La última Legión:

[Ha pasado mucho tiempo y lo reconozco desde la última vez que escribí un fic de "Resident Evil". El último que hice fue el 26 de Enero de este año llamado "Un día de suerte", cuyo protagonista era Jim Chapman, uno de los personajes del "Outbreak File 1 y 2", pero les traigo una noticia: Pienso hacer un fic, para este año, quizás para Septiembre-Octubre, que tendrá lugar antes, durante y después de los acontecimientos ocurridos en el "Incidente de Raccoon City", además de que tanto esta historia como el futuro proyecto que les estoy hablando, serán homenajes para Plagahood, Hakendo Mitsuronairi y Un Tal Pinto.

Como siempre digo: No soy dueño de "Resident Evil" ni de sus personajes, éstos son propiedad de "Capcom". El objetivo es solo entretener.].

Una mancha de sangre bajaba viscosa y lenta contra el empapelado de aquel edificio, un fierro yacía en el piso junto al cuerpo sin vida de una persona. Aquel líquido carmesí se escurría y avanzaba por la superficie, llevando a que su acompañante retrocediera un poco. El primero se acercó hacia la ventana y echó una ojeada al exterior. Todo era un caos. Si las huestes de Genserico de los Vándalos y del Rey Alarico I de los Visigodos pudieron causar muerte y destrucción a su paso, dentro del debilitado Imperio Romano de Occidente hacia el Siglo V D.C, también lo podían hacer las criaturas que rondaban por las calles, hambrientas y que saciaban aquel apetito con la carne de los vivos. La chica que acompañaba al primer hombre se acercó y pudo observar a un grupo de tres zombies que devoraban a un chico que habían atrapado. Su cuerpo tenía una serie de espasmos y revelaban de que aún vivía cuando empezaron a comérselo. Uno de ellos metió su mano dentro del vientre rasgado y extrajo sus intestinos, llevando a que procediera a darles la primera dentellada.

- ¡Dios!.- Exclamó la muchacha de cabello negro, asqueada y que se alejó de la ventana para contener las nauseas. El otro que la acompañaba se apoyó contra la pared y se cruzó de brazos, esperando de que la citada pudiera recuperarse. Se encerró en el cuarto de baño y comenzó a vomitar, oyéndose esos gritos ahogados hasta que se calmó.-

- Yoko, ¿necesitas una mano?.- Preguntó el joven de cabello negro, vestido con su uniforme de Plomero color café y zapatos, yendo hacia donde se hallaba su caja de herramientas.

- Tranquilo, ya...- Respondió la japonesa pero ésta volvió a sentir arcadas por esa horrenda escena y tuvo que vomitar una vez más para eliminar las "toxinas" psicológicas.- Estoy bien, David, gracias.

- Avísame si necesitas algo, ¿de acuerdo?.- Le pidió éste como recado, mientras que la otra asentía con la cabeza y de ahí iba a cerciorarse de que las puertas y ventanas estuvieran bloqueadas.

En el exterior podía verse a un hombre rubio, de piel morena y con uniforme perteneciente al Subterráneo de la Ciudad. Éste corría a más no poder y portaba, como única arma defensiva una tubería que estaba ensangrentada y mellada por su uso. Se ocultó tras unas casas y pudo notar que en una de ellas había alguien, así que buscó algo en sus bolsillos y extrajo una moneda, la cual sostuvo en la palma de su mano.

- Por favor, Diosa de la Fortuna, guía al bueno de Jim Chapman a la seguridad.- Pidió, la lanzó al aire y ésta dio un resultado contrario al que esperaba.- Mierda, pero no tengo opción.- Sostuvo y corrió por la calle hacia la escalinata de aquel domicilio, no sin antes matar a un grupo reducidos de zombies que deambulaban por allí.-

David había estado en la cocina, revisando la heladera y las alacenas para ver si había comida en su interior pero, por desgracia, era muy poca. Lanzó un bufido que se extendió por toda esa zona y de ahí notó a la persona que iba hacia él. Se trataba de aquella chica de cabello negro, provenía de Japón, llevaba una blusa negra, una campera verde, jeans "Levis" y zapatillas claras. El plomero la observó un poco pálida pero supo que podía arreglarse por su cuenta, ya que él no estaba para ser de "Niñero" de alguien como ella.

- Oye, no eres muy comunicativo, ¿acaso no te gusta que alguien esté contigo?.- Preguntó la extranjera, cosa que llevó a que el otro le lanzara una mirada fría pero sin ninguna respuesta oral, solo esa expresión que la dejó sorprendida pero no se contuvo. Prefería encarar los problemas, así que se cruzó de brazos y se quedó a la espera de lo que quería.

- ¿Acaso es un interrogatorio, Oficial?.- Bromeó pero ella no le dio importancia.

- Jajajaja, muy gracioso.- Se "río" la citada.

- Escucha una cosa, "niña": Yo no soy tu amigo de la escuela, ni mucho menos alguien con quien puedes divertirte. Date cuenta de ello: La vida es así. Dura, una verdadera perra que tienes que estar sobreviviendo a cada maldito momento, porque, de lo contrario, te terminará por patear tan fuerte el culo que terminarás traumado de por vida.- Le espetó el plomero, mientras que sacaba las pocas provisiones de las alacenas.- Será mejor que prepares tu mochila, apenas hay comida para unos dos a tres días aquí.

Yoko le dirigió una nueva mirada, mientras que le quitaba el cierre al citado objeto. Sobre la mesa pudo notar que habían unas latas de arvejas, otras eran de conserva, pan lactal, sopa y unas botellas con agua mineral.

- Nunca dije algo así de tu vida, solo quería saber al respecto de ti.- Fue la respuesta que le dio la japonesa a éste.-

David se quedó quieto por unos instantes contra las alacenas y de ahí volvió su mirada hacia ella. ¿Cómo había podido quedar atrapado con una estudiante universitaria?. Aún recordaba el momento en el que estaba en ese bar y cuando la oyó gritar, dentro del baño de mujeres, supo que no era de su incumbencia hasta que oyó que ésta caía al piso porque unos zombies le habían agarrado las piernas debajo de la rejilla que daba al exterior, así que la debió salvar a como de lugar. Maldecía su accionar y así mismo, deseaba poder irse cuanto antes y que tomaran caminos diferentes pero no podía, solo esperaba poder salir de ese Infierno cuanto antes.

- Tal vez empecé con el pie izquierdo este día pero bueno, ya que tanto insistes.- Sostuvo el plomero y quedó a pocos metros de ella.- He cometido errores en mi vida.

- Todos lo hacemos, algunas veces a propósito y otras no.- Señaló la estudiante de cabello negro corto.

- Exacto, muy bien.- Le felicitó David.- Bueno, conmigo yo lo hice repetidas veces durante mi adolescencia. Conocí a gente que decía que te apoyarían en todo, somos una pandilla decían, nada malo nos pasará, decía. Pero fue todo lo contrario: Cuando un plan sale mal, es entonces que ellos te abandonan y quedas como el único que se las sabía todas y es ahí que ellos salen impunes mientras que yo tuve que pasar un buen tiempo en prisión.- Le relató su Pasado y viéndose imágenes de lo que había sido su vida como gamberro, un delincuente hasta que cayó en la celda por el accionar de la Policía.- Las personas que uno se relacionan dicen ser buenas y leales, pero les falta tener el coraje suficiente como para que sea verdadero. A mí me traicionaron y dejaron solo en prisión. Aprendí de mis errores gracias al "Código Bushido".- Aquello tomó por sorpresa a la nipona.- Veo que te llama la atención y por eso es que no confío en nadie que no sea de mi círculo.- Finalizó y de ahí se puso de pie.- Será mejor que nos vayamos de aquí. Esos podridos vendrán en cualquier momento.- Sugirió, mientras que ella se ponía de pie al ver a alguien que corría hacia la entrada.

Jim había llegado hasta el final y aún sostenía la tubería mellada y casi rota. Un zombie iba tras él por lo que la empleó con todas sus fuerzas, logrando aplastarle el cráneo al desdichado, el cual rodó por los peldaños hasta dar contra el pavimento.

- ¡Ayuda, por favor, quien sea que esté, abran, se los ruego!.- Pidió y gritó a todo pulmón.

- ¿Y eso?.- Se preguntó una chica rubia con vestido rojo junto a sus pantalones y zapatos, notándose, además, su credencial como periodista. Ésta se hallaba junto a otros supervivientes en la casa de al lado, resguardándose del peligro cuando notó el ruido de aquel moreno que imploraba para que le abrieran la puerta.- Oficial Ryman.- Llamó ella a un policía peli castaño y fornido. Éste caminó y vio la situación, ya que el ruido estaba atrayendo a otros zombies de la cuadra.

- No lo podemos dejar allí solo, vamos.- Pidió el Oficial y de ahí tomaron sus cosas y fueron hasta el patio trasero, donde pasarían al otro domicilio y así podrían sacar al joven que golpeaba la puerta.

- No lo podemos allí afuera, debemos ayudarlo.- Pidió Yoko a David, quien permanecía en silencio hasta que decidió hacer lo correcto: Fue hasta la puerta y giró la perilla, dejando que el trabajador del subterráneo entrara al lugar.

- ¡Gracias, muchas gracias por salvarme, viejo! ¡Podría besarte incluso!.- Le agradeció el moreno, en forma de broma, pero David ya se había puesto de pie.- Oh, ya veo, eres de esos silenciosos y fríos. Está bien, no haré nada malo ni te joderé, solo déjenme estar aquí con ustedes.- Pidió como única condición.

- Tenemos muy poca comida, vamos a tener que ir a buscar en otros sectores de la ciudad.- Apuntó el plomero.- Si quieres venir, adelante, pero tendrás que usar un arma mucho mejor que esa porquería que llevas contigo.- Le señaló a la tubería que portaba.

- Oh esto, sí, sí, tranquilo, ya me conseguiré una. Igualmente me fue de mucha ayuda, ya que pude darle muerte a un montón de esos zombies.- Respondió el moreno.- Por cierto, soy Jim Chapman, empleado del "Subterráneo de Raccoon City".- Se presentó.

- Yoko Suzuki, estudiante universitaria y ex-empleada de "Umbrella".- Se le acercó la nipona, dándole su saludo Oriental.

- David King, plomero.- Añadió éste con seriedad y de ahí fue por su caja de herramientas.- Ahora vayámonos antes que...- Sugirió pero, nuevamente, un sonido nuevo reapareció por los alrededores y que provenía de los jardines.- ¿Habrán entrado?.-

No tuvieron tiempo a nada, ya que la puerta de la cocina se abrió y allí aparecieron varias personas. Dos de ellas tenían armas de fuego, siendo un policía castaño y el otro un hombre de piel morena, alto pero calvo, además de que portaba un uniforme de "Guardia de Seguridad". El otro acompañante era un hombre mucho más joven y de cabello negro, además de que iba muy formal, de traje, corbata, pantalones y zapatos oscuros. También habían dos mujeres rubias, la citada periodista y una camarera muy bonita.

- ¿Quiénes son ustedes? ¿Qué hacen aquí?.- Preguntó la periodista rubia, quien iba hacia ellos.

- Je, pierdes tu tiempo, querida. Ya todos los que conocías están muertos.- Le apuntó David, cruzado de brazos.

- Más respeto, "amigo" o te dejo estéril.- Le advirtió la chica con su "Pistola Taiser" pero la otra rubia le detuvo.

- Alyssa, por favor, no creo que lo haya dicho a propósito. No hagas ninguna tontería, debemos sobrevivir.- Pidió la camarera, quien le tomó de las manos y ésta se calmó.- No queremos problemas. Habíamos oído a ese hombre que pedía ayuda pero veo que ya lo rescataron. Por cierto, mi nombre es Cindy Lennox, trabajo en el "J's Bar".- Hizo su presentación ante el otro grupo.

- Alyssa Ashcroft, periodista del "Raccoon Today".- Añadió la mujer rubia y vestido rojo.

- Mark Wilkins, Guardia de Seguridad del "Hotel Apple In".- Dijo el hombre calvo y moreno.

- Dr. George Hamilton, trabajo en el "Hospital de Raccoon City".- Continuó el joven médico peli negro.

- Kevin Ryman, Oficial de Policía del "R.P.D".- Finalizó el castaño, mientras que enfundaba su arma.-

- Bueno, veo que estamos en una encrucijada en estos momentos.- Argumentó Yoko, mientras que cerraba la puerta.- ¿Alguien tiene alguna idea? ¿O piensan seguir por su cuenta?.- Quiso saber la nipona ante la grave situación en la que estaba por la presencia de zombies en las calles.

- Es obvio que seguir por nuestra cuenta es muy peligroso. Si nos unimos, podremos salir vivos de aquí.- Sugirió Jim, siendo oído por los presentes.- ¿No?. Sería lo más lógico, a menos de que quieran pelear contra los muertos vivientes como en la película "Corazón Valiente" de Mel Gibson.- Bromeó acerca de ello y provocó una risa en Kevin y Mark.

- Lo que dices es lógico: Además, podríamos ir al "R.P.D" y resguardarnos allí. Mis Camaradas deben de seguir trabajando allí y protegiendo el edificio.- Propuso Kevin ante la idea del otro personaje.

¿Quién podía dar su opinión al respecto?. Estaban a merced de la Muerte misma a cada rato que pasaban allí. Las calles eran inseguras, los muertos vivientes estaban a la espera de poder hincarles el diente y así poner fin a su existencia, así como también los riesgos de que se toparan con otras horrendas abominaciones creadas por "Umbrella". Aún así, fue David quien dio un paso al frente.

- Bueno.- Dijo, caminando de un lado para el otro.- Parece ser que hay muchas dudas sobre qué hacer.- Alzó una mano al aire y se relamió los labios.- Déjenme decirles que esto puede ser nuestra salvación o condena. Pero, aún así, no pienso encerrarme y esperar a que llegue la ayuda. Los militares no vendrán y la Policía está más ocupada en sus cosas que no le darían importancia a otros civiles.- Apuntó.- No lo tome a mal, Oficial Ryman pero, tal y como dijeron los otros, si queremos sobrevivir, entonces debemos unirnos para salir adelante. Si Roma tuvo que aliarse con las tribus Germánicas aliadas para detener a Atila I de los Hunos, también hacer lo mismo, igual que los últimos Legionarios del Imperio que combatieron hasta el final.- Argumentó.

No se dijo más, todos ellos estaban de acuerdo.

- Es un hecho y una decisión.- Sostuvo Mark.- Andando, saldremos de aquí, por las buenas o las malas, vamos a sobrevivir.- Juró el moreno y fueron dejaron atrás el domicilio, poniendo rumbo hacia las calles.

Sabían muy bien de lo peligroso que podía ser esa "aventura" en Raccoon City pero, aún así, tenían una misión: Muchos que ellos conocían ya no estaban entre sus "filas". Estaban muertos o convertidos en esas horribles criaturas sedientas de sangre y carne humana, por lo que unir sus fuerzas los haría imparables ante las hordas de zombies y otras aberraciones que rondaban por la urbe y sin importar el accionar de sus consecuencias, conseguirían salir vivos de allí, de una pesadilla que apenas acababa de comenzar.

Fin.

[Considero esto como un "Fragmento" del futuro spin-off de "Heroes of The End of The World" y "La Guerra de las Dos Rosas" para Plagahood y los otros.

Espero que les guste, amigos y nos estamos viendo.

Les deseo una muy buena semana y un excelente comienzo del mes de Julio para todos ustedes, Camaradas

Cuídense y hasta la próxima.].