual se lograba ver en su mayoría entre los ya graduados de la academia, o al menos, tenían más de 20 años, si bien esto indicaba un talento sobresaliente que no era nada especialmente destacado, como el caso de Iris Midgar, quien estando cerca de los 20 años ya entraba al mínimo nivel requerido para ser catalogada como "Elite Superior".

Al observar al joven Kageno personalmente, Fenrir pudo discernir la inteligencia astuta que se ocultaba detrás de esa fachada de indolencia. "Es un maestro en el arte del engaño", pensó, admirando la habilidad de Kageno para ocultar su verdadero poder. La hazaña de dividir en dos una bola de descarga mágica lanzada por la temida "bruja de la calamidad" no era algo que pudiera ser logrado por un simple diletante en las artes místicas, de hecho.

Los rumores hablaban de su naturaleza dócil y libertina, reforzados por la visión de Kageno aceptando con una sonrisa complaciente los favores y sobornos del alto obispo que había sucedido a Nelson. Pero Fenrir había visto más allá, era muy similar a los nobles corruptos con los que su facción estaba relacionada.

¿Un busca fama? pregunta dentro de si, "¿o solo le gusta actuar como un noble corrupto?"

Entonces, planeaba que responder a Alfa se oyera un estridente grito colectivo.

-¡La princesa Rose se ha enloquecido!-

Tras eso la gente de la sala común empezó a cuestionar las palabras escuchadas.

"Así que así comenzó" pensó Cid viendo como los nobles le dejaban de prestar atención.

Aquellos con capacidad de manipular el maná pudieron a través de sus sentidos aumentados escuchar el sonido de espadas chocando y de ataques siendo realizados.

Un breve temblor se produjo producto de una poderosa explosión.

-Yagi-llamo Klaus.

-Si- respondió al instante, -Al parecer la sala reservada a uno de los diplomáticos externos tuvo algún altercado- dijo.

-Rose Oriana...-murmuró Klaus, -¿No era la chica que representaría a la academia de caballeros oscuros en el torneo Bushin?-

-Es correcto-respondió, -También funge como presidenta del consejo estudiantil-

Fuera de la sala de recepción que se utilizaba para reunir a los diversos nobles de distintos lugares del mundo también se asignaban salas privadas para que ellos pudieran reunirse en privado, y en este caso era donde estaba residiendo el rey de Oriana, Rafael Oriana.

Otra explosión se desencadenó, mucho más fuerte que la anterior.

"Ya no puedo hacer la vista gorda" pensó, y justo antes de dar la orden a los caballeros que hacían guardia.

-¡Es Shadow Garden!-se oyó un grito de donde provenían las explosiones.

Otros temblores fueron resonando y temblando alrededor de los presentes.

-¡Arghh!-

-¡Puaj!-

-¡No!

-¡Piedad!

-¡Esa voz!-exclamó Yagi-¡Es de Mike!-

-¿El caballero guardián del rey Rafael?-exclamó Klaus. -¡Guardias!-exclamó.

Al instante los presentes sin más palabras se dirigieron al lugar.

Sin embargo, alguien se movió para interponerse.

Antes de llegar a la gran puerta se interpuso una persona encapuchada.

No era alguien reconocible, tampoco llevaba ropas de nobleza, sencillamente el cuerpo de esta persona estaba cubierto de una tela oscura, y su rostro mayormente encapuchado.

Los caballeros se detuvieron a pocos metros de esa persona desconocida.

Les parecía extraño que alguien encapuchado hubiera logrado entrar, el propio Yagi no había detectado a ningún intruso, y aun así tampoco logró notar que alguien estaba vestido de esa manera, sin embargo, él y sus compañeros no podían apoyar a los demás guardias enviados, pero Klaus, ya que estos eran la guardia personal del Rey, ni siquiera Klaus podía ordenarles dejar su lado y dejarlo vulnerable.

-¡Muévete o serás arrestada!-ordenó uno de los caballeros oscuros.

-Me temo que eso no será posible-respondió al instante, -Necesitamos que los presentes se queden aquí-dijo con gracia.

Fueron palabras muy osadas, considerando que frente a esta persona habían múltiples guardias, casi tomando a los presentes como rehenes pese a no tomar acción contra los nobles presentes.

"Es una mujer de Shadow Garden" determinó el guardia viendo su postura, voz y palabras.

Desenvaino su arma al determinar que debían apresarla tras aquellas palabras.

Sin embargo, el guardia cayó al suelo inconsciente sin desenvainar su arma del todo.

-Por eso les dije que se debían quedar aquí-dijo.

"No se ha movido" pensó Yagi sin haberla perdido de vista.

¡¡¡EXPLOSIÓN!!! Una explosión atronadora ensordeció todo el salón de eventos.

Y gracias a ese despliegue de humo y aire fue que Cid pudo detectarlo "Ese olor..."

A su vez, Iris no perdió el tiempo en acercarse a su prometido -Iré a ver qué sucede, espérame aquí-

Y sin esperar a que le respondiera Iris rápidamente se acercó a uno de los guardias, -Préstame tu espada-

El guardia se sorprendió pero el repentino pedido no dudó en soltar la vagina de su cinturón y se la ofreció a su princesa.

Iris procedió a desenvainarla "Servirá" pensando midiendo detenidamente cuanto mana podía soportar el arma de uno de los capitanes de los guardias y sin más dilación se acercó al lugar de donde procedía el humo.

A su vez, la persona encapuchada no le dijo que retrocediera, con solo una mirada entendía que la joven primera princesa no aceptaría un "no" por respuesta, ya que conocía muy bien su personalidad.

-Solo lo diré una vez-dijo Iris levantando la espada-Muévete-

Sin embargo, aquella miembro de Shadow Garden no respondió a la orden, a modo de respuesta levantó su mano y de ella se fue extendiendo una extraña forma gelatinosa de color negro frente a sus ojos.

Frente a Iris, aquella extraña "gelatina" fue tomando forma, se fue alargando hasta unos 45 centímetros en su estimación, la mano de la encapuchada se apretó dando forma a una empuñadura sólida.

La forma gelatinosa se iba reemplazando mediante compresión, formando una hoja oscura unida a la empuñadura

Aquella extraña daga creada carecía de adornos, en su vida, Iris jamás vio aquella extraña daga o algo similar que permitiera crear un arma.

Y lo más destacable eran unas extrañas extensiones largas y se retorcían formando casi un círculo unido, sin embargo, aquella extensión se tenía a un poco de distancia de la hoja creada.

No hubo más palabras por parte de Iris, tomó su postura de batalla y justo antes de atacar.

-¡Me adelantaré! -grito repentino Cid que corrió a toda velocidad hacia la encapuchada.

Habiendo tomado por sorpresa a la persona encapuchada, Cid corrió hacia ella sin dudar, causando que por instinto ésta se preparara para atacarlo, sin embargo no logró atacarlo ya que éste desapareció de la vista de esa persona, y apareció a unos metros de distancia.

¿Movimiento flash? Pensé que Iris estaba viendo aquella técnica que ya conocía.

"No, eso no fue movimiento flash" concluyó Iris.

La característica fundamental en esa técnica consistía en fortalecer el cuerpo mediante el flujo de mano en el cuerpo completo, en las piernas para ejecutar el movimiento a alta velocidad, y en el resto del cuerpo para resistir la alta velocidad a la que se movería.

Sin embargo, por obligación, existía una cantidad mínima de mana que debía ejecutarse en el cuerpo para realizar la técnica en batalla, sin embargo, Cid no usó casi nada de mana, y aun así logro desparecer de su vista y aparecer sin hacer el más mínimo rastro de ruido a 2 metros de la encapuchada.

-¡Gracias por la distracción querida!-grito mientras seguía corriendo.

"Okey...¿En serio tenías que decir cosas melosas en este momento?" pensó Iris quien no dudo la distracción generada por Cid en la encapuchada para atacarla.

Sin embargo, no fue suficiente, su ataque fue contrarrestado sin problema alguno, el ataque de Iris quedó atascado en una de las extensiones de la extraña daga que tenía su adversaria.

"Si Alfa-sama estuviera aquí y escuchara a nuestro señor decirle "querida" a otra mujer... no quiero pensar en ello..." pensó la enigmática encapuchada.

-Fin del capítulo-