En una época la gente creía que cuando alguien muere, la fuerza se lleva su alma a las tierras de la muerte.

Pero algunas veces pasa algo tan malo que se lleva una tristeza terrible y el alma no puede descansar, y a veces, solo a veces, la fuerza puede devolver el alma para enderezar las cosas.

Coruscant ardía, el imperio comenzaba, los jedi, todos y cada uno de ellos habían sido perseguidos. Todos aquellos que no apoyaran al imperio, serían asesinados también.

Anakin y su esposa, Padme, estaban en su apartamento junto a Ahsoka cuando todo ocurrió.

-No sobreviviremos Ani- dijo Padme aterrada mirando los ojos de su esposo cuando los clones, antes leales aliados de los jedi llegaron al lugar

-Mantente segura Ahsoka- dijo Anakin besando la frente de su padawan y escondiéndola en un armario, pidiéndole que pasara lo que pasara usara la fuerza y se escondiera, esta era una batalla que no podían ganar.

-Anakin había rechazado al emperador, lo había delatado y el consejo jedi había ido por él a capturarlo, él siguió las órdenes de Mace Windu, y obviamente ellos habían fallado.

-Debes esconderte ángel, puedo protegerte- dijo Anakin besando la frente de su esposa embarazada

-No te dejaré, moriremos juntos- sollozó Padme y el tomó su mano cuando los clones avanzaron.

Horas más tarde.

La policia local investigaba cada misterioso asesinato cometido por los ''jedi''. Investigaban el ataque a la casa de una senadora de la ahora inexistente república, ella estaba grave, la habían puesto en una cápsula médica, pero dudaban que sobreviviera.

El imperio había comenzado y una gran matanza había sido perpetuada por los jedi, o eso había sido lo que el emperador había dicho. La policia local hacia su trabajo, rescatar a los heridos.

El capitán Rex, jefe de la policia local, antiguo soldado clon que había perdido la memoria en una batalla junto a los jedi en Geonosis, investigaba la situación. No sabía quién era la mujer que veía agonizando en la cápsula médica.

Observó, había un vestido de novia en el salón y una invitación.

-Anakin Skywalker y Padme Amidala- dijo Rex observando la tarjeta.

-¿La senadora Amidala?- preguntó uno de los oficiales- No, no pude reconocerla- djo con un nudo en la garganta- ¿Se iba a casar con un jedi?

-No, ellos ya estaban casados, renovarían sus votos- dijo Rex sintiendo algo familiar al leer los nombres- Eso dice la tarjeta.

-¿Quién demonios renueva sus votos cuando las cosas iban como iban?- preguntó un oficial refiriéndose a la situación que llevo a la república a su fin

-Ya nadie- dijo Rex mirando el lugar era un desastre, los jedi se habían ensañado con ellos, aunque eso no parecía el ataque de los jedi.

Padme fue trasladada en la cápsula médica hacia la bahía médica más cercana, Rex la siguió, no había nadie que pudiera ir con ella, él iría.

Iba a seguir su camino, cuando vió al ahora Gran Moff Tarkin deteniendo la cápsula.

-Si se ha atacado a una senadora no pueden entrar y llevársela así nada más, hay procedimientos- dijo el hombre- Primero necesitan mi autorización

-Necesita un hospital, me encargaré de que llegue a uno- dijo Rex sabiendo que eso probablemente le costaría su placa, o lo confinaría a trabajo de oficina.

Una aterrada Ahsoka salía del armario y se escondía hasta llegar afuera, debía encontrarlo a él, debía encontrar a Rex, aunque él no la recordara. Observó un cuerpo y contuvo un sollozo, ella sabía quién era, no podía ser, no podía ser.

Vio la cápsula que llevaba a Padme, Rex estaba allí, corrió hacia ellos, Ahsoka sollozó al verla, ella había escuchado todo, se había tapado los oídos para no escuchar. Su maestro uso la fuerza para mantenerla oculta hasta el último momento, impidiéndole salir de su escondite,pero ellos, ellos no habían podido ocultarse.

-Padme- sollozó corriendo hacia donde estaba la cápsula, observando el rostro y cuerpo malherido de Padme- ¿Cómo está ella?- preguntó Ahsoka mirando a Rex que le dio una mirada preocupada pero fría, él no la reconocía, y ella no podía hacer que la recordara, no ahora.

-Anakin- sollozó Padme

-Él está bien- mintió Rex

-Ahsoka- susurró Padme intentando estirar su mano cuando vió a la joven troguta

-No se preocupe- dijo uno de los oficiales que ayudaban a subir su cápsula a la nave- Recuéstese

-Por favor, dígale que cuide de Ahsoka- suplicó mirando a Rex y el juró que la mirada de ella se le hacía conocida- Dígale que la proteja

-Lo haré- dijo Rex confundido- Por favor solo recuéstese

Rex apartó a Ahsoka que sollozaba viendo el cuerpo de Padme, y la cápsula fue puesta en la nave y partieron rumbo a la bahía médica.

-¿Tú eres Ahsoka?- preguntó Rex y ella asintió. La mirada de la chica, era como si lo conociera.

-Mira, tu amiga, ella estará bien- dijo Rex mintiendo.

-Ella no es mi amiga, ella es como mi madre- dijo Ahsoka sollozando- Ellos eran como mis padres, ella y Anakin- dijo y las lágrimas cayeron de sus ojos. Estaba sola, buscaban a los jedi para matarlos, y los culpaban de cada crimen, a ella también la encontrarían.

-Le mentiste sobre Anakin- dijo Ahsoka sollozando

-Tuve que hacerlo- dijo Rex con pesar

-Y me estás mintiendo sobre Padme- dijo mientras las lágrimas no dejaban de caer de su rostro- ¿Se va a morir no es verdad?

-Lo siento- dijo Rex notando los sables de luz en la cintura de la chica- ¿Eres una jedi?- preguntó y ella se tensó- ¿Los jedi no hicieron esto verdad?- preguntó y la chica negó

-Bien, tal vez haya dicho mentiras, pero te cuidaré, te ayudaré a esconderte esta noche- prometió Rex y Ahsoka le creyó. Él siempre cumplía sus promesas, aunque no la recordara.

Tal vez alguno de ustedes haya visto esta película, pero esta historia está inspirada en ''The crow/ El cuervo'' Es una película maravillosa, bastante oscura, pero buenísima.