La guerra había terminado pero aún quedaba la devastación en las calles, también la marca de la guerra en las personas que la vivieron, en nosotros era claramente notable:  Keito se volvió más reservado y menos extrovertido, era un joven callado en el colegio- cada vez se veía más parecido a su padre, la forma en como hablaba, su mirada, solo que él no tenía los brazos sumamente velludos cómo su padre y él era bastante llamativo entre las jovencitas de su clase, ya que era inteligente e  incluso pertenecía al club de ajedrez, por mi parte yo había ingresado a estudiar literatura en la universidad, como nuestros horarios eran casi iguales siempre iba a pasar buscandolo al colegio cuando salia temprano.

Dos años después de todo, sin saber de su padre o tener al menos una tumba que visitar, Keito había comenzado algunos cursos  en la Universidad de Artes, era menor que sus compañeros, pero sabía sobresalir y ser más misterioso que los otros, , a veces llegaban jovencitas a visitarlo para posar para sus cuadros como modelos ya que él era bastante bueno dibujando y seduciendo chicas- tenía que apartarle las chicas casi que con escobazos.

Un día tocaron la mi puerta un hombre con un señor en sillas de ruedas, este tenía un sombrero que le cubría el rostro, vestido de negro, no podía adivinar quien era.
- ¿quien es él? Pregunte sorprendida.. curiosa al ver al abogado del señor Matsuda-
- ¿ya no me recuerdas?—Preguntó quitándose el sombrero y dejando ver los ojos rasgados negros y aquella  cálida  sonrisa.

-¿ señor matsuda? —Dije sorprendida. El me sonrió..

 - luces mucho más radiante que como te recordaba , ya eres toda una mujer.— Dijo  con galanteria,- yo lo invite a pasar, pero el abogado se despidió dejandonos solos, como si fuera una encomienda dejo al hombre en mi sala  y se fue.
- keito esta en clases—dije aun sorprendida, no dejaba de verlo. -

—no te sientas mal por mi.. Esto es temporal. Creó,— dijo sonriendo.. Estaba mucho más delgado a como recordaba, más pálido y mas adulto, —

—-pensamos.. Que estabas.—. Dije nerviosa..y  él nos interrumpió
—estuve preso.. Con el accidente nós tomaron presos y yo tenía una lesión tenía unas vertebras inflamadas y eso... Aunque, Sigo teniendo la vertebra inflamada o algo asi-— respondió riendo—, pero.. Yo..¿ Ves? Estoy mejor las estoy moviendo más y puedo pararme, pero no mucho tiempo.. Dijo sonriendo

.-tú..—  Dije preocupada. 

—estoy bien.. Enserio..—  contestó tratando de consolarme  con sus palabras —no me tengas lástima..—Agregó rodando hacia mi.. -veo que no tienes anillo.. ¿Y el joven coreano?—  pregunto curioso.. -

—el señor Kim.. Él.. No esta conmigo.. Más—dije evitando el tema y él sonrió.. 

—no debería alegrarme por el mal ajeno. Pero este es una oportunidad para mi.. —Dijo sonriendo.. y yo me sonroje completamente. No había pensando en tener una pareja en mucho tiempo. ¿ esta era mi oportunidad? Pensé  mirando al hombre  que  estaba frente a mi, para mi una pareja era algo "tabu" no tenía  a nadie que me acelerara  el corazón  y de alguna  forma en las noches siempre  recordaba a Patrick  y a su ausencia. 

Keito llegó y se llevó la gran sorpresa.. Al ver a su padre corrió a abrazarlo

—no te reconoci enserio, no te reconocía en verdad mi hijo.. Estas enorme, tan solo mirarte asi, es como ver a tu madre, La forma de tu rostro"todo".. - 

—se parece a ti tambien—dije  sonriendo enternecida por ese momento.

El chico lloraba mientras lo abrazaba - Matsuda le decía cuanto lo había extrañado,

— mi querido— 

 Keito me tomó del brazo y me llevó abrazarme tambien, eramos  como una familia  que se reencontraba luego de mucho  tiempo.

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2 meses después-

 
- ¿te quieres casar conmigo; ? Obviamente.. Cuando deje la silla de rueda..— Dijo sonriendo.. Yo lo mire sorprendida.. Jamás había pensando eso, ¿casarme? había dejado de pensar en los hombres en tanto tiempo... Yo lo mire y le sonreí nerviosa. 

 —¿me prometes que serás el mismo hombre que conoci en aquella fiesta?— Pregunté sonriendo, no podía  evitar sentirme atraída  por él,  durante  estos dos meses Matsuda era un hombre del cuál cualquiera se enamoraria a pesar de que  no era un  clásico  joven apuesto que o un sexy  maduro.
- seré mejor No te arrepentirás.. —Dijo besándome las manos, poco a poco el me llevó hacia él y me miró Sonriendo mientras apartaba mi cabello un lado.—- yo..—  dije nerviosa, se acerco a mi y me beso con dulzura.

. -ve a dormir, dijo en un hilo de voz yo lo mire sorprendida y me fui, sorprendida por lo que habia pasado- Detras de mi habitación escuche que tocaron mi puerta y abrieron la puerta- Era Keito.

—me asustaste—, dije cubriéndome con la bata, él me sonrió. -

—¿Te casaras con papá? Pregunto sonriendo mientras se acostaba en mi cama .
-¿como te enteraste? Pregunte sorprendida.
-los escuche.. Dijo riéndose. 

— ¿escuchaste todo?
-ustedes dos son unos pícaros.. Dijo el riéndose y yo  le di un golpe en el brazo. 

- respete a sus mayores le regañe- y el se lanzó encima de mi y me dio un abrazo.. Ya era de mi tamaño.. E inclusive parecia que iba a ser poco más alto.. 

—gracias por siempre estar para mi, cuando pensaba que iba a quedarme solo en el mundo tu apareciste.. Fuiste el regalo de los cielos de mi madre. —Dijo sonriéndome.

— -¿en que momento mi chiquito hiperactiivo se puso tan alto? Pregunte sonriendo. 

-si no fueras la novia de mi papá te robaba, dijo el sonriendo mientras alborotada mi cabello y yo lo golpee de nuevo en el hombro.

 -¿ a dónde fue a parar el niño tierno?pregunté molesta y  me sonrió 

— ya tengo casi 16.. Y siempre asumías que yo yo tenía 8.. Dijo él.. Solo nós llevamos 6 años.. No hay mucha diferencia.. Mi madre cuando se casó era menor que yo - Y cuando tu conociste a mi padre también casi mi misma edad. - Y cuando conociste al Señor Kim..— Dijo sacando cuentas.
-vete mocoso atrevido.—. Dije sacándolo de mi cama  mientras se reía.. 

—- Mocoso intenso.—

 Tenía tiempo que no recordaba a Patrick, solo teniamos una fotografía juntos  y él se habia quedado con ella y las demas copias- bueno solo 2 y  no tenia otra forma de recordarlo que no fueran mis recuerdos, Según las cartas de Sakura ellos estaban felices, el señor Park había regresado a Corea, pero iba varias veces a Londres.. mientras Patrick Se había vuelto un gentleman ingles. Yo me sentía resentida.. Pero;Ahora estaría con alguien que si me quería.

 Bueno, tampoco que tenía de otra.¿o si? Los muchachos que conocian solo querían pasar el rato o conseguir dinero. Keito tenía razón, cuando conocí a Patrick teníamos la misma diferencia de edad Y con su padre esta era mucha más grande, pero a diferencia de Patrick este si me amaba.
Poco a poco matsuda mejoraba, e iba a terapia 4 veces a la semana, era bastante diligente con las terapias y entre keito y yo lo ayudabamos.

((...) 

Pero no todo iba a ser facil, 

 Mi padre había perdido algo de dinero por lo cual la situación era más difícil en casa, las cuentas pasaron a ser manejadas por mi parte de la herencia que yo poseia- ya que su administrador había maquillado los libros y a su vez las sus nuevas amantes de mi padre gastaban el patrimonio familiar más rápido que lo hicieron los japoneses con la guerra. Mi padre buscaba con quien hacer negocios, pero había sido tildado de ayudar a los nazis por lo que su negocio bajaba más y más. Gracias a matsuda y la parte que me había dejado se había ayudado para lograr mejorar la economía en el hogar, las provisiones y la guerra civil en España nós hizo cambiar de destino nuestra vida.

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En un barco hacia estados unidos, donde viviríamos en un suburbio en california, mi padre se haría cargo de una granja que tenía allí de naranjas, y todo lo que teníamos en España fue asegurado en otros lugares, ya habíamos aprendido despues de lo sucedido en Corea.. Pronto irían por nosotros, ya que varios amigos habían desaparecido sin saber de nuevo de ellos... Por eso nós fuimos a california un lugar que no era desconocido para nosotros-..
- habia pasado bastante tiempo que no había visto este lugar.—. Dijo mirando la vista —oceano y mas oceano,— yo lo mire sonriendo  sientiendo la brisa salada sobre  mi rostro

— Yo también desde que llegamos de Japón nós quedamos en España, tanto tiempo que ya viajar me produce cansancio.. antes viajabamos a cada rato—
- a mi también me produce cansancio, pero si estas a mi lado.. puedo olvidarme de eso — . Dijo matsuda tomándome de la mano, yo miraba a keito emocionado pintando el océano, era un artista muy bueno, todos en el barco le querían pagar para que los dibujara. Hacia retratos en carboncillo como nadie..
-mira papá todo lo que me he ganado.. —Dijo el emocionado y él lo miro con seriedad.. 

- eres hábil.. y con suerte.. -deberias ahorrar para que puedas tener tu propio capital dije sonriendo mientras lo abrazaba él me sonrió. -

— eso haré.. Quiero estudiar artes en New York. Y ser el mejor.. yo..—
-hijo.. Apenas nós reencontramos y ya te quieres separar? Apenas eres un niño. —Interrumpio rapidamente Matsuda-
-padre, yo soy un hombre!— le reclamó .. -estoy estudiando y ya tengo 16 años tengo casi 17.. Yo soy un adulto.. Tu a mi edad te casaste.. ¿Por que yo no ? —Protestó

.Matsuda se sorprendió..
-¿casarte?¿ Con una española? ¿O con esas mujerzuelas que pintas? Gritó enojado.. 

—señor Matsuda.. Yo soy española.. Y si recuerdo tú me dibujaste varias veces..,,— Dije molesta y él me miro furioso. 

-es distinto.. _—

—-¿ distinto? Se te olvida a caso que yo tambien soy como tu le dices "Mujerzuela" y si no te has fijado mi pasaporte dice Ess-Pa-ño-la.

.—no deberías meterte.. eso es ..- protestó con firmeza y mis ojos se llenaron de rabia ¿como que no?

. -si debo, ese niño es como mi hijo.. le grite molesta.

. -¿niño? Tienen casi la misma edad.. ¿Como va a ser tu hijo?..

 -lo cuide lo suficiente, para saber.. 

- los primeros años el fue mio. Ahora es que lo conoces..
- ¡pero eso no quita que sea mi hijo!  Conteste  molesta.

Estaba roja con las lágrimas en los ojos.. Keito me miro sorprendido  me tomo de la mano y me llevo al otro lado del barco, para calmarme. 

. -gracias..eres la única madre que he conocido.. Te amo— dijo el abrazándome.. Yo le correspondi el abrazo llorando de la rabia y herida ..

— -somos lo suficientemente grandes para vernos demasiado ridículos— dije riéndome el me miro

. -no me había dado cuenta de lo pequeña que eras —dijo el mientras se paraba erguido para verse más alto. ,

—niño bobo y aun así quieres irte a vivir solo.—. Dije sonriendo

.- gracias por quererme.— - él apoyo su frente con la mia sonriendo como un niño-

¿ acaso yo iba a pensar en una relación cuando todos estos años me dedique a cuidar a este niño? para mi él era mas que suficiente.